Nuestro Destino

Por una ventana un niño joven se asomaba, viendo como la lluvia caía, sintiendo como el aire le susurraba que la espera de algo bueno terminaría pronto…tal vez demasiado pronto.

Mirando como la lluvia paraba de caer, tocaron la puerta de su casa. Oyó como su madre fue a abrirla y unas personas entraban.

Le dio curiosidad , así que bajo las escaleras y se dirigió al comedor donde estaban su madre con sus invitados para espiar tras una puerta que estaba entre abierta.

-Qué bueno que haya salido todo bien, es una alegría..

Dijo su madre a esas personas que no identificaba.

-Si por suerte está todo bien

Le respondieron aquellas personas.

-Hmm

Dijo el niño mirando con atención a lo que parecía tenían esas personas, una bebita.

Su madre se volteó y al verlo sonrió

Ven hijo…saluda – Dijo ella sonriéndole y ofreciéndole su mano.

El la tomo´ y se acercó a ellos .

Hola tanto tiempo sin verte, ¿Cómo estás? – Dijeron aquellas personas sonriendo alegremente.

Bien, ¿y ustedes? – Dijo con educación, a pesar de que le estaba poniendo atención a otra cosa, o más bien a alguien…

Bien gracias – Dijo la señora, empezando a sonreír por como el chico observaba con tanta atención a su hija que recién acababa de nacer.

Ella es mi hija Amu – Le dijo al niño.

Ellos acaban de llegar del hospital- le explico su madre

Si, como la bebe y yo estábamos bien, decidimos venirnos- Dijo la señora sonriendo

Y porque no te gustan los hospitales- Dijo el marido de ella.

Bueno también porque queríamos venir a visitarte- Dijo la señora a la madre del niño.

Que bien, eso me alegra – Dijo la ya mencionada madre del chico.

Y luego de una larga charla, preguntas y todo eso, el chico aún así no les ponía mucha atención , ya que la misma estaba aferrada a aquella niña de ámbares ojos.

Oye, ¿quieres tenerla?, tengo que ir al baño.- Dijo la señora dándosela al niño que sorprendido se la sostuvo .

Te acompañare por si necesitas algo- Dijo el marido de la señora caminando tras ellá.

Hijo, iré a comprar unas cosas, no tardo ok?- Dijo su madre dirigiéndose hacia la puerta de la casa.

Hm ok- Dijo el chico

El niño siguió mirándola con mucha ternura y curiosidad, se dirigió a una ventana para ver como la luna llena salía y volvió su mirada a la linda bebita que lo miraba con atención, él sonrió para luego decir:..

Tú serás mi esposa…