I: ¿Neville sexy?
Hacia tres años desde que Severus había partido a Durmstrang y si no fuera por la compañía de George Weasley ella se hubiera sumido en un gran abismo de soledad .Los dos se acogían y se ayudaban mutuamente, pasaban gran parte de las vacaciones juntos, además en esos años de locura descontrolada, por que eso habían sido, George y Marían se habían vuelto amigos de Luna, especialmente Marían que encontraba que la sinceridad de la joven facilitaba su trato.
Ese año habían decidido ir juntas de vacaciones. Marían necesitaba ir a buscar algunos ingredientes para pociones experimentales que estaba realizando y Luna buscaba no se que animal. Marían sugirió que fueran de vacaciones a Sudamérica específicamente a Cuzco, para que así su amiga conociera Perú.
Se encontraban planificando las vacaciones en el caldero chorreante junto a George que las acompañaba con una cerveza de mantequilla antes de ir a la tienda cuando vieron entrar a Minerva , la actual directora de Hogwarts, Toda la mesa la saludo cariñosamente, especialmente Marían quien veía a esa mujer como una segunda madre
-Hola directora que ¿hace por acá?- pregunto la joven profesora.
-Nada particular, solo vine a pasear un rato-
-¿Por qué no se sienta con nosotros?- dijo George quien ya había colocado una silla para la mujer
-Gracias, acepto encantada-
- Nosotros estamos preparando nuestras vacaciones pensamos ir a Sudamérica-
-La mujer mayor miro a los jóvenes que tenia delante, se notaban bastante contentos -¿y piensan ir los tres juntos? Señorita Lovegood va a hacer mal tercio-
Los jóvenes se miraron unos a otros y fue Marían la primera en estallar en risas -Profesora con George no tenemos nada solo somos amigos; y no, solo iremos Luna y yo.-
Cuando las risas y el rojo de las caras pasaron Minerva comenzó nuevamente la conversación.
-A que no adivinan quien vino hoy a solicitar un puesto en Hogwarts.
Los jóvenes se miraron y contestaron al unísono –No-
-Vino a mi despacho Neville Longbotton a solicitar el puesto que antes ocupaba Sprout-
-Mm. es lógico- dijo Marían el es excelente en herbólogia.
-Lo mismo pensé yo- dijo la mujer mayor- es por eso que le entregue el puesto, así que tendrás un nuevo colega Marían.
-Qué bien por Neville- dijo George, él es un buen hombre-
-Si- dijo Marían, además ahora esta bastante atractivo, ya no es el jovencito rechoncho, tímido y extremadamente torpe-
-Ahora es alto mas esbelto y el pelo largo con la coleta le queda bastante bien- la que había hablado era Luna a lo cual todos la quedaron mirando sorprendidos.
-Mm. parece que Luna lo mira con otros ojos- la burla de George hizo enrojecer a Luna.
-Buen si tu solo eres amigo de Marían, no veo por que no puedo encontrar atractivo a Neville.
Tanto Minerva como Marían comenzaron a reír.
-Touche- dijo George,- esta bien no te molesto mas-
Los cuatro siguieron hablando mucho mas rato y cuando ya estaba entrada la noche George dijo que se iría a lo que las demás también decidieron hacerlo, tanto Marían como Luna Vivian juntas desde hace unos meses, pero solo era cuando Marían no estaba trabajando en Hogwarts o cuando no se quedaba en la tienda de George.
Las vacaciones junto a Luna fueron bastante alegres, además las dos habían ligado en Sudamérica, especialmente Luna que había quedado con otro mago ingles, con el cual se seguían viendo al llegar a Londres, pero ya estaban terminando las vacaciones y Marían tenia que comenzar nuevamente a trabajar.
Cuando volvió al colegio, lo primero que vio fue a Neville cargando un gran numero de libros, al ver a su antigua profesora se le cayeron los libros, cuando Marían vio lo que había pasado se rió fuertemente.
-Hola Neville, ¿como estas?-
-Eeehh bien-
La joven mujer se acerco al nuevo profesor y se agacho para ayudarle a recoger los libros.
