Bien, despues de mucho tiempo por fin me decido a publicar una historia. Es una de mis peliculas favoritas, y desde que la vi, no puedo dejar de pensar en ella. Se desarrolla después de la misma, y tendra personajes Oc. Es romantica y dramática. Denle una oportunidad.

Disclaimer: El origen de los guardianes no me pertenece, seria extremadamente feliz de que fueran mios u-u. Solo me pertenece la historia, y los personajes extras (oc).

Cap.1

El parque estaba repleto de niños que jugaban en los juegos. El aire frío recorría el lugar, mientras que los primeros indicios del invierno se notaban. Una joven delgada y de largos cabellos negros observaba la escena, mientras que de tanto en tanto se frotaba los brazos. A su lado un par de niñas, de 13 y 10 años de cabellos cafés, también observaban la escena algo sorprendidas.

-Esto es genial-

La mayor sonrío al oír el comentario, sinceramente feliz. Ese era un gran cambio, y supuso que a todas les animaría jugar en la nieve, dado que ellas jamás la conocieron. Con una sonrisa, las encamino a los juegos, y no falto decirles nada mas para que ellas salieran corriendo a explorar el nuevo elemento. La joven se sento en un banco, viendo a los niños jugar con la nieve. Ella misma la tomo entre sus manos, sonriendo.

-Es mas bella de lo que pensé.- Sonrío. Aun cuando el frío era algo a lo cual no estuvieran acostumbradas, eso no fue impedimento para disfrutar de tan singular paisaje. Saco de su bolso una cámara, y empezó a tomar algunas fotos del lugar, de la nieve, y de los niños jugando, caminando de un lado a otro, tratando de no caerse y esquivar a los niños que corrían muy cerca de ella y que en mas de una ocasión casi la tiran. De pronto un grito llamo su atención.

Por otro lado, las niñas empezaban a jugar entre ellas, al principio algo tímidas de hablar con alguien más. Mas solo fue cuestión de un par de minutos, para que se fueran acostumbrando.

-¡Hey! Ustedes son nuevas por aquí!-aseguro un chico de cabellos cafés y piel pálida. – Soy Jamie. Mucho gusto-

-Yo soy Fer-exclamo la mayor mas segura- Y ella es mi hermana, Sari.-La niña menor solo lo observo, timida.

-Bien ¿quieren jugar?-

Fer solo asintió, contenta- ¿a que?-Jamie solo sonrío feliz.

-A una guerra de nieve, claro esta-

-¿y como se juega eso?-

-¡¿no sabes?!-exclamo Jamie, incrédulo.

-no, de donde venimos, nunca nieva.- Ahora fue Sari la que contesto algo molesta. Jamie solo atino a disculparse. –Es el mejor juego de la historia. Vengan.-

-¡Alex!, vamos a jugar con el- grito fer, atrayendo la atención de la joven, quien les sonrío. Jamie las llevo hasta sus amigos, y rápidamente se desato una batalla campal en medio de la nieve. A lo lejos Alex observaba, divertida. Una brisa fría paso a su lado y la hizo estremecer. De pronto, una bola de nieve le dio directo en el pecho.

-¡Perdón!-Escucho gritar a Fer. Alex solo sonrío maliciosa, mientras se colgaba su mochila al hombro.

-Ah no, esto no se queda así- Y sin mas, la joven se unió a la batalla campal, sorprendiendo a la mayoría que no esperaban que alguien mucho mayor a ellos se les uniera, pero solo unos instantes, ya que rápidamente todos se acoplaron de nuevo al juego, atacando a diestra y siniestra. La tarde paso rápidamente, entre juegos y risas. Al final, todos se hallaban tirados en la nieve.

-esto es mas divertido cuando viene Jack- Solto Jamie.

-¿quién?- pregunto Fer.

-Jack. Jack Frost.- Pero ella solo le devolvió una mirada confundida.- Oh vamos, no pueden no conocerlo.- Jamie paso su mirada por Sari y Alex, quienes lo miraban curiosas.- ¿no lo conocen? ¡Es el mas genial! –

-¿quién es Jack Frost?-

-Es el espíritu de la nieve, de los juegos, es el quien hace nevar!-exclamo emocionado.

-Los espiritus no existen.- Contesto rápidamente Sari.

-¡claro que existen! Jack Frost es muy real.-

-Eso es una mentira.-

-Claro que no, todos nosotros lo conocemos, le encanta venir a jugar aquí.- Se defendió rápidamente Jamie.

