Summary: Alguien llama a la puerta de la Cabaña del Misterio, Stan abre la puerta, solo para ver que a sus pies se encontraba un bebe envuelto en sabanas sucias. El tenia muchas cosas de las que preocuparse y no podía agregar a un bebe a la lista. Una cosa llevo a lo otra y termino adoptando al bebe, 18 años después, Dipper y Mabel llegan a Gravity Falls para pasar el verano con Stan y Caroline. ¿Que podría salir mal?


Prologo: Bajo la lluvia

Stan Pines estaba mirando la televisión, ya era tarde en la noche, casi medianoche. Hoy la Cabaña del Misterio tuvo muchos clientes, el estaba exhausto, no tenia a nadie que lo ayude para administrar la Cabaña. Hace poco despidió a su ayudante y le dio el trabajo a un adolescente que no tenia ningún entusiasmo por trabajar. Tal parece que nadie en su sano juicio quiere trabajar aqui. Lo cual es raro, toda la gente del pueblo viene y le gusta la Cabaña, pero nadie quiere trabajar aquí.

El televisor mostraba el clima para los próximos días, tal parece que la lluvia estaba para quedarse, ya estaban empezando a caer las primeras gotas. Después de varias semanas de calor infernal, la lluvia era un alivio, pero en un lugar como Gravity Falls era de esperarse que la lluvia traiga mas problemas que alivio debido a que el pueblo es propenso a las inundaciones si llueve por días sin parar. Stan apago el televisor, se levanto de su sofá y camino hacia la maquina de golosinas. Hoy no iba al laboratorio, estaba cansado, su espalda le dolía. El no tenia pensado abandonar a su hermano, no sabia si estaba muerto o no, pero aun así, seguirá intentado hasta traerlo devuelta.

En ese momento, alguien toca la puerta delantera de la casa. Dio aproximadamente 5 golpes, bien fuertes, antes de parar. Stan fue a la puerta, no tenia mirilla para ver a la persona del otro lado, Stan tomo un bate de baseball, en caso de que sea un ladrón. Nadie en su sano juicio vendría aquí a tales horas de la noche y bajo la lluvia. La Cabaña esta casi a las afueras del pueblo. Stan resoplo, abrió la puerta rápidamente y levanto su bate... Pero no había nadie. Stan suspiro, por un momento pensó que debió haber sido su imaginación hasta que miro a sus pies. Sus ojos se abrieron como platos, era un bebe envuelto en una chaqueta negra sucia. Alguien dejo un bebe en su puerta.

─No puede ser. ─Dijo Stan. Agarro al bebe y lo llevo adentro para que no tome frió. Stan rápidamente tomo varias sabanas, lo arropo y dejo la chaqueta a un lado. ─¿Quien en su sano juicio abandona a un bebe? ─Stan miro al infante detenidamente. Parece que solo tenia días de haber nacido, ni siquiera tenia pelo aun. El bebe estaba dormido, el esperaba que al menos se ponga a llorar, pero no lo hizo. Stan agarro la chaqueta en la que estaba el bebe y la examino. En el bolsillo izquierdo había una nota doblada. Stan la abrió y la leyó en voz alta.

"Cuídala bien, no te arrepentirás. Te lo prometo" Debajo no había ninguna firma. Stan no sabia que pensar de esto. El vio al bebe durmiendo pacíficamente y suspiro. Rompió la nota, fue a cambiarse de ropa, tomo al bebe, subió al auto y fue al pueblo. Stan termino en el hospital, al entrar no había nadie, solo la recepcionista estaba en el lugar. Su cabeza estaba pegada al escritorio, el se puso frente a ella y la despertó. Ella alzo la vista y miro a Stan a los ojos.

─¿Que se le ofrece? ─Ella pregunto.

─Algún idiota irresponsable dejo a este bebe en mi puerta. No puedo tenerlo en casa, soy un hombre ocupado.

─Bueno... No podemos tenerlo aquí, y el pueblo no tiene ningún orfanato en el cual lo puede dejar. Usted va a tener que hacerse cargo de... ¿Es chico o chica? ─Pregunto la mujer. Stan suspiro, examino al bebe para saber el genero.

─Es niña. Mas razón para no tenerla cerca. Seria terrible como padre. ─Stan se quedo pensando por un momento─. ¿No tiene algún registro? Parece que nació hace poco. Cuando nacimientos hubo recientemente? ─Stan pregunto. La mujer no se movió de su lugar, se cruzo de brazos y le respondió.

─Cero. Ningún niño nació aquí en meses. Es un pueblo chico y lo sabes. Debe ser de afuera.

─Vaya mi mala suerte. ─Stan suspiro, esto iba de mal en peor para el.

─Mira, si yo fuera tu me quedaría con la niña. Pero si tanto quieres deshacerte de ella, ve a la policía y ellos se encargaran.

─¿La policía? ¿Esos inútiles?

─Si, esos inútiles. ─Respondió la recepcionista, ambos sabían que la policía de este pueblo dejaba mucho que desear. Stan miro a la bebe durmiendo en sus brazos.

─... Bien, me haré cargo. Pero mas tarde haré algo al respecto.

─Lo que usted diga. ─La mujer volvió a poner la cabeza sobre el escritorio y se durmió. Stan salio del hospital, puso a la bebe en el auto y volvió a la Cabaña. Una vez dentro, Stan dejo a la bebe en su cama y el se recostó a su lado.

─¿Que voy a hacer contigo, pequeña? ─Stan solo miro al techo, no sabia que hacer. El nunca se vio con una familia estable, esposa, hijos. Su vida fue de mal en peor, pero esto llegaba a otro nivel. Stan escucho a la bebe llorar, el la tomo en sus brazos y trato de calmarla.

─No llores, Niña. Todo va a estar bien, todo va a estar bien. ¿Tienes hambre? Te conseguiré leche. Solo aguanta, ya la preparare. ─Stan fue a la cocina y saco leche del refrigerador. Se detuvo cuando se dio cuenta de que algo faltaba─. ¿Como lo tomas? ¿Vaso o...? Rayos, estoy en un lió. ─Stan no sabia como hacerse cargo de la bebe y estaba seguro de que no durara una semana con ella...