Disclaimer: Soul Eater y sus personajes son obra y propiedad de Atsushi Ohkubo. Yo solo soy una fan que disfruta escribir historias sobre ellos
Espero que les guste
-Te amo.
Soul levantó la mirada de la revista que tenía en sus manos y miró desconcertado a Maka, quien se hallaba frente a él.
-¿Qué?-preguntó, inseguro.
-Que estoy enamorada de ti…desde hace mucho tiempo-repitió, valientemente.
Se quedaron en silencio. Maka no se veía afectada, de hecho estaba increíblemente tranquila, algo extraño si se tiene en cuenta que estaba confesándose. En cambio, Soul se quedó paralizado.
Estaba sorprendido y a la vez no. Hacía tiempo que él se había dado cuenta de los sentimientos de su compañera, pero era un tema del cual ninguno de los dos se había referido nunca y que seguramente debían discutir en algún momento.
Pero no esperaba que fuera así de pronto, de la nada.
-Maka, yo…-la miró con tristeza-no siento lo mismo por ti.
-Lo sé-dijo ella, sonriendo cálidamente.
¿No era ese el momento en que las chicas empezaban a llorar y salían corriendo? ¿por qué le sonreía si la estaba rechazando?
-Sabía que dirías eso, ya estaba preparada para escucharlo…-empezó a decir Maka mientras se sentaba a su lado-es solo que tenía que decírtelo, no podía dejar esto pendiente por mucho más.
-En serio, lo siento-dijo Soul, mirando el suelo sin saber qué hacer.
-No tienes que disculparte, no has hecho nada malo.
-Hacer que mi compañera, no…mi mejor amiga se sienta triste no es exactamente algo cool-dijo. Podía sentir como la onda de alma de Maka se había encogido por la pena.
-Te estoy hablando en serio Soul. Yo ya había aceptado que nunca me verías de esa forma y de verdad puedo vivir con eso-suspiró-si me ves triste es por otra razón.
-Estás actuando extraño, ¿qué es lo que sucede?-preguntó él.
Maka se quedó callada y la sintió temblar. Esto lo puso en alerta y empezó a sentir miedo. Tenía un mal presentimiento.
-¡Maka!, ¡ya dime!
-Ya no podemos ser compañeros.
Soul se quedó paralizado por aquella horrible sorpresa. Tenía que ser una broma, Maka nunca lo dejaría así.
-¿Pero de qué estás hablando? ¿acaso es porque no te correspondo?
-¡No!, si fuera por eso hace mucho tiempo ya que estaríamos separados.
-Entonces… ¿por qué?
-Es por nuestra resonancia, Soul-su voz sonó frágil y eso llegó a dolerle a él también-tú sabes que ya no existe, se ha ido y no va a volver.
Soul se sintió horrible ante la gran verdad que su amiga estaba diciendo. Ellos habían sido un gran equipo desde los doce años, habían conseguido dominar múltiples técnicas de gran dificultad y estaban orgullosos de eso. Pero durante el último tiempo y sin saber por qué, no lograban establecer una resonancia estable. Maka apenas lograba sostenerlo sin quemarse las manos y el solo intentar hacer el Caza-brujas terminaba en catástrofe.
Por eso no habían podido recolectar almas en varios meses y por más que entrenaran y se esforzaran nada parecía mejorar la situación.
-No digas eso, es solo una mala racha, ya verás que lo conseguiremos y volveremos a patear traseros de kishines.
Maka negó con la cabeza.
-Ya no podemos seguir engañándonos. Shinigami-sama ha sido muy paciente con nosotros durante estos meses pero ya ha sido suficiente.
-¡Que se joda Shinigami-sama!
-¡Soul!-exclamó, enojada-¿es que no lo entiendes?
-No, no lo entiendo porque estoy seguro que podemos superarlo.
-Soul, nuestro deber como estudiantes de Shibusen es crear una Death Scythe- dijo Maka, mirándolo a los ojos-¿cómo va a lograrlo un equipo que no puede luchar? No podemos seguir siendo compañeros por puro capricho.
-Pero Maka…-sin querer empezó a temblarle la voz.
-Y tú tienes un potencial increíble para convertirte en una Death Scythe, no puedo permitir que te quedes estancado por mi culpa.
-Deja de decir estupideces. Eres la mejor técnica de guadaña que tiene Shibusen, nadie es más apto que tú para convertirme en una.
-Quizás lo fui pero ya no más…debes buscar otro técnico Soul. Tienes montones de solicitudes, de seguro encuentras a alguien.
-No…
-Por favor…entiéndelo.
-¿Y qué vas a hacer tú? ¿ponerte a ordenar la biblioteca de Shibusen o qué? no pienso dejarte sola.
