CAPÍTULO 1: De cómo 3 españolas ganan un concurso montadas en un burro
-Sabía que teníamos que haber hecho un flashmob…-murmuró Tatiana sin quitar la vista del ordenador.
-Aún así no habríamos ganado,-le contestó Silvia, sentada a su lado, frente a la pantalla-nadie podía competir contra esto.
"Esto" era un video colgado en la web. En la página oficial de la compañía SM Entertainment. Estaban en casa de Tatiana, en su habitación. Y no estaban solas, Nazaret había venido a pasar con ellas las vacaciones de Semana Santa, ahora mismo estaba de pie, en medio de la sala, mirando al infinito con un mohín en la cara.
-Joder, nuestro video era perfecto. En cada detalle, cada momento. ¡Nos aprendimos "It's You" de memoria solo para que nos saliese bien el puto playback!
-Creo que no han entendido lo del burro…-le interrumpió Silvia, con voz suave.
-¿Cómo no van a entenderlo? ¡Un burro! Era genial, metafórico…- replicó Naza.
-Por última vez-intervino Tatiana-es un caballo, no un burro, os lo llevo diciendo seis días.
-¿Una metáfora de qué, exactamente? ¿Es el año del burro allí o cómo?-le inquirió Silvia a Nazaret, ignorando por completo el último comentario de su amiga.
-¿El año del burro? Que va ser el año de…¡el 2010! Ese es el año en Korea-contestó Tatiana-dejad de fliparos. ¡Y no es un burro!
-El burro simbolizaba la fuerza, la unión entre ellos…- continuó Nazaret, haciendo caso omiso-y también simbolizaba que había que subirse a algo para hacer de Heechul en la escena final y no teníamos una moto a mano.
-Dios, parecías la Virgen María a punto de parir…-continuó Silvia-que cutre nos ha quedado todo.
Estaban hablando del video que habían enviado al concurso coreano, organizado por la productora del grupo musical Super Junior, el premio al mejor video homenaje sería participar en la nueva temporada del programa Full House. Estaba organizado a nivel mundial y acababa de salir el fallo del jurado: el ganador había sido un espectacular cortometraje sobre los inicios del grupo, interpretado por unas fans estadounidenses.
El corto era tan perfecto y emotivo que incluso había hecho llorar a las tres amigas. Sin embargo, eso no significaba que siguiesen indignadas ante el clarísimo error que había cometido la organización. Su impecable homenaje al videoclip "It's You" se merecía el premio y todos lo sabían…con burro o sin él.
-Os juro que si Micky nos saca mañana en el programa…
-Abandonarás el país para siempre. -terminó Tatiana, por ella, hastiada. -No ha estado tan mal, pero se presentaba tanta gente…de todos modos el flashmob hubiese sido mejor. Cuando se tiene un sueño tan real como el que yo tuve hay que seguirlo al pie de la letra. Nos desviamos del tema con vuestra idea del videoclip.
-Ayer soñé que se me caían todos los dientes, -replicó Naza, irritada- a lo mejor deberíamos hacer caso a mi sueño, coger unos alicates y empezar a arrancármelos uno a uno.
Tatiana sonrió a su pesar y Naza le devolvió la sonrisa. Era la primera vez en toda su vida que discutían, y lo hacían por un video friki en un concurso para frikis sobre un grupo que nadie a varios kilómetros a la redonda era probable que conociese.
Silvia, sin embargo, aún seguía preocupada, la posibilidad de que Micky Nadal se riese de ellas mañana la aterraba seriamente. Se levantó y deambuló nerviosa por la habitación hasta que se cruzó con los ojos muertos de una de las muñecas.
No las había contado, pero entre las que había traído Naza desde Bilbao y las que ya había en la casa, posiblemente había como unas mil quinientas. O más. Estaban en todas partes, allí donde fuera. Siempre parecían seguirla con la mirada, controlar sus movimientos.
-Joder, dan puto terror…-murmuró entre dientes.
-¿Qué?-le inquirió Tatiana.
-Déjalo…¿de qué hablabais?
Naza sonrió.
-Tati dice que si esto fuese un fic habríamos ganado el concurso.
-Si esto fuera un fic escrito por mi-continuó Tatiana, jovial-Hankyung anunciaría ahora mismo su regreso, él y Heechul se darían un buen morreo en directo y fin de la historia.
-Y del angst-añadió Silvia, también risueña-Y si esto fuera un fic, escrito por mi…
-Pero, ¿qué?
Las tres fijaron la vista en la pantalla del ordenador, que Naza estaba señalando estupefacta. Todavía estaba abierta en la web de SM. Acababan de actualizarla con una noticia de última hora. Los titulares en coreano eran indescifrables para ellas, pero en medio de la pantalla brillaba una sola imagen.
Heechul y Hankyung se estaban besando en medio de un plató de televisión.
No había duda, Hankyung había vuelto al grupo y acababan de anunciarlo.
