¡Hola!
Titulo: El problema con la venganza.
Declaración: Ni Naruto ni sus personajes me pertenece, solo el argumento de esta historia.
Pareja: Sasusaku(?)
Advertencia: Ninguna, pero puede que el rating suba. Universo alterno.
Sobre la historia: Es un drama centrado en la corelación entre cuatro personajes principales y los fantasmas que a carga cada uno.
"Sasuke."
Dicho hombre miro a su lado sin girar su cabeza. El rubio camino hacia él, se paro a su lado. La brisa marina levantaba la bastilla de su larga y negra capucha, junto con las mangas de su tunica anaranjada, juntos, Miraron como las olas del mar golpeaban los laterales del barco, su viaje hacia Konoha había comenzado la noche del día de ayer.
"¿Que es lo que esperas sacar de todo esto?" Dijo Naruto después de un rato.
"Venganza." Dijo Sasuke llanamente.
"No deberías dejar que tus emociones nublen tu lógica." Este comentario hizo que el Moreno mirara con perfidia a su compañero.
"No lo hago."
"Lo haces, estupido teme que solo se guía por sus emociones." Dijo el rubio.
El joven Uchiha hace una mueca, un músculo en su mandíbula se contrae "Yo no actúo estupidamente. Al menos no me quedo esperando a que alguien mas busque mis respuestas."
Naruto se encoge de hombros dándole la espalda al viento.
"A diferencia de ti, me importa el honor de mi familia. A diferencia de ti, voy a encontrar a esa persona. A diferencia de ti, le arrancare el corazón del pecho y lo quemare frente a la tumba de mi padres." Continúo Sasuke entre dientes. "A ti, ni siquiera te importa averiguar quien mato a tu familia o porque."
"Dudo que los muertos puedan apreciar tu perseverancia." Dice Naruto en silencio.
Sasuke le mira fríamente. "Usura Tonkachi." Se da la vuelta repentinamente poniéndose a contra viento, la brisa despeinando su negra cabellera. "Lo hare, con o sin tu ayuda."
"Claro, olvidaba que tu realmente no me necesitas." Dice Naruto secamente. "Solo soy un remplazo."
"Hn. Y aun así sigues aquí."
Si, aun así Naruto seguía ahí, secretamente esperando ver el día en el que Sasuke se olvide de su tonta venganza y reinicie su vida.
Pero el teme seguía buscando problemas. Su mente estaba atrapada en otro lado, en algún lugar. Y tristemente, Naruto sabía, él no podía, no lograría, no le correspondía salvarlo esta vez.
Porque era amor.
El amor lo retenía en el pasado. Lo lastimaba. Lo hacia odiar y el odio lo hacia querer venganza. Naruto sabia muy bien, que después de la venganza… no hay nada.
Pero seguía ahí. Porque sasuke era su escape, su mundo.
Porque él conocía al teme y sus razones, era como un hilo en su alma, lo que lo conectaba con la gran red de este mundo. Atrévete a intentar cortarlo y será tu fin, córtalo… y será el mío.
Y como el teme, Naruto preferiría morir antes que admitirlo en voz alta o enfrente de alguien –entonces Naruto hablara, en una voz en la que planea verter toda su comprensión, apoyo y preocupación:
"No hagas nada estupido como es tu costumbre."
Sasuke hará como que no oye, pero mantendra sus oídos abiertos. Siempre abiertos para la persona que lo alejo de la soledad tanto tiempo.
Porque el Usura Tonkachi no era solo un remplazo, era como un hilo en su alma, lo que lo conectaba con la gran red de este mundo. Atrévete a intentar cortarlo y será tu fin, córtalo… y será el mío.
Y al igual que el Usura Tonkachi, preferiría morir antes que admitirlo –así que solo contestará como siempre, como el arrogante y egocéntrico Uchiha que es:
"Hn."
Porque el lazo que los une es profundo, temible y extraño.
"Este hombre que buscas." El hombre hablo repente, sacando a la chica de sus ensoñaciones matutinas "¿Sabes donde encontrarlo?"
"En realidad no… pero lo hare, así sea lo ultimo que haga." La chica se sentó sobre el mugriento colchón mientras atraía sus rodillas hacia su barbilla, rodeándolas con sus brazos. "Uzumaki Naruto... Así sea lo ultimo que haga, veré su vida transformada en un infierno. El mismo infierno que yo sufrí por su causa."
