Disclaimer: la serie y los personajes no me pertenecen a mí, sino a su autor y legítimos dueños y propietarios
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Ya era la segunda vez que Toriko salia con el estómago vació, confuso y solo del hotel Gurmet y eso extrañaba enormemente a todo el personal del hotel, en especial al encargado del mismo.
Toriko y Komatsu habían regresado una vez mas de capturar otro extraño alimento.
Después de el regreso del chef Komatsu, este se habia mostrado menos alegre que de costumbre.
Ya no hablaba con sus compañeros mientras cocinaba, mas de lo estrictamente necesario, ni hacia caras raras o gritaba por pequeñeces, pero a pesar de todo eso, lo que hizo saltar todas las alarmas de que a Komatsu le pasaba algo fue lo que sucedió unos días después.
Cuando Toriko regresó con otro pedido de captura, el gerente ya estaba organizando las reservas del restaurante por la falta inminente de su chef principal.
Toriko se dirigió a la cocina y allí se encontró con Komatsu cocinando, hasta ahí todo normal, lo raro vendría después.
El grandullón le explico como era la presa a capturar, el lugar superpeligroso en el que seria la captura y sobre todo la delicia que les esperaba tras la captura, pero el chef parecia que no estaba prestando la mas mínima atención a su compañero, ni siquiera habia dejado de cortar los ingredientes de la comida que estaba preparando.
-Komatsu – dijo Toriko para llamar la atención de su compañero - ¿Me estas escuchando?
-Claro – dijo Komatsu sin apartar la mirada de sus ingredientes.
-Entonces que ¿Te apuntas? - pregunto Toriko notando que algo raro pasaba, ya que normalmente Komatsu ya habría dejado todo y estarían ambos saliendo por la puerta principal del hotel en dirección a su nueva aventura.
-Lo siento – dijo Komatsu – pero me temo que esta vez me es imposible acompañarte.
Toriko no se podía creer lo que habia escuchado así que decidió volver a preguntar.
-¿En serio? - pregunto Toriko sorprendido.
-Lo siento pero tengo mucho trabajo.
-Pero...-¿Por que? - pregunto confuso Toriko.
El cuchillo hecho por Melk segundo atravesó la tabla de madera sobre la que Komatsu habia estado cortando los alimento y por fin el chef miro a Toriko.
-Por que sera muy peligroso para mi ir ¿Verdad, Toriko-san? - dijo un inusual Komatsu cabreado mientras levantaba su cuchillo – y ahora si no te importa, tengo trabajo- dijo mientras cambiaba la tabla y seguía a lo suyo, pero como vio que un aturdido Toriko seguía en su cocina le dijo como despedida – Buen viaje.
Para Toriko esa captura no fue muy divertida y aunque habia decidido llevarse a Terry con él parecia que ni el lobo se lo estaba pasando bien.
Mas de una vez, sobre todo en momentos de peligro se habia escuchado a si mismo gritando el nombre de Komatsu para avisarle del peligro, pero dándose cuenta segundos después que seguramente el chef estaba a salvo en su preciosa y acogedora cocina del hotel.
Cuando consiguieron su objetivo, no sabia tan bien como el habia esperado, como si solo ser hecho a la barbacoa no fuese suficiente para sacar su máximo potencial y sabor, sino que también era necesaria una mano experta para hacerlo delicioso.
En el fondo Toriko sabia que todo eso estaba pasando por su culpa. Por ser un bocazas y no pensar nunca antes de hablar cuando estaba enfadado o preocupado.
El extraño comportamiento de Komatsu habia nacido cuando la enorme bocaza de Toriko habia cobrado vida propia en su ultimo trabajo conjunto.
Una bestia anormalmente fuerte habia atacado a Komatsu causándole una fea herida en la pierna que al final resulto ser menos peligrosa de lo que en un principio parecia, pero en ese momento de frustración de Toriko, tras la pelea, por no haber evitado que su compañero se hiriese, su preocupación por el estado de Komatsu y su cansancio por la pelea explotaron todos a la vez diciéndole cosas muy feas a Komatsu. Pero lo que mas le dolió al chef fue que Toriko no creyese en el para ir, en un futuro, los dos juntos al mundo Gurmet como los compañeros que creía que eran. Desde ese momento no volvieron a hablar entre ellos en todo el camino de regreso a casa e incluso Komatsu rechazo la ayuda de Toriko para llevarle por su herida en la pierna, decisión que habia ocasionado que Komatsu se fuese haciendo mas heridas por el camino de las que ya tenia.
Cuando llegaron a la ciudad cada uno se fue por su lado y no volvieron a verse hasta que Toriko fue a ofrecerle a Komatsu que le acompañase a su próximo trabajo.
En esos momentos después de comer una comida insípida, torturándose por sus estúpidas acciones, con Terry mirándole como si supiese en lo que estaba pensando y secundara la moción llamada "Toriko es idiota" y bajo un manto de estrellas que estaba seguro que a Komatsu le hubiese encantado, decidió que cuando volviese a la ciudad se disculparía con su compañero y amigo.
Y ahora se encontraba en la acera del exterior del hotel Gurmet con otro rechazo a su oferta y sobre todo sin poder disculparse con el chef por que según él "estaba ocupado" . Y que si era la hora de la cena y el restaurante estaba lleno, seguro que era alguna excusa para no verle.
Mierda.