La felicidad les duró unas cuantas horas y durante ese tiempo ninguna de las tres recordó, ni siquiera por un segundo, la conversación que estaban manteniendo justo antes de recibir la espectacular noticia. Vieron en bucle el video del beso varias veces. Al parecer, en un programa coreano habían sorprendido al propio Heechul, que desconocía el regreso de su amigo, y este al enterarse y volver a verlo, se había abalanzado sobre él, presa de la felicidad.
-Si lo piensas, no tiene mucho sentido -masculló Tatiana, pensativa, tiempo después, mientras se reunían frente a varios platos de comida china para llevar-¿Heechul no sabía que iba a volver al grupo? Eso es casi imposible, ¿cómo pudo la compañía mantener eso en secreto?
-Igual sí que lo sabía-intervino Naza, mientras intentaba manejarse con los palillos- solo ha sido un numerito frente a las cámaras para darle más emoción. Fanservice y todo eso…
-Es que, tal como ha ocurrido- contestó Tatiana- ha sido un poco, no se…un fic malo.
Durante un segundo se hizo el silencio en la habitación. Una sombra de inquietud invadió a las tres chicas, sentadas en el suelo. Ninguna dijo nada pero las tres estaban pensando en lo mismo, una sensación que tenían desde hace rato, que no podían explicar. De todos modos, el ser humano no está hecho para demasiadas reflexiones, y menos tres fangirls que acaban de ver besarse a dos de sus más preciados ídolos en vivo y en directo. Así, que tal como vino, esa inquietante sensación se fue.
Ninguna de las tres volvió a mencionar el tema durante el resto de la tarde. Dieron una vuelta hasta el centro, tomaron un café, recordaron los Frapuccinos con cierta nostalgia y volvieron a casa de Tatiana para la hora de cenar. Silvia llevaba un rato buscando mentalmente una excusa para no quedarse a dormir en la Casa de las Muñecas sin que pareciese que lo hacía por las muñecas, cuando, al abrir la puerta encontraron el telegrama.
S.M. LES COMUNICA QUE HAN GANADO EL PRIMER PREMIO DEL CONCURSO DE SUPER JUNIOR. VENGAN A RECOGERLO A COREA. CIAO.
-¿Qué mierdas…?
-Yo flipo.
-¿Pero qué?
En la web de SM la explicación quedaba clara, el corto ganador había sido descalificado por utilizar cámaras y otros medios de grabación robados, días antes, en un supermercado. Así que el segundo clasificado había sido elegido para participar en el concurso. Y el segundo clasificado era una recreación del vídeo clip "It's You", hecho por tres chicas españolas y un burro.
-Si lo pensáis tiene sentido…-intervino Silvia, no demasiado convencida, con el telegrama aún en la mano.
-Sí- contestó Naza, levantándose de la silla frente al ordenador- robaron el equipo, no iban a darles el premio a ellos.
Sin embargo, ninguna de las dos estaba demasiado contenta. Habían ganado el premio que habían estado soñando, algo que parecía imposible. Pero ahí estaba otra vez, esa sensación.
Tatiana llevaba un tiempo sin hablar. Las otras dos la miraron, esperando que les diese la razón en sus aplastantes conclusiones, de hecho necesitaban que les diese la razón. Porque todo esto era más que lógico, ¿no es cierto?
Pero Tatiana no las escuchaba, tenía la mirada clavada en una Pullip que la observaba desde la estantería. Era una de sus favoritas, de las primeras que había comprado, sin embargo…
-Las Pullip dan miedo…-dijo con un hilo de voz.
-¿Cómo que…-comenzó Naza, indignada, siguiendo la mirada de su amiga-¡Joder! ¡Sí, dan miedo!
-Menuda novedad- inquirió Silvia, sardónica. Sacudió el telegrama en el aire- ¿Os recuerdo que acaban de seleccionarnos para el nuevo Full House?
Ninguna de las dos pareció escucharla.
-Las Pullips nunca daban miedo- continuó Tatiana.
-Claro que no, las Pullips son preciosas, son dulces y tiernas- siguió Naza.
-Si claro…un encanto. De verdad chicas…
De repente las dos se volvieron hacia Silvia:
-Las Pullips solo te daban miedo a ti -inquirió Tatiana, suspicaz- es como…no sé explicarlo, como si las estuviésemos viendo a través de tu ojos.
-No digas tonterías, si durante todo este tiempo no os habíais dado cuenta de que…
-¿Y de qué coño va ese telegrama?- interrumpió Naza, de repente, con inusitada energía, como si se hubiese despertado de un sueño- ¿Qué sentido tiene que nos manden un telegrama? Además, no tiene ningún sentido…¿Vengan-a-recogerlo-a-Corea-ciao?
-No sé- contestó Silvia, encogiéndose de hombros- Los coreanos son raros, mandan tartas envenenadas a la gente y todo eso.
-Si pero…- intervino Tatiana, sin dejar a mirar a Silvia de manera suspicaz- ¿Y todo eso del material robado? Si lo piensas no tiene ningún sentido. Es como si todo esto fuera…
-…un fic malo -terminaron las tres a la vez.