Lejos de causarle shock, tanto rencor dentro de una persona tan pequeña, a Itachi, su comentario o más bien la forma en la que lo dijo mueve las riendas de su corazon, llevándolo al pasado.
"Hablas igual que él. Tan hermosos y engreídos los dos... tan iguales." Dice Itachi sonriendo.
Sakura solo lo veía sonreír de esa forma cuando hablaba de su hermano. Sus ojos, eternamente negados de luz y sumergidos en el gran abismo solo derramaron lagrimas dos veces mientras ella estuvo con él. Cuando les dijeron que su hermano menor había muerto y cuando supieron que cabía la posibilidad de que siguiera vivo.
"¡Cierto! Itachi-san debe encontrar a ese hombre ¿Verdad?" vaya cambios de humor los de ella.
"Si. Supongo que ahora ya ha de serlo. Cuando nos separamos era solo un chiquillo."
"Sakura." Dice Itachi seriamente, la sonrisa desvanecida de su rostro. "Es muy probable que al llegar allá, nuestros caminos se vean separados."
"… Lo se." Acepta Sakura, deseando por otro lado con toda su alma no hablar del tema.
La vida sin Itachi... simplemente no...
Pero bien sabia que no podía ser, sus metas eran tan distintas, la de él apuntaba a algo mas noble, a un ser amado. La de ella no hacia más que hundirse en el odio y la desesperanza.
Pero es por eso que ella hará algo noble. Antes de partir caminos Sakura se hizo un juramento.
Itachi había hecho tanto y había cuidado de ella como nadie lo había hecho desde que su padre murió. Entonces ella hará lo que sea, lo que sea, por proteger lo más preciado para Itachi-san: Su hermano.
Sakura… la pequeña luz de su vida. Si Itachi pudiera ver la contemplaría todo el día. Solo por ella seguía aquí, vivo, respirando y ahora en camino de encontrar a esa otra persona tan importante en su vida.
Sakura lo hizo posible de una y mil formas. Y aunque lo que realmente deseaba era ver a su cerezo libre de las cadenas de la ese rencor que la carcomia.
Desde que se conocieron ella había permanecido a su lado como una fiel sirvienta, como su guía pero más que nada como una compañía. Entonces él hará algo, lo que sea, para que ella obtenga lo que mas desea en esta vida: Venganza.
Largo y cómodo silencio paso entre ellos. Habían vivido lo suficiente y por suficiente tiempo como para depender tanto el uno del otro… y amarse el uno al otro, después de todo ambos eran lo único que tenían.
Y era por eso que pasaban cada hora, cada minuto, cada segundo juntos, intentando prolongar lo inevitable.
Hacia calor. Itachi intenta encontrar a tientas el vaso lleno de agua en la mesita a su lado, Sakura se apura a acercarlo a su mano y por un milisegundo sus yemas se tocan.
Algo insignificante para quien no ha sufrido lo que ellos, para quien no sufrió buscando el contacto humano como agua en un desierto, pero Sakura, que dependía de ello e Itachi, que se aferraba a ello…
Lo sintieron...
Y eso se sintió como…
Amor.
Tan profundo como el amor entre hermanos.
Tan temible como ese rencor inexhausto.
Y tan extraño como la ironía de sus destinos.
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Cadenas de Amargura.
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Esos sentimientos…
"Uzumaki-sama, hemos llegado."
Las cinco personas dentro del camarote voltean para mirar al pequeño y escuálido paje frente a ellos.
La chica pelirroja que no hace unos segundos estaba cómodamente sentada en un brazo del sillón donde se encontraba el Uchiha lo conduce amablemente hacia la salida. Mientras Sasuke se incorpora de su cómodo y lujoso sillón, apagando un cigarrillo en la mesa.
"Esta bien, Naruto prepara todo." El rubio asiente y sale del camarote, adentro los otros tres sirvientes arreglan todo para desabordar.
Al salir del lugar y admirar el paisaje tan familiar, solo una cosa pasa por la mente del joven Uchiha. Lo que ocupa casi todos sus pensamientos.
Su sola razón de ser, la de su venganza.
"Hermano…"
Esos deseos….
"¡Itachi-san, itachi-san! ¡Creo que ya hemos llegado!" La joven pelirrosa saltaba de arriba abajo intentando abrirse paso entre la gente fuera del cuartucho que le asignaron en el barco. A los de clase tan baja no se les permitía subir a cubierta hasta que los riquillos hubiesen bajado.
