¡Hola a todos! Como verán: hacía tiempo que no escribía u actualizaba algún fic. Bueno, aquí les traje éste, que se basa en Krilin y Yamcha, de como sus puntos de vista pueden ser distintos al abordar un tema como la soltería. Espero que lo disfruten y estemos en de empezar:

1. La historia y personajes "Dragon ball Z" pertenece a don Akira Toriyama.

2. Hay algunos capítulos de los que citaré temas de música (en inglés u español), rspetando la autoría propia de los compositores y/o autores. Te recomiendo que escuches, ya que el fic quedará más ad-hoc con esa notilla de música.

Los bocinazos ensordecen, los atochamientos sacan de quicio y para más remate, un taxi colisiona con un camión que se pasó una luz roja. Por suerte sólo fue un accidente leve, pero aún así Krilin llevaba más de media hora en el autobús atestado de gente sin lograr avanzar. Todos los pasajeros estaban agobiados, ya que el autobús no había avanzado ni siquiera 10 metros. Krilin, algo ofuscado suspira y se arma de paciencia, ya que había venido a la ciudad del Norte por trabajo, pues hacía alrededor de nueve meses que no trabajaba por dedicarse por completo a su entrenamiento físico para la batalla contra Cell. Lucía un jeans y una polera de piqué celeste, zapatos café y gafas para el sol. Comenzaba a impacientarse, el autobús no avanzaba, y la cita que había leído en el periódico estaba que vencía. No aguantó más y se acerco a la puerta, toca el timbre y el conductor abre las puertas para que baje. Él baja, obvio, no podía quedarse estacando al medio de un colosal atochamiento típico de un día lunes. Mira su reloj y se lamenta, la cita del periódico había vencido hace media hora atrás.

_ ¡Rayos!-Pensó- ¿Cómo me fui a demorar tanto? Si me vine lo más pronto que pude y perdí más de media hora en el autobús… Eso de ocultar nuestros poderes para no levantar sospechas no me gusta mucho. Para cosas como esta (buscar trabajo) creo que sí debiese utilizarlas.

Krilin busca en sus bolsillos si es que tiene alguna cápsula. Malas noticias: no hay nada, ni siquiera un par de zenies para comprar algo mientras sigue rondando por la ciudad. Otra vez se lamenta, ni siquiera un par de monedas para llamar al maestro y decirle que se demorará en llegar a casa.

_ ¿Ahora que haré? Ni siquiera encontré un trabajo para no llegar con las manos vacías- Meditaba al caminar por aquella ciudad- Si sólo tuviese unos ingresos para mantenerme y darme algunos lujos sería feliz: así podría comprar mis cosas y no depender de la caridad de nadie. También, con un poco de dinero podría ir en busca de…

Suspirando, Krilin corta la frase para no pensar tanto en ella. Estaba tremendamente ilusionado por C-18, pero él mismo aterrizaba, el mismo apagaba sus ilusiones, sabía que una chica así era algo tan alejado para él, pero mantenía una fe de, a lo menos, poder verla uno de estos días. Al continuar caminando, pasa cerca de un lujoso edificio donde entran y salen carros espectaculares y ejecutivos con trajes elegantes. Krilin se detiene y comienza a mirarlos, con cierta nostalgia vuelve a suspirar. Se da cuenta que tras bello edificio hay un estadio colosal del equipo local, pero no lo toma demasiado en cuenta, sólo continúa caminando sin emitir un solo comentario.

_ Si me hubiese dedicado a estudiar…- Golpeándose la cabeza con tres palmadas- Tendría un apartamento de aquellos, tendría un carro deportivo, tendría una mujer como…

Otra vez C-18 colma sus pensamientos. Pareciera que Krilin estuviera cada vez más y más ilusionado con ella. Sacude su cabeza, tratando de no pensar en ella, pero le es imposible ya que ella vuelve otra vez a sus pensamientos y no puede sacarla de su cabeza.

_ ¿Cuándo te volveré a ver, C-18?- Pensó Krilin- Dime cuando…

Mientras pensaba, dos bocinazos lo distrajeron totalmente, como si hubiese aterrizado otra vez. Miró hacia la avenida y divisó un carro deportivo rojo con vidrios cromados que no se le hacía familiar. No lo tomó en cuenta y continuó caminando, pero se percató que el carro rojo venía a la misma velocidad que él caminaba, y se apegaba cada vez más a la acera.

