Antes de comenzar hare la renuncia de derechos… Naruto no es de mi propiedad, este pertenece a Masashi Kishimoto, mientras que Damashita! Power Puff Grils Z pertenece a Hiroyuki Kakudou.

Bueno amigos gracias a un comic que leí, me llego esta idea tan… tan… tan Kachorro seria la forma adecuada de describirla ya que todo lo que pienso no es lo mas normal y se que ya se dieron cuenta de ellos con mis proyectos anteriores.

Me gustaría decir que habrá muchas cosas que cambiaran y eso podrán apreciarlo cuando comiencen a leerlo. Repito… ¡Jamas! hare Naruhina así que no lo esperen, solo habrá una buena relación de amigos entre ambos.

Las chicas tendrán sus personalidades, pero solo tendrán su habilidad de súper fuerza, eso se sabrá mas adelante, si encuentro una manera de agregar las otras habilidades lo hare de un modo en el que no sean como Kekkei Genkai, pero eso si la habilidad de volar no es una opción, esta será totalmente descartada de la historia.

La aldea oculta entre las hojas 13 años después del ataque del Kyubi.

Oficina de Hiruzen Sarutobi 9:42 A.M.

- Vaya, no pensé que regresarías tan rápido -mencionó el hombre de edad avanzada mirando a su visitante, este hombre es el Sandaime Hokage, quien lleva en estos momentos la túnica blanca y el sombrero rojo-

- Lo se sensei, pero lo hice… además que vengo con intenciones de registrar a unas chicas que yo misma encontré, me gustaría tomarlas como mi equipo gennin junto a el -explicó la mujer de cabellos rubio pálidos, su vestimenta constaba de una gabardina verde con el símbolo kake en la espalda, lleva una camiseta sin mangas color gris dejando a la vista su voluptuoso pecho copa E, mientras en su cintura hay amarrado un listón azul marino, su, lleva unos pantalones azul marino y unas sandalias negras de tacón alto-

- Así que… ¿te enteraste? -preguntó Sarutobi, mientras sacaba la pipa de su boca y exhalaba todo el humo hacia el techo-

- A decir verdad si -respondió la mujer de ojos marrones tomando asiento frente al hombre-

- Lo veo un poco difícil pero no imposible, solo quiero preguntarte… ¿estas segura que podrás manejar un equipo de cuatro? -preguntó Sarutobi mirando a su antigua alumna-

- Hai sensei, se que el tiene pensado entrenarlo cuando comiencen los exámenes chunnin, además que esta la situación que ningún Jounin lo quiso bajo su tutela, mientras que el joven Uchiha fue el chico mas peleado, pero yo solo quiero encargarme del entrenamiento del hijo de mi alumna -respondió la mujer-

- Bueno, comprendo tu punto así que comenzare a hacer el papeleo -mencionó el anciano presionando un botón en un micrófono- Akari, tráeme los documentos de Naruto Uzumaki por favor -pidió el hombre- y ¿Qué me puedes decir de tus chicas? -preguntó Hiruzen, provocando una sonrisa en la rubia-

Mientras tanto por las calles de la aldea podemos ver a un rubio de 13 años de edad caminando fastidiado, su cabellera era alborotada y terminaba en puntas, ojos azules, su piel es color arena y en sus mejillas hay 3 marcas parecidas a bigotes de algún animal, aproximadamente 1.49 metros de altura. Su ropa constaba de una camiseta negra de mangas cortas y un pantalón anaranjado, su calzado consta de unas sandalias azules, mientras en su brazo derecho tiene atada la banda de Konoha-

- Malditos anbus gracias a su persecución mi chaqueta quedo reducida a nada -mencionó frustrado el rubio de ojos azules- con lo difícil que fue convencer al viejo para que me comprara esta ropa -suspiró con decepción el chico-

El chico caminaba frustrado por la aldea mientras pasaba al lado de una dulcería donde su atención termino centrándose en una larga cabellera anaranjada.