-Existen cosas que no cambian cierto Neville-
-No si cambian, pero tu me pones nervioso y haces aflorar toda mi torpeza-
Marían lo miro con los ojos bien abiertos –Neville, ¿Me estas coqueteando?-
-Si, pero solo por que estas mas hermosa de lo que recordaba cuando eras mi profesora-.
Marían se sobresalto, desde que Severus había partido solo había tenido algo medianamente serio con George, pero eran demasiado amigos como para amarse realmente. Estuvieron juntos para no estar solos y eso los dos lo entendían claramente, pero ahora Neville que había sido un antiguo alumno suyo le estaba coqueteando abiertamente ella no sabia que hacer, se rió nerviosamente, se levanto y siguió su camino, pero se sentía alagada y nerviosa.
Las clases comenzaron y todo estaba bastante tranquilo, durante semanas Marían no recibió nuevos coqueteos de Neville, pero también ella trataba de no estar a solas con él, por lo cual las oportunidades de que pasara eran pocas
Un día domingo especialmente frío Marían estaba en la sala de profesores jugando cartas junto a Mcgonagall quien acostumbraba conversar gratamente con su antigua alumna, estaban entretenidas en el poker y la mujer mayor ya le había ganado una considerable suma a la mas joven, cuando llego Longbotton a su lado.
-Buenos días directora- luego se dirigió a Marían quien al verlo se puso nerviosa- Buenos días Marían, ¿Qué juegan?
La que contesto fue Minerva -Poker, un juego Muggle que me enseño Marían y en el cual le gano descaradamente, ¿Quieres unirtenos?-
Neville miro a Marían y sonrió – No me gustaría molestar-
-No molestas Neville- la voz de Marían sonaba ruda pero agradable- solo tienes que traer dinero, por que siento que mi racha va a cambiar-
-Esta bien juego-
Estuvieron un par de horas jugando y Marían perdió bastante dinero, tanto que decidió que nunca mas jugaría. Se iba pero la directora la retuvo, -no te vayas, yo tengo que irme y no podemos dejar al nuevo profesor solo, no seamos malas colegas- la voz de la mujer tenia una cierta similitud con el antiguo director, especialmente por lo picara que sonaba y los ojos brillaban como quien esta realizando una travesura, mientras se iba y al pasar al lado de Marían coloco su mano sobre el hombro de la mujer mas joven la miro tiernamente mientras le decía.
-Me parece que tienes una botella de vino añejado, especial para un día tan frío como este-
-Si, si tengo-, Marían miro a Longbotton y luego sonrió a su profesora- Me parece que si es un día especial para tomarla, Neville ¿te parece que la abramos?
El joven la miro y asintió con la cabeza a lo que Marían se levanto y salio junto a la directora, para ir a buscar la botella. Cuando ya estuvieron en los pasillos Marían se dirigió directamente a Minerva.
-¿Qué trata de hacer señora directora?-
Mcgonagall la miro entretenida y luego volvió a su cara marcada por un rictus de seriedad, -Es que tengo una profesora bastante buena pero muy triste aunque no quiera aceptarlo, se esta volviendo hosca y creo que es momento para que trate de olvidar realmente a un antiguo profesor de pociones y darse una segunda oportunidad-
Marían la miro nuevamente y sonrió – No se si quiero olvidar o darme una segunda oportunidad, pero si se que Neville esta bastante sexy- cuando termino cerro un ojo coquetamente y se dirigió su habitación. Una vez en ella busco la botella y fue nuevamente a la sala de profesores cuando entro el joven seguía sentado y al verla se levanto.
Comenzaron a conversar y a medida que la botella disminuía su contenido la charla se animaba mas, en un momento Longbotton miro tan fijamente a Marían que esta volvió a ponerse nerviosa en compañía de quien antes era su alumno.
-¿Qué pasa Neville, porque me miras tan fijamente?-
-Lo siento Marían, es que quería pedirte disculpas-
-¿Por qué?
-Por lo que te dije el primer día que nos vimos, me he dado cuenta que me has estado evitando y supongo que es por ello -
-Tu lo dices por el coqueteo descarado que realizaste ese día ¿Por eso?
Neville y Marían rieron ya no estaban tensos.
