Disclaimer: Naruto y todos los demás personajes excepto los que yo he creado pertenecen a Masashi Kishimoto. Tampoco me pertenecen las canciones que mencionaré a lo largo de la historia. No hay ánimo de lucro en este FanFic.
Bueno, este es mi primer fic (supongo que no será el último...). Está editado, antes tenía bastantes fallos y no me gustaba cómo quedaba. Si ya lo habías leído antes, tal vez no te des cuenta de los cambios, pero creo que alguien que lo lea por primera vez tendrá una imagen de lo que sucede más aproximada a la que yo tengo (y a la que quiero que veáis).
Aún así debéis perdonar los errores inciales que sigue habiendo, sé que introduzo la acción demasiado rápido, al menos para mi gusto, y también fallo en captar la esencia de la personalidad de algunos personajes amén de más detalles como faltas de ortografía, cosas que se contradicen, incluso a veces deformo la realidad para adaptarla a lo que quiero, tal vez veáis situaciones rocambolescas y puede que sin sentido; aunque normalmente serán situaciones cómicas o de mucha relevancia en la historia...
Pero todos esos fallos a vosotros os dan lo mismo...¿No? (sé que no suena muy convincente, pero en fin XD).
Hablando de faltas de ortografía. Sé que después de exclamaciones y preguntas no se ponen signos de puntuación, pero si no los pongo el texo pierde caracteres y/o espacios por alguna razón que desconozco (¿?). Aún así esto es un detalle sin mucha importancia, incluso puede que nadie se diera cuenta si no lo dijera XD. Pero creo que puede que haya alguna que se me haya escapado, al igual que algún pensamiento de algún personaje, que puede aparecer en medio de un párrafo sin formato...Si véis algo así avisadme.
Ahora os explicaré cómo van los diálogos y demás:
-Blablabla.- El personaje habla.
-Blablabla.- El personaje piensa, o recuerda una cita o cualquier cosa que pase en su mente.
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Blablabla.
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Esto de aquí arriba es un flashback. Todo lo que haya entre esas dos líneas será del pasado, y aunque sea un flashback de algo que recuerda un personaje, el narrador seguirá siendo omnisciente, no os extrañiéis si leéis cosas que el personaje que está recordando no puede saber.
"Blablabla" Algo que está escrito y tiene cierta extensión e importancia, puede ser leído en voz alta, interiormente o el narrador puede relatarlo.
También deciros que como pone en el sumario, hay escenas muy fuertes, pero se verán más adelante. Ya os avisaré cuando sea necesario.
Si no lees el manga que sepas que te vas a reventar parte de la historia (mis conocidos saben que me gusta hacer spoilers, muajajajajaja...pero esta vez seré responsable). Si lo lees y has llegado al capítulo 309 no tienes que preocuparte de nada. Aunque a partir de ahí la historia la contaré a mi manera, iré cogiendo cosas del manga según vayan saliendo en éste para que las historias concuerden (a ninguno nos gusta ver cosas que se contradicen...Aunque siempre tengo la impresión de que yo escribo cosas que si lo hacen porque se me olvida que las he escrito.) Así que puede que te adelantes el nombre de alguna técnica o el del algún personaje, pero eso será más adelante.
Este es el capítulo de introducción, así que más o menos váis a ver cómo va a ser la historia y cómo la trato. En un momento, verás que aparece una canción y que os diré cómo escucharla. Sólo es para satisfacer la curiosidad, aunque si la escuchas tal vez comprendáis mejor la situación. Lo dejo a vuestra elección.
En fin, creo que he dicho todo lo que tenía que decir, así que ya podéis empezar a sufr...quiero decir, a leer:
1º capítulo:
El encuentro
Los rayos de sol bañaban la aldea oculta de la Hoja, colándose entre las nubes que cubrían el cielo. La gente paseaba por las calles pensando en sus quehaceres cotidianos ignorando la frenética actividad que se desarrollaba en el despacho de la Hokage. En efecto, Tsunade dormitaba tranquilamente sobre un montón de papeles que había dispuesto como si fueran una almohada, sobre los que dejaba que la baba cayera sin preocupación alguna. Soñaba que quemaba esos demonios de papel que la atormentaban con largas horas de pesado trabajo burocrático, mientras se reía malvadamente.
Un sonido seco que sonó contra su escritorio la despertó. Al abrir los ojos lo primero que hizo fue entrecerrarlos para no verse cegada por la luz que entraba por las ventanas que había a su derecha. Después de unos segundos se acostumbró a la iluminación y miró al frente para encontrarse con el reloj que solía colgar encima de la puerta de entrada al despacho. Pensó extrañada -No recuerdo que el reloj estuviera ahí…-
-¿Qué hora es?- preguntó luego, un tanto afectada por el brusco despertar -¡Menuda estupidez de pregunta, estoy sola y encima tengo un reloj a medio centímetro de mi cara!…El sake me está destrozando el cerebro.- meditó sobre su vicio.
Pero estaba en un gran error…o acierto. Cuando alzó la vista vio que una mano enfundada en un guante negro sujetaba el reloj en posición vertical. Esto causó el desasosiego del Hokage, pero no tanto como lo siguiente que vio al alzar aún más la vista en busca del rostro del bromista que la había despertado. La manga del taje que llevaba ese hombre era completamente negra a excepción de una nube roja que se continuaba en el cuerpo y de las que contó otras tres. Con la mirada atónita y un escalofrío helador en el espinazo siguió alzando la vista para intentar discernir su rostro; su pretensión se vio frustrada por dos factores: primero llevaba un gorro de paja con tiras rojas cayendo hacia los lados, y segundo, la altura de aquel hombre solo le dejaba ver la parte superior del gorro y no su cara; debería de medir unos dos metros…
Aquello fue más que suficiente para poner en alerta a Tsunade, levantarse bruscamente del sillón y usar éste como arma contundente. Pero ni siquiera pudo moverse de la posición en la que estaba. Ni uno solo de sus músculos respondía a sus órdenes. Incluso tenía dificultades para respirar; como si estuviera muy nerviosa y tuviera que hacer esfuerzos por calmarse y respirar a un ritmo fijo. Ante la situación se le vinieron a la cabeza las intenciones de aquel hombre, ahora ella estaba a merced de la voluntad del miembro de Akatsuki…podría matarla como a un perro -Maldición, he fallado en proteger aquello que prometí…y además de una forma tan patética…Bueno solo es uno, los demás se encargarán de él, y si no seguro que Jiraya puede con él, o puede que incluso…- pero la voz calmada del akatsuki la interrumpió y la sacó de sus pensamientos de culpabilidad.
-Siento haber tenido que hacer eso, pero era la única manera de que me dejaras hablar, te pido disculpas…-
En ese momento Tsunade recordó sus palabras sobre la bebida y pensó -Muy bien, solo hay dos posibilidades: o esto es una ilusión para distraerme; o he bebido litros de sake…-
-Supongo que debes de tener tres preguntas en tu mente ahora mismo…La primera debe de ser; ¿Cómo he llegado hasta aquí sin ser detectado? La segunda; ¿Quién soy? Y la tercera; ¿Qué quiero?- la estupefacción de Tsunade la dejó con una sensación que era mezcla de sorpresa y miedo -La primera pregunta tiene una respuesta muy simple…- dijo el akatsuki con una voz más calmada aún -Al no haber chakra en mi cuerpo me es mucho más fácil pasar por un lugar sin ser detectado.- ahora su voz se volvió más seria -La segunda pregunta no tiene respuesta; no tengo nombre…- y la voz volvió a ese tono calmado que había tenido antes -La tercera pregunta puede parecer contradictoria si no la explico un poco…- hizo una pausa un tanto larga -Este traje no me pertenece…es de Uchiha Itachi…Lo único que queda de él es el nuevo tintado de esto.- dijo cogiendo una de las tiras que colgaban del sombrero de paja…que deberían ser blancas, no rojas -Esto tampoco es contradictorio…he ampliado el traje para que sea de mi talla, me es útil usarlo…- volvió a hacer otra gran pausa, mientras, en la mente de Tsunade había un caldo hirviente de ideas; ¿era todo una trampa elaborada?; ¿cómo alguien que no podía usar el chakra había matado a Itachi? Y sobre todo; ¿por qué daba tantos rodeos a la pregunta más importante?; ¿acaso era un engaño?
Su voz volvió a interrumpir sus pensamientos -Tengo cuentas pendientes con Akatsuki, así que nos interesa cooperar.- dijo en un tono frío -Yo tengo algo de información y soy un gran enemigo al que enfrentarse.- al mismo tiempo que hablaba se volvía a coger las tiras del sombrero -Y tú tienes más información que yo además de muchos ninjas poderosos…¿Y bien…qué opinas?-
Al fin Tsunade se liberó de esa parálisis que le impedía moverse, e inmediatamente se puso en guardia, esperando alguna reacción del hombre vestido con el traje de Akatsuki. Lo único que hizo fue lanzar hacia atrás el reloj, que había estado todo el rato sujeto contra la mesa por su mano, colgándolo en la pared limpiamente.
