Disclaimer: DGB GT no me pertenece así como ninguno de sus personajes, todos son propiedad de Akira Toriyama.

Por esta ocasión: no hay mucha referencia a la saga, las situaciones son de mi invención.


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Por Bellatrix Monserratt

Suite Op. Brief: 'Apothese Son'

Movimiento 1: Sauter

No puede ser "

Es la misma frase que te has venido repitiendo desde hace 6 meses.

No es verdad "

Pero un velo sobre tu rostro te reafirma que sí lo es.

No puedo hacerlo "

¿Entonces por qué sigues caminando al compas de la Suite Op. 66ª 'Apothese-Andante' del Ballet de la Bella Durmiente? **

Siempre quise caminar al altar con esa suite de fondo, nunca me gustó la tradicional marcha nupcial "

¿Y ese es motivo suficiente? ¿Es suficiente razón para no salir corriendo de ahí? Que lo único bueno de esta situación sea poder realizar tu sueño de caminar al compás de Tchaikovsky ¿De verdad es suficiente aliciente para no huir?

No, no lo es "

Y te detienes, tan solo es una pausa de 5 segundos pero tu padre la ha notado y se voltea a preguntarte si estás bien.

Y es su cara de preocupación la que te recuerda porque lo haces, porque sigues caminando al igual que la princesa Aurora cuándo iba a conseguir la bendición de sus padres para casarse con su príncipe azul.

Pero él no es mi príncipe azul "

Nunca fuiste una romántica empedernida pero siempre te gusto la idea de casarte con alguien a quien amaras profundamente y que estuviera locamente enamorado de ti, y esto, no es así. Pero aunque no lo es, sacas coraje no sabes de donde y le sonríes a tu padre y continuas tu camino, él se ríe un poco pensando que simplemente estas nerviosa.

En la primera fila esta tu madre con un hermoso vestido que realza sus ojos, esta conteniendo las lágrimas, junto a ella están tus abuelos, tu abuelo materno esta henchido de orgullo y se nota en su mirar y su porte elegante, siempre fue su sueño verte casada con alguien de elite. Tu abuelo paterno te sonríe con amor mientras que abraza a tu abuela que no puede dejar de llorar.

Más adelante esta el padrino de tu prometido, quien convenientemente, también es tu tío, sus ojos están serios, como nunca antes los habías visto.

Él sí sabe "

Del otro lado está quien te pregunto mil y un veces si estabas segura, si de verdad sabías lo que ibas a perder; tú mejor amiga, tu compañera eterna, tu dama de honor. Te sonríe dándote valor; ella sabe que te estás quedando sin aire pero no lo demuestra, sabe que si lo hace tan solo te pondrás peor.

Escuchas los últimos segundos de la suite que te ha acompañado durante lo que te parecieron los dos minutos más largos de tu vida. Escuchas al padre preguntar quién te entrega, tu padre responde, se despide de ti dándote un beso en la frente, cierras los ojos disfrutando el contacto y entonces sientes como guía tu mano hacía el frente. Bajas la mirada y no abres los ojos.

Unos dedos largos la toman y solo entonces te atreves a levantar la mirada y ahí están, esos ojos azules que no habías visto en más de dos meses, te están mirando impaciente y tu caminas para quedar a su altura y justo cuando suena el último instrumento de la 'Apothese-Andante' es cuándo te colocas al lado de tu prometido con tu mano aún en la suya.

Tu mente no está en lo que dice el padre, quien constantemente te sonríe, reaccionas cuándo sientes como colocan alrededor de ustedes el lazo y segundos después ves a tu dama de honor entregándote el anillo que debes colocar en el dedo de tu prometido. Respiras profundamente al notar como tu mano tiembla, tomas la argolla y te volteas a tu ya casi esposo, éste toma tu mano izquierda y coloca junto a tu anillo de compromiso tu enlace matrimonial y sorprendiéndote te toma la mano y se la lleva a la boca dándole un beso a tu dedo anular, te sonríe, y te mira de una manera que no sabes cómo interpretar.

Aun temblando tomas su mano izquierda y colocas el anillo, no puedes evitar pensar que se ve perfecto en él. Tampoco puedes evitar el pensamiento de que todo en él es perfecto, sus ojos, su cabello, su cuerpo, su porte, sus modales, todo.

No es suficiente "

Y no lo es, tú esperabas más, querías más, quieres más.

Pero no se puede, y cuándo escuchas pronunciar el 'puede besar a la novia'; sabes que ya no hay nada que puedas hacer al respecto. Él te toma por la cintura y te gira al ver que no haces nada, tus manos quedan sobre su pecho y observas como con ambas manos te levanta el velo, lo observas, aún tiene esa mirada misteriosa y después sientes sus labios sobre los tuyos, es un contacto cálido, suave y sabes que es su forma de decirte que debes estar tranquila aunque no lo estés.