_ ¡Hey Krilin! ¿Qué haces aquí?

Esa familiar voz lo hizo girar inmediatamente, era Yamcha, que estaba conduciendo aquel carro deportivo. Krilin lo iba a saludar pero se dio cuenta que su amigo no venía solo, que estaba acompañado por una preciosa chica de cabello rubio y ojos turquesa.

_ Oye Krilin ¿Por qué no subes y nos acompañas?- Pregunta Yamcha que se apoya su codo en la ventana de su carro.

_ Eh ¡No, gracias! Ya me marcho a Kame house…muchas gracias- Responde Krilin para no interferir

_ Ah, hombre… ¡Sube, así me acompañas a dejar a Stacy al gimnasio!- Propone Yamcha que se quita sus gafas y las deja sobre su cabello- Así también hablamos un momento ¿Qué dices?

Krilin se acerca a la puerta del carro, que se sube automáticamente. Krilin se sorprende, nunca se había subido a uno de esos. Se instala en el asiento trasero y observa como si hubiese descubierto algo nuevo. Yamcha voltea y le da un apretón de manos a su colega.

_ Tanto tiempo sin verte, Krilin ¿Qué haces en la ciudad del Norte?- Pregunta Yamcha que maneja el carro a una velocidad no tan permitida por la ciudad.

_ Bueno… la verdad es que yo…- Algo avergonzado, ya que al ver a su amigo, el carro y la hermosa chica que viene con él se cohíbe.

_ ¡Dime hombre! ¿A algo habrás venido?- Pregunta Yamcha mientras le sonría a su chica que le da un beso sin importarle que esté K con ellos.

_ Vine por trabajo- Algo sonrojado- Creo que el dinero me es escaso y debo encontrar la manera de solventar mis gustos.

_ ¿Por eso te cohíbes? Vaya, yo pensaba que era porque te había juntado con…-él mismo se interrumpe, ya que la última vez C-18 se fue sin darle muchas esperanzas a Krilin. Yamcha guarda algo de silencio- ¡Disculpa! Por cierto: Ella es Stacy Whitten, mi novia. Bombón, él es Krilin, un amigo de años.

_ Encantada de conocerte Krilin- Saluda la chica haciéndole un gesto con la mano-…Amor, creo que hemos llegado, ¿Podrías ir a dejarme a la puerta?

_ Como digas, preciosa- Comenta Yamcha abriendo la puerta, apresurándose para recibir a la chica, ayudándola a salir del carro.

Krilin observa en silencio la escena: Yamcha toma de la cintura a la mucha, que lo atrapa con sus brazos y le da un acalorado beso sin importarle quien pase a su lado por la calle. Yamcha le responde a la chica y le dice un par de palabras al oído, haciendo que ella también le responda de manera sensual. Yamcha se despide y regresa al carro, sonriendo. Krilin observa a su amigo, no luce para nada formal: un short largo de surfista, de colores blanco y azul. Una sudadera blanca sin mangas ajustada al cuerpo que resalta por la piel morena de éste y hawaianas de hombre.

_ Pensar que el baseball lo ha enriquecido y le permite vivir a su antojo. Estoy seguro de que Yamcha tiene más dinero que aquellos ejecutivos que salían de aquel hermoso edificio… ¡Vaya! Si sólo me hubiese dedicado a algún deporte masificado, de seguro también tendría dinero y popularidad con las chicas- Pensaba Krilin, sonriendo y sonrojándose al imaginarse rodeado de chicas- Yamcha tiene a la chica que quiere: sólo basta ver su última conquista… ¡Qué vida tienes, viejo!

_ ¿De modo que viniste por trabajo hasta aquí?- Le pregunta Yamcha que ingresa al carro otra vez- Dime: ¿A qué te quieres dedicar?

_ Bueno…La verdad es que necesito dinero para mis gastos y…

_… ¿Para invitar a salir a C-18?- Le interrumpe Yamcha haciendo partir el motor para salir del estacionamiento.