-Eso no va a pasar-su mirada se tornó aún más triste-aunque es algo de lo que debo hablarte también.
-¿Y ahora qué?-preguntó, con temor.
-Conoces la situación que Shinigami-sama tiene en Europa, ¿verdad?
Soul asintió, sin comprender que tenía que ver con ellos.
-La población de kishines se está descontrolando allá y con eso han surgido cada vez más armas y técnicos sin guía-explicó-no todos pueden venir a estudiar aquí y ya casi no damos abasto, por lo cual decidieron instaurar una sede de Shibusen en Europa.
De golpe adivinó lo que iba a decir a continuación y habló antes de que ella confirmara sus temores.
-Tú… ¿vas a irte?
-…Sí
-Entiendo, necesitas alejarte de mí-su voz sonó vacía.
-Claro que no, te mataré por pensar eso-dijo Maka, enojada-¿de verdad crees que yo querría abandonarte a ti y a los demás?
-Entonces, ¿no es algo que hayas elegido por tu cuenta?
-No, me transfirieron porque me necesitan allá por una misión especial.
Volvió a callarse durante unos momentos sabiendo que iba a herir mucho a su compañero al decirle aquello.
-Cada vez hay menos guadañas en el mundo, pero apareció una en Francia…-tomó aire-y lo asignaron como mi arma.
Nuevo silencio.
-¿Un chico?-preguntó.
-Sí, por lo que supe es un poco mayor que nosotros, pero su sangre de arma despertó recientemente y necesita de un técnico con experiencia que le ayude a controlar y aprender a usar sus poderes-respondió Maka-me eligieron a mí diciendo lo mismo que tú. Que soy una de los mejores técnicos de guadaña de Shibusen.
-Deberían de enviar a Stein, él sabría entrenarle-dijo Soul, amargado.
-Yo no haré eso, seré su compañera para poder manejarlo y quien va a entrenarnos va a ser mi madre, ella aceptó ser profesora en la sede de Europa.
Un entrenamiento con Kami Albarn, eso sí era algo por lo que mataría cualquier técnico de Shibusen y sin que ella tuviera que decirlo, Soul ya sabía que era una oportunidad única.
Aquella sensación desagradable y dolorosa en su pecho empeoró. Todo lo que Maka le estaba diciendo era difícil de asimilar y aún más de aceptarlo.
No era fácil de aceptar que una de las personas más importantes para él ya no podría luchar a su lado, se iría al otro lado del mundo y lo peor es que ya había encontrado otra arma, alguien que ocuparía su lugar y que ella convertiría en Death Scythe en vez de a él.
-No quiero que te vayas-le dijo Soul-por favor, no te vayas Maka.
Notó que los ojos de su amiga empezaron a ponerse llorosos antes de que ella lo abrazara.
-Tampoco quiero irme, pero es lo mejor para los dos.
En ese momento, antes de sentir que algo se quebraba en su interior, deseó haberla amado.
Porque así quizás habría podido convencerla de que no se marchara.
-Te vamos a extrañar mucho, Maka-le dijo Tsubaki, al borde de las lágrimas.
-Yo también los extrañaré demasiado-dijo Maka, con expresión triste.
-Tienes que avisarnos apenas llegues, ¿de acuerdo?-le pidió Kid.
-Y manda muchas fotos, queremos ver cómo te va por allá-dijo Liz.
Patty se acercó y le dio un pequeño y adorable peluche de jirafa a su amiga.
-Es para que no te sientas sola en el vuelo-le dijo, sonriendo.
-Gracias Patty-le devolvió la sonrisa y se abrazaron tiernamente.
Lo que no se esperaban era que el siguiente abrazo fue una brutalidad en equipo de parte de Black Star y Kid, quienes atraparon a Maka y la apretaron hasta lo indecible.
-¡Ya suéltenme, idiotas! ¡Van a quebrarme!
-Es que te queremos, Maka-le dijo Black Star.
-Y te vamos a echar mucho de menos-secundó Kid.
Eso fue suficiente para que empezara a lagrimear y sus dos amigos se desesperaron.
-¡Ya basta!, nos harás llorar a nosotros también, estúpida-le dijo Black Star.
-Hay que ver lo poco cool que pueden llegar a ser-dijo Soul, encogiéndose de hombros.
Eso hizo reír a Maka, quien se secó las lágrimas y se acercó a su amigo. Él extendió sus brazos sonriendo y la rodeó con ellos sin querer soltarla. Fue un abrazo más largo que los de los demás y dejó a todo el mundo con una sensación triste.
-Prométeme que vas a esforzarte en clases y que vas a derrotar a muchos kishines-le pidió ella.
