Sintió como su garganta se apretaba y sus entrañas dolían. No podía ser. Se negaba a aceptarlo. No podía haber perdido a su familia otra vez. No podía haber perdido lo que construyó durante tanto tiempo y que tanto esfuerzo le costó.
-¡No!-pero ni su velocidad lo había ayudado y vio como Eobard Thawne atravesaba el corazón de Joe, Iris y Wally. Eran una familia disfuncional, pero eran su familia, sus seres queridos, todo lo que amaba y amó siempre.
Cuando creyó que todo estaba bien y tranquilo en la ciudad decidió pasar una tarde junto a su familia cenando en un restaurante con una bella vista al mar ¿cómo lo pagarían? Iris había sido ascendida de puesto y podían darse ese lujo.
-Y ¿han pensado en casarse?-dijo Joe con seriedad. Estaban todos sentados a la mesa y ya les habían traído la comida.
-¡Papá!-respondió la morena molesta-ni hemos hablado de ello con Barry.
-No creo que necesitemos hablarlo-dijo el velocista poniéndose de pie y haciendo que su novia hiciera lo mismo.
-Barry-susurro viendo la pequeña cajita que el castaño sacaba de su pantalón. Al parecer todos sabían de la propuesta, porque ni Joe ni Wally lucían sorprendidos, sino que felices.
-Iris West-dijo poniendo una rodilla en el suelo sin soltar la mano de la morena, pero una ráfaga de viento y luz se llevó a Iris, Joe y Wally en un segundo y de un momento a otro se vio corriendo para darles alcance.
Sin saber cuánto había corrido detrás de esa luz amarilla, cuando se detuvieron se dio cuenta de que estaban en la antigua casa Allen y Eobard Thawne sonreía con arrogancia sin quitar su mirada del otro velocista, quien no despegaba su vista de su familia que estaba de rodillas en el suelo y amarradas de manos y pies.
-Ya quiero saber qué sucederá cuando destruya tu futuro-dijo con una sonrisa y alzando una mano en dirección a Joe- Despídete-dijo el rubio mirando con soberbia a Barry. Los West miraban con terror al castaño.
-Barry-susurraron los tres a un tiempo. En el siguiente segundo vio como el pecho de Joe, Wally e Iris era atravesado sin misericordia.
-¡No!-gritó y solo logró tomar a Iris antes de que cayera al suelo. La tomó e intentó que despertara, veía desesperado a Joe y Wally que tampoco se movían y todos estaban con los ojos abiertos.
-Mi más sentido pésame, Allen-dijo mirando los cuerpos y luego al velocista, quien se aferraba al cuerpo tibio de su novia.
¿Cómo un sólo hombre te quita tu familia dos veces? Todos sus familiares de sangre y adoptivos estaban muertos. ¿Cómo planear un funeral tan grande sin sentirte culpable? Porque fuiste incapaz de salvarlos o de hacer las cosas distintas. Tal vez no estarían muertos si fueras más rápido, tal vez quedaría uno de ellos vivo.
No supo en qué momento, pero había llegado a laboratorios STAR, sólo sabía que de algún modo en medio del llanto había llevado el cuerpo de su familia hasta las instalaciones, lugar donde Cisco y Caitlin lo vieron llorar y sentir que todo estaba tan mal que podría matarse en ese momento, pero aún debía darles la sepultura correspondiente. Aún debía darles el último adiós.
Sus amigos estaban impactados por lo ocurrido, y Barry solo pudo explicarles entre el llanto y gemidos que Eobard Thawne los había asesinado. No fueron capaces de decir nada, solo Caitlin reaccionó y comenzó a hacer los preparativos para los funerales.
En todo momento permitieron que la funeraria se hiciera cargo de todo y Wells de Tierra 2 lo miró comprensivo junto a Jesse, quien lloraba la pérdida de Wally.
-Allen no hay nada que pueda solucionar esto, pero estoy aquí para lo que necesites-dijo poniendo una mano sobre su hombro y entregando todo su apoyo. Barry no respondió.
Al cuartel de policía fue Cisco quien informó todo diciendo que fue un meta humano velocista quien los asesinó. Como era de esperar fue el capitán Singh quien habló con Barry y le dio la libertad de tomarse un año en el que podría decidir si volvía a trabajar o qué haría con su vida. Le pagarían su sueldo hasta que tomará una decisión.
Al Picture News fue Caitlin quien informó y en la escuela fue Jesse. Nadie creía lo que había pasado. Sin embargo, ahí estaban todos junto al último integrante de los Allen y West, ayudándole a sobrellevar su pena y dolor, aunque fuese por unas horas.
Los funerales duraron las 48 horas correspondientes y junto a un gran número de autos y personas llegaron al cementerio de Central City donde sepultaron los restos de los West junto a la mujer que falleciera hace unos meses, nuevamente la familia estaba reunida.