Itachi se incorpora de la cama, mientras el fino olor a mar mezclado con bosque y hierba fresca se cuela por los orificios de su cuarto. Un olor vagamente familiar y un solo recuerdo "Sasuke…"
"Itachi san ¡Vamos, vamos! Ya podemos subir." Sakura lo jalaba de la mano para subir largar y viejas escalera hasta que el sol brilló en sus rostros.
Aun ciego sus ojos tenían la habilidad de apreciar cuando un rayo de luz los acariciaba. Era tan diferente a las sombras.
"¡Mira Itachi-san! ¡El mar! ¡Vamos a verlo!" Tan emocionada estaba Sakura que ni siquiera recordaba que él, simplemente no podía ver nada. Itachi rió para si mismo ante la ingenuidad de la chica. Fue cuando oyó los pasos de la chica alejándose que su mente entro en pánico.
"¡Espera Sak…" Al dar la vuelta para intentar detenerla, choco contra alguien y sin querer se aferro a su brazo para mantener el equilibrio. Cuando sintió aquel brazo tensarse y a la gente alrededor callarse abruptamente supo que había cometido un grave error.
"¡Lo siento mucho señor!" Grito mientras su voz se volvía más chillona y se tiro al piso para disculparse.
"Hn."
"N… no era mi intención… yo… soy ciego… no era mi intención." Se disculpo una y otra vez Itachi en un afán de parecer ridículamente sumiso y mortificado. Si lo detenían por una insignificancia como esta todos sus planes se habrían ido al diablo.
"Tienes suerte de ser ciego. De otra forma ya estarías muerto por tal desacato." Con eso dicho el joven Uchiha sacude el polvo imaginario de su brazo y se dirige al pálido chico a su lado. "Suigetsu, busca al Usura Tonkachi, es hora de partir."
Dicho esto el orgulloso joven extiende su mano a la pelirroja y bajan juntos del barco sin prestar la más minima atención al pobre ciego en el piso.
Han hecho, sin lugar a dudas….
"¡Agh!" Grito Sakura al impactarse contra algo.
"¿Eh?..." Naruto voltea instantáneamente al sentir un golpe en su espalda. "Oh perdona pequeña, no te vi ahí ¿Estas bien?" Dice mientras le tiende la mano a la niña cubierta por un sucio abrigo tirada en el suelo. Ella la acepta con vergüenza y asiente para contestar la pregunta del chico.
"Que bien." Palmea la cabeza de la niña. Sobre el gorro añadido manualmente a su andrajoso abrigo.
"Hey tu ¡Ya es hora!" Se oye gritar a Suigetsu desde el otro lado. Naruto suelta un suspiro de pesar y se da la vuelta para mirara a la chica de nuevo.
"Bueno, talvez nos veamos después, cuídate mucho pequeña."
Y se aleja dejándola anonadada. Con un sentimiento difícil de explicar, uno que no había sentido en mucho tiempo.
Gratitud.
Nunca nadie, aparte de su padre e Itachi la había tratado tan bien ¿Quién habría sido ese chico rubio? Por su vestimenta se podía decir que venia con los de clase alta.
Jamás imagino que alguien de esa clase pudiera ser tan amable.
"¡Sakura!"
"¿hmm?" Oír su nombre a la distancia la saca de sus cavilaciones. Recordándole donde y con quien estaba. "Oh, Itachi-san ¡Aquí estoy!" Grita para luego dirigirse corriendo a su lado.
"¿Estas bien?" Le pregunta Itachi mientras busca su rostro con las manos. La preocupación palpable en sus palabras.
"Si. Estoy b…"
Sin darle tiempo a reaccionar Itachi la aprisiona entre sus brazos oprimiendo los pulmones de Sakura hasta dejarlos casi sin aliento. "Gracias al cielo… Nunca permitiré que algo malo te pase, nunca. Primero muerto." Pero a Sakura no le importo la incomoda falta de oxigeno, Ni siquiera que alguien pudiera verlos, su mente solo podía pensar en todo lo que este abrazo transmitía. Los sentimientos que Itachi difícilmente sabía expresar.
Cuanto se preocupaba…
Cuanto la atesoraba…
Cuanto la necesitaba…
"… Itachi-san." lo abrazo de vuelta. Mientras una lagrima de suma alegría y sumo temor rodó por su mejilla.
…Cuanto se necesitaban.
"Primero muerto."
Esta no seria una despedida fácil.
Que sus destinos se reunieran… una vez más.