- Todos esos se ven realmente deliciosos, yo quiero probar ese y ese también y un poco de ese no estaría mal -mencionó la voz perteneciente a la cabellera anaranjada-

- Oye… -llamó el rubio logrando captar la atención de la cabellera anaranjada, que al voltearse termino resultando ser una linda chica de grandes ojos rosados, que llevaba un lazo rojo atado como moño en su cabeza, su vestimenta constaba de una camiseta blanca de manga larga y bicolor con los tonos rosado y fiusha, esta apenas lograba resaltar su cuerpo en desarrollo, lleva unos shorts azules algo ajustados que llegan sobre sus muslos, mientras su calzado esta conformado por unas sandalias azules, esta chica parecía tener al menos 13 años de edad- ¨es muy bonita¨ -pensó el rubio con un leve sonroso al ver a la chica-

- ¿Necesitas algo? -preguntó la chica mirando a Naruto-

- Bueno, es que… si quieres tanto uno de esos dulces ¿Por qué no los compras? -preguntó el rubio a la chica-

- Bueno es que… no tengo dinero -respondió con algo de pena la chica-

- Hmmm… ven vamos -dijo el rubio entrando al local-

- ¿Eh? -expresó con mucha confusión la chica-

- Si yo te comprare los dulces ¡Dattebayo! -mencionó el rubio sonriéndole a la chica-

- ¿¡DE VERDAD!? -preguntó sorprendida la peli naranjada-

- Si además yo también tengo algo de hambre -respondió el rubio, para que en ese momento la chica lo arrastrara dentro de la tienda-

- Quiero uno de esos y algo de eso y después unos pocos de esos y… -mencionó la chica muy emocionada-

- Lo veo y no lo creo… nunca pensé verte con una amiga -mencionó un hombre de edad avanzada detrás del mostrador-

- Jejeje, yo… yo la acabo de conocer -respondió el rubio algo apenado-

- Pues la chica es muy bonita… -mencionó el hombre mirando lo rápido que se movía la peli-narajada por los estantes de dulces-

- ¿Oye ya decidiste que es lo que quieres? -preguntó Naruto a la chica-

- Quiero estos -dijo la chica poniendo una enorme cantidad de dulces en el mostrador, algo que hizo sonreír al anciano de forma malévola y Naruto solo podía ver con horror como todo su dinero del mes se acabaría en ayudar a la chica-

- ¡OYE YO TE DIJE QUE ESCOGIERAS UNOS CUANTOS NO QUE TE LLEVARAS TODA LA TIENDA! -gritó el rubio mientras los ojos de la chica se comenzaban a cristalizar-

- AAAAAAA -gritó la chica para después sentarse y ponerse a llorar- ¨esto nunca falla¨ -pensó de forma malvada la chica que decidió seguir con su actuación-

- Esa no es forma de tratar a tus amigos Naruto -mencionó el viejo hombre con decepción-

- Pero es que… yo… y mi dinero… y mi ramen… -comenzó a decir cosas sin sentido el rubio para terminar siendo derrotado- ponlos en una bolsa -exclamó el rubio llorando de forma graciosa-

La caja registradora realizo sus funciones para terminar dando el sonido de venta y después verse a un Naruto completamente deprimido, con la chica detrás de el cargando una enorme bolsa de dulces.

