¿Cómo salvar una vida?
Descargo de responsabilidad: Hunter x Hunter no me pertenece al igual que sus personajes y demás relacionado con la serie
Prólogo
Un brillo segador... Fuego... Humo... Y... Gritos...
Además de una rosa.
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Cuando despertó lo primero que vio fue blanco, un techo tan blanco como la nieve. Escuchaba el ruido de un pitido constante, también podía sentir unos tubos conectados a sus brazos y otros que iban hacia el interior de su boca. Se asustó.
Intentó sacar todos esos tubos, tenía miedo. ¿Dónde estaba? ¿Cómo había llegado ahí?
Pero no podía pensar, por más que lo intentara. El ruido de la maquinita había empezado a ser aún más molesto.
De pronto una puerta se abrió y unas mujeres vestidas de blanco entraron a la habitación. Dijeron palabras, pero él no las entendía. Parecía que trataban de que se recostara de nuevo y le colocarán todos esos tubos de nuevo.
Él no quería, sólo quería salir de ahí lo más rápido posible. Intentó correr fuera del cuarto, pero sólo dio unos pasos fallidos, se tambaleo y cayó. Las mujeres se acercaron para ayudarle a levantarse, pero él las apartaba dando manotazos.
Al final lo dejaron en paz y vio un par de pies que se acercaban a él. Un hombre mayor, con cabellos y barba dorados, se hincó ante él. Pudo ver en sus ojos azules bondad, así que perdió todo su miedo.
-¿Puedes levantarte?- le preguntó, por fin capaz de entender lo que decía.
Asintió y se levantó poco a poco. El hombre mayor lo ayudo un momento, para asegurarse de que estaba bien.
Ahora que lo notaba, sus piernas estaban en los puros huesos y su horror fue comprobar que también sus brazos.
El hombre de cabellos dorados le ayudo a llegar a la cama y lo hizo sentarse. Después tomó una silla cercana a él y se sentó enfrente de él. Pidió a una de las enfermeras que le consiguiera algo de comer al joven y a las demás que se marcharán.
-Soy un doctor- le dijo el hombre- has estado en el hospital alrededor de tres años, en estado de coma- explicó.
Él asintió, dándole a entender que entendía lo que le decía. El doctor sonrió satisfecho.
-Tengo que revisar que tu cuerpo funcione adecuadamente- le aclaró y empezó a realizar su trabajo. Lo ultimó que quería era asustarlo.
Una vez que hubo terminado, hablo nuevamente con él: -Estas desnutrido, pero no te preocupes, aquí te ayudaremos a recuperarte rápidamente.- le sonrió, por alguna razón se sintió más tranquilo- pero aún me quedan algunas preguntas que hacerte- el joven frente al doctor asintió.
-¿Quién eres? ¿Cuántos años tienes?
El chico pensó por un momento, el doctor pensó que tal vez él no querría revelarle dicha información, pero era necesaria.
Finalmente el chico abrió sus labios para pronunciar dos palabras: -No sé-
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