_ Es verdad…-Asintiendo con la cabeza algo silente- …También quiero dinero para salir con ella.

_ Pues… ¡Haberlo dicho antes!- Dándole un palmetazo a Krilin en la espalda- Oye ¿Te gustaría jugar baseball?

_ No es mala idea…- Tomándose el mentón- Pero ¿En dónde?

_ Supe que los Red Sharks del Sur necesitan jugadores. La paga es buena, la fama igual ¿Qué te parece? A parte que pasa a ser inmediatamente una figura pública: todo lo que hagas puede ser utilizado en tu contra- Dando una gran carcajada – Bien… y cuando me refiero a lo de figura pública me refiero a ser totalmente conocido, contratos millonarios, fiestas, mujeres, mujeres y muchas y bellas mujeres.

Krilin sonrió, claramente era una forma fácil y rápida para él de obtener dinero que le ayudara a comprarse cosas y quizás para ahorrar para un par de años más. Lo de las chicas lo sonrojó, ya que no se caracteriza por ser muy sociable con las mujeres; aún se cohíbe ante una chica bonita si se le acerca a hablar. Pero, de pronto, se acordó de Maron, y pensó que si escogía un trabajo como aquel sólo tendría chicas de ese estilo y no como la que él quería.

_ No, gracias Yamcha…prefiero otra clase de empleo- Lo dice mirando por el espejo retrovisor- Tu sabes que eso de la fama no va conmigo, más bien soy un tipo quitado de bulla y más hogareño.

_ Como quieras- Responde Yamcha al virar a la izquierda para entrar a estacionarse a aquel bello edificio donde Krilin se había detenido anteriormente- Eso es lo único que te puedo recomendar. La verdad es que a esto me dedico yo, a lo que me de el baseball y sus regalías.

_ ¡Hey!- Casi espantado- No me digas que vives acá ¿Cierto?

_ ¡Obvio!- Responde Yamcha levantando su pulgar derecho- Con lo que gano en los Titans me puedo dar estos lujos. ¿Le temes a los ascensores?

_ No ¿Por?

_ Vivo en el piso 15, para que te acostumbres a la idea de subir tantos pisos ¿Eh?- Comenta Yamcha al bajar del carro- Toma: vivo en apartamento 1503, es el de puerta blanca.

Krilin recibe las llaves del apartamento que su amigo le lanzó, agarrándolas hábilmente. El calvo sale del auto y va directamente al ascensor, el cual marca "S -3". Entra y ve como su amigo comienza a sacar su bolso y ropa deportiva de entrenamiento. Krilin entra al ascensor y presiona "piso 15" en un tablero electrónico del ascensor. Éste comienza a subir y el tablero marca piso por piso que ha subido. En silencio, Krilin mira el habitáculo que esta cubierto de espejos.

_ ¡Qué vida! Llegar del trabajo a las 12 AM para irte a descansar hasta la tarde. Disfrutar de una siesta y volver al estadio o gimnasio. Creo que pensaré la propuesta de Yamcha, en una de esas me acostumbro al estilo de vida---

El ascensor para en el primer piso, abriéndose las puertas de acero, dejando entrar a las personas, que eran mayoritariamente mujeres ¡y Qué tipo de chicas! Cual de todas era más bella o lucía más linda. Rubias, morenas, pelirrojas ¡En fin! Lo hombres eran mayoritariamente ejecutivos que regresaban por algún documento o de vuelta a casa. Krilin los observa, algunos iban en silencio o flirteaban con las chicas. Volviendo en sí, él mira el panel y ya va en el piso 10, sólo quedan tres personas, él incluido. Se baja un hombre de cabello canoso que lucía un tarje Armani negro, perdiéndose por el pasillo. El ascensor continúa su viaje, quedando sólo él con una chica de cabellos castaños que venía muy silenciosa. Krilin veía algo aburrido: subir tantos pisos por un ascensor no es un buen panorama. Llega la piso 15 y sale de ahí, estaba aburrido por el trayecto. La vista es espectacular: sólo hay 3 apartamentos en ese piso, y uno de esos es el 1503. La vista de la ciudad es increíble, ya que un gran panel de vidrio te permite ver una panorámica de 270 grados a la ciudad. La decoración era perfecta, de un elegante color blanco de las murallas, acompañada de plantas de interior que hacían lucir a aquel lugar como uno de los más lujosos de la ciudad. Un silencio que llamaba al relajo y a la buena vida, se vio interrumpido por una voz que, cuando Krilin escuchó, sintió como un golpe de corriente en su corazón. Pero aquella sensación no fue cálida para nada.

