Disclaimer: Zootopia es propiedad de Disney. Pero esta historia si es de mi propiedad, prohibido cualquier tipo de plagio.

Advertencia: Demasiada azúcar, despues no me anden culpando si se vuelven diabéticos. xd

"Créditos al dueño de la imagen".


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«Calor»

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Los copos de nieve caían con suavidad sobre el asfaltado suelo, uniéndose al blanquecino manto que lo cubría.

Judy suspiró contra la ventana, empañándola de inmediato. Tembló ligeramente a pesar de la espesa y abrigada ropa que la cubría. El invierno realmente no era de su total agrado debido al frio casi descomunal.

O quizás solo era su pequeña anatomía que no estaba del todo capacitada para resistir temperaturas tan bajas, y ella simplemente se negaba a aceptarlo.

Sintió como alguien se acercaba por su espalda, apoyaba una taza de un humeante chocolate caliente contra la ventana y colocaba sus patas contra sus hombros.

Se regocijó al percibir lo caliente que se encontraba su temperatura corporal, acercó mas su cuerpo al de él, cerrando los ojos.

— ¿Frio, Zanahorias? —se inclinó y susurró contra una de sus largas orejas.

No pudo evitar estremecerse al sentir el cálido aliento y delicioso aroma a chocolate chocar contra ella.

Volteó su rostro y abrió sus amatistas ojos para observarlo.

Nick la observaba con una mirada cargada de ternura, mirada que solo era capaz de dedicarle a ella. Le sonrió.

—Un poco, pero estoy segura que este chocolate me calentara un poco —comentó tomando la respectiva taza y dándole un largo trago.

La temperatura tan elevada de la bebida quemó todo a su paso, pero no le importó. Realmente necesita algo de calor en su cuerpo, y si para eso tenía que dejar quemaduras de tercer grado en su garganta, poco le importaba.

—Pelusa, me ofendes, ¿realmente osas de decir que prefieres recibir calor de una taza de chocolate a mi maravillosa presencia? —dramatizó haciéndose el ofendido, pero su sonrisa ladeaba delataba su intención de bromear.

La coneja rió suavemente y volvió a colocar la taza en la ventana.

— ¿Insinúas que eres un radiador solar? —inquirió, alzando una ceja con diversión.

—Pues no, pero te puedo calentar de mejor manera —rebatió, guiñándole un ojo.

La presa se ruborizó levemente y negó con la cabeza, ya adaptada a las constantes insinuaciones sexuales de su pareja.

—De verdad, no estoy para ese tipo de cosas ahora, torpe zorro.

— ¿No estas para que te acurruque entre mis brazos y nos acostemos en el inmenso y cómodo sofá? —comentó con diversión, y viéndola con una ceja alzada.

La coneja bufó, había vuelto a caer en otro de sus tontos juegos de palabras.

Justo iba a replicar, cuando velozmente el cánido la tomó en brazos estilo nupcial; se subió al mueble mencionado, acostándose cómodamente en él, apretujando a su coneja entre sus brazos y abrigándola con su espesa y felpuda cola.

Judy emitió un suspiro de felicidad y se aferró más a él, disfrutando del calor natural que le brindaba. Permanecieron un indefinido tiempo así, en un cómodo y reconfortante silencio.

Ambos atesoraban esos hermosos momentos. Donde podían demostrar que no todos los momentos de intimidad conllevaban al sexo.

La coneja, logrando alejarse levemente del pecho del zorro, alzó su rostro quedando frente al de él; comentando:

—Definitivamente, eres el mejor proveedor de calor corporal —se frotó suavemente contra su hocico, brindándole una delicada caricia.

Nick cerró sus ojos esmeraldas ante el contacto, y sonriendo de lado, mientras que apoyaba una pata en su mejilla, comentó:

—Losé, je-je. Te amo, torpe coneja —y terminó de alejar esos centímetros que los separaban mientras que la besaba.


NA: Definitivamente, es cierto lo que dicen de que la tristeza te inspira a escribir. Y definitivamente la depresión por la situación de mi pais me dejará en la demencia.