-Un truco muy bonito, pero no te servirá de nada para pelear.-
-No tengo intención de hacerlo…- dijo cortantemente -Solo voy a defenderme.-
-¡¡Pues defiéndete de esto!!- dijo Tsunade agarrándolo de la pechera y tirando de él hacia si, al mismo tiempo que preparaba su otro brazo para hacerle una operación de cirugía facial no planeada. Cuando el puño de la Hokage estuvo a unos centímetros de la cara de ese hombre, este movió su cuerpo sobre la cintura inclinándose lateralmente para que el ataque no le alcanzara; y arrastrara a Tsunade debido a la enorme fuerza que llevaba. El resultado fue que la Hokage acabó en el suelo, quejándose del golpe, y el supuesto miembro de Akatsuki detrás del sillón, después de haber dado una ágil voltereta para caer de pie.
-¡Imposible! Nadie puede moverse tan rápido sin usar chakra.- Tsunade estaba paralizada por la velocidad que había mostrado su oponente -Parece que dice la verdad, si se puede mover así, ya podría haberme matado si ese fuera su objetivo…Además no veo nada que me lleve a pensar que esto es una trampa, no hay rastros de genjutsu ni nada por el estilo.-
Cuatro miembros de ANBU irrumpieron en el despacho.
-¡¿Qué ha sido eso, Hokage-sam…?!- el soldado no termino de hablar al ver a un akatsuki allí, en el despacho de la Hokage, con ésta levantándose del suelo, y estando éste tan tranquilo, como si estuviera comprando dango en un puesto ambulante.
-¿Cómo coño ha llegado hasta aquí?- preguntó el que parecía el capitán, mientras los cuatro desenvainaban sus katanas.
-¡No!- gritó Tsunade al ver el gesto amenazante de estos -Está con nosotros.- añadió.
-¡¡¿¿NANI??!!- inquirió otro ANBU confuso.
-Vaya, así que has aceptado…- no parecía que pusiera mucho énfasis o interés en sus palabras.
-Retiraos, ya me ocupo yo.-
-Pero Hokage-sama…- replicó el cuarto ANBU.
-Es una orden…avisad a Yamato, que busque a Kakashi cuando salga del hospital hoy, y que vengan con el equipo en cuanto estén listos…Ah, y explicadles quién es y que está de nuestra parte.-
-Hai, Hokage-sama.- respondieron al unísono los cuatro, al mismo tiempo que se desvanecieron en una nube de humo.
-Supongo que querrás que se te pague; ¿no?- preguntó Tsunade.
-No. Me conformo con saber cuando comienza nuestra actividad.- su tono de voz seguía sin cambio alguno, frío y desinteresado.
-Un equipo de cinco ninjas se ocuparán de evaluar tus habilidades hoy por la tarde. Te quedarás aquí bajo mi vigilancia mientras me explicas cómo me has paralizado antes.- parecía que Tsunade se lo estaba ordenando, como si al aceptar hubiera pasado a formar parte de sus ninjas.
-De acuerdo, pero no me vendría mal comer algo, hace tres días que no pruebo nada…- la cara de Tsunade pareció iluminarse -No creas que podrás entender como he conseguido aguantar sin comer, paralizarte y esquivar ese puñetazo con cosas que entiendas, por muy ninja médico que seas…-
-No estaba pensando en eso.- mientras pensaba -Maldición, lo ha averiguado como si lo llevara escrito en la frente. Tengo que controlarme y calmarme un poco…Se me nota mucho.- -Si quieres comer, ven conmigo, no me fío de dejarte solo…Además, tengo hambre, no he desayunado todavía.-
-Tranquila, no le arrancaré el brazo a nadie y me lo comeré delante suya.- ahora lo que asustó a la Hokage era que se regodeó en las palabras mientras las pronunciaba.
Por el camino el número de explicaciones fue incontable. Un hombre vestido así en un lugar como ese no despertaba mucha confianza. A cada paso que daban, un nuevo ninja aparecía atacando con kunais y shurikens al falso akatsuki, que esquivaba los proyectiles casi bailando, como si intentara burlarse de la falta de habilidad de los ninjas.
-¿Si no tienes nombre, cómo te llama la gente?- preguntó Tsunade mientras caminaban. Curiosamente no había nadie atacando al "visitante".
-Los pocos que lo han hecho eso se referían a mí como "Kuroakuma" o "Akahayabusa".-
(Demonio negro y halcón rojo respectivamente.)
-Muy acertados…Pero llamarte así cada vez es un engorro; ¿no crees?-
-Si te refirieres a que necesito un nombre no me importa el que sea.-
-"Shu".- dijo mirando al anillo que llevaba. La Godaime se sorprendió de que lo llevara también.
-¿"Shu"?- tranquilamente se llevó la mano a la barbilla para rascársela -Vale…- la sensación de tener un nombre era algo nuevo para él y no le agradaba mucho… -No creo que me resulte fácil acostumbrarme…-
-¡¡Cuidado, Tsunade-sama!!-
-Oh no, otra explicación…Ya van quince, joder.- musitó para si misma mientras miraba hacia otro lado.
Mientras, "Shu" esquivaba kunais y golpes de una kunoichi pelirrosa. Después de la explicación de turno, Sakura se disculpo.
-Etto, no lo sabia, gomen.- una risa nerviosa la acompañó todo el rato que habló.
-No es necesario disculparse, hiciste lo que debías.-
-Sakura, ya se lo he pedido a los ANBU, pero tu mejor que nadie sabes que Naruto es un idiota rematado y no se enteraría aunque la vida le fuera en ello, así que quiero que se lo expliques tu después. No quiero pérdidas innecesarias con él.-
-Hai, Tsunade-sama.- después de recibir las especificaciones de la misión saltó hasta un árbol para ir a encontrar a Naruto. Al cabo de un rato de búsqueda le vio yendo hacia el puesto de ramen de Ichiraku -Estoy empezando a dudar de que su cerebro no esté hecho de ramen…- mientras, una gotita de sudor se le resbalaba por la cabeza -¡Ey! Naruto, ven, tengo que decirte algo muy importan...- no pudo terminar la frase porque el rubio se había subido a la rama donde ella estaba, tan rápido que ni si quiera lo había visto…Y éste empezó a hablar a voces, como siempre -¿Qué?; ¿Qué?; ¿Qué pasa Sakura-chan? Ah, no me lo digas, quieres una cita; ¿verd…?-
Segundos después, Naruto se asomaba entre los escombros del cráter que Sakura había hecho con él.
-¿Me vas a escuchar ahora?- preguntó furiosa la kunoichi.
-Ha-haaai.- se desplomó, cayendo al suelo. La pelirrosa se acercó para curarle un poco, si intentaba explicarle algo en ese estado tendría que repetirlo varias veces, y si eso sucedía Naruto acabaría muerto o en coma, no estaba dispuesta a hacerle eso a su amigo.
-¿Vas a atenderme ahora y no vas a decir ninguna tontería?- se podía oír el crujido de sus puños.
-Sí, sí, no te pongas así.- la voz de Naruto temblaba y tenía los ojos blancos.
-Muy bien, escucha, Tsunade-sama tiene una misión para nosotros esta tarde, tendremos que valorar como pelea un hombre que parece que quiere ayudarnos a luchar contra Akatsuki. Vendrán con nosotros Sai, el capitán Yamato y Kakashi-sensei. ¿Entendido?-
-Sí, pero; ¿por qué nos han cogido a nosotros? No tengo ganas de hacer una misión ahora que iba a comer ramen…-
-No lo sé, órdenes son órdenes. Después de que Kakashi-sensei salga del hospital, los cinco iremos a la puerta cuarenta y dos del bosque de la muerte, allí estarán Tsunade-sama y ese hombre…uhmmm…"Shu".-
Más tarde…
-Vaya, justo después de salir del hospital y tengo una misión...- Kakashi rebosaba ilusión por todos lados mientras veía la alambrada de la puerta cuarenta y dos -¿Os parece fuerte?-
-Bah, no saldrá vivo de aquí...- Naruto parecía confiado...demasiado. "Shu" se quitó el gorro de paja y dejó horrorizados a todos los presentes -¿Empezamos?-
-¡¡¡La puta madre, vaya pedazo de súper-mega-moco!!!- gritó el rubio mientas señalaba con el dedo una bola viscosa de color verde parduzco que colgaba de la nariz de "Shu".
Kakashi, Yamato y Sai entornaron los ojos y desviaron la mirada hacia un lado, Sakura se llevó una mano a la boca y Tsunade retrocedió unos pasos al ver eso, pues estaba al lado de él.
-Lo siento me pasa a veces.- se puso un dedo en la otra fosa nasal y soplo con fuerza lanzando el moco al suelo, que produjo un sonido pegajoso.
-¡¡Kyaaaaa, se está moviendo!!- la voz de pito que Sakura puso estremeció los oídos de todos los que estaban allí.