- Muchas gracias por comprármelos, no hay duda que los dulces de Konoha son los mejores -exclamó ella con gran felicidad devorando una barra de chocolate-

- Si, si lo que digas -respondió Naruto siendo cubierto por un gran aura de depresión-

- Por cierto no me eh presentado, mi nombre es Akatsutsumi Momoko, mucho gusto -se presento la chica con una sonrisa, haciendo que la depresión del rubio disminuyera un poco-

- Bueno, yo soy Uzumaki Naruto y me convertiré en el Hokage de la aldea ¡Dattebayo! -exclamó el rubio provocando la risa de la chica, haciendo que el rubio la mirar con confusión- ¿acaso dije algo gracioso? -preguntó Naruto-

- Eres divertido, me caes bien Naruto-san -mencionó Momoko con una sonrisa-

- Bueno… ¿de donde vienes Momoko-chan? -preguntó el rubio sonrojando un poco a la chica por como la llamo-

- Yo… bueno, vengo con mi sensei y mis amigas de un viaje y… ella dijo que nos estableceríamos en Konoha -explicó Momoko-

- Oh ya veo -respondió el rubio para ver como la peli-anaranjada parecía recordar algo-

- Diablos lo olvide por completo -mencionó ella rascándose la cabeza- espero verte otro día, debo buscar a mis amigas, de nuevo gracias por los dulces -dijo la chica separándose del rubio que miro confundido lo que ocurrió-

- Las chicas de ahora cada vez son mas extrañas -dijo el rubio tomando su habitual pose, donde camina con los ojos cerrados y lleva sus manos detrás de su cabeza-

Ya habían pasado varios minutos desde que Naruto y Momoko se separaron, el rubio volvió a abrir su monedero de rana y aun le quedaba un poco de dinero… para unos 4 quizás 5 platos de ramen.

- Diablos… tendré que ver si el viejo Sarutobi me ayuda un poco de dinero, aunque lo mas probable es que me regañe por gastar mi dinero de forma tan imprudente y después me de un encargo pequeño para poder sobrevivir la semana -analizo el rubio mientras se imaginaba lo que decía en voz alta, lo cual provoco que por estar distraído chocara con alguien- oh lo siento mucho -se desculó el rubio-

- Auch, eso me dolió -se quejó una chica de cabellos rubios atados en dos coletas cortas-

- Perdón, déjame ayudarte -dijo el rubio ayudando a la chica para que se pusiera de pie-

- Muchas gracias eres muy amable -respondió la chica ya de pie- oh no mis telas, espero que no se hayan ensuciado -dijo preocupada la rubia-

- Discúlpame no era mi intención, para justificarme permíteme ayudarte con esto -dijo el rubio recogiendo las telas-

- Gracias pero no tienes que hacerlo, yo puedo llevarlas -mencionó ella ante las palabras del rubio- pero si insistes esta bien.

- Wow esta es mucha tela -dijo el rubio metiendo diferentes pliegos de telas de varios tamaños y colores-

- Si lo que ocurre es que yo me encargo de hacer ropa para mi y mi familia -respondió la chica-

- Vaya, debes ser muy habilidosa para ello -dijo el rubio sonrojado un poco a la rubia-

Ahora que la miraba bien, esta chica era igual de bonita que Momoko… incluso, eran un poco parecidas. La rubia frente al Uzumaki es de grandes ojos azules, piel clara y parecía ser mas baja que el en estatura. Su vestimenta constaba de un chaleco azul, una camiseta blanca de manga corta donde se podía apreciar un busto adecuado para su edad, lleva una falda corta de color azul y unas sandalias azules. La chica parecía tener 12 quizás 13 años como el.

- Bueno la verdad es que siempre eh soñado con ser una modista -dijo la rubia con una sonrisa en su rostro-

- Vaya que gran sueño, yo sueño con ser Hokage algún día ¡Dattebayo! -exclamó el rubio con una sonrisa-

- Pues espero que tu sueño se cumpla… eh… -mencionó la rubia dándose cuenta que no sabía el nombre de Naruto-

- Lo siento, soy Uzumaki Naruto -se presentó el chico-

- Un gusto Naruto-san, mi nombre es Goutokuji Miyako -se presento la rubia-

- Vaya el nombre te sienta bastante bien -dijo el rubio en voz alta cuando estas palabras debían decirse en su mente, lo cual provoco que la chica se sonrojara-

