NOTAS DEL AUTOR:
(Basado en el anime de Nanatsu no Taizai de A-1 Pictures, y en el manga creado originalmente por Nakaba Suzuki y publicado por Kodansha)
Nunca he sido muy propenso a hacer Drabbles, por no decir que nunca los he hecho antes realmente. Pero quise participar en este Reto de Septiembre: "Querida Estación..." del foro "Mar de Joyas Escondidas" de , para adentrarme un poco en el fandom de Nanatsu no Taizai, que es de los pocos animes de la actualidad que realmente me ha cautivado, pero que parece que aún no ha llegado a una gran cantidad de fans, al menos de habla hispana. Si no han visto esta gran serie, deben de verla, enserio.
Pues bueno, el tema del reto es hacer cuatro Drabbles enfocados en un personaje (en esta ocasión Helbram) con la temática de una estación (en este caso el verano) usando cuatro palabras como el tema de cada Drabble. En verdad no estoy muy seguro de si me salieron bien, no estoy acostumbrado a intentar decir algo con tan pocas palabras, pero veamos qué tal.
Sin más, espero los disfruten.
I
Ropa Ligera
Si la curiosidad fuera un pecado, sería precisamente éste el que me definiría. La curiosidad fue lo que me llevó a la perdición la primera vez, y aun así no logré librarme de ella al volver a la vida. Curiosidad sobre el futuro, sobre los demonios y la gran destrucción que crearan al llegar… Pero sobre todo, curiosidad por estas efímeras y extrañas criaturas que son los humanos. Siempre fueron el centro de mi fascinación, incluso antes de la tragedia.
En estos momentos precisamente, analizo a uno en especial: la Dulce Guila, esta jovencita que Hendrickson me encargó para hacerla mi discípula. Pero lo que analizo es más específicamente el vestido ligero, rosado, y extremadamente corto y sin mangas que ha traído a la lección de hoy. Las hadas femeninas nunca podrían ni cerca desarrollar un cuerpo como el suyo. Ellas siempre se mantienen iguales, como pequeñas niñas desde la perspectiva humana.
- ¿Sucede algo, Sir Helbram? – Escucho que me cuestiona de pronto, volteándome a ver sobre su hombro. ¿Habré sido acaso demasiado obvio con mis miradas curiosas en sus largas piernas?
- Sólo inspeccionaba los detalles de tu vestido, Dulce Guila. – Le respondo con una honestidad que me sale quizás demasiado natural…
- ¿Mi vestido? ¿Hay algo malo con él?
La inocente jovencita voltea a ver su atuendo y toma la tela entre sus dedos, alzándola un poco sin darse cuenta… quizás.
- ¿Tal vez es algo inapropiado? Pensé que estaría bien, debido al clima tan caluroso de hoy. ¿Usted no tiene calor con esa armadura, Sir Helbram?
¿Calor? Ni siquiera me había detenido a pensar en ello. Eso es algo más que me fascina del mundo de los humanos.
En el Bosque donde vivía, siempre era primavera. El clima y el paisaje, siempre eran los mismos. Todo se mantenía constante, como la apariencia misma de las féminas de mi especie. Pero acá afuera, cada día es distinto. Todo va cambiando poco a poco, desde el clima, hasta la apariencia de los que me rodean. Y eso incluye, quizás principalmente, a esta jovencita, que había pasado de un parpadeo de ser una escuálida y patética niña, a una hermosa mujer, y pronto una poderosa Caballero Sacro.
- ¿En qué tanto piensa, Sir Helbram?
- ¿Yo? En nada. No te preocupes y sigue practicando tus movimientos.
Guila obedece, y continúa moviendo su florete con notoria elegancia y gracia, haciendo danzar la tela de su vestido con cada estocada.
La parte de poderosa Caballero Sacro me había sido bastante clara desde hace tiempo, pero no había reparado mucho en la de hermosa mujer hasta ahora. ¿Qué tanto más secretos que no he podido aún descifrar se esconderán debajo de esa tela rosada? ¿Qué tanto más habrá cambiado su cuerpo sin que yo me percatara?
Esto definitivamente requiere más investigación.
NOTAS DEL AUTOR:
Un poco extraño, ¿no? ¿Incómodo quizás? Me hubiera gustado tener más palabras disponibles, pero bueno. Este fue el primero y el primer tema. Veamos cómo quedan los siguientes tres.