-No, en realidad ha caído encima de este gato.- efectivamente "Shu" metió la mano dentro de la "masa" y saco un gato que parecía que había sido de color marrón…y su nueva coloración tenía pinta de ser definitiva…
-¡Dejad de hacer el idiota y poneos a trabajar!- al mismo tiempo que Tsunade hablaba, dejó en el suelo uno de sus "recuerdos" comúnmente conocidos como cráteres.
-Ha-hai Tsunade-sama…- respondieron los cinco al unísono, mientras "Shu" la miraba divertido. Al fin se veía su cara. Tenía los ojos de un color marrón-rojizo extraño, además de unas marcadas ojeras. Su pelo era oscuro y corto, con un flequillo que parecía hacerle más alto aún. Y su expresión era tranquila, como si todo estuviera dentro de sus estimaciones…pero había algo atemorizante en sus ojos…
-Tengo que irme, los del consejo querrán mi cabeza por haber dejado que un akatsuki entre en la aldea…quiero un informe sobre él en dos horas como máximo. Estaré en mi despacho.-
-Hai, Tsunade-sama yo me encargaré del informe.- Yamato respondió haciendo una reverencia al tiempo que Tsunade se iba.
-Aunque lleve este traje, no pertenezco a esa organización…- ese tono serio apareció otra vez en su voz.
-¡No tienes tiempo de hablar!- "Shu" vio cinco copias de Naruto saltando hacia él.
Media hora después, Tsunade caminaba hacia su despacho donde su querido papaleo la esperaba con impaciencia. -Shannaro. No sé cómo pueden ser tan cabezones, hasta que no se lo he explicado con un dibujo no lo han entendi…- cuando vio que "Shu" la estaba esperando en la puerta del despacho apoyado de espaldas en la pared y a los cinco ninjas sentados en el suelo atados con una cadena se quedó helada -¡¿Cuánto tiempo llevas ahí?!- preguntó Tsunade con la boca abierta señalándolo con un dedo.
-Dos minutos exactos.- dijo el hombre del traje negro sin mucho interés al mismo tiempo que los ninjas se desvanecían en una nube de humo y Yamato, seguido de Kakashi, aparecía por el pasillo.
-Una ilusión muy bien hecha.- anotó Kakashi.
-Y basada en la realidad.- replicó "Shu", Kakashi y Yamato se miraron incomodados mientras Tsunade alzaba una ceja.
-Muy bien; ¿dónde está ese informe, Yamato?- señaló a su despacho haciendo una señal para que pasaran los tres.
-Sí, Tsunade-sama, aún no está redactado, pero puedo relatárselo si lo desea.- respondió Yamato en tono solemne.
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-Muy bien, muéstranos qué sabes hacer.- Kakashi hablaba mientras miraba de reojo a Naruto que había caído dormido al suelo antes, cuando intentó atacar a "Shu", seguramente había sido alguna técnica suya.
-Está bien, mirad.- extendió la mano con la palma hacia arriba y apareció una pequeña llama negra con el borde rojo -Aunque te recuerde al Amaterasu no lo es, éste es más peligroso.- Kakashi miró sorprendido a "Shu" -Ahora su poder está contenido en esta pequeña llama; pero si lo libero parcialmente pasa esto.- se acercó caminando hasta la valla y puso la mano cerca del metal, exponiendo éste al calor del fuego oscuro. Pasados dos segundos el candado que había cerca se puso al rojo vivo y empezó a fundirse, cayendo al suelo. -Y si lo libero completamente pasa esto otro.- golpeó el suelo con la palma en la que sostenía la llama en un ángulo de unos cuarenta y cinco grados. La explosión no se expandió en todas direcciones, sino solo en la que había sido proyectada la llama. Al disiparse el humo apareció una zanja en el suelo de unos diez metros de largo y tres o cuatro de ancho. Dentro de ella, rellenándola hasta la mitad, había roca fundida -El magma debería llegar hasta el borde, pero se ha producido tanto calor que se ha evaporado una parte de la roca que había, de hecho la roca que ahora hay ahí abajo se está evaporando; no os acerquéis o moriréis ahogados por los vapores.- los cuatro shinobis se abstuvieron de asomarse a ver el estropicio causado.
Naruto abrió los ojos. Lo primero que vio fue una tenue luz rojiza que se distinguía en su visión como una simple mancha; que le recordaba terriblemente a cierto chakra. Frotándose los ojos trató de levantarse sin conseguirlo -¿Esta luz es el chakra del Kyuubi?; ¡Mierda, voy a perder el control! Tengo que retenerlo…- Sin embargo, cuando consiguió levantarse vio que solo se trataba de roca fundida.
-Naruto; ¿qué haces ahí parado? Ven aquí.- a Naruto le extrañaba que Sai le tratara así, se esperaba una reacción mucho más fría, pero se iba acostumbrando al cambio. Se acercó a ellos caminando, mientras miraba la lava. Mal hecho, debió mirar al suelo…Parecía como si hubiera pisado "algo", dirigió su mirada hacia abajo para encontrarse con el súper-mega-moco -¡¡Aaagghhhhhhhhh!!; ¡Agua!; ¡Necesito agua para limpiarme esto!- salió corriendo hacia un riachuelo cercano dentro del bosque, yendo a la pata coja para evitar quedarse pegado al suelo. Los demás le miraban con una gota de sudor corriéndoles por la nuca.
-Bueno el problema de ese ataque es que es fácil de esquivar, aún así es muy útil como distracción o para encender cerillas. Además también puedo controlar la forma como quiera, mirad.- apuntó la mano hacia el suelo y la llama empezó a tomar una forma familiar -¿Estas son las caras que hay esculpidas en la roca, no?-
-Sí, e incluso se parecen más a los originales que las otras.- contestó Sakura haciéndose la entendida.
-Puedes tocarlas.- "Shu" propuso aquello como un desafío.
-¡¿NANI?!; ¿Estás loco?- no pareció que la propuesta fuera de mucho agrado, pero "Shu" ya había puesto su mano sobre la llama -Seguro que esos guantes que llevas te protegen del calor.- dijo desconfiando Sai. El falso akatsuki se deshizo del guante que llevaba y volvió a introducir la mano, desnuda esta vez. Era pálida, y tenía una pequeña cicatriz. Al no producirse ningún efecto, los cuatro se quedaron boquiabiertos.
-No pasa nada, solo produce efectos si libero el calor que hay dentro, adelante hazlo, es una sensación…diferente.- se pensó bien su última palabra. Kakashi fue el primer valiente que se atrevió. Acercó su mano despacio, para intentar sentir un aumento de la temperatura a medida que se acercaba a la llama. Cuando su mano se posó sobre ella sintió un hormigueo extraño, parecido al que se experimenta cuando se duerme una parte del cuerpo, pero este no era desagradable…era como una insensibilidad confortable que le acariciaba la mano con el movimiento de la llama. La retiró no sin antes pensárselo dos veces. Pero sus pensamientos se dirigieron a su mano de nuevo al ver que se derretía y quedaba cegado por un dolor muy intenso. Sus gritos parecían inaudibles para los demás, que ni siquiera se inmutaban. El dolor no se detuvo ahí, su brazo siguió fundiéndose como un helado, para después seguir por su cuerpo hasta que sus ojos se cerraron.
Cuando los abrió estaba de pie, al lado de los demás, que parecían también afectados por aquello -Un genjutsu muy bueno, en ciertos aspectos.- lo que le había impresionado era el hecho de que el dolor era real. El dolor de un genjutsu se acompaña siempre con una alteración del chakra que se puede notar, pero en este caso no fue así. Por otro lado, la "simulación" de los hechos en general era poco convincente.
-No, error, eso no ha sido un genjutsu, el genjutsu necesita chakra, y yo no tengo nada en absoluto. Así que primero tendría que haber robado el de alguno de vosotros para haber podido hacerlo. La ilusión ha sido "real"…- hizo el signo de comillas con los dedos -Desde un punto de vista relativo.-
-¿Realidad relativa? Eso no tiene sentido.- las palabras de Yamato sonaron cortantes.
-Por supuesto que lo tiene, es muy fácil engañar al cerebro, por eso es real y relativo al mismo tiempo.- los ninjas pusieron cara de no haber entendido mucho. "Shu" decidió dejar el tema y seguir con su prueba -Supongo que querréis ver mis habilidades cuerpo a cuerpo; ¿no?
-Sí, quiero verlo para poder reírme de ti cuando estés en el suelo.- todos se dieron la vuelta para ver a un Naruto sonriente con los brazos cruzados…seguía estando demasiado confiado.
-Has hecho las tres cosas mal. Primero te has revelado cuando podrías atacarme por sorpresa, segundo, me estás subestimando, y tercero, me has dado una pista sobre como vencerte más rápidamente.- Naruto se preparó para contestar, pero "Shu" apareció delante suya, colocándole un pie en el pecho para empujarle hacia atrás. Éste retrocedió unos pasos y puso una mueca de impotencia y sorpresa. Al ver eso, Kakashi se levanto su protector frontal sin dudarlo dos veces, e hizo un gesto para indicar a los demás que se preparan para atacar.
