Capítulo 1
La muchacha se encontraba junto a su amado en el parque que siempre solían visitar. El día acompañaba perfectamente a la pareja.
- Y bien, nos vamos al departamento – preguntaba él con una sonrisa muy pícara.
- Ahh que travieso eres – le respondía ella
- Sabes que te amo y que quiero que siempre estemos juntos
- Lo sé, y eso me hace muy feliz
- Serena, te amo
- Y yo a ti, Darien.
Se besan apasionadamente, se hacia tarde, el sol iba escondiendo sus hermosos rayos y la pareja disponía a hacer abandono del parque para dirigirse a su nido de amor. Subieron al auto de Darien y partieron.
- Aló, mamá, si llamaba para decirte que me quedare en la casa de Mina a estudiar para los exámenes finales
- A si? Dame con ella – respondía Ikuko
- Ah es que esta ocupada, está en el baño, pero le digo que te llame si quieres apenas salga
- Si claro, está bien Serena, CUIDATE – dándole énfasis a aquella ultima palabra
- Claro mamá, adiós.
- Te dijo algo? – pregunto Darien
- No, sólo que me cuidara – y mira de reojo a Darien muy sonrojada – como si no lo hubiera hecho las otras veces – sonríe avergonzada
Darien seguía manejando hasta su casa. Serena se sentía siempre muy segura de las cosas que hacia con su novio. Ya llevaban tres años más desde que sucedió todo con Galaxia. Las cosas habían pasado a otro nivel, eso había afiatado más la relación entre ellos. Serena comenzaba a comportarse más como una muchacha "rebelde" al mentirle a su madre y pedirle a sus amigas que la cubrieran de todo. A pesar de todo eso, las cosas se estaban haciendo rutinarias y eso comenzaba a incomodar a Serena, pero nunca le decía nada a su amado, porque no quería estropear todos los valiosos momentos que pasaba junto a él, sólo por el hecho de que no quería volver a sufrir como cuando él se fue al extranjero, ya que si llegase a sentir ese dolor nuevamente ¿quién podría curarlo? Sus amigas no lo comprenderian. Era entonces cuando recordaba a Seiya.
Habían llegado al departamento, todo sucedería como las veces anteriores. Ella se entregaría a sus brazos, pasarían una hermosa noche y despertaría al día siguiente abrazada de su hombre.