Bueno… pues escribí esto porque recordé una película que vi hace mucho, creo que cuando tenía 10 años más o menos… No recuerdo el nombre pero intente recordar la base de la historia, espero les agrade. Por cierto puse algunos personajes de otros animes como Kurumu Korono de Rosario+Vampire y Kei Takishima de Special A. Aunque solo copie sus nombres y su apariencia, como sea estos personajes no me pertenecen solo los uso para darle vida a esta maravillosa historia que tampoco es del todo mía. Aun así esto no es un Crossover, solo los puse por el bien de mi seco cerebro xD


Mi nombre es Sakura Haruno, vivo en la ciudad de Konoha con mi madre. Mis padres son divorciados y la verdad eso no me molesta, a veces paso tiempo con mi amado padre y otras veces con mi estricta madre. Ellos no se hablan para nada, así que bueno, tengo mucha libertad al igual que mi hermano mayor.

En cuanto a la escuela, este es mi último año en la preparatoria de Konoha, en poco tiempo tendré que alejarme de mis mejores amigas Kurumu Korono una chica con cabello corto de color azul mar y unos hermosos ojos oscuros de color violeta, pestañas voluminosas y la piel clara, es un poco más alta que yo y aunque a veces envidio sus grandes senos considero que yo tampoco estoy tan mal.

Otra de mis mejores amigas es Aiko Takishima la hermana gemela de mi hermoso novio, al igual que él tiene los ojos de color miel y el cabello castaño. Ella es de complexión pequeña y delgada, es más baja que yo y es un poco tímida a diferencia de Kurumu, su piel es clara pero un poco rosadita.

Mi novio, el hermano gemelo de Aiko se llama Kei Takishima, es más alto que yo por 20 centímetros si no es que más, es serio, frio y a veces un poco arrogante, solamente conmigo y con su hermana es protector y dulce. Siempre busca la manera de hacerme reír y no sé porque pero a veces me resulta imposible enojarme con él, a pesar de que la mayoría del tiempo llega a ser un poco molesto. Aun así es divertido y espontaneo y lo adoro muchísimo.

Yo, bueno, mi cabello es largo y rosado, mis ojos son de color verde esmeralda, soy baja de estatura y considero que tengo buen cuerpo gracias al ejercicio y a que pertenezco, al igual que mis amigas, al equipo de futbol femenino de la escuela. Mi novio pertenece al equipo de futbol masculino, obviamente, el es el capitán de este.

Mi hermano mayor Gaara Haruno, tiene un año más que yo y entrara a la universidad ya que fue expulsado de la anterior en la que estaba, es pelirrojo y con los ojos del mismo color que yo, solo que los de él son un poco más claros, le encanta la música y es guitarrista en una banda, por supuesto mi madre no está de acuerdo con su intento de carrera, aunque bueno, nuestra madre nunca está de acuerdo con lo que nos gusta. El es un chico apuesto, debo admitirlo, mi hermano tiene lo suyo. Es divertido, molesto y protector, y a pesar de que a veces quisiera desaparecerlo le tengo un gran aprecio porque no se deja llevar por nadie y siempre hace lo que él cree correcto.


En este momento me encuentro en una práctica de futbol y como siempre el entrenador llega más tarde que de costumbre, así que aprovechamos para competir contra el equipo masculino de futbol soccer.

En este momento estoy corriendo por la cancha, mi posición es delantero al igual que Kurumu y estoy esperando un pase de ella ya que estoy sola y con la posición perfecta para anotar. Y aquí viene, lo golpeo con mi cabeza y luego con el empeine de mi pie y ¡GOOOOOOOL!, corro y abrazo a todas mis amigas, mientras saltamos alegremente. Mi novio sonríe de medio lado y yo corro hacia él.

-¡Ja! Te gane, ahora págame- dije después de besarlo ya que él me había dicho que no iba a poder meterles ni un mísero gol.

-Eres la mejor Sakura- dijo después de cargarme y besarme.

-¿A si? ¿Qué tanto?- dije arrogante y con una sonrisa en mi rostro después de mi triunfo.

-Juegas mejor que la mayoría del equipo masculino- dijo y le agradecí con una sonrisa para después ser bajada, el entrenador había llegado por fin.

-¡Chicos, acérquense!- grito, todos caminamos para escucharlo- Lamento decirles, chicas, que el nuevo director decidió eliminar el equipo femenino- dijo, después se escucharon abucheos por parte de la mayoría de las mujeres.