El rubio creó sus típicos cuatro clones para rodear a "Shu" con ellos. No pareció que mostrara mucho interés en su situación…¿desventajosa? Kakashi y Yamato se miraron para confirmar su plan, el primero desapareció y el segundo juntó las dos palmas de sus manos para hacer que dos raíces salieran del suelo y sujetaran a "Shu" por encima de los tobillos. Éste miró hacia abajo, interesado en esa técnica, y mostró una sonrisa confiada. Desapareció cuando el rasengan gigante de dos de los clones de Naruto empezó a mover su traje debido a la corriente de aire que movía el jutsu.
Apareció en el lugar donde estaban Yamato, Sakura y Sai, justamente detrás de éste último; empuñando una larga katana en su mano derecha. Dio un tajo horizontal a la altura de los pulmones del ninja, el cual pudo evitar agachándose y rodando lateralmente, aunque perdió algunos pelos debido al corte del sable. Yamato retrocedió de un salto al ver que se había escapado de su trampa. Sakura cargó hacia él con intención de que le diera a ella un "golpe de ojo en el puño", pero al ver que se dio cuenta y que se cubrió colocando la katana con el lado del filo apuntando hacia su puño, se detuvo. "Shu" apoyó la otra mano en la punta de su espada para darle más apoyo en caso de golpe. Sakura le lanzó un shuriken al mismo tiempo que se acercaba una de las bestias dibujadas de Sai en la dirección opuesta.
El falso akatsuki introdujo la punta de la katana en el agujero central del shuriken para lanzarlo hacia atrás. Atravesó a la bestia, convirtiéndola en un charco de tinta, y se dirigió hacia Sai describiendo una curva suave. El shuriken no le dio a él, sino que impactó contra su pergamino, incendiándolo debido a las oscuras llamas que había en el filo de la estrella ninja -Mierda, solo me queda otro, será mejor que me lo guarde para cuando aparezca Kakashi y lo inmovilice.- "Shu" se quedó en una posición defensiva después del contraataque, empuñando la katana frente a su cara, sujetándola por la izquierda.
-¿Qué estarán tramando y dónde están los otros dos? Bueno la trampa está casi lista, solamente hace falta que se acerquen…Quizá un cebo…la chica…Perfecto, y además es el médico del grupo, puedo notarlo por su estilo de pelea, no dejarán que le pase nada.- las ramas de Yamato mantenían ocupado a "Shu" mientras pensaba.
Una mano salió del subsuelo agarrando el tobillo de "Shu" y tirando de él con fuerza hacia abajo, enterrándole hasta el pecho. Yamato sujetó los brazos y la cabeza de la víctima con sendas raíces.
-¡¡Naruto, ahora!!- gritó Kakashi, mientras miraba al mencionado, que estaba pegando sellos explosivos a gran velocidad en el cuerpo del futuro cadáver.
-Tu turno, Sakura-chan.- la kunoichi asintió desde lo alto, montada en uno de los dibujos, un pájaro. Se lanzó para caer sobre el inmovilizado "Shu" usando toda su fuerza y la velocidad de la caída. Le golpeó en la cara y se oyó el crujido de su cuello, incluso en el lugar donde estaba oculto Sai. La kunoichi salió de allí de un ágil salto, justo después explotaron los sellos; creando un cráter en el que estaba el cuerpo inmóvil.
-Tú has sido el que nos ha subestimado, idiota.- el integrante de "raíz" se acercó caminando al cráter para ver junto a sus colegas si estaba muerto.
-No…no he subestimado a nadie. Vuestras habilidades encajan más o menos en las predicciones que había hecho, simplemente estimé acertadamente las habilidades de vosotros cinco y lo he sabido aprovechar para pelar de la forma más eficiente posible…- una pausa dejó el ambiente cargado de tensión, principalmente porque la voz venía de todas las direcciones y parecía no tener cuerpo; lo que inquietó a los ninjas -Ya he ganado, habéis caído en la trampa y no podéis salir, ni si quiera sabéis dónde estoy…-
-¡¡Agrupaos!! Si nos coge dispersos se podrá ocupar de nosotros sin problemas.- instantáneamente los otros cuatro siguieron el consejo de Yamato y formaron un círculo cerrado, espalda con espalda.
-¡Sal! Vamos, voy a darte tu merecido.- Sakura miró reprobatoriamente a Naruto, regañándole con la mirada por ser tan impetuoso.
-Admiro tu actitud determinada, Naruto…- la voz de "Shu" seguía sin proceder de una dirección en concreto -Pero ya has perdido.- el rubio iba a responder otra vez dejándose llevar, pero una fuerza que obligó a los cuatro a sentarse se lo impidió. Los cinco notaron como algo les empujó hacia abajo y los sentaba. Todos se dieron cuenta de que no podían moverse, como si estuvieran atados. De repente, el cuerpo del falso akatsuki se convirtió en una masa de llamas negras y rojas. Al mismo tiempo, se hicieron visibles unas cadenas que ataban a los cinco shinobis por el abdomen a la par que sujetaban los brazos por debajo del codo. De la cadena que cada uno tenía atada, salía otra desde la espalda que se encontraba con las de sus compañeros. De modo que los cinco estaban sujetos a una misma cadena que se dividía en otras cinco en el último eslabón, y cada una de las divisiones iba a la cadena en la que estaba atado uno de los ninjas.
-Como vamos a trabajar juntos, os explicaré cómo lo he hecho, además aprenderéis una valiosa lección que os servirá en el futuro.- la voz de "Shu" sonaba como si estuviese dando una clase de novatos a unos principiantes. Apareció delante de ellos con su gorro puesto.
-¿Cómo demonios lo has hecho? Es imposible que no nos hallamos dado cuenta de que nos habías atado con las cadenas.- Sai parecía impresionado, si por algo destacaba en "raíz" era por detectar las trampas.
-Muy bien, escuchad…- el falso akatsuki envainó su katana en la funda que llevaba en su espalda, dentro de su abrigo negro. También recogió la cadena con su brazo izquierdo, desatando a los ninjas, y guardándola dentro de su manga -Ese clon ha estado peleando con vosotros desde que me he quitado el gorro y os quedasteis sorprendidos por el moco; en ese momento me cambié por él aprovechando que todos estabais distraídos. Con mi velocidad no os disteis cuenta. Puedo usar mis técnicas a distancia mientras tenga una copia.- puso la mano apuntando hacia un lado y un nuevo sustituto apareció junto a él, tomando forma a partir de las llamas -Es exactamente igual a mi y puedo manejarlo y defenderme, más o menos, al mismo tiempo. Así que todo lo que habéis visto es algo que podría hacer en un combate, solo lo he usado para distraeros de las cadenas.-
-Ya, pero; ¿cómo no nos hemos dado cuenta de que las cadenas nos estaban atando?- preguntó Kakashi mientras se levantaba del suelo.
-El moco.- los cinco dirigieron la mirada hacia la susodicha "masa" -Además de haberme servido de distracción, tenía otra función.- al decir esto el moco desapareció dejando humo en su lugar -También era una ilusión, cuando lo habéis visto, habéis caído en la peor trampa posible.- la explicación de "Shu" tenía un tono pausado y lento, aunque sonara algo forzado.
-¿La peor?; ¿Quieres decir que podrías haber hecho algo más?- Sakura se puso nerviosa.
-Sí. Cuando habéis sentido asco hacia el moco la ilusión se ha reforzado. Ya que si pensáis que es asqueroso…Que lo es…Le estáis otorgando credibilidad inconscientemente a la ilusión; y por tanto abriéndome las puertas de vuestro cerebro. Esto quiere decir me he colado en vuestra mente y he eliminado la sensación de contacto de la cadena. Pero podría haber hecho muchas más cosas. Por ejemplo, podría haber parado vuestros corazones o veros morir asfixiados inmovilizando vuestro diafragma.- la cara de los shinobis era una mezcla entre sorpresa, humillación, alivio y vergüenza -Habéis perdido porque no os habéis tomado en serio el combate desde el principio; si no hubierais caído en la ilusión, seguramente ahora estaría teniendo dificultades contra vosotros…La inteligencia es la mejor arma.- se hizo un silencio tenso en el que, como era de esperar, Naruto se aseguró de ser el primero en volver a hablar.
-Muy bien, has ganado…Por esta vez…- se podía ver como el jinchuuriki se levantaba con la vista baja para volver a levantarla y mirar a "Shu" -La próxima vez que nos enfrentemos yo ganaré y…- "Shu" interrumpió a Naruto.
-Naruto, de no haber sido por ti; ahora, estaríais peleando todavía contra el reemplazo.- ésas palabras dejaron el cerebro de Naruto bloqueado, sin saber qué decir o hacer.
