.
.
.
.
*holaminombreesdrama*
.
.
La palabra más maravillosa
.
.
Habían palabras que solo tenían sentido, sí era de él de quien se hablara, incluso si eran comunes, o sacándolas del contexto principal en sí. Una podría ser: magia…
Era magia la forma en que lo sabía, como una primera mirada a los ojos: tan fuerte como el miedo mas profundo que pudiera atacar el corazón, la razón o el alma, incluso mas que eso, estaba tan dentro que parecía que siempre había pertenecido a ti y era tan poderoso como para romper el mundo entero, o quizás… al menos… mi mundo.
La caprichosa sensación y emoción de plenitud al hundir mi cabeza en su pecho, tan reconfortante era escuchar su corazón, el toque de las manos que llenaban mi cuerpo de mariposas revoloteando y que hacia que me temblaran las piernas, demasiado parecido a la risa en pleno apogeo, como daba ese estremecimiento a mi mismo corazón, la forma en que a su lado, todo era sentir, la alegría absoluta, lo maravilloso que era el mundo con tan solo que me dejara seguir a su lado, quien le daba un lugar a mi corazón, un hogar…
Yo podría entregar mi corazón sin el menor de los miedos, la promesa del romance puro en la eternidad, aun si no era del tipo en donde te llenas de cosas; aquellas que podrían romperse en un momento, su sola presencia lo era… todo.
O quizás confianza, ¿Estoy demasiado enamorada?, de pronto lo más lógico era hacer lo irracional, las diferencias no se notaban, o incluso si estas se manifestaban de la forma más bruta me parecía que aquello solo me hacía adorarlo más. La palabra siempre era mas poderosa que nunca, me sentía destinada a ello y no tenia el menor miedo de lo que el futuro podría deparar, incluso si mi vida no bastaba lo suficiente, el tiempo que me tocara a su lado seria bienvenido, porque verlo a los ojos lo era sentir, porque tan solo el roce de las manos calentaba cualquier frio en mi alma, destruía el miedo de una forma tan rápida, que me hacía temblar… podría sonreír la vida entera.
Creo que siempre lo quise de esta forma, creo que fue destino el no tener miedo, el obligarme a ser valiente, aun notando que todo apuntaba hacia lo que estaba mal. Las razones que nos separaban me hacían reír, ¿Por qué llorar?, si sentir esto era lo mas maravilloso, era mío y de él, aunque a ojos de quien sea que no lo conociera como yo, diría que la única enamorada soy yo.
Su manera de ser estaba bien, porque conocer aquello que era únicamente mío, restaba todo lo demás. Frialdad y calidez, él era la contradicción perfecta de ambos, ambivalencia completa.
Incluso si el me recordaba que era una chiquilla tonta, no importaba tanto, ¿verdad?, jamás seré perfecta, y aquello no quitara que no cambie un día, mañana o quien podría saberlo.
Realmente nada importaba más, ni si quiera el orgullo, sabia que cualquier cosa que no fuera el amor que le tenía, acabaría temprano o más tarde, solo existía una única cosa que era fuerte.
El me apretó con mas fuerza, y su piel desnuda, en contacto con la mía, hacia que donde fuera que me tocara se sintiera una tormenta…
A su lado yo solo podía sentir, y ese era el mejor regalo que nadie podría quitarme jamás.
Sin embargo, a veces parecía que un: te amo¸ no parecía ser suficiente, no parecía dar la suficiente justicia.
- Eres mi vida – pronuncio el de manera ronca, y yo cerré mis ojos y atesoré la forma en que las notas de su voz estremecían mis tímpanos.
- y tu eres la mía -.
Hacer el amor era perfecto, era la mezcla de todo, pero repasar cualquiera cosa que sentía lo era aún más, siempre era feliz a su lado, su recuerdo me bastaba en los momentos más difíciles.
Cuando abrí mis ojos, pude ver que se acercaba a besarme, con los parpados entre abiertos, luego los cerramos.
La eternidad podría resumirse, en tan solo un segundo tan solo: sintiendo; a su lado.
Podría olvidar mi propio nombre, pero sin duda alguna, había una palabra aun mas maravillosa que era capaz de resumir todo lo que pensaba y sentía por cada fibra de mi ser, y esa era su nombre: Sesshomaru.
.
.
.
Creo que ha quedado claro que soy una romántica… en fin, un beso y saludos al lector que pase por aquí.
.
.
.
*holaminombreesdrama*
.
.