-¿Qué?- me impuse- No puede hacer eso, también tenemos derechos.

-Si lo sé Sakura, no solo cancelo el equipo femenino de soccer, también el de vóley bol, futbol americano, tennis…

-¿Qué?- dijo Kurumu- ¡pero qué machista!

-El único equipo deportivo que quedo fueron las porristas- término de decir el entrenador Maito Gai.

-En este momento iré con el director y le hare saber que no estamos conformes- dije y escuche un "si" lleno de entusiasmo por parte de mis compañeras.


Estaba en la oficina del nuevo director, en cierta manera tenía un poco de miedo, pero Kurumu estaba conmigo y estaba igual o más furiosa que yo.

-Díganme ¿en qué puedo ayudarles?- dijo el nuevo director, era blanco pegándole a pálido, sus ojos eran amarillentos, su cabello era largo y oscuro, se me figuraba que era una serpiente humana.

-Bueno, director Orochimaru-sama, estamos aquí porque no estamos de acuerdo con su decisión de excluir a las mujeres de los equipos deportivos- dije de manera firme, el me miro como analizándome, su mirada me atemorizaba, sin embargo no se lo demostré.

-¿Puedo conocer sus motivos?- dijo después de observarme.

-Las mujeres también tenemos derecho de desarrollarnos en el ámbito deportivo, somos tan buenas como los hombres en estos ámbitos y también tenemos derecho a elegir un deporte como actividad extracurricular.

-Sí, señorita Haruno, sin embargo ustedes pueden inscribirse en otra actividad que no sea necesariamente un club deportivo- dijo firme.

-¿Cómo cual señor Orochimaru?- dijo mi amiga Kurumu.

-Existen las manualidades, las porristas, el comité de graduación, los que recaudan fondos para la escuela, entre otras actividades señorita Korono.

-Sin embargo…- trate de decir, pero fui interrumpida.

-No señorita, la discusión termino. Las mujeres no son lo suficientemente fuertes y resistentes como para pertenecer a un club deportivo y esa es mi última palabra.

-Pero…- trate de decir.

-Eso no es justo señor Orochimaru- dijo mi amiga, comenzando a molestarse por la actitud de este hombre.

-Por favor, salgan de mi oficina y regresen a sus casas.

-No nos iremos de aquí hasta que vuelva a poner los equipos femeninos- dijo mi amiga cruzándose de brazos retando al director.


Minutos después nos encontrábamos afuera de la oficina del director, con un papel de detención cada una.

-Creo que no fue buena idea hacer eso- dije resignada.

-Pero es que no es justo Sakura- dijo mi amiga aun molesta.

-Lo sé Kurumu, pero no debiste ponerte en ese plan- dije en forma de regaño.

-Pero es que… ash- dijo cruzándose de brazos.

-¿Como les fue chicas?- dijo tímidamente Aiko, después de que llegamos a la cancha donde las demás chicas y los chicos nos estaban esperando, le mostré mi reporte de detención y ella bajo la cabeza- supongo que mal.

-Lo lamento chicas- dijo el entrenador- si hay algo que pueda hacer por favor díganme- ofreció, los ojos me brillaron ante la maravillosa idea que tuve.

-Inclúyanos en el equipo masculino- dije animosa.

-Sakura- rio un poco y después me miro de nuevo- Otra cosa, eso no- dijo firme.

-¿Por qué no?- dije ofendida- somos tan buenas como el equipo masculino.

-Chicas, en pocas semanas se acercan los juegos del campeonato, no puedo incluirlas seria una desventaja- dijo el entrenador.

-Hola bonita- dijo Kei, mi novio, mientras se acercaba.

-Hola- dije saludándolo.

-¿Qué está pasando?- pregunto Kei.

-Las chicas quieren entrar al equipo masculino- dijo irónico el entrenador.

-Deben estar bromeando- dijo mi novio, me ofendí claramente.

-Señoritas, son excelentes pero no son tan fuertes, rápidas y resistentes como los hombres, lo lamento.

-Ok, Kei tu eres el capitán, dile al entrenador que piensas de esto- dije, esperando que mi novio me apoyara como siempre lo ha hecho.

-Sakura, el entrenador tiene razón- dijo decepcionándome por completo.

-Hace un momento dijiste que yo era mejor que la mayoría del equipo masculino- dije con obviedad y un poco molesta.

