Ya saben que los personajes y lugares son de J.K y WB(y los millones también), pero nunca viene mal repetirlo, no quiero que me demanden.
Sin más preambulos...
Fantasías a medida.
"Nuevas y Mejoradas Fantasías Personalizadas, garantía de Sortilegios Weasley"
¿Aburrimiento a morir en Historia de la magia?
¿Horas interminables de castigo?
Esto es lo que buscabas
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Solo ábrelo y disfruta de 60 minutos inolvidables.
(No se aceptan reclamos ni devoluciones.)
Era una medida extrema pero realmente no pensaba que pudiera resistir una noche más de mirar al infinito encerrada en las mazmorras por un castigo tan injusto.
Además podía ser divertido, todo el mundo le decía que necesitaba relajarse o moriría de un pico de estrés.
Y con este ultimo pensamiento Hermione Granger tomo la pequeña caja que llevaba en el fondo de su baúl desde hacia meses, más exactamente desde que los gemelos se la regalaron, y se dirigió a cumplir con la quinta noche de castigo en las mazmorras.
Bajo hasta la sala común donde encontró a sus amigos parados junto a la puerta de salida, como la primera noche, para acompañarla.
-Ya les he dicho que no es necesario que me acompañen, puedo llegar sola a las mazmorras- repitio una vez más la chica.
-Y nosotros ya te hemos dicho que no importa lo que digas, igual te vamos a acompañar- contesto el muchacho morocho mientras le daba el paso-
-Además es nuestra culpa que te haya castigado el pelograsiento ese, todo por querer ayudarnos con esa poción del demonio -
-Ronald, no maldigas- dijo la castaña, aunque con menos ímpetu que en otras ocasiones- bueno, vamos, no quiero llegar tarde y que me extienda el castigo a la semana que viene-
En 15 minutos ya se encontraban frente a la puerta del profesor de pociones.
-Bueno chicos, nos vemos en un rato-
Cuando se disponía a tocar a la puerta, esta se abrió abruptamente causando un respingo en los tres Gryffindor.
-Granger, se que le es difícil separarse de sus compinches, pero le aseguro que los volverá a ver, ahora entre de una vez- dijo con su pausada voz- supongo que esta tan ansiosa como yo de culminar de una vez con esto-
Y en eso no se equivocaba, realmente estaba desesperada por concluir con ese tiempo desperdiciado que eran sus castigos con Snape. Porque si hay algo que realmente moleste a Hermione es el tiempo que se pierde en hacer nada provechoso, y al pareces su profesor lo sabía muy bien, por eso ella no tenía que hacer ninguna larga ni tediosa redacción, ni ordenar los anaqueles, ni siquiera limpiar los apestosos calderos. No, su castigo consistía en sentarse durante una hora y media viendo hacia el frente, sin hablar, sin hacer movimiento, sin hacer nada.
La primera noche fue con su mochila con la esperanza de que le tocara la redacción y no la limpieza de calderos, pero el profesor ni siquiera la dejo adelantar deberes de otras materias, solo mirar el espacio que se extendía al frente. Para el tercer día ya se planteaba seriamente suplicarle que le dejara limpiar los dichosos artefactos, pero se negó firmemente a caer tan bajo.
Y aquí estamos, el último día gracias a Merlín, pero con la ayuda de los gemelos sería medianamente soportable.
-Bueno Granger, ya sabe en que consiste su castigo- dijo mientras le sonreía burlonamente- tome asiento- y ella así lo hizo.
El profesor Snape se dirigió a su escritorio y se puso a corregir algunos pergaminos, luego de unos 20 minutos se levanto y se acerco al su alumna.
-Debo ausentarme por un momento, pero usted se quedará aquí sin moverse, ya conoce las reglas-
"Claro que las conozco, yo me muero de aburrimiento mientras usted se va a quien sabe donde a hacer quien sabe que" pensó la chica, pero contesto:
-Por supuesto profesor-
A continuación Snape dibujo con su varita un circulo dorado rodeando el pupitre de su alumna, el cual se encargaría que la misma no saliera de el.