- Yo… yo… muchas gracias -respondió un poco apenada la rubia y con un lindo rubor en sus mejillas-

- Discúlpame si te hice sentir incomoda -mencionó el rubio muy apenado-

- No hay problema Naruto-san -respondió Miyako-

- ¿Necesitas ayuda para cargar tus telas? -preguntó Naruto-

- No me gustaría abusar, además creo que tú debes tener tus propios asuntos -respondió Miyako-

- No te preocupes, ahora estoy libre -dijo Naruto-

- Bueno, pues entonces me vendría bien tú ayuda Naruto-san -respondió la rubia con una linda sonrisa-

El par de rubios estuvo caminando por varios minutos, ambos hablaban de temas triviales, a Miyako le sorprendió que Naruto fuera un chico huérfano que vivía solo, algo bastante extraño pues el en realidad era muy agradable y no podía entender por que alguien no lo quiso adoptar, después el sorprendido fue Naruto escuchar las palabras de Miyako, quien le dijo que había llegado a la aldea hace pocas horas en compañía de su sensei y su familia, y que ahora se encontraba explorando la aldea.

- Vaya por alguna razón creo que ya había escuchado eso antes -mencionó el rubio con una pose pensativa-

- ¿Lo dices enserio? -preguntó Miyako-

- Si hace poco yo… -en ese momento se comenzaron a escuchar los gritos de emoción de varios chicos frente a ellos, al parecer había una especie de pelea- ¿Qué ocurrirá ahí? -preguntó el rubio mientras Miyako se alzaba de hombros negando con su cabeza-

Lentamente ambos llegaron al tumulto, donde pudieron ver al todo poderoso Sasuke Uchiha el mejor genio de la generación de Naruto siendo acompañado por su equipo y fans quienes le daban ánimos para terminar rápido con la pelea.

Sasuke es un chico de 13 años de edad, su piel es blanca y su cabello azabache en puntas detrás de su cabeza, lleva una camiseta color azul de cuello alto y mangas cortas, en sus brazos hay una especie de protectores que cubren desde sus codos a las muñecas, lleva unos shorts blancos y unas vendas cubren desde sus rodillas al tobillo mientras su calzado son unas sandalias azules. Su banda shinobi esta amarrada en su frente.

- Es el teme -dijo el rubio mirando al Uchiha- ¿pero? ¿Con quien esta peleando? -preguntó el rubio que no podía identificar al chico con el que Sasuke se batía en combate-

Este chico tenía cabellera azabache alborotada, llevaba suéter con capucha de color verde, en sus manos había unos guantes negros de entrenamiento y lleva unos pantalones verdes junto a unas sandalias azules.

- ¡KAORU! -exclamó Miyako preocupada-

- ¿Kaoru? -preguntó Naruto confundido- vaya nombre raro para un chico -dijo el rubio-

- No es un chico ella es mi hermana -mencionó Miyako con preocupación-

- ¿TU HERMANA? -preguntó Naruto en shock al ver que el Teme estaba luchando con una chica-

- Ya te disculparas por haberme empujado -preguntó Sasuke sin perder de vista los movimientos del ¨chico¨-

- Ahora resulta que nadie te puede pasar por un lado por que te desases, vaya princeso -mencionó Kaoru con burla mientras a Sasuke le aparecía una vena punzante en la frente-

- ¿como te atreves a hablarle a Sasuke-kun de esa manera? -gritó molesta una chica de larga cabellera rosada y lindos ojos color jade, lo único malo en ella era su terrible temperamento y actitud de chica fan hacia el moreno-

- No te metas en esto Haruno -sentenció Sasuke con una voz seria, haciendo que su compañera se deprimiera por el tono-

- ¿te crees rudo tratando así a tu amiga? -preguntó la chica mirando a Sasuke-

- ella no es mi amiga, ni siquiera la conozco, lo único que se es que es una tonta fan mas de mi estúpido club de fans -respondió Sasuke con duras palabras dejando dolidas a todas las fans que estaban ahí-

Sasuke se lanzo contra la chica, el Uchiha tenia preparada una patada mientras la morena sonreía esa patada seria demasiado fácil detenerla solo era cuestión de segundos, pero esta patada jamás llego, por que… Naruto se puso enfrente recibiendo el golpe del Uchiha, bloqueando la patada con sus brazos.

