Espero les guste el siguiente fic. Hace tiempo no escribo nada de Glee ni de sus personajes.
¡Gracias por leer!
DarkSideBlaine
Dejó de respirar y su vista se enfocó completamente en lo que ocurría al otro lado del andén de esa estación de metro en Nueva York. Sentía como su visión se nublaba por las lágrimas que se asomaban.
Al frente de él veía a Kurt y su actual novio, sabía su nombre pero estaba seguro de que su mente lo bloqueaba en ese momento para no hacerlo todo peor.
Él se dirigía a su hogar, nunca tomaba el metro, pero había decidido cambiar su rutina y se encontró con esa escena. No podía respirar y quería decirle tantas cosas a Kurt, quería una explicación que sabía no merecía.
Dio un paso en su dirección, olvidando completamente que estaban las líneas del metro entre ambos andenes.
Dio dos pasos más y al tratar de dar uno más sintió como quedaba suspendido en el aire por un segundo y luego caía sobre el cuerpo de alguien que lo abrazaba con fuerza.
-Anderson, el suicidio no es la respuesta. Menos para la estupidez de Hummel-dijo una voz conocida en su oído.
-Sebastian-murmuró separándose y tratando de ponerse en pie.
-¿Se encuentran bien?-dijo una guardia del metro.
-Sí. Sólo se mareó por los medicamentos para el resfriado. Pero está bien-dijo Sebastián en el instante que el metro llegaba a ambos andenes y bloquea la vista de Blaine del frente, donde estaba Kurt.
-Voy a casa-logró decir cuando el castaño lo sujeto de la cintura y lo alejó del grupo de personas que subían al último vagón.
-Nos iremos juntos-susurró pegandolo a su cuerpo y llevándolo fuera de la estación, allí el más alto detuvo un taxi.
Cuando subieron Blaine dio su dirección y luego rompió a llorar contra el pecho de Sebastián, quien lo abrazó con fuerza. Necesitaba contener al moreno y también hacer una llamada. Pero eso podía esperar.
Cuando llegaron a los departamentos donde vivía Blaine, el castaño pagó al taxista y bajaron. Mientras caminaban hizo su llamada.
-No Hunter-dijo serio-tampoco-susurro molesto-esta vez es una urgencia. Luego te cuento.
Subieron al departamento del moreno y Sebastián se desenvolvió como si fuera su hogar. Puso a calentar agua y se sacó su abrigo mientras Blaine tecleaba algo en su teléfono.
-Blaine dame tu teléfono-exigió y lo obtuvo al momento. Ahí vio un gran mensaje que iba para Kurt-por este tipo de cosas Hummel se fue con David-dijo con una mueca y borrando el mensaje.
Se mantuvieron en silencio hasta que el agua hirvió. Blaine sirvió dos café y luego le entregó una taza a Sebastián.
-Explicame cuantas veces tu y Hummel van a ir y volver.
-Nunca más-murmuró sorbiendo con suavidad.
-No seas dramático-dijo entornando los ojos y tomando su café.
Se quedaron en silencio.
-No te contaré nada. Ahora Kurt es feliz-dijo suave-y si él es feliz yo…
-No te hagas el fuerte conmigo-dijo tomando una de sus manos, estaban sentados lado a lado en un sofá-te he contado lo mal que lo he pasado. No es justo que me mientas ahora.
En eso Sebastián tenía razón, debía ser justo con él, después de todo lo que el castaño le había contado, pero sentía que todavía no podía ser transparente con él.
-No puedo-susurró cerrando los ojos.
-¿En otro momento?-murmuró con una mueca.
-Sí, lo prometo-dijo con una sonrisa rota.
-Bien, entonces creo que es momento de que me des tu teléfono, si mal no recuerdo Hummel te obligó a aislarte de todos tus conocidos o amigos porque eramos posibles amnates para ti y…
-No es cierto, Kurt no…
-Engáñate todo lo que quieras, pero tus amigos sabemos la realidad-susurró grabando su teléfono en el de Blaine y llamándose para tener el número del moreno, luego borró el número de Kurt del aparato sin que Blaine lo notara-bueno, vamos a hacer las cosas bien-dijo con una sonrisa-ya que solo es lunes, te dejaré en paz por algunos días. Pero el fin de semana no te deshacer de mí-murmuró tomando su abrigo y al momento Blaine se puso de pie.
Ambos caminaron hasta la salida.
-Hunter me va a matar-murmuró con una sonrisa luego de ponerse su abrigo. Hacían 5 grados y estaban en pleno invierno. Realmente no se quería ir de ahí.
-¿Por dejarlo plantado?-susurró Blaine delante de él con una sonrisa, en ese momento la diferencia de estatura era muy notoria.
-No, por esto-dijo acortando la distancia y tomando el rostro del moreno con suavidad para unir sus labios en un beso casto, pero sintió las manos del ojimiel sujetándolo por el cuello y atrayéndolo a él, por lo que profundizó el beso, en cuanto se separaron mantuvieron sus frentes apoyadas y sus ojos cerrados por un momento.
-Te va a matar si son novios-dijo tratando de recobrar el aliento y bajando sus manos hasta el abrigo del castaño.
-Por suerte soy soltero-susurró acercándose y dejándole un beso en los labios. Se separó, abrió la puerta y dejó a Blaine completamente solo con sus pensamientos.