-Hasta luego señorita Granger-
-Hasta luego profesor- respondió mientras Snape cerraba la puerta- maldito hijo de…una buena bruja- termino mascullando.
Luego de esperar unos momentos por si Snape se olvidaba de algo, saco la cajita de Sortilegios Weasley del bolsillo de su túnica y la coloco sobre el pupitre.
-Bien playas del Caribe, allá vamos- pronuncio mientras cerraba los ojos, rompía el precinto y abría la caja.
Lentamente fue abriendo los parpados para encontrarse con…la misma hedionda mazmorra.
-¿Y mi playa?, ¿las olas? y ¿el viento?, ¿sucundungu?, ¿sucundungu?- decepcionada miro adentro de la caja, debajo de ella y hasta debajo del pupitre para convencerse de que ahí no había nada.
-Malditos gemelos, ya me extrañaba tanta generosidad, ¡me regalaron un producto defectuoso!, van a recibir mi queja como cliente no satisfecho- y ahí tuvo que detener su perorata contra los dueños de Sortilegios Weasley ya que escucho pasos proviniendo del otro lado de la puerta.
Solo le dio tiempo de esconder en su capa la caja del producto antes de que Snape ingresara seguido de una alumna, ni más ni menos que Cho Chang.
-Señorita Chang, tome asiento- dijo señalando el pupitre inmediatamente detrás del de la castaña- supongo que entenderá que su comportamiento de esta noche no puede quedar sin castigo-
-Si profesor Snape, pero…-
-Sin "peros" que valgan señorita Chang, hoy se quedara acá hasta que yo venga a buscarla. Luego de hablar con Dumbledore iré ha hablar con el jefe de su casa y mañana él será el encargado de dictar su castigo- luego del pequeño discurso, se dirigió hacia la puerta- y silencio total en mi ausencia- finalmente cerro la puerta.
-¡Maldito murciélago grasiento!- exclamo Cho.
-¿Que paso para que te castigara?-
Cho dio un respingo al escuchar su voz, la verdad no se había fijado quien era su compañero de infortunio, mejor dicho su compañera.
-Hermione, digo, Granger, no te había visto-
-Puedes llamarme Hermione si quieres, después de todo estamos compartiendo el infierno-
-Je, je, eso es un poco exagerado, ¿no crees?, no vi ningún anuncio de "¡Oh, vosotros los que entráis, abandonad toda esperanza! " en la puerta-
-Pasa 5 noches seguidos contando los adoquines de la pared y luego me dices- dijo algo sorprendida por la referencia a una obra muggle- por cierto son 724-
-Retiro lo dicho-
-Bueno, y ¿porque estas aquí?-
-Tuve una diferencia de opiniones con una Slytherin, y Snape me vio cuando le demostraba que no estaba de acuerdo con sus argumentos-
- ¿Y como exactamente le demostrabas tu desacuerdo?- pregunto Hermione con una sonrisa socarrona.
-Solo digamos que no la veremos mucho por los pasillos en un tiempo, no creo que quiera salir hasta que consiga deshacerse de todo ese vello facial, y créeme que no le será fácil-
-Ja, ja, ja, por favor dime que fue Parkinson, por favor-
-Hoy es tu día de suerte-
-¡Si!, te abrasaría si pudiera salir de este circulo, eres mi ídolo- le resultaba raro estar hablando con Chang con tanta confianza, después de todo casi no se conocían, pero en ese momento le parecía natural.
-Ah, el famoso círculo carcelero de Snape, así que te toco el castigo "tedio enloquecedor", había escuchado comentarios, al parecer es un castigo que usa bastante con los Ravenclaw, en general a los Gryffindor los hace limpiar calderos apestosos-
-Supongo que pensó que este castigo sería peor para mí,… y no se equivoco-
Ya que no podía salir de su reducido perímetro Hermione se sentó en el pupitre para poder conversar sin padecer una tortícolis a la mañana siguiente.