-No entiendo…que quieres decir.- la confusión del rubio era considerable.
-Fueron esos sellos los que derrotaron al reemplazo, si no lo hubieras hecho se habría recuperado de los demás ataques. Para poder acabar con él hace falta una combinación de golpes desde muchas direcciones; no uno muy concentrado…- se paró para poder ver la cara de asombro del muchacho -Además, eres un gran ninja…Y el peor enemigo al que enfrentarse…- ahora Naruto estaba aún más confuso y contento al mismo tiempo -Alguien a quien hay que descuartizar en trocitos para obligarle a rendirse puede llegar a ser un verdadero problema…Y estoy seguro de que tu potencial te permitirá superar a quien quieras sin muchos problemas…- "Shu" dibujó una sonrisa confiada para intentar sacar a Naruto de su trance. Cuando éste se dio cuenta imitó el gesto y se llevó la mano a la nuca para rascarse en uno de sus típicos gestos.
-Bueno, Kakashi-senpai y yo debemos llevar el informe a Hokage-sama.- -Espero que no nos eche la bronca por perder…- -Deberías venir con nosotros…¿"Shu", no?- la pregunta de Yamato pareció incomodarle.
-…"Shu"…sigo sin acostumbrarme…Supongo que no hay más remedio…- se quedó pensativo un momento -Venga, vamos.-
-Vosotros tres podéis iros a casa.- Kakashi miró a los chicos, que asintieron y se marcharon.
-Esperad.- "Shu" vio como los 3 ninjas se daban la vuelta y le miraban -Necesito que me hagáis un favor, venid a hablar conmigo cuando salga de la oficina de la Hokage; tendréis recompensa.- dijo haciéndose el interesante.
-¿Y qué ganaremos?- preguntaron los tres al unísono.
-Uhmm…no sé…tal vez os enseñe algún jutsu o…- Naruto se le acercó instantáneamente para acosarlo a preguntas.
-¡Oh!; ¿Nos vas a enseñar a usar ese fuego, o serán esas ilusiones, o…?-
-Tranquilo Naruto, no puedo enseñaros eso, no podéis usarlo. Pero puedo enseñaros otras cosas o invitaros a cenar o…- el rubio volvió a interrumpir.
-¡¡Sííí!!; ¡Ramen!; ¡Ramen!; ¡Ramen!- la expresión de los presentes pasó a ser de vergüenza ajena.
-Lo tomaré como un sí…¿Y vosotros?- Sakura asintió y Sai se encogió de hombros como si quisiera decir: "Qué remedio…" -Muy bien, ya sabéis dónde estoy.-
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-Vaya, tus habilidades son muy interesantes…Sin embargo me gustaría que hicieras algunas misiones antes de vértelas con Akatsuki. Vosotros dos podéis retiraros.- Yamato y Kakashi obedecieron a Tsunade, al mismo tiempo que desaparecieron en una nube de humo -Bien, ven aquí mañana a las ocho para que se te asigne una misión de grado "A" y a dos compañeros de equipo. Trataré de que sean del grupo que has conocido hoy para que tengas más información sobre ellos; ¿entendido?-
-¿Grado "A"?- preguntó "Shu".
-Ahora no puedo atenderte, seguro que te las puedes apañar solo.- el papeleo acumulado sobre la mesa era un motivo que no pasaba desapercibido.
-Está bien.- "Shu" se dio la vuelta y se marchó.
-No será complicado en exceso para él…Pero no puedo arriesgarme a algo más difícil, además no tenemos nada más por ahora…Espero que Akatsuki no nos dé muchos problemas…- Tsunade se impacientó por la falta de información sobre el enemigo.
El misterioso hombre vestido de negro iba saliendo del edificio, cuando vio la luz rojiza del sol, que ya estaba bastante cercano al horizonte. Los recuerdos no tardaron en llegar a su mente…
-¡¡¡"Shu"-san!!!-
-¿Uhm?- la voz de Sakura le devolvió a la Tierra.
-Llevo media hora llamándole…y bien; ¿cuál es ese favor?-
-Favores…- replicó "Shu" -Necesito saber qué es una misión de grado "A"; y también necesito que me enseñéis la villa. Lo más seguro es que pase aquí mucho tiempo, así que me vendría muy bien conocer este sitio lo mejor posible.- los shinobis se quedaron extrañados al oír sus peticiones.
-Pues vale, pero nos tienes que invitar a ram…- Naruto no pudo acabar de hablar. Si se piensa bien es difícil hablar con un puño en la boca.
-¡¡Baka!!; ¿Alguna vez has comido algo que no sea ramen?- Sai se alejó unos pasos de Sakura para evitar llevarse un "regalito", por si acaso…"Shu" les miró alzando una ceja.
-Bueno será mejor que les dejemos resolver sus problemas.- Sai les señaló, mientras Sakura zarandeaba a Naruto furiosamente. La ceja de "Shu" seguía en su sitio -Mira, una misión de grado "A" suele consistir en un asesinato, en espionaje, en capturar criminales peligrosos etc.…las suelen hacer los jounins.- la respuesta del shinobi dejó a "Shu" pensativo. Dio una voltereta hacia atrás para esquivar a Naruto, que había sido lanzado por Sakura. Ésta iba caminado hacia él para rematarlo, pero el falso akatsuki la cogió del brazo.
-Puede que sea un idiota y se merezca algún golpe que otro, pero ya está medio muerto, le as cogido con la guardia baja y encima le has dado en los puntos vitales sin querer. Yo que tu le echaría una mano.- Sakura miró a su amigo, que estaba sin sentido en el suelo y se dio cuenta de lo que había hecho. Había perdido completamente el control y se había pasado "tres pueblos". Salió corriendo hacia él para curarle, pero la mano de "Shu" no la había soltado.
-¡¡¿¿Qué mierda haces??!!; ¡¡¡Naruto va a morir por mi culpa!!!- la pelirrosa gritó con toda su fuerza, pero se paró al ver al falso akatsuki apoyando una mano sobre Naruto y sobre todo; al ver que los rasguños se cerraban y su respiración se hacia normal.
La copia que sujetaba a Sakura se desvaneció, dejándola libre para acercarse al rubio. Efectivamente, estaba curado plenamente.
-Ahora solamente hay que despertarle.-
-Eso es imposible estará inconsciente al menos hasta mañana.- Sakura negó al mismo tiempo con la cabeza mientras contemplaba horrorizada lo que había hecho. ¿Cómo había podido ponerse así por algo tan irrisorio?
-Compruébalo, verás que está perfectamente.- la kunoichi no se hubiera dado cuenta de que él había estado apunto de morir si no lo hubiera sabido, se había dejado llevar por esa parte de ella que le hacía parecer tan terrible -Estoy seguro de que el ramen le despertará; ¿dónde podemos conseguirlo?- preguntó "Shu" con algo de impaciencia a la par que cargaba el cuerpo de Naruto a sus espaldas como si fuera un saco.
-Seguidme, está cerca.- dijo Sakura algo preocupada con la mirada baja -Joder…casi le mato por una tontería…Tengo que aprender a controlarme, no puedo dejar que esa faceta infantil me enfade…Espero que no se cabree mucho…Mierda me siento fatal, casi mato a mi mejor amigo, y ni siquiera sé si hubiera sido capaz de salvarle si él no llega a estar aquí…-
-¿Te pasa algo Sakura?- preguntó Sai al ver que habían llegado a la calle dónde estaba el ramen de Ichiraku; y que ella siguió andando hacia delante.
-¿Qué? No, nada, nada, es que estaba un poco distraída, jijiji.- se rió nerviosamente al mismo tiempo que sacaba la punta de la lengua para volver a dirigir la mirada a un punto indefinido del suelo.
-No te preocupes, Naruto no podrá recordar que ha estado al borde de la muerte.- esas últimas palabras hicieron que la mirada de Sakura bajara aún más. "Shu" reparó en su error e intentó enmendarlo -Venga, anímate que invito yo.-
-No déjalo…me voy a casa…- la kunoichi empezó a caminar a paso lento con la mirada clavado en el suelo.
-Comprendo que quieras estar sola, pero ten cuidado. No conseguirás nada deprimiéndote…-
-Lo sé…- contestó sin muchas ganas mientras se alejaba.
El falso akatsuki y Sai se sentaron en un taburete cada uno y pusieron a Naruto en otro que estaba pegado a la pared para evitar que se cayera.
-Bien, pide algo; yo quiero…- miró al papel que había en la pared con los precios y el menú -El que tiene cerdo, veinte tazones por favor. ¿Y tú?- Sai quedó un poco impresionado por el pedido de "Shu"; Ichiraku se frotaba las manos ansiosamente. Si tenía un cliente así podría pagar los estudios de su hija sin problemas.
-¡Ahora mismo!- respondió el dependiente corriendo a preparar semejante pedido.
-Yo tomaré un cuenco del de marisco.-
Naruto movió su nariz y se despertó instantáneamente -¡Ramen!-
-Adelante, pide que yo invito.- por primera vez la mirada de "Shu" parecía amable.
