Tan solo por ser Kage
By.- Conchito
En una aldea alejada de todo, se encontraba el jefe de ésta, el Kazekage, ocupado entre unos papeles.
Un par de golpes lo distraen de su trabajo y lo obligan a levantar la mirada.
-Adelante.- Responde con monotonía en su voz.
-Hola Gaara.- Contesta el hombre que atraviesa la gruesa puerta.
-Hola.- Le contesta a su hermano, volviendo a dirigir la mirada a sus documentos.- Qué es lo que ocurre?
-Pues veras...- Dice acercándose al escritorio en donde se encontraba el pelirrojo.- Se a reunido un consejo... Es por... por lo que tú no quieres.
Su semblante cambió inmediatamente a un extra-serio y algo enfadado. No podía creer que el ser Kazekage también implicaría eso.
Se levantó y de mala gana lo siguió, sin dirigirle la palabra.
Dios horas después.
-No puedo creerlo!.- Casi gritó al cerrar de un portazo la puerta de su despacho.
-Cálmate.- Acababa de entrar sus hermanos. Temari continuo.- No puede ser tan malo. Ya tienes 18… es una obligación.
-Casarme por solo ser Kazekage?- Le miró algo amenazador.- Es ridículo!
-Pero no renunciarás solo por eso, o sí?- Kankurou se sentó frente él en el escritorio.
-Claro que no!- Ahora el de orbes aguamarina revolvería unos papeles.- No haría una tontería como esa.
-Entonces déjalo en nuestras manos.- Kankurou se levantó y se paró al lado de la rubia.- Nosotros te conseguiremos a la mejor de todas.
-Como quieras.-Dijo volviendo a su labor de firmar papeles.
Al día siguiente, la aldea de la Arena estaba empapelada de anuncios diciendo que el Kazekage buscaba prometida.
-Kankurou!!! No puedo creerlo!- Ahora si que estaba enfadado. Estaba rojo de cólera y su hermano se escondía tras Temari.- Cuando dejé que te encargaras de esto, nunca te dije que empapelaras la cuidad con esos afiches!
-Pe-pero...- Le tenía temor, machísimo temor a su hermano pequeño.- Yo quiero a la mejor para ti... también mandé a Konoha...
Ahora sí que no se pudo esconder.
-Que?!?!- Se volteó y se dirigió al lugar en donde estaba el castaño.- Que hiciste qué?!?!
Luego de una "leve" pelea familiar y de que a golpes, le quitara la pintura morada a Kankurou, lograron que el Kage se calmara y respirara, sentado en su escritorio.
-Dentro de cuatro días llegarán las candidatas de Konoha.- Le dijo temari. Habían pasado dos días desde el incidente en su oficina.- Sería la mejor opción que escogieses a una de ellas... teniendo en cuenta todos los tratados que has firmado con esa aldea.
-Depende de las candidatas... no quiero a cualquier tonta.- Se enfurecía al recordar todo lo que había tenido que pasar durante esos días debido a todo eso de su esposa.
-No seas malo.- Le dijo con una sonrisa dulce en su rostro.- Además... las chicas de Konoha son muy bonitas.
-No porque tú te hayas casado con alguien de esa aldea, significa que yo también tenga que hacerlo.- Esto sonrojó en demasía a la rubia ahí presente.
-Ya cálmate, quieres.- Le reprochó Kankurou que entraba a la oficina y veía como en ese momento su hermana no sabía como responder.
-Tú no te metas, estás excluido de todo.- Gaara firmaba un papel y lo dejaba a un lado para firmar otro.
-En fin... te traigo la lista con los nombres y los clanes de las chicas.- Dijo estirándole una lista no muy larga... de unos... 50 nombres?. Gaara la cogió y lo dejó por ahí.- Aunque sea échale un vistazo.
-Después... ahora tengo cosas que hacer.- Firmaba y leía más papeles.- Ahora... si serían tan amables en dejarme solo?- Siguió sin siquiera levantar la vista.