- ¡Naruto! -exclamó con preocupación Miyako al ver como el chico protegió a su hermana-

- Dobe -dijo Sasuke mirando que Naruto se había puesto en su camino- sigues siendo tan estúpido como siempre -mencionó el Uchiha mirando fijamente al rubio- si sabes lo que te conviene, muévete… tengo cuentas pendientes con ese pequeño bastardo -señalo el Uchiha a Kaoru-

- No… lo hare -dijo el rubio haciendo mucho esfuerzo por detener al Uchiha- no permitiré que por tu estúpida… arrogancia, lastimes a una chica -mencionó el rubio mientras la encapuchada tenia un pequeño sonroso por las palabras-

- muévete -sentenció Sasuke mirando fijamente al rubio-

- dije que no -mencionó el rubio- no voy a permitir que trates a los demás como tu quieras… solo por ser un Uchiha -sentenció el rubio muy enojado mientras el ambiente comenzaba a ponerse muy tenso entre ambos chicos-

En ese momento Sasuke suavizo la mirada y se volteo dándole la espalda a todos.

- Esto ya me aburrió, pero no creas que esto terminara así, la próxima vez que te metas en mi camino… te juro que no me voy a contener -mencionó Sasuke caminando lejos de todos, mientras su club de fans se comenzaba a disipar al momento en que la chica Haruno se quedaba viendo al rubio que tenia inflamado el brazo debido a la patada de Sasuke-

- ¿¡QUIEN RAYOS TE CREES PARA METERTE EN MI PELEA!? -gritó muy enojada la chica de verde-

- Kaoru tranquila, el es mi nuevo amigo -presentó Miyako-

- Pues la próxima vez que el se meta en mi camino, juro que lo hare pedazos -dijo la chica descubriéndose la cabeza, dejando que el rubio mirara unos lindos ojos verdes como esmeraldas-

- oye un gracias no hubiera estado de mas -mencionó el rubio, haciendo que Kaoru detuviera su paso-

- ¿Qué dijiste? -preguntó molesta apretando los puños- para tu información, yo no necesitaba tu ayuda, fuiste un completo baka al meterte en mi camino yo sola pude haberle dado una paliza a ese egocéntrico princeso mimado -sentenció la chica muy enojada-

- Gracias de todas maneras Naruto-san fuiste muy amable conmigo, quizás algún día podamos reunirnos -sugirió Miyako con una sonrisa al momento de intentar calmar la situación-

- No hay de que Miyako-chan -dijo el rubio sonrojado a la chica, mientras Kaoru tenía una vena punzante en su frente-

- ¡OYE CUIDA COMO TE REFIERES A ELLA FRENTE A MI! -sentenció la chica con una mirada desafiante-

- Tranquila Kaoru-nee, yo… yo no veo problema en que me llame así -mencionó la rubia desviando la mirada-

- Huy… como quieras, pero donde este baka con cara de pervertido intente algo contra ti... mejor me voy antes de que suceda otra cosa -dijo Kaoru dejando a Naruto y Miyako-

- De nuevo gracias por tu ayuda, Naruto-kun… yo… -dijo la chica para ser interrumpida por su hermana-

- ¡MIYAKO APURATE! -gritó Kaoru que ya tenía las telas de su hermana en manos-

- Hai… nos veremos Naruto-kun -con esas palabras la rubia planto un beso en la mejilla de Naruto y después se fue y camino al lado de su hermana-

Una vez que Naruto se dio cuenta que Miyako y su hermana se habían retirado, este decidió que era hora de ir a hablar con el Hokage por lo del dinero, pero su vista se centro en Haruno quien seguía parada en ese mismo lugar y con la cabeza agachada.