_ Cariño, te llamo cuando llegue a tu clínica ¿Te parece? … ¿Cómo que en 15 minutos más? Mi carro no es lo suficientemente rápido para llegar ahí… Bien, tienes razón cariño, besos.

_Esa voz- Pensó Krilin totalmente paralizado- Esa voz es de… ¡es de Maron! ¿Qué diablos hace aquí ella? No me digan que vive en este edificio… ¿Cómo puede ser tan pequeño el mundo?

Krilin sintió que aquellos pasos femeninos se acercaban. Sin duda era ella: vestía un traje rojo ajustadísimo al cuerpo, con tacones y traía sus gafas puestas. Krilin se escondió tras unas plantas de ornamentación, no quería que ella lo viera. Si bien hacía tiempo que no tenía noticias, no le era un grato recuerdo, Krilin aún no olvidaba que ella lo había dejado por un tipo de dinero. Eso le rompió el corazón y lo mantuvo alejado de las chicas por mucho tiempo. Una vez ella salió del lugar, Krilin aparece otra vez en el pasillo, algo desconcertado.

_ ¿Qué te pasó, hombre? Parece que hubieses visto al mismo diablo- Le habla Yamcha al ver que su amigo aún no ha ingresado al apartamento.

_ ¡No me asustes!- grita Krilin - ¡Oh! Disculpa, es que yo me…

_ ¿Te topaste con Maron?- Pregunta Yamcha acertando.

_ ¿Cómo no me dijiste que ella vive aquí?- Aún desconcertado Krilin-Podías habérmelo contado.

_ Tranquilo Krilin, pensé que no era de importancia- Abriendo la puerta del apartamento- Por favor, pasa.

_ Pero ¿cómo?- Lamentándose el calvo- Casi me caí de la impresión cuando la vi a ella. Dime ¿Por qué vive aquí? ¿Qué diablos hace en este edificio?

_ Ya que insistes… - Comenta Yamcha que se dirige al freezer por dos cervezas- Maron vive con Toru Hasbe, el cirujano plástico más caro de esta ciudad. Son novios hace 2 años atrás. Siempre me topo con ambos en los estacionamientos o cuando me voy a entrenar al estadio ¿Contento?

Krilin, desilusionado, se deja caer en aquel cómodo berguere que tenía Yamcha en el living de su apartamento. Mirando al techo recuerda aquellos momentos que tuvo con Maron antes de que ella lo cambiara por otro. Si bien había pasado el tiempo, aún sentía Krilin nostalgia por ella.

_ ¿Desde cuando que vives acá Yamcha?- Pregunta Krilin recibiendo la fría cerveza que traía su amigo.

_ Hace tres años- Dando un gran sorbo a la botella de cerveza- Desde que me separé con Bulma yo compré este apartamento, que es más grande que el que tenía anteriormente…Éste es más grande, con mejor vista y mucho más caro… Pero ¿A quién le interesa eso?

Krilin comprendió que su pregunta no había sido muy asertiva. Guardó silencio, inocentemente había abierto una herida que su amigo aún no daba por cerrada. Culpándose en su interior, Krilin, cabizbajo, mira detenidamente a su amigo que quizás donde tenía su vista con tal de que los recuerdos no lo abrumaran tanto. Yamcha, con una sonrisa melancólica voltea y va por el control del equipo de sonido, para escuchar algo de música. Busca entre sus bolsillos sacando un teléfono celular modernísimo, las llaves de su carro y un par de zenies que estaban totalmente arrugados.

_Yamcha…-Interrumpe Krilin aquel molesto silencio- Lo lamento, yo no quise…

_ Por favor, amigo…No te preocupes, es sólo que yo…- Mirando aún por el enorme ventanal hacia la ciudad- … Hay cosas que cuestan quitarse de la cabeza…Pero ¡al mal tiempo, buena cara! ¿Crees eso?