-Haré lo que pueda-le dijo Soul y sonrió de lado-espero que puedas sobrevivir sin mí, no creo que seas capaz de entender el acento escocés.
-Oh, cállate-le dijo ella riendo mientras le daba un ligero golpe en el hombro.
En ese momento, los altavoces avisaron sobre el vuelo de Maka y supieron que ya era tiempo de separarse.
-Ya es hora…-dijo ella, con un nudo en la garganta.
Todos asintieron, le dieron un último abrazo y le ayudaron con las maletas.
-Los quiero muchísimo a todos y siempre serán mis amigos-les dijo ella-no sé cuándo vuelva pero lo haré.
-Y echaremos un buen partido de básquet-dijo Black Star.
-Sí, claro-sonrió-adiós chicos.
La vieron alejarse y luego desaparecer por los pasillos del aeropuerto.
-Debiste haberla besado, Soul-dijo Liz-así se habría quedado.
Soul sonrió tristemente. Era algo que ya había pensado, pero que era incapaz de hacer.
El teléfono empezó a sonar, distrayendo a Soul del increíble disco de jazz que había adquirido hace poco.
Pero si eran las doce y media de la noche, ¿Quién lo llamaría a esa hora?
Solo podía ser una persona… y eso hizo que casi corriera a contestar.
-¿Hola?
-¡Soul!-la voz de Maka lo llenó de calidez y alivio.
-Vaya, sí que suenas feliz de oírme, ¿es que acaso no puedes vivir sin mí, Albarn?
-No seas tonto-rio-pero si te echo horrorosamente de menos, llevo horas sin dar un Maka-chop y tengo síndrome de abstinencia.
-¿Llegaste bien?
-Sí, mi madre me estaba esperando en el aeropuerto y me trajo a mi nueva casa-respondió-estoy agotada, el viaje fue horrible.
-¿Y cómo es Escocia?
-Por lo poco que he visto mientras viajaba en el auto y lo que puedo vislumbrar por la ventana es precioso, bastante distinto-le contó-hay demasiado verde por todas partes y hace mucho frío.
-Vaya, y acá estamos con más de veinticinco grados.
-Sí, es muy extraño-concordó Maka-pero sabes, igual me siento como en casa porque puedo ver un cementerio por la ventana y al lado hay un parque infantil.
-Tal y como en Death City-rio Soul, divertido.
-Típico de Death City.
-Y… ¿qué harás hoy? Supongo que por allá es de mañana…
-Sí, creo que dormiré un poco y mi madre dijo que debíamos ir a la DWMA-así le llamaban a la escuela de Shinigami-sama en Europa- para, eh…conocer a mi arma.
-Bueno…eso es fantástico, me alegra que todo esté bien por allá-dijo Soul, fingiendo alegría.
-Sí, supongo-dijo ella, con duda-pero es incómodo, no conozco a este chico de nada y ya tengo que vivir con él e ir a un entrenamiento intensivo juntos. Preferiría que me dieran un poco de tiempo para conocerlo.
-No te preocupes Maka, si resulta ser un pervertido o un psicópata solo tienes que llamarme e iré a partirle el cuello.
La escuchó reír.
-Gracias.
-¿Gracias por qué?
-Por seguir siendo mi amigo a pesar de todo.
-Nunca podría dejarte Maka-le dijo, sin pensar.
-Por supuesto, porque eres tú el que no puede vivir sin mí-ya podía imaginarse su sonrisa burlona-ya debo irme, estoy muy cansada y me arrastrarán durante toda la tarde de un lado a otro.
-Bueno, cuídate.
-Tú igual, Soul, te llamaré cuando pueda, adiós.
Se quedó un rato ahí quieto, con el teléfono aún en la mano. Miró el departamento y se sintió tremendamente solo y vacío.
Sí, le hacía falta Maka.
Después de la llamada de Maka y algunos cuantos mensajes, no supieron de ella durante al menos dos meses.
Shinigami-sama los tranquilizó diciéndoles que se hallaba entrenando con su nueva arma en un lugar que los mantenía incomunicados, pero que estaba bien y no debían preocuparse.
Solo que Soul no lograba tranquilizarse.
Aunque no quería aceptarlo, esperaba que Maka y su nueva arma no lograsen resonar sus almas y ella tuviera que volver a Death City, pero por lo visto se había equivocado.
Y a él no le había ido nada bien buscando un técnico. Tampoco es que se hubiera esforzado mucho en eso, es más, era Stein el que más insistía en que consiguiera uno e incluso le había presentado algunos aspirantes, pero ninguno de ellos había sido capaz de sostenerlo.