-Cinco tazones de miso ramen.-
-¡En seguida!- respondió Ichiraku.
Lo que se supone debía ser una cena era un velatorio, al menos en lo que a conversación se refería. Entre que Naruto y "Shu" estaban ocupados devorando ramen y Sai no era muy hablador…Además para recibir la contestación de alguien con la boca llena prefería no decir nada.
-Por cierto; ¿dónde está Sakura-chan? No la veo…- el falso akatsuki sabía que esa pregunta llegaría tarde o temprano.
-Se fue, no se encontraba bien.- no vio otra opción más que mentirle para no empeorar la situación. Naruto volvió a su ramen. Sai le envió una mirada a "Shu" para indicarle que no debería haber mentido. Pero éste se encogió de hombros y él sencillamente le imitó en señal de que había entendido lo que quería decir.
Una vez acabada la cena; Sai y Naruto condujeron a "Shu" para mostrarle la villa. Cuando pasaron al lado de un callejón, se detuvo, dejando que los dos shinobis se adelantaran.
-¿Qué pasa?- preguntó Naruto.
-Otro día seguiremos…ahora voy a dormir.-
-¿Dormir?; ¿Dónde?- Sai se extrañó por las palabras del falso akatsuki.
-Aquí; no pensarías que iba a dormir en un hotel; ¿verdad?- la respuesta causó que las caras de ambos se quedaran con una mueca confusa.
-Pues sí.- Naruto respondió con los ojos cerrados, como era habitual en él.
-No me gusta dormir en sitios cerrados…Mañana a lo mejor comparto misión con alguno de vosotros…hasta entonces.- se sentó y usó la pared como improvisado respaldo apoyando la cabeza con cuidado para no hacerse daño.
-Joder, que tío más raro…Bueno adiós.- empezaron a caminar, alejándose de allí -Ah y espero que me invites otro día.- dijo el rubio.
-Se verá que puedo hacer, Naruto…- "Shu" parecía cansado no solo por su actitud y su voz, algo más incitaba a pensar en ello…
Miró hacia arriba para ver el cielo estrellado. Bufó al darse cuenta de que estaba en un callejón que no le permitía ver todo el orbe celeste. Se levantó mascullando alguna maldición y de un salto subió al tejado del edificio contiguo al callejón -Esto ya está mejor…- murmuró para si mismo. La vista era bastante más amplia que desde el suelo. Se veía todo el firmamento; y había menos luz de la calle debido a la altura. Recordó aquellas noches en el desierto, cuando estaba completamente solo, sin nadie en decenas de kilómetros a la redonda…El silencio que solamente se veía interrumpido por el viento que mecía las dunas haciéndolas avanzar…
Cayó dormido rápidamente. Haber curado a Naruto y la pelea de la tarde le habían debilitado, además, hoy era el primer día en que comía desde hacia otros tres.
Estaba tumbado en la parte más alta del tejado. Era un sitio plano y con el suelo cubierto de madera algo dañada por el paso del tiempo y la carcoma. La cadena sirvió de improvisada y "mullida" almohada, se quitó su gorro y lo dejó en el suelo con cuidado. Su último pensamiento se dirigió hacia "él" -Ojala estuvieras aquí y ahora…No dejaré que vuelva a pasar, me cueste lo que me cueste…-
Cuando la oscuridad de la noche empezó a disiparse entre las primeras luces de la mañana los ojos de "Shu" se abrieron lentamente -…¿Qué hora es?...Auch, la madera es más dura que la arena.- su costumbre de dormir tumbado en las dunas del desierto no le ayudaba a adaptarse al duro suelo -Debería comer algo…No sé cómo va a ser de difícil la misión, tengo que estar preparado…Pero ahora está todo cerrado…tendré que cazar algo…- "dicho" esto se levantó tranquilamente, se puso su gorro y guardo su cadena dentro de su manga izquierda. Fue saltando de tejado en tejado hasta llegar a la muralla. La vista de los bosques que rodeaban a la aldea de la Hoja iluminados por la luz del amanecer hizo que el falso akatsuki se detuviera a contemplar el paisaje. Su mente regresó automáticamente al pasado para recordar los amaneceres en el desierto que tanto le gustaban…
Unos pasos procedentes de las escaleras de una de las torres le sacaron de los recuerdos de su mente. Con el objetivo de evitar tener que dar explicaciones indeseadas, saltó de la muralla para aterrizar sobre una gruesa rama, de la que bajó aprovechado el rebote. Empezó a caminar relajadamente, como si estuviera paseando.
-Veamos que puedo apañar para comer…- lanzó rápidamente su cadena hacia un arbusto. Ésta quedó calvada en el suelo -¿Le habré dado?- tiró con decisión, arrancando un trozo de tierra y llevándose la mitad de un arbusto por medio. Una sonrisa se dibujó en su cara al ver a su presa. La cadena había atravesado la cabeza de un conejo -No está mal, con esto será suficiente.- agarró al roedor por el cuerpo y tiró de él para arrancarlo de la cadena, haciendo pedazos lo que quedaba de su cabeza.
-Parece que hay otro conejo…- volvió a lanzar su cadena, hacia la copa de un árbol. Esta vez se oyó un quejido. Sai cayó de la copa del árbol con la cadena atada a su brazo derecho. Aterrizó sin muchos problemas, a pesar de la molestia que le brindaba el tener el brazo apresado -No está bien seguir a la gente…-
-No te estaba siguiendo, te estaba buscando. La Hokage quiere verte en su despacho en diez minutos.-
-Vaya…Supongo que no hay tiempo de comer…- miró al conejo y lo guardo en un bolsillo interior se su amplio traje. Sai lo miró con incredulidad -No hay mejor comida que la que caza uno mismo.-
-Ya…- Sai no estaba muy interesado.
-Te deben de haber asignado al equipo que vendrá en mi misión; ¿me equivoco?- empezaron a caminar hacia la aldea.
-No, estás en lo cierto, iré contigo…También vendrá Sakura, nos está esperando allí.-
-Bien.-
Llegaron a la oficina con el tiempo justo, Tsunade estaba impacientándose. Movía los dedos de su mano rítmicamente, creando un sonido repiqueteante.
-Bueno, ya iba a ir a buscaros yo misma…- dejó el entretenimiento sonoro y apoyó la barbilla en una de sus manos -Vuestra misión consiste en traer a un ninja renegado aquí para interrogarle, eso quiere decir que tiene que volver vivo y con capacidad para hablar.- Sai alzó una ceja en respuesta a la obviedad del comentario de la Hokage -Podéis tomaros vuestro tiempo. Suponemos que está al sur del país de la tierra, aunque podría moverse a países cercanos o cruzar la frontera con el país del viento. No sabemos su nombre, pero tenemos esta foto de él.- los tres se acercaron para mirar. En la foto había un hombre algo mayor, con una pequeña cicatriz en la frente, algunas arrugas, una barba blanquecina y completamente calvo.
-Creo que sé quien es…He oído que intentó secuestrar a un familiar de un señor feudal…Pero solo es un rumor.- "Shu" estaba alterado. Cuando Tsunade había dicho dónde tendrían que buscar se sintió alegre y triste al mismo tiempo…Volvería a donde sucedió todo.
-Pues entonces partiréis enseguida hacia vuestro destino en cuanto preparéis vuestro equipo…- hizo una pausa pensándose lo que iba a decir -Sugiero que "Shu" sea el líder del grupo, pero la elección os la dejo a vosotros.-
-A mi me parece bien.- respondió Sakura, que tenía la cabeza gacha.
-Creo que es lo mejor.- Sai pensó que sería mejor que el hombre trajeado con el abrigo negro les liderara, le inspiraba confianza la habilidad que había mostrado en la prueba.
-Entonces supongo que mi deber es traer a mis compañeros de equipo sanos y salvos; ¿no?- preguntó "Shu".
-No exactamente, pero es muy importante que te asegures de que volváis todos. Ahora marchaos.-
-Hai, Tsunade-sama.- Sakura y Sai respondieron al mismo tiempo, el falso akatsuki simplemente asintió. Los tres salieron del despacho en silencio.
-Escuchadme, id y coged lo necesario para el viaje; avanzaremos campo a través, así que necesitaréis una tienda cada uno. No os preocupéis por comida, agua o mapas; de eso me ocupo yo. Os estaré esperando en la puerta principal. No tardéis mucho…- después de decir esto "Shu" se fue a esperar a su equipo y los dos shinobis se dirigieron a sus casas a preparar lo necesario.
Sakura se detuvo al ver la foto del equipo siete en su cuarto. Ahora ella estaría sola, Kakashi y Naruto se habían quedado en la villa; y Sasuke estaba muy lejos de allí…La voz de su madre la sacó de su mundo interior de pensamientos. Fue caminando hasta la puerta principal meditando sobre lo que había hecho el día anterior. ¿Cómo podría mirar a Naruto a la cara la próxima vez que le viera?