-Si, por eso, siento si te molesto-
-No, esta bien lo que pasa es que fue demasiado raro yo te veía como a un alumno y tu me sales con todas esas insinuaciones que me descolocaste, pero no te preocupes ya paso y prometo no volver a esquivarte si tu prometes no dártelas de galán conmigo.
-Esta bien lo prometo, solo si me prometes que nos tomaremos otra botella de este exquisito vino en otra ocasión-
Marían sonrió, se sentía alegre no sabia si era por el vino o por que ese joven bastante atractivo le sonreía –Esta bien pero en otra ocasión por que en este momento creo que estamos un poco pasados de copas y no se vería bien que dos profesores anduvieran borrachos por el colegio- cuando termino de decir eso se levanto beso en la mejilla a Neville y se fue a su cuarto, definitivamente tendría que hablar con sus amigos de esto.
Era el primer domingo del mes por lo que iría a la madriguera a almorzar con los Weasley, era una tradición que había impuesto Molly para ver a sus hijos y a quienes ella había optado por adoptar, por lo cual Marían debía ir si no quería recibir un vociferador en su clase al día siguiente, además era un buen momento para poder hablar con George y los demás.
Se apareció fuera de la casa Weasley faltando cinco minutos para la una de la tarde y por el bullicio que se sentía al interior la mayoría de los comensales ya había llegado. Al entrar a la casa los calidos brazos de Molly la recibieron en un afectuoso abrazo e inmediatamente le pregunto por Luna- ella no podrá venir por que tenia cita con su nuevo novio- eso tranquilizo a la señora Weasley que permitía que faltaran si estaban casados o con novios, mientras tanto los demás también iban a saludar a la recién llegada ,se encontraba Ginny, Harry, Ron, Hermione, y el señor Weasley, después de una agotadora sesión de abrazos y besos Marían empezó a buscar a George, quien en ese momento entro a la casa.
-Hola George, para variar llegas tarde y como siempre después de Marían- era la voz de Ron que estaba marcada por la burla, todos en la casa asumían que George y Marían estaban juntos y que no querían reconocerlo. George iba a responder pero Marían se adelanto.
-Por lo menos nosotros no hacemos comando por las noches en casa de Mamá para poder estar con mi novia-
La cara tanto de Ron como de Hermione se volvieron completamente rojas y todos los que estaban en ese momento y que la escucharon comenzaron a reír, por suerte la señora Weasley no se encontraba en la habitación, sino el comentario habría generado consecuencias.
-Hola George como estuvo tu semana-era la señora Weasley que había entrado con una gran cantidad de platos al comedor y todas las jóvenes que estaban ahí corrieron a ayudarla-
George, fue a saludar de beso a su madre y a responder su pregunta- bien de lo mas bien, te traje un regalo-
-¿Qué me trajiste George?
El joven le paso un echarpe muy lindo de color dorado –esta hermoso hijo gracias-
Marían se había acercado a la mujer a observar el precioso echarpe, cuando estuvo al lado de George lo saludo de un beso en la mejilla.-
-Hola George, que precioso echarpe-
-Hola preciosa, si esta bello, también te traje uno para ti, pero de color negro como a ti te gusta-
-En serio- Marían se coloco roja su amigo siempre hacia ese tipo de cosas que a ella terminaban por incomodar.
-Mm.- era Ginny quien estaba al lado de ellos dos y que miraba con picardía- veo que trajiste regalos para tus dos mujeres importantes eeehhhh-
-George también se sintió avergonzado pero luego se acerco a Hermione y la abrazo mientras Ron le lanzaba una mirada de odio, también le entrego un regalo – En realidad le traje a todas las mujeres hermosas de esta casa, por eso no te traje a ti- cuando termino de decir le saco la lengua, pero tuvo que esquivar una cuchara que su hermana menor le había lanzado, para luego de eso entregarle también su regalo.
Todos se sentaron en la mesa que era bastante grande y conversaban en amena charla, cuando terminaron de comer Marían se ofreció a lavar los platos y convenció a George para que la ayudara, mientras estaban en la cocina comenzaron a conversar, ella necesitaba contarle sobre Neville.
-Tengo algo que contarte-
-¿Se trata de un hombre?-
Marían lo quedo mirando, se impresionaba de cuanto la conocía y ella lo quería por eso.