Krilin asintió con la cabeza y rió, si bien Yamcha no se veía muy cómodo, siempre tenía algún comentario que cambiaba situaciones incómodas, haciendo reír al resto. La sonrisa de su amigo era distinta, pero no por ello él se echaría a morir.

_ Oye, viejo ¿Ella es tu novia?- Preguntándole Krilin- No te enojes amigo, pero es una chica muy bonita.

_ ¿Stacy?- Volviendo Yamcha en sí- Stacy es hermosa, sabe lo que quiere en su vida.

_ Disculpa, pero ¿Hace cuanto la conoces? Si se puede saber, claro.

_ Hace casi cinco años atrás- Tomándose Yamcha su mentón para recordar- Ella llegó como porrista al equipo, y pronto se convirtió en la primera bailarina del equipo. Ahora está estudiando aerobics para tener su propio gimnasio y esas cosas ¡Tú sabes! Cosas de mujeres.

_ ¿Cinco años?- Krilin saca cuentas mentales- La conoces hace bastante tiempo.

_ ¡Hey! Somos novios sólo hace dos años- Comenta rápidamente Yamcha para desviar cualquier cálculo- No me malinterpretes.

_ No, no te preocupes –Deshaciéndose en disculpas Krilin- Yo y mis preguntas idiotas.

_ Tranquilo… Mira, me iré a dar un baño. Dejo mi teléfono aquí. ¿Lo puedes contestar?- Acota Yamcha yendo directamente al baño- Si es algún sponsor, dile que hoy no atiendo a nadie. Si es Stacy, dile que nos juntamos en la noche… Si quieres utilizar el teléfono del apartamento, la clave es 5033 ¿Te parece?

_ Como digas. Llamaré a Kame house para decir que estoy acá- Tomando el auricular, marcando la clave.

Krilin espera el tono para comunicarse con el maestro, pero nadie le responde. Vuelve a marcar y nada. Krilin espera al otro lado del teléfono. De pronto, el teléfono de Yamcha, que estaba sobre aquella elegante mesita de centro comienza a vibrar. Krilin no le toma importancia: era sólo un mensaje de texto. Continúa esperando por comunicarse con Kame house, parece que no hay nadie en casa. El teléfono celular vuelve a vibrar, pero de manera más insistente. Krilin corta la llamada y deposita el auricular en su lugar, poniéndole atención al teléfono móvil. Cual sería la sorpresa de leer en la pantalla del aparatito el nombre de "Bulma, llamando".

_ ¿Bulma?- Sorprendido Krilin - ¿No se supone que uds. dos terminaron hace tiempo?

El teléfono continuaba vibrando, Krilin dejó que siguiera así. Ya eran 4 llamadas perdidas de Bulma. De pronto, ella dejó de llamar. Krilin toma el teléfono móvil en sus manos y observa en la pantalla las llamadas perdidas. Un mensaje de texto llega al teléfono y, Krilin, curioso como un gato, presiona la pantalla para ver que decía el mensaje.

"Yamcha ¿Por qué no me contestas?...

¿Acaso estás molesto

por lo del Domingo?"

_ ¿Domingo?- Pensando Krilin- No me digas que…

Hurgueteando por el menú de mensajes, Krilin logra ver más mensajes de texto de Bulma en el teléfono de Yamcha. Más curioso que antes, Krilin los lee, sorprendiéndose más por el contenido de éstos.

1. "¿Qué tiene ella que no tenga yo?"

2. "Y pensar que por esa zorra me dejaste…"

3. "Gracias por preocuparte de mi"

4. "Me siento sola, te necesito"

5. "Tu sí sabes tratar a una mujer como yo"

¡Basta!- Se autoinculpó Krilin- Eso no me corresponde, no puedo ser tan chismoso y…

Continuó averiguando el contenido, pero ahora el de la bandeja de salida de los mensajes. Totalmente embobado, Krilin presiona la pantalla, apareciendo los mensajes enviados a Bulma como respuesta.