Los días pasarían lentísimo. No quería creer que sus padres le hicieran eso. Llevarla a otra aldea para que se casara... no podía creerlo... y ni siquiera con alguien que ella amase.
-"Las a honrar al clan".-Dijo imitando la voz de su padre.- Como si eso fuese lo más importante.
-Ino?- Fue lo que continuó a dos golpes en la puerta y un rechinar de ésta misma.- Soy Sakura.
-Sakura! Para adelante.- Le dijo haciendo a un lado las lágrimas.
-Supe lo de la aldea de la Arena.- Dijo sentándose en la cama.- Y también supe que tus padres te pusieron en la lista.
-Puedes creerlo!?!-Casi gritó sentándose a un lado de su amiga.
Los problemas con ella se habían solucionado luego de que Sakura se volviese la novia de Naruto, el actual Hokage.
-Cálmate... Tan solo es una posibilidad.-La consoló abrazándola.- Naruto me contó que fueron enviados 50 nombres en la lista. Y tienes que contar que hay muchas más en la Arena. Eres una en muchas.
-Lo sé... pero no podría imaginarme en un lugar tan feo.- Se acomodaba en el hombro de su amiga.- Espero no se la "afortunada".- Tono burlón para la última palabra.
Su vida transcurrió normal el último día en su Konoha, ya que debía emprender viaje con sus padres a la aldea de la Arena.
El día había llegado.
El sol lo sacó de sus pensamientos. A pesar de ya no tener a Shukaku dentro de él, no acostumbraba a dormir por más de cuatro horas, si no es que menos.
Se dio una ducha larga y se vistió, prefería dirigirse al alba a su despacho, así no lo molestaban esas kunoichis con el asunto de su esposa.
Se encontraba firmando papeles, cuando la puerta sonó dos veces y ante la afirmativa, Kankurou atravesaba la puerta.
-Es hora.- Dijo quedándose junto a la puerta.- Viste la lista siquiera?
-La lista?- Dijo al fin mirándolo.- Creo que la tengo por ahí.- Levantó un montón de papeles y alzó uno amarillento (no porque estuviera sucio).-Ésta?
-Sí, esa.- Dijo algo fastidiado.
-No... se me había olvidado que existía.- Gaara tenía semblante de un niño pequeño, reflejaba mucha inocencia en ese instante.
-Pues bueno... Despeja tu escritorio y prepárate.- Se acercó a la manilla y la giró.- Comenzarán a llegar dentro de media hora. Te aconsejaría que le echaras un vistazo a la lista.
Y desapareció tras la puerta.
-Diablos...- Se levantó y comenzó a ordenar los papeles.
Terminó con eso. Aun había un papel sobre su escritorio.
Se sentó y lo cogió. Paso su vista por los primeros nombres, pero se detuvo en uno en especial.
Golpearon la puerta nuevamente, sacándolo de su trance.
-Adelante.
-Kazekage-sama, llegaron las familias.- Dijo un ninja mientras hacía una reverencia.- Quiere que haga pasar a la primera?
-Espera.- Dijo volviendo su vista a la lista.- Quiero que hadas pasar al clan Yamanaka.
-Pero, Kazekage-sama.- Dijo el hombre hojeando la lista que el también tenía.- Ellos don el número 10.
-Y?- Ahora lo miraba casi con desprecio.- Haz lo que te dije.
-Como ordene, Kazekage-sama.- Y se retiró.
-Yamanaka...-Miraba una y otra vez ese apellido. Se le hacía muy familiar.- Yamanaka Ino...
La puerta fue golpeada nuevamente y el dio el pase.
-Aquí está el clan Yamanaka.- Dijo Kankurou dándole el pase a una familia de cinco integrantes.
-Buenos días, Kazekage-sama.- Dijeron todos haciendo una reverencia.