-¿Y cual era la diferencia de opinión?, si se puede saber- ahora que tenia con quien pasar lo que le restaba de castigo no lo iba a desperdiciar cumpliendo la utópica orden de Snape sobre no conversar.
-De hecho… eras tu- al ver la cara de asombro de la castaña prosiguió- y todos los hijos de muggle claro, la estupida esa estaba diciendo no se que tontería sobre que muchos magos "respetables" opinaban que la magia solo puede ser heredada y que cualquiera sin parientes magos que tuviera magia tendría que haberla obtenido ilícitamente, así que consideraba que todos tus logros en el colegio eran, por lo tanto, inmerecidos- Hermione se había quedado de piedra, claro que no era la primera vez que escuchaba esa tonta teoría, pero aun le sorprendía que hubiera gente capaz de repetir tamaño despropósito- como vez la estupidez de algunos no tiene limites-
-¿Y me defendiste?, digo, nos defendiste-
-Por supuesto-
-Gracias-
-No tienes porque darlas-
Mientras Hermione meditaba sobre lo que Cho había hecho, esta se levanto de su asiento y se acerco al círculo que rodeaba a la castaña.
-Eh, ¿Que haces Cho?-
-Me acerco- respondió mientras traspasaba la barrera que al parecer evitaba que la castaña saliera pero no que alguien entrara.
-Eso ya lo veo…, pero ¿Por qué?- pregunto la chica mientras la Ravenclaw quitaba la silla de su camino y ponía las manos a ambos lados de la Gryffindor.
-Tengo curiosidad- dijo acercando su rostro a escasos centímetros del de la castaña.
Hermione empezó a tragar con dificultad mientras la oriental la miraba a los ojos, y sus nervios fueron en aumento cuando observo que le miraba los labios con gran interés.
-Emm, ¿Cho?-
-¿Si?- respondió mientras esquivaba sus labios en dirección al cuello- dime- y su aliento le erizo los pelos de la nuca.
La respiración se le acelero y retiro un poco el cuerpo hacia atrás, pero la barrera que la mantenía prisionera no la dejo retroceder más.
-¿Cu… Curiosidad de que?- pudo sentir que sonreia mientras su respiración seguía haciendo estragos en sus nervios.
-De tu aroma- respondió mientras aspiraba en su cuello- de tu sabor- y esta vez poso sus labios justo debajo del pabellón auricular y con extremada delicadeza lamió la muy sensible zona provocando un gemido de la castaña, que ni siquiera sabía que tuviera ese sonido en su repertorio- de tu cuerpo debajo de la capa y el uniforme,… ¿no te parece que traes demasiada ropa?-
De repente fue conciente del calor que hacia en la habitación y no pudo hacer otra cosa más que darle la razón a la Ravenclaw asintiendo levemente.
-Eso suponía- y una mano se dirigió al broche de su capa desprendiéndolo y retirando la innecesaria prenda, la cual cayo fuera del circulo, al parecer su ropa si tenía permiso para traspasar el "circulo carcelero de Snape" - mejor…, aunque no suficiente- y delineo con sus labios y lengua la mandíbula hasta el mentón y una vez ahí, bajo por su cuello hasta donde el primer botón de la camisa se lo permitió.
-Merlín, que rico se siente esto-
-Me alegro que te guste, pero solo es el comienzo- dijo su compañera mientras se deshacía de la corbata a rayas rojas y doradas y comenzaba a desprender los estorbosos botones.
"¿Lo había dicho en voz alta?, por lo visto si, esto no esta bien, estoy en las mazmorras, en un castigo y Snape…," el hilo de su pensamiento se perdió en cuanto sintió las manos de Cho sobre su estomago y sus labios entre sus senos, provocando un nuevo gemido.
"Estaba pensando en algo importante… que era… si ya me acuerdo, era sobre…"y Cho volvió a ascender por su garganta y el hilo de su pensamiento volvió a perderse.
-No puedo pensar si sigues con eso- murmuro cuando pudo verla a los ojos.