- Sakura-chan ¿estas bien? -preguntó el rubio preocupado por quien era su compañera de equipo-

- Naruto… tú… tú crees que yo… ¿soy un estorbo? -preguntó la chica mientras el rubio notaba que por sus mejillas bajaban lágrimas-

- Claro que no Sakura-chan, tu eres una chica muy inteligente y en las misiones que hagas la fuerza no siempre lo será todo, así que no dejes que las palabras que te dijo el Teme te afecten… tu vas a ser una Kunoichi muy buena yo estoy seguro -dijo el rubio sonrojado a la Haruno-

- Gracias Naruto -dijo ella sonriéndole al chico, algo que nunca había pasado- Naruto, ¿te gustaría acompañarme hasta mi casa? -preguntó la pelirosada, mientras el rubio se daba cuenta que esta era una oportunidad de oro-

- Vamos -dijo el rubio provocando que Sakura sonriera y su corazón latiera un poco rápido-

Ambos chicos iban en silencio, Naruto simplemente se mantenía pensando alguna excusa para que el viejo le creyera el como fue a gastar tanto dinero en poco tiempo, mientras Sakura por primera vez se sentía nerviosa y corta de comentarios al estar con Naruto, un chico que jamás en su vida pensó que la dejaría sin habla. Los chicos llegaron a la casa de Sakura y ella no había podido decirle absolutamente nada en todo el camino.

- Bueno Sakura-chan espero que pases una buena tarde -dijo el rubio-

- Yo gracias… ¿no te gustaría pasar? -preguntó la chica sin creer en sus propias palabras-

- Me gustaría pero, tengo que ir a ver al viejo Hokage, estoy corto de dinero y creo que el podría ayudarme con eso -dijo el rubio- otro día será Sakura-chan, nos vemos -dijo el rubio despidiéndose y caminando lejos de la casa de Sakura-

- Hasta otro día entonces… Naruto-kun -dijo la pelirosada entrando a su casa-

El rubio siguió tranquilo su camino hacia la torre, el día aun no terminaba y todo fue bastante raro con la presencia de esas chicas en la aldea, una vez que el rubio llego a la torre la secretaria lo recibió amablemente algo que no hacia la del turno vespertino.

- Bueno, el esta ocupado en estos momentos pero veré si puede atenderte -dijo la joven secretaria caminando en dirección a la oficina- Hokage-sama, Naruto-kun esta aquí y quiere hablar con usted -dijo la joven castaña-

- Inesperado, lo iba mandar a llamar… Akari por favor hazlo pasar -pidió el hombre haciendo asentir a la secretaria-

- El te esta esperando Naruto-kun -dijo la joven secretaria con una sonrisa dándole el pase-

- Gracias Kari-chan -respondió el rubio abriendo la puerta e ingresando- Oye viejo necesito tu ayuda -mencionó el rubio entrando a la oficina-

- Antes que eso Naruto-kun permíteme presentarte a… -mencionó el Hokage que fue interrumpido por Naruto-

- Oye eres la One-san que siempre me ayuda cuando vienen de visita -dijo el rubio señalando a la mujer que solo podía sonreír-

- Así es Naruto-kun, mi nombre es Senju Tsunade -se presento la mujer rubia-

- Es un gusto -el rubio hizo una reverencia algo que impresionó a Hiruzen pues el chico estaba mas educado que de costumbre-

- ¿Bueno Naruto-kun dime que te trae por aquí? -preguntó Hiruzen-

- Bueno veras… es que ocurrieron unos inconvenientes cuando conocí unas chicas y… -en ese momento el Sandaime corrió a velocidad Hirashin no jutsu y agarro a Naruto de los hombros para levantarlo y comenzar a sacudirlo de forma violenta mientras sus ojos demostraban furia y sus dientes se volvían colmillos-