Una vez se habían reunido los tres en la puerta, "Shu" empezó a dar instrucciones -Muy bien, necesito saber algo Sai; ¿puedes hacer que tu técnica de dibujo detecte enemigos?-
-No mientras nos movemos.- respondió éste.
-No importa. Necesito dos criaturas de esas para que podamos avanzar en formación adamantina.-
-¿Formación adamantina?- inquirió Sakura.
-Os lo explicaré. En este tipo de formación pueden ir cuatro o cinco personas. En primer lugar iré yo, me encargaré de detectar a los enemigos a distancia y ser el primero en atacar. Detrás mía irá Sai, se ocupará de controlar los flancos con su jutsu, también cubrirás al médico del grupo,- señaló a Sakura -en caso de ataque. Tendrás que tener a dos dibujos controlando los flancos. Y tú tendrás que vigilar la retaguardia, si nos atacan te encargarás de rematar al enemigo.- Sai escuchaba con atención pero Sakura parecía estar distraída -No creo que sea necesario que usemos ésta formación hasta que salgamos del país, aún así estad alerta para defendernos en cualquier momento…No me fío de este tío, y además podemos encontrarnos con "problemas" que no tengan que ver con la misión…En marcha.- los tres saltaron hacia los árboles y avanzaron velozmente.
Después de unas seis horas de camino recorrido se detuvieron en un claro.
-Pararemos una hora para comer y descansar…Iré a buscar la comida, vosotros conseguid leña.- "Shu" se fue, dejando a Sakura y Sai cortando en trozos una rama de árbol que estaba tirada en el suelo.
-Te arrepientes de lo que hiciste anoche; ¿verdad?- Sakura palideció al oír a su compañero.
-Sí…No sé qué me pasó…¿Qué ocurrió con Naruto después?- preguntó la pelirrosa insegura de si misma.
-Se despertó al oler el ramen…No recordaba nada.-
-No sé si eso es bueno o malo…-
-¿Qué quieres decir?- dio un fuerte golpe a la rama y se cortó por todas las marcas que había hecho en ella.
-Que si lo supiera supongo que no querría volver a hablarme…Pero me siento culpable por no contárselo.-
-Deberías contárselo.- respondió "Shu" que cargaba con un jabalí atado en la cadena -Si no lo haces te sentirás aún peor conforme pase el tiempo. Además Naruto tiene derecho a saberlo…Seguro que él te perdonaría, si llegara a enfadarse contigo, claro. Ya sabes que eres muy especial para él.- Sakura se impresionó por el agrado de atención que el falso akatsuki prestaba a todo -Por cierto, esto es para vosotros dos.- soltó al jabalí en el suelo y en las caras de los dos apareció una mueca de sorpresa y sarcasmo.
-¿No crees que te has pasado un poco?- Sai alzó una ceja, parecía que aprendía usar las expresiones en el momento adecuado.
-No, en el desierto no hay tanta comida, hay que guardar algo para cuando lleguemos…Bueno no importa. Vamos a comer.-
Durante la comida "Shu" se fijó en la actitud de ambos. Sai miraba con recelo su mochila, como si la estuviese vigilando. Y Sakura estaba fijada en el fuego, no apartaba la vista de él.
-Bien, ésta noche llegaremos al desierto, así que necesitamos cargar toda el agua que podamos. Recoged vuestras cosas, yo me ocupo de lo demás.- los ninjas obedecieron y en unos minutos estuvieron en marcha de nuevo.
Al menos ésta vez Sai rompió el silencio durante el viaje -"Shu"…¿cómo es el desierto?-
-…Es una pregunta muy amplia…no podría contestarte con unas pocas palabras.-
-¿Has estado allí?- preguntó Sakura.
-He nacido y vivido allí durante veinte años, lo conozco muy bien. Lo bueno y lo malo.-
-Vaya…- Sai quedó intrigado por la respuesta.
-¡Ah! Casi se me olvida…Seguid avanzando, ahora vengo.- desapareció ante la mirada atónita de los ninjas.
-¿A dónde ha…?- el falso akatsuki volvió a aparecer delante suya.
-Aquí lo tengo.- en su mano tenía una rama de bambú recién cortada.
-¿Dónde lo has conseguido? Aquí no hay bambú.- Sakura seguía sin salir de su asombro.
-Hay un río a un kilómetro de aquí.- respondió "Shu" con ironía mientras señalaba en una dirección.
-¿Para qué quieres una rama de bambú?- inquirió Sai.
-Ya lo verás…O mejor, oirás…- una sonrisa misteriosa se dibujó en el rostro de "Shu".
Cuando llegaron al borde del bosque y las dunas empezaron a dibujarse sobre el horizonte, justo debajo de la puesta de sol; "Shu" no pudo evitar sentir que estaba en la puerta de su "hogar". Se detuvo sobre la rama del árbol que estaba en el límite. Sakura y Sai se pararon al lado suyo.
-Esto…es el desierto…Ahora se ve su cara amable…cuando entremos veréis la mala.- la vista era como la del amanecer de ese mismo día; imponente. La arena dorada se tornó rojiza con la luz del ocaso, al mismo tiempo que se empezaban a divisar las primeras estrellas y la oscuridad de la noche se cernía sobre el lugar -Pasaremos la noche aquí…Pero si queréis podemos hacerlo dentro del propio desierto y disfrutar de la vista.-
-Quiero dibujarlo…es…-
-Precioso…- Sakura le robó la palabra a Sai, aunque él no sintiera en un principio, parece que la compañía de Naruto y la pelirrosa le estaban ablandando, y esa intención de exteriorizar una emoción era la prueba de ello.
Siguieron avanzando por encima de las dunas, teniendo cuidado de no hundirse en ellas, ya que la arena era muy fina.
Cuando se pusieron a cenar, los shinobis entendieron porque "Shu" se había molestado en guardar tanta comida y agua. Lo único que había allí era arena.
-Será mejor que os vayáis a dormir, estaréis cansados…Yo haré la primera guardia.-
-Me pido la última.- parecía que Sakura se había alegrado un poco, sobre todo cuando Sai se resignó a coger la de en medio, que era la peor -Bueno, me quedaré yo en medio.- se arrepintió un poco de ver así a Sai.
Después de la cena y de montar las tiendas, la kunoichi se fue a dormir. Cuando llevaba un buen rato dormida, un extraño sonido la despertó. Se levantó y salió exterior. Pero volvió a entrar al sentir una bofetada de frío. No tuvo más remedio que coger una manta para abrigarse. Siguiendo ese sonido hipnótico llegó hasta lo alto de una duna.
Allí estaba "Shu", con una flauta hecha de bambú, tocando una canción que sonaba algo extraña…Había más sonidos de los que emitía la flauta. Se sentó delante de él y empezó a escuchar -Será una de sus ilusiones…- el falso akatsuki se dio cuenta de la cara pensativa de Sakura y en una de las pausas que hacía el sonido de la flauta se lo confirmó -Sí; los otros instrumentos son una ilusión.- la pelirrosa quedó algo impresionada por la respuesta que le dio su líder, pero no replicó nada y siguió escuchando la música durante un rato.
(La canción se llama "The lonely shepherd" de Zamfir, la puedes escuchar en radioblogclub, una página en la que hay miles de canciones que puedes oír on-line. El link está en mi perfil. Pondré todos los links de canciones o videos que estén relacionados allí.)
-Tocas muy bien…y es una canción muy bonita.- parecía estar mas animada que durante el viaje.
-Gracias…-
-…-
-…-
El silencio tensó el ambiente. Sakura levantó la cabeza y vio a compañero de equipo temporal concentrado en las estrellas. Cayó en la cuenta de que ese día había luna nueva…Y poco a poco se percató del resto de factores del ambiente. El cielo plagado de miles estrellas, la oscuridad casi absoluta, el leve ruido del viento que movía suavemente la arena…En ese momento entendió el porqué de aquella canción: la soledad.
-Dijiste que estabas muy unido a este lugar; ¿no?-
-Sí…Nací aquí…o al menos eso me dijo "él". Y hasta hace cinco años he vivido en el desierto.-
-¿Entonces tienes veinticinco años?-
-Sí…-
-¿Y por qué te fuiste así, de repente?- esa pregunta hizo que "Shu" bajara la mirada de las estrellas al suelo.
-Tardaré mucho en contártelo…Tu guardia empieza ahora, me puedo quedar aquí contigo y aburrirte con la historia; por que es muyyyyy aburrido…-
-No importa, cuéntamelo.-
-Ponte cómoda…- Sakura se tumbó y miró al firmamento salpicado de estrellas, se rodeó con la manta para no congelarse. No se esperaba aquel frío polar en el desierto -Como he dicho antes, "él" me dijo que yo nací aquí…en el desierto…- la voz de "Shu" se tornó melancólica y nostálgica -Lo primero que recuerdo de todo…es la canción que has oído antes…- se paró a meditar sus palabras -Yo tenía unos dos o tres años entonces; repentinamente oí un sonido de flauta y me deje guiar por él…-
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Se ve a un pequeño "Shu" bajando por una duna y entrando en una cueva excavada en la roca, guiado por la música. Allí hay un hombre mayor de unos cincuenta o sesenta años, con una flauta de bambú entre las manos; tocando una canción que sonaba algo extraña…Había más sonidos de los que emitía la flauta. El pequeño "Shu" se sentó en el suelo y escuchó la canción entera, no reparó en que había sonidos que se emitían desde ninguna parte, simplemente se quedó allí, embobado delante de la persona que tocaba.