-Si se trata de un hombre, pero a que no sabes quien-
-Mm. déjame adivinar, tu no sales mucho a menos que contemos los domingos que vienes acá o las veces que nos juntamos a comer, en las dos ocasiones estoy yo a tu lado por lo que no se te acercan otros hombres, así que debo suponer que es alguien del colegio y por lo que se en el solo te juntas con Firenze, ¿me vas a decir que te ligaste con un centauro?- las ultimas palabras estaban cargadas de burla. Marían se quedo mirando a su amigo con los ojos muy abiertos para luego comenzar a reír y terminar lanzándole un vaso con agua.
- Como se te ocurren, no tonto. Te acuerdas de lo que te conté que había pasado con Neville cuando llego al colegio.
-Si, si me acuerdo, especialmente me acuerdo que dijiste que te pusiste nerviosa y que lo esquivabas-
-Bueno si, pero el otro día nos quedamos conversando con una botella de ese vino añejados que compre y me pidió disculpas por lo impertinente que había sido y por que se había dado cuenta que me había perturbado-.
- A si, Mm. mira tu que atento esta-
- Si, no te parece lindo-
- ¿Me estas preguntando si encuentro atractivo a Neville?-
- No tonto, te digo que es lindo su gesto-
-Ah, si bonito gesto pero a mi me parece que lo que encuentras lindo no es necesariamente su gesto o me equivoco- los ojos del joven se veían inquisidores pero con chispas de alegría, se sentía feliz de volver a ver a su amiga nerviosa por un hombre, por que el había estado con ella desde hace tres años y si bien había tenido algunas conquistas jamás era algo que la preocupara, incluso cuando estuvieron juntos por casi un año, era mas por compañía que por ser pareja, a ella no le interesaba tener pareja y él sabia que era por ese hombre por el cual ella había entregado lo mas preciado y que aun no olvidaba.
Marían lo miraba fijamente con los ojos entrecerrados, se comenzó a acercar mas al joven y lo cogio de la cintura abrazándolo – Celoso Gorgy-la cara de ella era todo coquetería, George también la abrazo por la cintura- sabes que no, pero existe un problema preciosa-
Marían lo miro con cara de pregunta- ¿Qué?-
-Me parece que a Luna le gusta Neville-
La mujer se tocaba el mentón con una de sus manos mientas bajaba la cabeza –Mm. no había pensado en eso, ¿tendría que hablarlo con ella?
-Claro que tendrías, aunque se supone que ella esta con William, ese chico que conocieron en vacaciones-
-Si, pero si a ella le gustaba Neville desde hace mucho yo no voy a……. No siguió hablando pero una tonalidad roja marco sus pómulos-
-¿No vas a que? Termina la frase, no seas cobarde-
-Nada, nada, no me molestes- Marían se separo del joven alejándose, pero a medida que ella se apartaba el iba acercándose cada vez mas en forma bastante peligrosa.
-Ya Gorgy déjame tranquila, no voy a decirte-
-Entonces tendré que torturarte- y una risa maquiavélica salio de la boca del joven quien como león cogio con una mano las muñecas de su amiga y con la otra comenzó hacerle cosquillas. Los gritos se escuchaban por la casa por lo cual todos acudieron a ver que pasaba y los encontraron a los dos en el suelo, George sobre Marían haciéndoles cosquillas y ella pateando desesperada a todos lados. Ninguno de los dos se había dado cuenta que tenían espectadores hasta que el joven sintió que alguien tiraba de su oreja
–George Weasley, ¿que crees que estas haciendo con Marían?, era la voz enojada de Molly Weasley quien había salvado a Marían y humillaba a George.
-Mamá, suéltame que ya no tengo 10 años-
-Pues no lo parece, mira que hacerle cosquillas a Marían, cuando sabes que a ella no le gustan-
-Gracias Molly-dijo eso mientras se levantaba y se arreglaba la ropa
-Nada de eso a ti también debería retarte, mira como quedo la cocina-
Marían bajo la cabeza y dio un suave lo siento y con un movimiento de varita la cocina quedo nuevamente limpia. Todos se reían de muy buena gana de los dos jóvenes y ellos solo agachaban la cabeza sin poder contestar a las burlas.