-¿Qué?- dijeron los demás chicos, sorprendidos y un poco molestos.

-No, Sakura yo nunca dije eso- dijo después de las miradas fulminantes que sus compañeros le regalaban.

-Claro, ahora mientes, sabes que…- estaba dispuesta a decirle hasta de lo que se moriría.

-Sakura, ya basta, termino la discusión- dijo, seguido de ánimos por parte de los demás hombres.

- De acuerdo, termino la relación, adiós- dije para después caminar, alejándome de él.

-Espera, Sakura, no hagas esto- dijo, tomándome del brazo para evitar que me fuera- Solo no quiero que te lastimen, entiende.

-Awww – dije después de poner cara tierna- eres un estúpido- dije cambiando mi semblante, le lance el balón que cargaba directo en la cara y camine alejándome de él.

-Vuelvan al entrenamiento- escuche al entrenador gritar después de habernos ido.


Iba llegando a mi casa después del peor día de mi vida, había terminado con mi novio, y no solo eso descubrí que es un estúpido machista, mi equipo que era mi pasión había sido eliminado y ahora tendría que enfrentarme a las locuras de mi madre.

Caminaba con mi balón de futbol en mano, mi mochila de entrenamiento, mi capucha puesta y mis audífonos con la canción Here Without you de uno de mis grupos favoritos 3 Doors Down.

Abrí el portón de la gran casa de mi madre, ignorando todo a mí alrededor e inundándome en mi propia tristeza, y es que no era para menos, amaba el equipo de futbol y no pude hacer nada por salvarlo, en cuanto a Kei decidí que no vale la pena sufrir por eso, así que no lo hice.

De pronto sentí como alguien me tocaba del hombro y me volteaba bruscamente, en cuando sentí esa mano sobre mi hombro pensé que si era Kei le daría un golpe muy fuerte, pero al voltearme me tome con la mirada de Setsuna Matsuoka, la novia de mi hermano, una chica rubia de ojos azules, con un cuerpo despampanante.

-¡Auch!- emití al momento de haber sido jalada de una forma tan brusca.

-Ahh- dijo con decepción en sus ojos- eres tú- dijo después de soltarme, la mire fulminante pero ella lo ignoro.- Tú y tu hermano se parecen por atrás, debe ser por tu falta de curvas- dijo mientras recorría las suyas como mostrándome lo que según ella yo no tenía.

-Ay que tierna eres- dije sarcástica- también te quiero, me alegra verte- dije aun de la misma manera.

-¿Donde está Gaara?- dijo ignorando mi comentario.

-No lo sé, ¿Tengo cara de niñera?- dije como si fuera obvio que yo no sepa.

-Hazme un favor ¿si cariño?- dijo, rodé los ojos fastidiada- recuérdale a tu hermano que tiene suerte de tenerme como su novia, y que me llame si no quiere dejar de ser mi novio.

-Claro, me encantaría ayudarte- dije de manera sarcástica lo que ella noto- veré si le interesa- dije fastidiada.

Ella se volteo y camino hacia su lujoso auto, tipo de las muñecas barbies, realmente me hartaba esa mujer, no entendía como era que mi hermano seguía como una arpía como esa.


Entre a mi casa y hay estaba esperándome mi madre, me miro con una gran sonrisa.

-Sakura, ven aquí- dijo tomándome del brazo para jalarme.

-Ahora no madre, no estoy de humor- dije tirando mis cosas al sofá.

-Vamos, te alegrara- dijo, me tapo los ojos con sus manos- mantén los ojos cerrados ¿sí?- camino, escuchaba sus tacones contra el suelo de madera de la casa- No hagas trampa- bufe fastidiada- ¡sorpresa!- grito, abrí los ojos y me sorprendí demasiado, pero no era una sorpresa buena.

-Mamá, ya te lo he dicho muchísimas veces, no me gustan los vestidos- la sonrisa de mi madre se desvaneció mientras sostenía un vestido corto de color fiusha con corte en V, unas decoraciones con piedritas brillantes en este, manga corta y un encaje en la falda finalmente un cinturón negro como decoración.

-Pero este vestido te quedara precioso para la fiesta de graduación- Dijo mi madre mirándome con sus ojos esmeralda llenos de esperanza.

-Mamá hablo enserio, no usare esa cosa que solo degrada a las mujeres, es una excusa para que los hombres puedan ver más de lo debido- dije cruzándome de brazos, diario era lo mismo, la misma batalla campal contra mi madre.

