Volviendo a la casa de mis abuelos, que es donde comencé "Desear Cosas Imposibles" el año pasado, con esta nueva cuenta he decidido volver a escribirlo, mejor, y mas seriamente y tal vez más dramático.
Espero que apoyen esta reescritura como apoyaron mi primer intento como Hales-WTF-
"Desear Cosas Imposibles"
Capítulo Uno: El corazón te trae de vuelta.
La diez de la noche en la Academia de Aurores, podrán ustedes imaginarse la cantidad de jóvenes exhaustos volviendo a sus habitaciones deseando nada más que poder quitarse los zapatos y dormir hasta morir. Y también que; hasta las varitas parecían cansadas.
Harry Potter, antes conocido como "el niño que vivió" yacía boca abajo sobre la almohada, luego de un gran examen de Defensa, y su cuerpo ya no daba más, por lo que probablemente no vio la gran lechuza café que se acercaba peligrosamente a su ventana y que al posarse comenzó a golpear el vidrio con su pata.
El joven levantó la cabeza y sacó fuerzas para levantarse y abrir la ventana para darle paso a la enorme ave que se posó cómodamente en su escritorio. En su pata izquierda venía amarrada una carta. Con un poco de maña logró desatarla y la lechuza salió para volver a casa. La tinta del sobre estaba algo borrosa por la lluvia leve que presentaba la noche. Alzó la mirada para ver por última vez la misteriosa lechuza reflejada como una sombra en la luna llena.
Dentro del sobre había un pergamino color violeta doblado uniformemente, y dentro de el rezaba:
"Al Señor Harry J. Potter.
Presente.
Sr. Potter:
Ud. Ha sido cordialmente invitado a la convocatoria de alumnos graduados de Hogwarts que irá a llevarse a cabo este 17 de Julio a las 21 hrs. Será un evento formal y puede usted llevar un acompañante.
Esperando su asistencia.
Comité de reencuentros de Hogwarts"
Era simplemente increíble.
Habían pasado ya 5 años desde que Hermione, Ron y Harry habían dejado Hogwarts para siempre luego de la caída de Voldemort y no había mantenido contacto con ninguno.
-Hogwarts – susurro casi sin aire. La idea de volver a pisar el castillo le ponía la piel de gallina. No de miedo. Si no de emoción. Amaba a Hogwarts como ningún otro lugar del mundo pues fue su casa. Y quería volver.
¿Sería difícil volver a ver a sus mejores amigos?
OoOoOoOoOoO
En otra parte del mundo una castaña estaba atónita mirando una casa de café.
Hogwarts, es decir, Hogwarts, ningún lugar en el mundo la hacía tan feliz como Hogwarts y la idea de volver era como si de pronto toda la alegría del mundo se la hubiesen inyectado.
Estaba en estado de shock y la carta seguía abierta sobre la mesa de aquel Café-Restaurant al que acostumbraba a ir todos los días al salir del trabajo.
-Hola G. – saludó un chico sentándose frente a ella haciéndola despertar y sobresaltarse. Había pasado mucho tiempo intentando acostumbrarse a la idea de Hogwarts que ya se veía como una niña nuevamente corriendo por los pasillos de la biblioteca buscando un libro- ¿Qué te sucede?
-Esto- le dijo la chica poniéndole la carta en las manos, algo temblorosa.
-Hermione¿Estás nerviosa? – le preguntó el chico mirando a su amiga que seguía paralizada – Sí, al parecer si.
-Wayne, porfavor ven conmigo, no creo poder enfrentar esto sola – le súplico la joven, que ya había sido vencida por los nervios.
-Herms – dijo el joven mirando el techo, demostrando molestia sobre la idea.
-Porfavor, porfavor – rogó Hermione, que se veía cada vez mas nerviosa.
-De acuerdo- suspiró el chico, mirándola – Que tan malo puede ser.
-Gracias, eres un excelente amigo – dijo la joven mostrando su blanca sonrisa.
-O uno muy tonto.
Bueno, aquí está la reescritura del primer capítulo de un fanfiction que jamás terminé.
Ojalá les haya gustado y lo sigan y me comenten D
Atentamente
Hallie.Chan ex –hales-wtf-