Todos estaban enfundados en impecables trajes negros y llevaban en silencio y con respeto los ataúdes hasta las fosas donde descansaran en paz. Sabía que Iris debía de estar sonriendo por encontrarse con su madre y Joe feliz de ver nuevamente a su Francyn.
Entonces ¿por qué dolía tanto? Por qué dolía a pesar de que sabía que estaban tranquilos y en paz. Los extrañaría y no tenía idea de cómo seguiría su vida sin ellos.
No fue capaz de hablar en el funeral. Nadie quiso decir nada. Tal vez fue lo mejor. No lo sabía. Pero cada vez el dolor se acentuaba más y no lograba detenerlo. Así como no fue capaz de detener a Eobard.
Cuando bajaron los féretros sintió que podría arrojarse dentro con tal de mantenerse un momento más junto a ellos. Los amaba por sobre todas las cosas y no fue capaz de salvarlos, no pudo, no fue lo suficientemente rápido. Sería una culpa que por siempre lo acompañaría.
Antes de que pusieran la tierra sobre la madera sintió como lo sujetaban de ambos brazos, no tenía que mirar para saber que se trataba de Wells, Caitlin, Cisco y Jesse. Eran lo único que tenía, eran su única familia ahora.
No fue capaz de volver a la casa de Joe y mucho menos a su departamento. Por lo que decidió ir a laboratorios STAR. Sus amigos se quedaron con él por esa noche.
A pesar de la presencia de su equipo, se sentía muy solo. Ya no tenía a quién acudir en busca de un consejo ni había quien acudiera a él en busca de ayuda para un nuevo proyecto. Tampoco habría nadie que lo esperará en casa con una sonrisa y todo el amor sincero para dar.
Se habían ido y era su culpa. Si hubiera dejado que su madre muriera y no hubiera alterado el tiempo. Ellos seguirian ahí y Thawne estaría muerto tal como lo hizo desaparecer Eddie ese día en que también perdieron a Ronny.
Mientras todos dormían decidió que viajaría en el tiempo y evitaría la muerte de Iris, Joe y Wally; sin importar las consecuencias. Caminó hasta su traje y se lo colocó, luego fue al acelerador de partículas y comenzó a correr, cada vez iba más rápido, pero sin saber por qué cayó y se golpeó contra una de las paredes.
Luego de unos segundos se puso de pie e intentó nuevamente correr y alcanzar la velocidad suficiente para viajar en el tiempo. Pero ni siquiera alcanzó la velocidad necesaria para dar una vuelta al lugar. Lo volvió a intentar una tercera vez y sintió como sus piernas ardían al tratar de correr. Sin saber por qué había perdido lo único que pensó sería para siempre, su velocidad.
-No-murmuró para sí mismo y sintió como la velocidad se le había escapado de las manos. No quería resignarse, por lo que volvió al laboratorio y tomó una navaja que pertenecía a Wells. La pasó por su brazo y este comenzó a sangrar, era una herida poco profunda, mitigaba el dolor en parte, pero no cerraba. Hizo otro corte mucho más profundo y su piel no se estaba regenerando y esa era la prueba irrefutable de que había perdido su velocidad. Pasaron unos cuantos minutos en que la sangre caía de su brazo y había formado un pequeño charco a sus pies. Su instinto le decía que se detuviera, pero hizo otro corte en su brazo y miró al frente.
-Iris-murmuró algo débil y caminando a donde estaba la mujer con un precioso vestido negro que apenas le tapaba los muslos. No le hablaba pero su sonrisa era suficiente para atraerlo.
-Barry-escucho como alguien lo llamaba, no quiso girar y mantuvo su brazo escondido, siguió avanzando donde la morena.
-Tu no deberías estar aquí-dijo con la voz más neutra que encontró. Quería estar solo con Iris.
-Estoy donde debo estar-susurró preocupado porque la sangre caía al suelo en un goteo continuo y el castaño parecía no reparar en ello.
-No tienes-intentó hablar pero un fuerte mareo lo desestabilizó y se dio cuenta de que estaba perdiendo mucha sangre. Aunque eso no le importaba, porque Iris estaba a un par de pasos.
Se movió bruscamente para alcanzar a la morena. Pero casi cayó al suelo, si no hubiese sido por Oliver que lo sujetó a tiempo habría caído contra el escalón del laboratorio.
No veía bien y se obligó a cerrar los ojos. No sentía su cuerpo y lentamente se fue durmiendo. Sentía que eso era lo correcto.
El arquero sólo se limitó a tomarlo en brazos y salir con él de los laboratorios. Barry necesitaba otro tipo de ayuda, una que no podían darle en laboratorios STAR y que él sí le podía otorgar.