Antes de que Sari reprochara, Alex se le adelanto.- Si eso es cierto, nos encantaría conocerlo- Le dijo conciliadora. -¿verdad que si niñas?

Fer contesto emocionada, mientras que Sari dudaba. –Alexa ¿en verdad existen los espiritus? ¿no son malos?-

Alexa le sonrío dulcemente a la niña. –Claro que si amor. Ellos existen y hay buenos y malos. Como nosotros.-

-¿De verdad lo crees?

Alexa lo pensó un momento. Ella ya tenia bastante edad como para que le contaran historias fantásticas, pero ciertamente, le encantaban. Alexa era de esas que aunque dudaran de ello, le daba un lugar especial y mágico, aunque supiera que solo eran cuentos. Además, ella no seria quien les quitara la ilusión.- Claro que si-

Sari parecio considerar su opinión y se volteo hacia Jamie. –¿Entonces cuando podremos conocerlo?

Jamie se quedo pensando unos momentos, meditando con la mirada perdida en un arbol. De pronto sonrío. –Vengan mañana. De seguro que estará aquí.- Ellas aceptaron, contentas. Se levantaron y se despidieron con la promesa de regresar al día siguiente. Jamie las vio alejarse un poco, para después voltear de nuevo hacia el árbol.

-¿por qué ellas no te pudieron ver?- pregunto por fin

-Por que solo me ven quienes creen en mi. Eso ya lo sabes.- Jack estaba recostado en el árbol.

-Pero…¿podrán verte?-

Jack sonrío y dio un salto hacia el suelo.- Nos encargaremos de eso. ¿me ayudan?-de inmediato recibió afirmaciones. –Además, no los puedo dejar que se sigan divirtiendo sin mi.- Y tras esto, lanzo una bola de nieve hacia Jamie.

Alex, Fer y Sari llegaron al día siguiente al parque a la misma hora que el día anterior. En cuanto vieron a Jamie y sus amigos, no perdieron el tiempo y fueron hacia ellos. Alex esta vez se mantuvo en una banca, leyendo mientras observaba a los niños jugar de reojo. Una ráfaga de aire paso, haciendo que ella se sobresaltara. Pronto el ambiente se relajo aun más, los gritos de los niños eran cada vez mas fuertes. Alex volteo a verlos nuevamente y se sorprendió de ver lo rápido que habían hecho sus municiones. Había montones de ellas por todos lados, dispuestas para que pudieran tomarlas rápidamente. Todos parecían divertirse mucho. Jamie y Fer conjuntaron ataques, sorprendiéndola, y fue muy poco por lo que pudo esquivarlos.

-¡Ya verán!- Corrió tras ellos, mientras les arrojaban un par de bolas, mientras ellos huían divertidos. Alexa solo suspiro, divertida. "No veo a ningún Jack Frost" pensó por un momento, para después negar con su cabeza "pero ¿en que estas pensando?" sonrío divertida, "al menos se la están pasando bien" Se dio la vuelta y choco con alguien, haciendo que se asustara y perdiera el equilibrio, soltando un grito.

-¡Hey! ¡cuidado!- Esa persona la tomo en brazos para evitar que se cayera.

-¡Tonto! ¡Me asustaste!- Alexa alzo la mirada, asustada, topándose con una mirada divertida y una sonrisa traviesa. Alexa se paro con su ayuda, sin despegar su vista de el. Era bastante llamativo, con su piel blanca, sus ojos azules y su cabello blanco, que fue lo que mas la sorprendió.

-¿puedes verme?- Ella lo miro, curiosa, sin entender su pregunta.

-Claro que si…- Y el solo amplio mas su sonrisa. Ajeno a ellos, los demás niños los habían volteado a ver.-¿Quién eres?

El joven solo sonrío aun mas. –Jack Frost.-

Alexa solo abrio los ojos sorprendida, mientras retrocedio un paso, mientras que él parecia disfrutar aquello. –Pense que eras muy grande para creer. Pero veo que me equivoque. Eso es bueno.-

Jamie corrió hacia donde ellos, obteniendo la atención del joven, mientras que ella solo lo observaba todo demasiado sorprendida. Jamie le estaba llamando Jack. ¿seria posible…? Antes de que pudiera pensar algo mas, Jack apareció una bola de nieve en su mano, dejando a la chica sin palabras, igual que a las Fer y Sari.

-¡a jugar!- Grito lanzándola bola y haciendo que con esto se retomara la batalla, que incluso las dos niñas salieran de su incredulidad y se unieran como si nada. Jack volteo a ver a Alexa, para sonreírle y guiñarle un ojo, antes de perderse en aquella pelea.