Milán, Italia 1918
Alice se encontraba detrás de un camión junto a otras enfermeras de su edad o unos años menores. Las chicas que trabajaban en el frente no tendrían más de 14 o 16 años y tenían que esperar a que les entregaran los materiales para curar a la brevedad las heridas de los soldados que no paraban de llegar en improvisadas camillas.
-Agua, Gasas y Vendas-masculló la jefa de las enfermeras cuando le entregó los materiales a Alice quien tuvo que disimular su nerviosismo ante los soldados ya que le temblaban las manos.
La joven no sabía por donde empezar, habían tantos heridos que gemían de dolor y necesitaban ayuda urgente que se sintió algo desorientada al ver llegar a algunos soldados con heridas de bala graves y uniformes totalmente ensangrentados. Era increíble pero con solo 16 años ya se había acostumbrado a los horrores de la guerra y trabajaba como enfermera desde que tenía 14 años.
Alice no era italiana pero vivía en ese país desde que tenía 11 años. Su familia y ella decidieron mudarse desde Estados Unidos en busca de mejores oportunidades laborales, sin embargo, la Gran Guerra se había desatado de pronto y quedaron en la ruina por un mal negocio en el que su padre había invertido más dinero del que debía por lo que la joven tuvo que empezar a trabajar como enfermera en diversos hospitales y frentes de guerra acostumbrándose a presenciar las heridas y el sufrimiento ajeno.
-¡Enfermera!- le gritó un soldado que estaba cerca de una ambulancia-¡Aquí se necesita una enfermera!
Alice caminó hacia él con cuidado para que el jarro de agua no se diera vuelta, aun se sentía algo aturdida y cuando miró dentro de la ambulancia se dio cuenta de que estaban hacinados unos seis hombres en sus respectivas camillas y que no había mucho espacio.
-No hay espacio-se quejó Alice al darse cuenta de que el pequeño lugar que quedaba fue ocupado por un herido que dejaron en el piso.
-Has lo que puedas-dijo el soldado ayudándola a subir a un taburete que quedaba cerca de la puerta- e intenta que la mayoría llegue vivo al hospital.
La puerta se cerró y Alice miró a su alrededor a través de la única luz de un faro al final de la ambulancia, el olor ahí dentro era nauseabundo y decidió sentarse un momento en el taburete a la vez que deseaba poder estar en otro lugar. No le gustaba para nada los gemidos de dolor de los pobres hombres heridos ni el olor de la sangre que llenaba cada rincón.
Mientras pensaba pudo sentir el gorgoteo de la sangre de uno de los heridos, se abrió paso como pudo hasta llegar a él y vio como la sangre caía ahora como un rió a través del vendaje que llevaba. La joven decidió cambiar sus vendas y lavar la herida pero apenas lo hiso la herida volvió a sangrar con fuerza. Se sintió tan mal por no poder ayudar a ese chico que decidió dedicarse a atender a los otros enfermos.
Comenzó a lavar sus cuerpos y cambiar sus vendajes por unos limpios y nuevos, los soldados parecían sentirse mejor cuando Alice los atendía y hablaban de algunas cosas sin importancia para hacer un poco más ameno el trayecto al hospital. Dejó para el final a un hombre que estaba en la camilla del rincón algo alejado de sus compañeros, no sabía si debía cambiar las vendas ya que tenía miedo de agravar la herida sangrante que tenía en el cuello.
Se acercó a él con cuidado y comenzó a limpiar su rostro y desenredar un poco su rubio y rizado cabello. Era guapo bajo toda aquella mugre. Muy guapo pero la distrajo un momento la herida que seguía sangrando en su cuello. Cada vez que intentaba quitar su vendaje él gritaba de dolor haciendo que Alice se sintiera mal por provocarle ese sufrimiento.
-Tranquilo, vas a salir de esta-susurró Alice acariciando la mejilla del joven con suavidad.
-No estoy tan seguro de eso señorita-murmuró él atrapando la mano de la joven a medida que abría los ojos.
Los ojos de él eran tan azules que Alice no se dio cuenta de cuando fue que se perdió en ellos, ambos se miraron a los ojos durante unos minutos hasta que ella decidió cambiar su vendaje de una vez por todas. Cuando ella terminó de limpiar la herida del joven ya habían llegado al hospital y unos soldados ayudaban a bajar las camillas de los heridos.
A medida que bajaban su camilla el joven rubio y de ojos azules que la habían hipnotizado hiso el ademán de tomar su mano como si quisiese quedarse junto a ella. Alice suspiró y se sentó un minuto viendo como entraba una enfermera rubia,casi de su misma edad, muy hermosa y cuyo uniforme tan blanco le hiso recordar que el suyo estaba lleno de sangre y barro.
-¿Cómo estás?-le preguntó la joven con una sonrisa-¿has venido sola desde el frente?
-Hola, estoy bien-respondió Alice sonriendo-, podría ser peor.
-Mi nombre es Rosalie pero puedes llamarme Rose-dijo la joven mientras limpiaba un poco la ambulancia-¿tu como te llamas?
-Soy Alice
-Tienes mucha suerte-sonrió Rose-en este hospital están las enfermeras más simpáticas y los soldados más guapos, estoy segura de que te encantará quedarte y trabajar aquí.
-Rose-Alice no sabía por qué le preocupaba tanto la salud de aquel joven de ojos tan azules como el mar y cabello de un dorado intenso similar al sol-¿sabes a donde llevan a los hombres que venían en esta ambulancia?
-Los llevan al el ala este porque por lo que vi casi todas son heridas graves-dijo Rosalie poniéndose de pie-¿no me digas que ya te has enamorado de uno? No te culpo como dije antes en este hospital la mayoría de los pacientes son muy atractivos.
Alice y Rosalie caminaron hacia el hospital para ver a la jefa de las enfermeras para que le indicara a la primera sus horarios y deberes, sin embargo, la joven chica no podía dejar de pensar en aquel hombre tan guapo y cuya mirada hipnotizante la había hechizado por completo. A ella no le quedó más que desear que continuara con vida y que pronto pudieran volver a verse.
hola c: yo quería actualizar un fic pero no sé que le pasa a la pagina y como quería escribir algo me decidí a hacer un nuevo fic, dudo mucho que a alguien le haya gustado pero bueno gracias por leer y nos vemos en otro fic ya que no sé si continuarlo o dejarlo asi :/ espero que esten bien y gracias n.n