-Pero a Kei le encantaría verte con esto puesto- dijo mi madre con una sonrisa como si según ella hubiera tocado el punto exacto para convencerme.

-Otra razón más para no ponerme esa cosa que muy apenas cubrirá mi cuerpo- dije molesta y comencé a subir las escaleras para llegar a mi habitación.

-¿Cómo es que prefieres patear un balón todo el día que hacer cosas de mujeres?- pregunto mi madre un poco molesta.

-No te preocupes, no volveré a hacerlo. El equipo de futbol femenino fue eliminado- dije un poco entristecida y molesta a la vez.

-¿No más futbol?- pregunto mi madre sorprendida- que triste- dijo mientras tomaba el vestido, con una amplia sonrisa en su rostro.

-Sí, veo que te entristece mucho- dije sarcástica.

-Vamos hija, a Kei le encantara este vestido y más si tu lo traes puesto- dijo, poniéndome el vestido casi en la mera cara, fruncí mi entrecejo.

-¡Ya basta madre!- dije claramente molesta- Termine con Kei

-¿Qué? ¿Por qué? El era un buen muchacho- dijo entristecida.

-No quiero hablar de eso madre- dije continuando con mi labor de subir las escaleras para aislarme de la sociedad.

-Pero él era tan lindo, tan dulce, me agradaba- dijo bajando la cabeza mientras un aura triste la rodeaba.

-Bien, ¿Por qué no sales con el madre?- dije molesta entrando a mi habitación, cerrando la puerta atrás de mi.


-Hola Gaara- salude a mi hermano mayor que estaba empacando desesperadamente- Setsuna vino a buscarte- dije fastidiada- ¿Oye?- lo llame, me miro fugazmente- ¿Cómo es que andas con esa tipa?- pregunte curiosa.

-mmm- se rasco la barbilla para aparentar que lo pensaba- cosa de hombres, no lo entenderías- dijo, rodé los ojos, me imaginaba la razón.

- Pero, es de lo peor, es una arpía- dije, el rio y yo también. Cerró su maleta y la aventó por la ventana de la habitación- Gaara, ¿sabes que hay una puerta al frente?

-Sí, pero mi madre me vería- dijo mientras arrojaba mas de sus pertenencias por la ventana- Ella cree que yo estoy con papá y el cree que estoy con mamá. – me recosté y comencé a lanzar mi balón mientras jugaba con el- Y en poco tiempo ellos creerán que estaré en la universidad, eso es lo bueno del divorcio.

-Gaara, ¿A dónde iras? O ¿Por qué estas aventando todas esas cosas por la ventana?- dije confundida.

-Iré a Nueva York, tengo un concierto en grande con mi banda y no me lo perderé.

-Pero ¿y la escuela?- cuestione incrédula.

-Sí, ¿puedes ayudarme?- dijo, levante ambas cejas incrédula- Llama a la escuela, finge que eres mamá y diles que… que estoy enfermo, algo que dure unos 15 días.

-Gaara, te acaban de correr de la universidad en la que estabas, ¿no podrías ser más considerado y pensar en tu futuro?

-Lo estoy haciendo, mi futuro es la música… en fin, ayúdame ¿si?, te daré lo que quieras- dijo y salto por la ventana.

-¡Gaara! ¡Gaara!- grite, mi madre entro a mi habitación.

-¿Hablabas con tu hermano?- pregunto mientras cargaba el fastidioso vestido de hace unos momentos.

-ammm…- tome el teléfono rápidamente- si, por teléfono, el está con papá… Adiós papá- fingí hablar con ellos y que colgaba el teléfono.

-Sakura- se encogió de hombros restándole importancia- iremos a una fiesta el fin de semana que viene, ¿no te gustaría llevar este vestido?

-No madre, ya te lo dije, no usare algo más corto que mi short de entrenamiento.

-A veces pienso que estoy con tu hermano en vez de contigo- dijo y salió de mi habitación.

Me mire al espejo, tome una foto de mi hermano que estaba en mi tocador y mis ojos brillaron con malicia ante la maravillosa idea que había surcado mi mente.


OwO me divertí tanto escribiendo esto.

Espero les haya gustado, dejen sus comentarios que serán los que determinaran si sigo escribiendo o no esta historia.

Cuidense, los quiero.

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