- ¡MUCHACHO IRRESPONSABLE, ¿COMO QUE YA EMBARASASTE A UNAS CHICAS? ESTOY COMPLETAMENTE DECEPCIONADO DE TI, AHORA MISMO ME LLEVARAS CON ELLAS PARA OBLIGARTE A CASRTE Y QUE TE HAGAS RESPONSABLE DE TU ESTUPIDEZ! -gritó el Sandaime completamente furioso con el rubio que ya tenía los ojos en espiral-

- Sensei creo que si sigue sacudiendo a Naruto-kun se le va a salir la cabeza -exclamó Tsunade con una gota de sudor bajando por su cabeza-

Una vez que el Sandaime se calmo cuando Naruto logro decir que todo era un error, el rubio estaba alejado del viejo como una medida de precaución en caso de que el viejo hombre quisiera matarlo.

- bien… ¿Qué es lo que paso Naruto-kun? -preguntó el Sandaime-

- bueno como te dije, tuve un pequeño inconveniente con… -en ese momento la puerta se abrió, mientras una chica de cabellos castaño oscuro, que vestía un kimono negro entro a la oficina cargando a una peli-naranjada que pataleaba, mientras la otra cargaba una bolsa algo pesada y grande, al momento de ser seguidas por una rubia de ojos azules y una chica de cabellos azabaches alborotados-

- las encontré Tsunade-sama -mencionó la chica-

- ¡PERO AUN NO ESTOY SATISFECHA, QUIERO SEGUIR COMIENDO MIS DULCES! -pataleaba cierta peli-naranjada que Naruto conoció-

- No entiendo por que nos trajo a todas, Momoko es la problemática -dijo Kaoru molesta y cruzada de brazos-

- Bueno quizás sea por que Sensei nos quiere ver -dijo la rubia-

- ¡AAA SON USTEDES! -gritó Naruto señalando a las chicas-

- ¡Naruto-kun! -exclamaron Momoko y Miyako mirando al chico, mientras Kaoru simplemente se dedicaba a voltear el rostro-

- ¿Acaso ya se conocían? -preguntó Tsunade mirando al rubio-

- Tsunade-sama tome esto, Momoko puede ser tan testaruda cuando tiene dulces a su alcance -mencionó la chica de cabellos castaño oscuros algo cansada-

- Gracias Shizune, Momoko-chan, ¿de donde sacaste esto si yo no te di dinero? -preguntó Tsunade mirando el gran botín de dulces que la chica cargaba-

- Por eso mismo vine viejo -respondió Naruto- yo me ofrecí a comprarle dulces a Momoko-chan, pero no pensé que arrasaría con la mitad del local -dijo deprimido el rubio-

- MOMOKOOOO -gruñó Tsunade haciendo que su alumna se asustara-

- Entiendo tu situación Naruto-kun, pero lamentablemente ya no te estaré suministrando dinero -dijo Hiruzen sorprendiendo al chico-

- ¿Eso por que? -preguntó Naruto en shock-

- Bueno, es que… -dijo Hiruzen intentando buscar las palabras adecuadas-

- Por que ahora te lo vas a ganar en misiones -dijo Tsunade con una agradable sonrisa-

- Pero eso no es posible yo no tengo un equipo -respondió Naruto mirando a la mujer-

- Para eso te iba mandar a llamar Naruto, Tsunade se ofreció a ser tu sensei y quiere que te integres a su equipo -dijo el hombre señalando con su mano a las chicas-

- ¿Que? -preguntó Momoko-

- ¿Como? -preguntó Miyako-

- ¿EL BAKA? -preguntó Kaoru-

- NANIIIIIIII -gritó el rubio en shock con tal revelación-

CONTINUARA….