Ya entrada la tarde Marían se comenzó a despedir, tenia que ir al colegio a preparar sus clases para el día siguiente, pero antes quería hablar con Luna así que decidió que se iría a su casa en Londres y luego desde allá a Hogwarts.
- Señores Weasley me voy, tengo cosas que hacer-
-Si, ya nos dimos cuenta que cosas tienen que hacer ustedes dos- era Ginny que aun se reía del reto anterior que les habían dado tanto a George como a Marían.
Marían miro con odio a Ginny, pero luego se sonrió, Harry miro a Marían sabiendo que se venia una venganza trato de arrancar pero las palabras de Marían fueron mas rápidas.
-Ah Ginny al lado de donde vivo se desocupo un departamento para que lo vayan a ver ustedes dos, ¿No querían irse a vivir juntos?-
Ginny quedo blanca y Harry también los demás se miraban, Mientras los dos jóvenes se reían al salir se podían escuchar los gritos de la madre de Ginny que les pedía explicaciones.
-Que mala eres- decía George sin poder dejar de reír-
-Ellos se lo buscaron no les gusta molestarnos, bueno me vengue además es mentira, que yo sepa no piensan irse a vivir juntos ¿O si?
El joven subió sus hombros en señal de no saber- ¿Donde vas ahora?
-Voy a ver a Luna, espero no molestarla-
-Yo también espero eso, ¿Te acompaño?
-Si, esta bien, así nos tomamos algo para el frió, se nota que se acerca navidad-
Los dos desaparecieron y aparecieron en el baño del departamento que Marían compartía con Luna, salieron tratando de ver si no importunaban, pero al llegar al living se encontraron con Luna leyendo, ella levanto la cabeza al ver a los dos llegar.
-Hola chicos ¿como estuvo la cena?-
-Bastante buena como siempre ¿Y tu cita que paso?-
-Ya termino, yo tenia cosas que hacer, ¿Qué los trae por acá, tu no tienes que trabajar mañana Marían?- La cara de Luna era de intriga por que generalmente su amiga no iba los domingo al departamento.
-Si lo que pasa es que necesito preguntarte algo, es que me están coqueteando pero quiero saber si a ti te gusta…-
- No Marían a mi no me gusta George- la respuesta dejo a los presentes con la boca abierta-
Marían le lanzo un cojin mientras Luna se reía- Chistosa, que les dio a todos por molestarnos hoy- mientras decía eso se giraba hacia su amigo que la miraba con una gran sonrisa.
- Quería saber si a ti te gusta Neville, por que luego de lo que te conté el otro día me esta empezando a gustar-
Luna la miraba con sus grandes ojos y se tocaba el pelo mientras miraba fijamente a la mujer, señal de que estaba pensando que decir
- Mm. me gustaba mientras estuvimos en Hogwarts, pero el no me tomaba en cuenta, además ahora estoy con William, así que no te preocupes-
-En serio, lo dices de verdad Luna, porque no me gustaría interponerme-
-No no lo haces así que disfruta, además nunca te había visto realmente interesada en otro hombre que no fuera amigo tuyo- dicho eso miro a George que estaba bastante interesado mirando los dibujos del libro que momentos antes estaba mirando Luna, cuando escucho su nombre levanto la cabeza para preguntar -¿Qué?-
-Nada George, Luna que le gusta molestar, pero lo bueno es que me dio permiso para portarme mal con Neville.
-Ah si, mira tu que bien, por fin te podremos ver sonriendo nuevamente, cierto Luna-
-Si, es verdad-
-Oye yo me rió siempre-
Los dos jóvenes se miraron; George miro a Marían y le dio una tierna sonrisa, -Si pero no es una risa sincera, nosotros que te conocemos lo sabemos, es momento que vuelvas a ser feliz date una oportunidad-
-Marían los miro y sonrió –eso es lo que estoy tratando de hacer- fue a la cocina y volvió con unos chocolates calientes, lo que se hubo tomado el suyo les dio un beso en la mejilla a cada uno y por medio de la red flu llego a la oficina de Mcgonagall.