-Esa es la idea- y la beso, lentamente, saboreando los labios de la castaña, mordiéndolos un poco, provocando que los entreabriera lo suficiente para permitir el paso de su lengua.
El beso cobro intensidad y de repente la Griffindor comenzó a escuchar violines,… literalmente.
-¿Escuchas...los violines?- pregunto recuperando el aliento
-¿Violines?- dijo con una sonrisa picara- ¿mis besos te hacen escuchar violines?- susurro sobre sus labios- y dime… ¿Qué más te hacen mis besos?- pregunto con una voz que se había vuelto algo ronca pero muy sensual, mientras volvía a devorarle los labios esta vez con desesperación y sus manos subían por sus piernas hasta posarse debajo de la falda - ¿y mis manos?- Volvió a susurrar mientras bajaba por el cuello y se desviaba hacia los senos que aún se encontraban protegidos por el sujetador.
Hermione estaba bastante segura que los violines no eran imaginación suya, pero en realidad ya dejaba de importarle si habían violines en la habitación o toda la filarmónica de Londres tocando el himno nacional, mientras Cho se deshacía de su prenda intima.
-Sabes- dijo la castaña con la voz entrecortada- me parece que quien trae demasiada ropa ahora eres tu- Cho la miro a los ojos y se sonrió.
-¿Y que piensas hacer al respecto?-
Como única respuesta envolvió con sus piernas a Cho y la acerco más mientras aflojaba su corbata para luego arrojarla en dirección al escritorio de Snape.
Para ser francos no tenía ni idea de lo que estaba haciendo, pero el suspiro que la Rav emitió mientras jugueteaba con su lengua en su oído le indicaba que no estaba errando el camino. Uno a uno fue desabotonando su camisa mientras Cho la animaba acariciando su muslo.
-No tienes idea las veces que he soñado con esto- le confesión de Cho la congelo por un momento, no tenía ni idea que despertara este tipo de pasiones.
-¿Enserio?-
Como respuesta volvió a besarla mientras su mano se aventuraba más en su exploración y abandonando sus labios comenzó a descender por su cuerpo. Hermione la observo por un instante antes de cerrar los ojos para disfrutar de las nuevas sensaciones que estaba experimentando.
El sonido de una campana hizo que abriera bruscamente los parpados mientras le llegaba la voz de los gemelos.
-Estimado cliente, le informamos que su tiempo de prueba gratuito acaba de expirar, esperamos que halla quedado satisfecho-
-Como pudo apreciar, la calidad de "Fantasías Personalizadas" es insuperable, todo lo que su subconsciente desea para pasar las horas de aburrimiento y el nuevo modelo viene con banda sonora Dolby Soundround3G incorporado. –
-Recuerde que para adquirir su "Fantasía" sin límite de tiempo solo debe enviar un pedido a Sortilegios Weasley, solo 2 galeons y 10 Knuts-
-Que tenga un buen día-
Y a continuación Hermione se encontró en la misma mazmorra con toda su ropa y ninguna Cho.
-¿Era una muestra gratis?, malditos, ¿a esto llaman regalo?, serán…-
Los insultos fueron interrumpidos por la puerta al abrirse bruscamente para dar paso a su Profesor de Pociones.
-Bueno Granger, hoy me siento generoso, la dejare irse 5 minutos antes- dijo mientras levantaba el circulo dorado. Hermione que aún estaba algo aturdida por lo que había pasado momentos antes lo miraba como si acabara de hablar en Parsel- ¿que espera?, ¿una invitación por escrito?. Lárguese de una vez.-
-Eh, si profesor, digo no…, ya me voy, hasta el lunes-
Y salio lo más rápido que pudo del salón en dirección a la torre Gryffindor, tenía que pedirle prestado a Harry su capa y a Hedwyng, ya mañana habría tiempo para analizar porque su subconsciente fantaseaba con ser acorralada en las mazmorras por Cho Chang.
No se si quedo bien, pero es lo que me salio, después de tanto tiempo leyendo fics pensé que era justo subir algo, por lo menos para dar la oportunidad de que me tomateen.
Saludos.