Todos aplauden, sientes el flash de las cámaras sobre ustedes y se separan, se voltean hacía la familia y la prensa y entonces empieza tu espectáculo privado como la nueva Sra. Brief.


Es usted muy afortunada "

Su esposo es todo un caballero "

Además de guapo y galante "

Deberá cuidarlo muy bien sino quiere que se lo quiten "

Te preguntas por que todas las señoras de sociedad no saben hacer otra cosa sino chismosear y meter cizaña. Tú solo utilizas la sonrisa que has estado perfeccionando desde que anunciaron su compromiso a todos. Ésa sonrisa que usaste para convencer a tus padres que estabas locamente enamorada del heredero de las industrias Brief, esa sonrisa que no pudo convencer a tu mejor amiga de que habían tenido una relación secreta por un año, esa sonrisa que tu tío no tenía en su rostro.

"Es hora de irse"

Te volteas hacía tu ahora suegra y te dejas llevar fuera del salón de fiestas tan hermosamente decorado con listones blancos y plateados, los centros de mesas son de flor de iris blancas y rosas color rosa, te preguntas cuanto habrá costado tener esas flores en ese lugar.

Te lleva hacía una limosina gris, te dice que te llevara al lugar donde pasarás tu noche de bodas y no puedes evitar sonrojarte al pensar que es la noche de bodas lo que más te preocupaba de todo este asunto. Estas nerviosa y tus manos siguen temblando. Llegas a un hotel lujoso, eres recibida no solo por un empleado sino también por camarógrafos que te preguntan por qué llegas sola, los evades lo mejor posible pero no puedes evitar sentirte estúpida pues aún estas usando tu vestido, las zapatillas y el velo, con la frente en alto sigues caminando mientras te indican que debes usar el ascensor e ir al último piso del hotel.

Así lo haces y cuándo se cierran las puertas tras de ti, te giras y tu reflejo en las puertas es lo único que ves, ¿realmente esa eres tú? Tu cabello cae liso hasta la mitad de tu espalda, es rebelde y el peinador no ha podido enchinarlo así que opto por hacer su obra de arte en la parte de arriba y dejar lo demás libre, tu maquillaje es muy simple, les pediste que no fuera cargado, tan solo las pestañas, un poco de sombra y brillo en los labios. Tu tocado hace juego con el ramo, son flores de iris, adoras la flor de iris y es lo único que sabes que tu ahora esposo exigió, les exigió que hubiera flor de iris en la iglesia, en el salón, en tu tocado e incluso las hay en el ramo que también sabes, él mando a hacer especialmente para ti y que esta mañana llego a tu casa.

Te llevas a la nariz el ramo y aspiras su aroma con la esperanza de que eso te relaje, se escucha el ding que indica que has llegado a tu destino. Con un resoplido que logra desacomodar tu fleco esperas a que se abran las puertas y lo que encuentras enfrente de ti no es lo que esperabas.

El pasillo esta oscuro, lo iluminan velas y pétalos de rosas están esparcidos a lo largo del camino, temerosa sales del ascensor y sigues el camino de velas, más adelante esta él

Mi esposo "

Tiene una flor en una mano y la otra la tiene dentro del bolsillo, ya no lleva el saco, tiene las mangas de la camisa arremangadas y tiene algunos mechones rebeldes en la frente, te reprochas al pensar que eso lo hace ver sexy, y te reprochas más enérgicamente al darte cuenta que crees que todo él es sexy, sus brazos musculosos, su pecho, sus labios, su mirada…

"Espero que no te importe que te haya dejado sola en la fiesta, debía arreglar algunas cosas"

Te sonríe, con esa sonrisa coqueta que siempre viste que usaba para las entrevistas, esa sonrisa que lograba deslumbrarte cuándo tenías 15 años, esa sonrisa que sabes bien no solo te la ha dedicado a ti. Y a pesar de todo, no le respondes, solo lo estas observando, se te ha secado la garganta y no sabes que decir.

"Aún traigo puesto el vestido..."

Que estúpida "

Él se ríe ante tú declaración y la verdad es, que te encanta escucharlo reír.

"Lo puedo ver…" te quita le ramo de las manos, lo deja caer al piso y te entrega la flor que él traía en sus manos "flor de iris"

Y sin previo aviso te toma en sus brazos, abres los ojos sorprendida, no esperabas eso y él se da cuenta.