-Parece que te ha gustado…- el hombre mayor dibujó una sonrisa en su cara.
-Sí, sí, tócala otra vez, por favor.- "Shu" parecía entusiasmado con la canción.
El viejo se rió, causando que el niño se enfadara -¿De qué te ríes?- preguntó algo mosqueado.
-No podré hacerlo otra vez hasta mañana.-
-¿Pero por qué? Yo la quiero oír ahora.- las palabras de aquel niño volvieron a hacer reír al anciano.
-Ya soy viejo…y me canso mucho, te repito que no podré hacerlo hasta mañana…¡Ah!, recuerda que iremos a la aldea…-
-¡D'oh! No quiero ir…-
-Sabes que es necesario, tenemos que comprar cosas.-
-Está bien…- refunfuñó "Shu".
Al día siguiente los dos estaban en la aldea que había a unos kilómetros de esa cueva, comprando comida en un tenderete. "Shu" se extrañó al ver la reacción del dependiente al verlos llegar; estaba muy nervioso.
-¿Qué le pasa señor?- preguntó el niño desde abajo del mostrador.
-Na…nada…¿Qué…qué desea?- su voz era temblorosa…igual que sus manos.
- Un kilo de carne de cerdo por favor.- respondió el viejo
-S…sí…ahora mismo.- se fue corriendo a buscar lo que le habían pedido.
-Oye…¿Por qué ese señor está tan nervioso?-
-No lo sé…Tal vez se ha asustado al verme…- sonrió mientras miraba hacia abajo, a donde estaba "Shu". Cogió la carne que le dio el comerciante y se marcharon…pagando antes claro.
-¿Por qué toda la gente nos evita?- el pequeño miraba a un lado y a otro viendo como la gente les miraba con temor.
-No te preocupes…algún día lo entenderás.-
-Pero yo quiero entenderlo ahora.- "Shu" se agarró al pantalón del hombre con el que caminaba.
-No puedes, eres demasiado pequeño aún…- ahora el anciano estaba bastante serio, él sabía que estaba tratando un tema delicado.
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-¡Ey! Ya es mi turno…- Sai se había despertado y subía por la duna -¿No se supone que deberías estar durmiendo?- señaló a "Shu" que se encogió de hombros y empezó a descender por la cara opuesta de la duna.
-Bah, voy a dormir un rato hasta que amanezca…Te sugiero que hagas lo mismo, Sakura.- se tumbó en la pared de la duna unos pasos más abajo de donde estaban los demás y miró a las estrellas.
-¿Eh?- Sakura se había quedado embelesada en el relato de la vida de "Shu". Le costaba creer que un niño aparentemente normal se hubiera convertido en una persona tan fría…Tan…extraña -Sí, tienes razón debería acostarme…- vio como "Shu" se quitaba su gorro de paja. Entonces fue cuando observó sus ojos de cerca. Sus miradas se cruzaron. La actitud de aquel hombre vestido de negro era intrigante, sus extraños ojos de ese color marrón-rojizo tenían algo muy misterioso que causaba una sensación desagradable con tan solo mirarlos -Sé que no es algo agradable, te pido disculpas…- la voz fría de "Shu" sonó en la cabeza de Sakura -¡¿Cómo has llegado hasta aquí?!- preguntó la kunoichi asustada mientras se levantó rápidamente -No armes tanto jaleo, no creo que a Sai le interese esto; ¿verdad?, además este es otro de mis trucos.-
-Cierto, esto no le interesa a Sai…Explícame por qué me he sentido así.-
-Te lo explicaré cuando lleguemos a ese punto en la historia.-
-Entonces; ¿eso es tan importante?-
-Sí…Luego comprenderás su importancia; ahora voy a salir.- dicho esto la voz desapreció de su cabeza. Sakura cayó en la cuenta de que seguían mirándose y de que la sensación no se había ido. Apartó la cabeza bruscamente y sintió como se esfumaba aquella cosa tan desapacible que la había atenazado hacía un momento. Bajó por la pared de la duna hasta su tienda de campaña, entró y se acostó.
A la mañana siguiente, la luz del sol se coló en la tienda de Sakura. Abrió los ojos y vio una luz amarillenta a través de la tela de la tienda. Se incorporó y se cambió para salir a desayunar. Al salir, vio a "Shu" y a Sai comiendo algunas bayas y frutas.
-¿Qué quieres? Hay moras, frambuesas, manzanas, peras, castañas…- el falso akatsuki abrió parcialmente su traje y metió la mano en un gran bolsillo interior en el que había de todo lo mencionado y otras muchas frutas.
-Ehhhh…No sé…tal vez una manzana y unas moras…- Sakura capturó al vuelo la manzana con una mano y se acercó a "Shu" para coger las moras. Los guantes negros que cubrían sus amplias manos eran algo toscos y ásperos. Pero ni las moras ni la manzana parecían tener algún arañazo o algo por el estilo.
Cuando los tres acabaron de comer y habían recogido todo, el líder del equipo explicó el plan para avanzar por el desierto -Bien escuchad; aunque no lo parezca no todas la dunas son como éstas. Algunas tienen una arena demasiado fina como para andar sobre ellas. Si os fijasteis anoche no avanzamos en línea recta, sino en zigzag. Así que debéis pisar cerca de donde pise yo, nunca en el mismo sitio…¿Entendido?- los dos asintieron -Hoy seguiremos avanzando hacia el noroeste para llegar a la zona que nos dijeron. Una vez allí tendremos que empezar un trabajo de investigación sobre nuestro objetivo por las aldeas de la zona. Usaremos la formación adamantina si descubrimos a nuestro objetivo o sospechamos que él nos ha descubierto. Supongo que llegaremos esta noche si no tenemos que dar muchos rodeos…De lo contrario será mañana ¿Alguna pregunta?- ninguno de los dos habló -Perfecto. En marcha…Recordad, pisad cerca de donde yo pise.- subió de un salto a la parte superior de la duna que tenía delante. Sakura y Sai saltaron cayendo a ambos lados de donde "Shu" había pisado -Por cierto, no esperéis a tener sed para beber cuando haga más calor…Y tampoco os preocupéis por el agua, tengo de sobra para aguantar hasta mediodía…pararemos en un oasis entonces.-
En la aldea de la Hoja…
-¡¡Sí, sí, sí!!; ¡He dominado la manipulación de la naturaleza del chakra!; ¡Soy el puto amo!; ¡Sí!- el jinchuuriki había conseguido el trabajo de años en un día y una noche…Por lo visto parece que se había emocionado un poco…
-Cálmate Naruto, aún queda lo más difícil.- Kakashi intentó acercarse al susodicho para tranquilizarlo, pero tuvo que sujetarle para que no se cayera al suelo desmayado -Debería descansar más a menudo…¿No crees Tenzou?-
-Sí, se está sobre esforzando…- el ANBU suspiró aliviado al no tener que seguir conteniendo el chakra de Kyuubi.
Naruto abrió los ojos al rato. Estaba tumbado en el suelo, cerca de un árbol.
-Será mejor que te estés quieto durante una hora más o menos. No puedes hacer tanto trabajo tan rápido. Así que mientras te explicaré el siguiente paso del entrenamiento.- Kakashi miraba sonriente a Naruto desde la derecha de éste.
-Vale, pero explícalo lo más simple que puedas, que si no, no me entero.- el rubio hablaba con los ojos cerrados, como si estuviera enfadado por la posibilidad de una explicación compleja.
-Está bien, escucha. Ahora que ya dominas la manipulación de la forma del chakra, o sea, el rasengan; y la manipulación de la naturaleza del chakra, o sea, la capacidad de cortar las cosas con él.- señaló a la cascada que había cortado esa misma mañana -Debes unir ambas manipulaciones para obtener el jutsu definitivo…Pero antes hay que comer algo…- se puso en marcha hacia la aldea. Yamato le siguió y Naruto se levantó quejándose de que tenía hambre mientras se encaminaba por donde ellos iban.
Si vas a tirar tomates, ten un poco de decencia y no uses los que están podridos (me encantan los tomates).
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Antes habría puesto: "Hasta la semana que viene." o algo por el estilo, pero como está editado no tiene mucho sentido. Además, antes no me molestaba en escribir todo correctamente (¿Qué queréis? Soy así de vago...). Pero viendo que esto puede perdurar en el tiempo se merece que le dedique más tiempo y atención al estilo.
Saludos.