Estaban todos en la sala durante el descanso sentados en diferentes puestos conversando cuando se dieron vuelta al escuchar un chillido proveniente de Tsubaki.
-¡Un mensaje de Maka!-exclamó mirando su celular.
Fue rápidamente rodeada, más que nada por las chicas quienes se encontraban más cerca de ella.
-¿Qué dice, qué dice?-preguntó Patty, entusiasmada.
-Es para todos-dijo ella, sonriendo y empezó a leer-Hola chicos…
"Espero que todos estén bien. Siento mucho no haber podido llamarlos ni enviarles mensajes durante tanto tiempo pero la falta de señal en las montañas me lo impidió.
El entrenamiento estuvo bien, fue bastante duro pero hemos avanzado muchísimo. También pasaron muchas cosas pero les contaré los detalles luego.
Los extraño muchísimo, este lugar es bastante aburrido sin ustedes, pero al menos tengo a mi arma Alex, para que me haga compañía que si no me volvería loca.
Les mando muchos abrazos y Maka-chops (para quienes lo merezcan, claro)
Con cariño
Maka
PD: Alex también les manda saludos, les adjunto una foto para que vean que me está cuidando bien"
-¿Foto?-preguntó Liz, alarmada.
-¡Déjame ver!-exclamó Kim, quitándole el celular a Tsubaki-¡Dios! bastarda con suerte, ¿por qué siempre le tocan los chicos sexys a Maka?
Soul levantó una ceja, interrogante y ella le devolvió la mirada con cara de pocos amigos.
-No te lo tengas tan creído Evans, solo lo dije porque muchísimas chicas en Shibusen insisten con el tema.
Él suspiró y se acercó para ver la foto cuando Kim le devolvió el celular a Tsubaki. En ella salía Maka con el cabello atado en una cola de caballo y una gran sonrisa mientras sostenía la cámara con una de sus manos. A su lado salía saludando un chico de cabello negro y ojos castaños, parecía tener unos dieciocho años (dos más que Maka) y no se veía ni lo más mínimamente incómodo o tímido al lado de su nueva compañera.
-Parece simpático-dijo Tsubaki.
-No tan impresionante como yo, por supuesto-dijo Black Star.
-Se ve que se llevan bien, al menos podemos estar más tranquilos al saber que no es un imbécil que la esté molestando-dijo Kid.
-Aun así me cae mal-refunfuñó Patty, para sorpresa de todos- si no fuera por él Maka estaría aquí.
-No es su culpa Patty-dijo Tsubaki y luego miró a Soul-ni de nadie más, ¿ok?
Soul asintió silenciosamente y se dio vuelta para salir de la sala. Sabía que Maka se enojaría con él si supiera que se estaba saltando las clases, pero no estaba de ánimos para quedarse sentado dos horas viendo a Stein diseccionando algún pobre animal en extinción o a la profesora Marie destrozando la mesa de un martillazo.
La verdad es que incluso estaba dudando de permanecer en Shibusen.
Si Maka no le hubiese extendido su mano pidiéndole ser su compañera él nunca se habría quedado ahí. Ella era una pieza fundamental en la nueva vida que había emprendido al abandonar a su familia, pero ya no se encontraba ahí y se sentía un poco perdido sin ella.
Al fin y al cabo es el técnico quien guía al arma.
-Soy tan patético-masculló pateando una piedra.
Pero no. Se quedaría. Le había prometido a su amiga esforzarse. Ella confiaba en que él se convertiría en una Death Scythe y si era necesario luchar sin un técnico para recolectar almas, lo haría.
Así, cuando volviese a verla, podría mirarla a los ojos con orgullo.
Y además tenía a ese grupo de locos por amigos. Con ellos siempre tendría un hogar y un sitio al cual volver y sentirse acogido.
Sonrió. Ellos también habían sido un regalo por parte de Maka.
Ahora solo tenía que esperar. Así sería él quien le diese la bienvenida a Maka cuando volviera a casa.
Porque sabía que ella también cumpliría su promesa.
Aclaraciones
*Este fanfic sigue la cronología del animé, pero también tiene elementos y referencias del manga, para que no se confundan con algunas cosas que sucederán en los capítulos siguientes.
Y aparezco con un nuevo fanfic~
Últimamente he leído demasiadas historias de Soul y Maka, es más, tengo una más guardada que subiré próximamente y no os preocupéis, también estoy terminando el capítulo 7 de My pretty girl
Este iba a ser un oneshot, pero creo que da para más porque tengo demasiadas escenas en mi cabeza que debo poner en la historia. De todas formas será más cortita, o eso espero.
Bueno, ojalá les haya gustado :)
Muchos abrazos y nos vemos en el próximo capítulo