Se miraron largo y tendido durante lo que parecieron horas. No podía ser verdad, sin embargo, esa sensación…
-No somos los personajes de un fic, que os vaya quedando claro -intervino Naza con efusividad, mientras avanzaba hacia el ordenador y apagaba la pantalla de golpe.- Soy Nazaret, una persona de verdad, vivo en Bilbao, tengo una vida.
-¿Una vida en la que ganas una plaza para el nuevo Full House? -le contestó Tatiana-¿Desde cuándo hay un nuevo Full House? Eres el personaje de un fic, la versión literaria de una persona real. No eres Nazaret, eres la Mary Sue de Nazaret sobre la que alguien está escribiendo. ¡Esta no es mi casa! -añadió moviendo los brazos a su alrededor- Se parece un poco pero no termina de serlo. Es el recuerdo que alguien tiene sobre mi casa.
-¿Alguien? ¿Quién?
-La autora de este fic, la persona que está escribiendo toda esta historia. Nada es real, todo está ocurriendo en la febril fantasía de alguien…
Se volvió hacia Silvia que la observaba con expresión atemorizada, arrugando el telegrama con el puño cerrado.
-…alguien que tiene miedo a las muñecas.
ÚLTIMA LLAMADA PARA EL VUELO 418 CON DESTINO A COREA.
-¿Desde cuándo una llamada de un aeropuerto dice algo así? ¿Ni siquiera te has molestado en buscar en un atlas la ciudad a la que vamos? ¿Destino a Corea? Corea es un país entero -le preguntó Tatiana a Silvia.
Las tres amigas arrastraban sus maletas por Barajas, buscando el vuelo que les llevaría a su destino: Super Junior.
-Deja de hablarme como si fuese yo quien estuviese escribiendo la historia -le contestó Silvia, jadeando por el esfuerzo.- Te recuerdo que soy tan personaje como tú y tengo el mismo control sobre esta historia, ninguno.
-Si pero eres el alter-ego de la autora -intervino Nazaret, mientras se movían por los complicados pasillos del aeropuerto- Osea, que cuando llegue el momento serás tú quien se líe con el tío bueno y no nosotras.
-Tal vez, pero os quedarán otros doce donde elegir -contestó ella, reprimiendo una sonrisa.
En realidad ya había pensado en ello y esperaba que la autora no pretendiese, en un acto de absurda generosidad, ceder los sujus más guapos a las otras dos chicas, al fin y al cabo, ¡era ella la que estaba inspirada en su personalidad y no las otras dos! Si había decidido que la acompañasen en ese viaje no tenía nada que objetar, pero la protagonista era ella, ¿no? Así es como funcionaba el MarySuismo, todo el mundo lo sabía.
-¿Qué estas haciendo? -Tatiana la sacó de sus pensamientos.
-Nada…-contestó, evasiva, con un hilo de voz.
-¿Cómo que nada? Has puesto una cara rara…¡Como si estuvieras teniendo una especie de reflexión, desde tu punto de vista!
-¿Cómo que una reflexión? Estaba pensando en mis cosas, ¿qué tiene de malo?
-No tiene nada de malo -contestó Tatiana, mosqueada- sólo que no recuerdo que desde que empezó todo esto Naza o yo hayamos tenido un solo "punto de vista".
-¡Es cierto! -contestó esta última.- Joder, tía, una cosa es que aceptásemos seguir con el juego a ver dónde nos llevaba toda esta historia. Pero empiezo a estar un poco harta de ti y de la persona en la que estás basada. Primero, me hace pronunciar una palabrota cada quince segundos, ¡yo no hablo así, joder! ¿Y ahora te escribe pensamientos y reflexiones? ¿Qué pasa, que la historia está contada desde tu punto de vista? ¿Eres el puto Harry Potter de este trío?
-Dejadlo ya, ¿vale? Vamos a perder el avión…
-No voy a coger un avión para que tú te montes una orgía con los Super Junior mientras nosotras esperamos en la habitación de al lado.
-Mierda, ella no escribiría eso, la conozco. Soy yo, más o menos, va a escribir un fic muy bonito, veréis. Donde las tres seremos felices y nos enamoraremos de los tres que más nos gusten y…¿por qué entiendo lo que están diciendo?
Tatiana y Nazaret la miraron confundidas.
-Entiendo lo que están diciendo -continuó Silvia, desesperada, señalando una pareja que, a su lado, subían las maletas a la cinta de facturación.
Eran un hombre y una mujer de mediana edad, ella era regordeta y de aspecto afable, él llevaba bigote y su menudo tamaño le impedía levantar las pesadas maletas con facilidad. Reían y conversaban mientras realizaban la tarea. Pero no hablaban en castellano.
-Es euskera… -murmuró Nazaret, un poco asombrada.
-Yo también los entiendo -intervino Tatiana, impresionada- ¿Por qué los entiendo, Naza? Se supone que solo tú…
Las tres se miraron.
-Este fic no tiene una sola autora…-intervino Silvia.
-¡Estamos en un multiautorfic... -intervino Tatiana, aunque clarísimamente acababa de inventarse esa palabra.
-…y acaba de cambiar de manos! -concluyó Silvia, mirando directamente a Nazaret.
-Pues estamos jodidas -concluyó esta última.
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