"Tu sueño era caminar hacía el altar con la Suite Op. 66ª 'Apothese-Andante' del Ballet de la Bella Durmiente, te lo cumplí, ahora te toca a ti cumplirme el mío"

Tragas saliva mientras te preguntas si será correcto cuestionarle a que se refiere. Pero antes de que lo hagas él empieza a caminar y sin dejar de verte te responde:

"Yo siempre soñé con el momento de entrar a la habitación con mi esposa en brazos, podrá ser anticuado pero no me importa"

Llegan a la puerta y es tu turno de abrirla para que puedan pasar, lo haces y entran, una vez ahí observas como diestramente cierra la puerta con un pie llevándote aún en sus brazos, te preguntas cuantas veces lo habrá hecho.

Suavemente te deposita en el piso y quedas de espaldas a él, sientes un nuevo temblor recorrerte todo el cuerpo, también hay velas ahí pero tus ojos están centrados en la cama, es enorme, está unida al techo por 4 barrotes y también hay pétalos de rosas en el colchón. Das unos pasos vacilantes hacía ella y te agarras de uno de los barrotes, inhala exhala, inhala exhala, sientes como camina hacía a ti y te gira suavemente para que lo mires.

¿Sería una actitud muy cobarde pedirle que no pase nada? ¿Que de todo lo que perdió ese día, le deje conservar aquello que aún no le ha dado?

Tuviste seis meses para prepararte para esta noche "

Lo miras, te mira y de lo más hondo de tu alma te atreves a hacerle una confesión:

"Tengo miedo"

Y te besa, y no son como los besos que te dio durante la fiesta o para las fotos, y tampoco es como aquel último beso que te dio antes de irse por casi dos meses al extranjero, esos besos eran secos, fingidos, fríos, en cambio éste es cálido, suave y un tanto urgente. Sientes como sus manos llegan a tu cintura y la acarician, profundiza el beso, su lengua se abre paso y te empieza a embriagar con su sabor. Una de sus manos llega a los listones del corsé y los empieza a desabrochar. Tú subes tus manos a su nuca, quieres más de ese beso. Él rompe el beso y empieza a bajar hacía tu cuello, cuándo lo sientes morderlo no aguantas y gimes su nombre.

"Trunks…"

Las manos de él subieron a su cabeza despojándola del velo y de su tocado, con cuidado de no lastimarla le quitaron todas y cada una de las horquillas y después siguió su labor con el corsé. El vestido era hermoso y se ajustaba a su cuerpo como un guante pero él ya la había admirado lo suficiente con ese atuendo, ya no quería verla más con ese vestido. La tomo de la cintura y la giro, ella se agarró de uno de los barrotes de la cama y puso la otra mano en el colchón. Con maestría terminó de desabrochar los listones y bajo el cierra de la falda, ya sin fuerza que lo detuviera a su pecho se cayó mostrándole la blanca espalda de su esposa.

Ésta al sentirlo se enderezó y pego el corsé ya flojo a su pecho, solo las mangas y su mano impedían que cayera por completo. Se acerco a ella nuevamente y la tomo por la cintura para poder verla, había miedo en sus ojos pero también había pasión, sus ojos estaban aún más negros que de costumbre.

La volvió a besar no sabiendo de que otra forma reconfortarla, tomo su pequeña cintura y la pego a su cuerpo, empezó a recorrer su espalda desnuda provocando que se arqueara contra él, volvió a besar su cuello, siguió a sus hombros y la sintió temblar de deseo. Temerosa soltó el corsé y dejo que él quitara las mangas del vestido, lo siguiente que se escucho fue la pesada tela del vestido azotando contra el piso, estaba consciente de que ahora solo estaba cubierta por unas pantaletas y medias blancas.

Trunks la separo de su cuerpo y no pudo ocultar su mirada de deseo al verla así, con medias a mitad del muslo, tacones y nada cubriendo su parte superior, aún devorándola con la mirada comenzó a desabrocharse la camisa, la tiro al suelo y siguió con sus pantalones, su esposa estaba sonrojada y a medida que la ropa caía al suelo, más rojo se ponía su rostro.

Completamente desnudo la tomo en brazos y la deposito en la cama. Siguió besándola, recorriendo cada parte de su cuerpo y tomándose su tiempo al darse cuenta que a su esposa le gustaba que besara sus pechos, sus suspiros lo volvían loco.

Ella se sentía en otro mundo, ¿Cómo era posible sentir tanto? Vio como la dejaba de besar y tomaba una de sus piernas quitándole lentamente la media y besando conforme lo iba haciendo, hizo lo mismo con la otra y se sintió desfallecer al sentir sus besos y lengua en la cara interna de su muslo. La tomo por ambas piernas y la acerco a él, sintió todo su peso encima de ella y entonces recordó porque tenía miedo.

