Chapter 1: Introduccion.
Dicen que cuando alguien obtiene algo, algo de valor extremo para el individuo se pone en juego el corazón y la mente.
Por un lado la mente, cuyos pensamientos empieza cuando la persona obtiene lo que más aprecia. Empieza a imaginar un mundo de posibilidades a perderlo, lo que lleva al miedo el miedo de perderlo, lo que vincula al corazón.
El corazón por su parte tiene miedo, pero un miedo singular de que cuando pierda lo que más ama que lo llena de regocijo, se rompa, básicamente el corazón y la mente luchan a mil por obtener algo y también perderlo.
La mente siempre quiso ser ágil llena de firmeza, sensatez, y lista lo suficiente como para resolver lo complicado que es el corazón, pero no puede a la vez que es fuerte es tan frágil como una hoja seca que cae de un árbol, todo por lo que piensa se inicia en el corazón, el corazón por su parte es aventurero, torpe e ingenuo, porque por más que se le advierta por una cosa lo seguirá haciendo a consta de su propia felicidad, eso es lo que la mente quiere evitar sabe muy bien que lo que haga su corazón lo perjudica o beneficia a él, en cambio todo puede cambiar si el que lleva las riendas es la mente.
La mente siempre pensara lo que es mejor, no tan solo para el sino también para el corazón, eso es lo que el corazón no comprende, él es capaz de sacrificarse a consta de conseguir lo que quiere en cambo la mente es capaz de sacrificar lo que sea consta de estar bien. Es una pelea infinita en que siempre debatirán sus mejores argumentos.
Sin darse cuenta que sus peores enemigos son los sentimientos, aquellos que nacen de los dos: la ira, amor, tristeza, envidia, compasión, etc.
Son las causantes de las batallas que se llevan a cabo, sobre todo en el amor.
Cuando alguien ama sin ser correspondido es realmente doloroso o cuando ofreces amistad al que pide amor, es como dar pan al que muere de sed. Que ames a alguien y que no te corresponda duele, que lo haga te llena de regocijo, pero estar en la brecha del si y del no, es como una tortura tanto para la mente como para el corazón, es como un arma de doble filo sin sentido.
Es realmente obvio que cuando amas a una persona que no es correspondida la que pierde es el corazón, por no haber escuchado a la mente en una o barias ocasiones. En cambio la mente finge que el dolor que siente el corazón no es absorbido por el como una esponja. Y crea una ilusión aquella que de por más que duela no nos importa o, que siempre vas a querer lo mejor para aquella persona no importa si es feliz o con o sin ti, lo único que hace es engañarse a ella misma para neutralizar el golpe, es obvio que uno a pesar de todo siempre va a tener una parte por más pequeña que sea, egoísta. Es obvio que si uno quiere algo de manera inexplicable no va a querer que lo obtenga otra persona, además no existe otra persona más digna de obtener lo que desea que aquella que es capaz de sacrificar su felicidad y su corazón A consta de la felicidad del otro.