-Buenos días.- Contestó Gaara escrutando a la familia.- Adelante, tomen asiento.
Como se trataba de dos sillas, tan solo los padre se sentaron y sus hijos se pararon tras ellos.
-Y bien.- Dijo sin más. Él siempre iba al grano.
-Kazekage-sama.- Dijo el hombre levantándose y tomando la mano de uno de sus hijos.- Ella es Ino.- Y la acercó al escritorio un poco.- Ella es nuestra única hija, y sería para nosotros un honor que usted la tomara como esposa.- El hombre se mostraba orgulloso de su hija.- Ella es Jounnin de nuestra aldea y tiene vuestra misma edad.
-Ya veo.- Gaara se levantó e intentó mirar a la chica a los ojos. Se le hacía muy familiar.
Ella por otro lado, no lo había mirado a la cara en todo momento. Si é lo podía interpretar como falta de respeto, sería mejor para ella.
Ahora él la miraba de pues a cabeza, como si se tratase de un objeto en exhibición.
No tenía ni idea de quien se trataba y no tenía ganas de saberlo.
Se acercó. No podía sacarse de la cabeza su nombre...
Ino... por alguna razón se le hacía muy familiar.
Se acercó más, hasta quedar frente a ella. Le llegaba al mentón.
-Ino...- Dijo en un susurro para el mismo. Donde lo había escuchado...
Una imagen llegó a su cabeza.
--Flash Back--
-No me mires!
-Por qué no? Yo hago lo que quiero.- Le contestó en un tono burlón.
-Detente!- Él se ruborizaba a cada segundo que pasaba.- Quieres que te haga daño?
-No podrías... soy una Gennin con mucha experiencia.- Contestó orgullosa de sí.- No lograrías hacerme daño.
-A sí?-Ahora su semblante era más de travesura que de vergüenza.- Ya verás!
Y con su arena tiró a la muchacha al río.
-Mira tú! Gennin con experiencia.- Se mofaba de ella.
Salió del agua y le cogió del brazo para caer con él nuevamente al agua.
-Por lo menos no soy un distraído.- Le guiñó un ojo seductoramente.
Salió del agua dejando a un Gaara sonrojado y apenado.
--Fin FB--
-Y ahora no me miras a la cara?-Dijo al fin luego de un largo silencio- Ino?
Con esto, la rubia inmediatamente levantó sus ojos azules para encontrarse con los aguamarina del Kazekage.
-Gaara...-Estaba perpleja.
En todos esos años, y sobre todo en esos últimos días, había oído nombrar al famoso Kazekage de la aldea de la Arena, pero nunca nadie le dijo que se trataba de él.
-Ino!- Su padre le llamó la atención.-Trata al Kazekage con respeto.
-No se preocupe, Señor Yamanaka.- Dijo en defensa de la nombrada.
-Pero Kazekage-sama...
-Gaara... por qué nunca supe que eras tú?- No podía asimilarlo.
-Pues... yo siempre pensé que lo sabías...- Dijo sin más.- Además... hace ya unos años que no nos vemos.
-Pues... tú volviste a tu aldea y yo me quedé en la mía... y tampoco nunca volviste a Konoha.
-Yo...- No pudo terminar, ya que tocaron la puerta, como por décima vez.- Adelante.
-Kazekage-sama, es hora de que pase el siguiente clan.- Dijo cortésmente el ninja.
-No te preocupes.- Dijo cogiendo a la chica de la mano.- Ya no hace falta.
Este es mi primer fiC de naruto... así que espero que me dejen comentarios para ver si subo los otros que tengo escritos x)!
Si por casualidad encuentras algún error por favor háganmelo saber...
- nunca supe cuantos hermanos tenía Ino... en verdad nunca supe si es que tenía.. así que supongamos que sí los tenía xD!
Espero impaciente algún review!
Agradeciendo de antemano a los que leen y los envían ¡!
Besotes!
Conchito!!
