Disclaimer: Los personajes son propiedad de L.J. Smith. Hago esto sin fines de lucro. Por favor, no publiques esto en ningún lugar sin mi autorización. Gracias.

Solo... no mueras.

Velocidad de reacción. A eso se resume todo.

Pero, por otra parte, ¿quién ha dicho que quiero reaccionar? ¿Para qué estar consciente de una realidad tan… tan absurda?

Porque no había ningún término capaz de describir mejor esto, porque esto no podía estar sucediendo.

¿Así que este iba a ser el fin? ¿Las cosas acabarían de esta forma? ¿Acaso me había perdido alguna parte relevante de la historia? Hasta dónde sabía Stefan no era de las personas que arrojaban los brazos a la primera oportunidad. Entonces, ¿qué ocurría ahora?

Ahora mismo se le antojaba dejarse atrapar por los escurridizos brazos de la muerte. Él, un inmortal.

¿Había algo mal en retorcida forma de ver las cosas que no se percataba de la ironía? ¡Era un maldito vampiro! Pero aquello obviamente no se colaba en su mente.

Nunca lo había visto rendirse, Stefan siempre pelea. ¿Y ahora no? ¡Pelea, maldición!

No es mucho lo que te exijo. Debería hacerlo sólo por pensar en aquellos que lloraran tu muerte.

Porque, hermanito, otra cosa que nos diferencia es que, si tú mueres, habrá varios que lo lamenten profundamente, y si yo muero, ¿qué importancia tendrá para el mundo?

Dicho así, ¿por qué me pides algo tan idiota como dejarte ir completamente? No te dejare morir aquí como un perro, si es lo que pretendes.

¡Y el motivo no te importa en absoluto! Si fueras tan inteligente como aparentas lo sabrías bien ya.

Creo que quizás haces esto por Elena, no me sorprendería. Que ingenuo eres, ¿te ha garantizado alguien que van a encontrarse? ¿Estás seguro de lo que vas a encontrarte más allá? ¿Por qué arriesgarse? ¡Piensa! Y recuerda la promesa que le hiciste, esa de que íbamos a cuidarnos mutuamente. Yo estoy tratando de cuidarte ahora, coopera un poco también. Milagros no puedo hacer, ¿podrías darme un poco de predisposición? Es lo que ella querría, y lo sabes. No te mientras a ti mismo. No seas patético, por favor.

Miro a mi lado. 'Bonnie', la muchachita humana de cabellos rojos, observa con el puro tormento asomando en los ojos tu cuerpo malherido. No necesito ser un genio para saber que no está de acuerdo con tu decisión tampoco, también sé que si los demás que vinieron con ella la oyeran pensaría exactamente lo mismo.

Pero eso no te importa, claro que no. Ya no te das ni una sola esperanza, te mantienes firme y tratas que comprenda esa estúpida forma en la que ves la situación. Eres tan fastidiosamente terco a veces.

¿Y yo soy el egoísta? ¿No te das cuenta verdad? Lo sabía.

Escucha Stefan, solo voy a pedirte una cosa, y será lo único que te pida alguna vez: No mueras.

¿Puedes hacerlo?

Edit: 26/03/10