1. "Ella no me utiliza como tú lo haces"

2. "No quiero recordarte quien fue primero infiel…"

3. "Si me necesitas, llámame"

4. "No quiero ser tu pañuelo de lágrimas cuando él se vaya"

5. "Sólo hago lo que tu me pidas, preciosa"

_ Jajajajajaja- Riendo para su interior, dejando el teléfono móvil encima de la mesita- ¿Aún se siguen viendo? Esa te las tenías guardadas, Yamcha…jajajajajajaja

_ ¡Krilin!- Le pide Yamcha en voz alta desde el baño- Pídete unas pizzas para almorzar. El número está en el freezer pegado con una figurita imantada. ¡Que sea una vegetariana y la otra a tu gusto!

_ ¡O-OK! – Responde Krilin nervioso- ¡Como digas!

Krilin marca el número y hace el pedido. Yamcha sale del baño vestido con jeans y una camisa ajustada blanca, con su cabello en puntas. Krilin toma un periódico que estaba bajo la mesita de centro y comienza a hojearlo. No pasan más de 5 minutos y el pedido de comida llega al apartamento. Yamcha sale a recibir al chico de los pedidos, entregándole los zenies que había dejado en la mesita. Krilin recibe las pizzas, dejándolas sobre la mesa. Yamcha saca dos platos más cubiertos para almorzar. Se sientan en ambos extremos de la mesa a comer, tomando con cuidado los cortes de pizza.

_ Así que buscando trabajo…Bien, sólo te puedo decir lo de los Red Sharks, nada más- Dice Yamcha llevándose un trozo de pizza a la boca.

_ Quiero algo más calmado, algo no tan bullicioso. Se que me iría bien, pero prefiero un trabajo más discreto- Responde Krilin tomando un trozo de pizza.

_ Mira… No se si lo habrá encontrado, pero lo llamaré… El dueño de los Titans, el señor Salvatore necesita un guardaespaldas. OK, él tiene cinco, pero son unos alfeñiques al lado nuestro. Los tipos son unos gorilas, pero no tienen la más remota idea de defender a alguien. Creen que con su estatura intimidan a alguien y no ¿Te parece si lo llamo y le consulto?- Propone Yamcha buscando su teléfono móvil.

_ ¿De veras?- Con los ojos brillosos- ¡Haberlo dicho antes!

Yamcha habla con el tipo por teléfono y le hace la consulta pertinente. Krilin escucha cada palabra que su amigo pregunta, confirmando la cita de Krilin para mañana siguiente. Yamcha apaga el teléfono y se acerca a la mesa para continuar comiendo.

_ Bien Krilin, mañana a las 8:30 en el estadio de los Titans. Debes ir tal cual, deberás darle una paliza a los cinco gorilas que tiene Salvatore ¿Qué difícil para ti?- Comenta Irónico Yamcha, que hace reír a Krilin- ¿Qué me dices? ¿Aceptas?

_ ¡Cómo no!- Feliz Krilin por la noticia- Eso es pan comido.

_ Hey Krilin… ¿Te parece si esta noche nos vamos de parranda?- Propone Yamcha- Así celebramos tu trabajo y…

_ ¿Estás loco?- Sorprendido Krilin- Me debo levantar temprano para llegar bien a la cita con tu jefe, no debo dar una mala impresión.

_ Oye, Salvatore va siempre a la discoteca donde voy. A ese le gustan las chicas más que a mí, siendo que ya es un viejo zorro, pero con mucho dinero- Riendo Yamcha- Así te lo aprovecho de presentar para que lo conozcas ¿Qué dices?

_ Pero…- No convencido Krilin.

_ ¡Nada de peros!- Responde Yamcha- Mira: así te distraes un rato y conoces a algunas chicas. Además: a donde iremos es el mejor lugar para conocer chicas guapas.

_ Sabes que sólo me interesa una mujer- Acota Krilin.

_ ¿Sabes? El mundo es tan pequeño, que… en una de esas, capaz que te topes con C-18 por ahí. Quizás hoy, mañana ¡qué se yo! ¡Vamos! Así nos distraemos un momento.

Pensándolo, Krilin acepta la propuesta de la juerga para la noche. Yamcha aplaude la decisión de su amigo, dándole un palmetazo en el hombro en señal de aprobación. Krilin y Yamcha no saben lo que les deparará esta noche. Ni se imaginan las situaciones que les sucederán.

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