"Yo…jamás he…"

Y por la forma en que la miró ella supo que había entendido, se acercó nuevamente a ella y la beso, un beso profundo con el que incluso le arranca un gemido y mientras hace esto dirige su mano en medio de sus piernas, que en instinto de protección ha vuelto a cerrar. Comienza a hacer su labor y siente como ella mueve las caderas en respuesta, mueve su mano más rápido y entonces la siente explotar.

Y en ése momento sabe que está lista para él, se coloca nuevamente en medio de ella y toca su parte más sensible. Ella se aleja un poco y hunde las caderas lo más que puede en el colchón. Con calma sigue su trabajo hasta que entra en ella.

Una mueca de dolor atravesó su rostro y arqueo la espalda y el cuello.

Dolía, ese intruso en su cuerpo dolía.

"Tranquila Pan…"

Tras unos segundos sin moverse empezó a dar ligeros empujones e involuntariamente ella comenzó a mover sus caderas.

Ya no dolía, se había ido y algo nuevo estaba naciendo en su ser, no podía evitar gemir y enterrar sus uñas en su espalda.

Se sentía morir, necesitaba más de él, enredo sus piernas alrededor de su cintura en un intento por sentir más.

El clímax estaba cerca, ambos lo sentían y ella fue la primera en alcanzarlo nuevamente, la presión interna ejercida por ella sobre él, fue su muerte y segundos después la alcanzó con un gruñido y una maldición. Jamás había tenido un desenlace tan fuerte y placentero.

Cansada, se dejó caer en la almohada y fue vagamente consciente de su esposo dándole un beso en la frente.

Se dejó acunar y cubrir por una sabana, sus brazos la envolvían como a una muñeca de porcelana mientras su cerebro empezaba a funcionar como era debido una vez más.

El aroma de una flor le recordó porque estaba ahí, porque había llegado a eso, porque le había entregado lo único que le quedaba propio a ése hombre.

Se permitió derramar una lágrima que fue a dar al pecho desnudo de su amante. No lo podía evitar.

¿Por qué ella no había terminado como la princesa Aurora? ¿Por qué a pesar de haber caminado al compás de la misma canción no tenían el mismo final feliz?

Su esposo pareció adivinarle el pensamiento y le levantó la cara y le limpió las lágrimas que ahora salían de ambos ojos.

No supo interpretar su mirada y tampoco le dio tiempo, él suavemente le cerró los ojos y la abrazo más hacía sí, no dijo nada y tampoco es que hubiera algo que decir.

Recordó lo que su mejor amiga le había dicho respecto a eso.

« En los negocios hay que ser prácticos, no sentimentales »

En eso estaba de acuerdo

« Para el placer no se necesita amor »

Pero ella quería amor, ese amor al que había renunciado apenas unas horas atrás. Ése amor que sabía no estaría ahí en la mirada de su esposo a la mañana siguiente que despertara.

Es hora de dormir Pan "

Y así lo hizo, en los brazos de su ex prometido, que ahora era su esposo y que también se había convertido en su amante. Ésa persona que por azares del destino había vuelto a su vida.

3 años era lo que necesitaban los dos, 3 años y podría decir adiós, solo debía cuidar su corazón 3 años.

Puedes hacerlo Pan, tú puedes… "


Prox. movimiento : Etendre...


Hallo, aquí estoy otra vez después de muchos años con un nuevo proyecto que espero les guste como mi otra historia.

También será PanxTrunks aunque no tendrá nada que ver con la saga, lamento si esto los decepciona pero es una idea que he traído y que no me he podido quitar de la cabeza.

La parte mala es que tardaré en actualizar los capítulos. Lo lamento, pero mientras, espero ansiosa sus comentarios.

El próximo cap. Esta a tan solo unos reviews de distancia, de verdad que sí, quiero saber que opinan además que me alegrarían la vida :D y así sabré si les gusto esta nueva idea.

El título y las referencias al Ballet 'La Bella Durmiente' son porque es uno de mis ballets favoritos y Tchaikovsky es por mucho uno de mis compositores preferidos; además que encajaba a la perfección con la trama que estoy desarrollando.

** .com/watch?v=LFsY6dcv3oA

Éste es el link para que escuchen la Suite Op. 66ª 'Apothese-Andante' . Como ya dije antes es de Piotr Ilych Tchaikovsky de su ballet 'La Bella Durmiente'. Es hermosa y la recomiendo ampliamente y sí corresponde, como dijo Pan, al momento en que la princesa Aurora recibe la bendición para casarse con Desiree. [Este es el nombre del príncipe en el ballet].

El título de la historia es una mezcla de la suite con los apellidos de Trunks y Pan.

Sin más, los leo después. Read&Review please..! Mientras mas reviews reciba más pronto actualizare ;) , lo prometo.

Muchos besos y abrazos

Bella