Este fic lo escribí para Perla Negra como regalo de cumpleaños.
Disclaimer (personajes): Dean Winchester (aún) no es mío y, muy lamentablemente, Brian Kinney tampoco lo es.
Harry y Draco fueron vilmente secuestrados de la tenebrosa mansión de Jo Rowling para poder ser los protagonistas de este crack!fic.
Disclaimer (referencias): 'The Bronze' y la idea de los Dolls ('Dollhouse') son de (Dios) Joss Whedon.
Sylar pertenece a (Peter Petrelli) Tim Kring.
xxx
Draco versus Draco
Harry estaba sentado en el sofá, comiendo un trozo de tarta y obligando a su cerebro a pensar qué podía llegar a gustarle a Draco como regalo de cumpleaños.
La tarta se había acabado y él continuaba sin saber qué regalarle al quisquilloso rubio que desde hacía varios días le venía diciendo que "por tu propio bien, tendrás que regalarme algo que me encante."
¿Y qué le encantaba a Draco?
Harry suspiró y pensó que el chico ya tenía todo lo que le encantaba.
¿Dinero? Tenía y mucho.
¿Caramelos? Por todas partes, hasta debajo de la almohada.
¿Ropa? Sí y hecha a medida.
¿Follar? Todos los días.
¿Él mismo? No, eso no.
Bueno, sería difícil regarle un Draco Malfoy al mismísimo Draco Malfoy pero era clarísimo que el muchacho se adoraba en demasía y un 'él' de regalo le iba a encantar.
Pero, ¿cómo hacerlo? Quizás, pensó Harry, él podía tomar Poción Multijugos para lucir como el Slytherin. No, no, eso no serviría porque no podía pasar el resto de su vida con otro cuerpo.
Un poco resignado, decidió ir al Callejón Diagon, ya que, con un poco de suerte podía llegar a encontrar otro obsequio pertinente con los gustos de su novio.
Cuando llegó al Caldero Chorreante, se encontró con Blaise Zabini, que también estaba teniendo problemas para decidir qué comprar.
"Ve a un WP," le recomendó el Slytherin, tras oír su descabellada idea.
"¿A un qué?"
"A un WizPorn. Puedes regarle un Doll."
Harry levantó una ceja. "¿Qué?"
Como era evidente que el Auror no tenía idea de nada, Blaise lo acompañó a uno de esos WPs y habló con la vendedora. "Necesitamos un Doll para dentro de dos días."
La muchacha asintió y caminó hacia el mostrador a buscar un frasco. "Un recuerdo donde se lo vea bien, por favor."
Blaise, entonces, tomó su varita y depositó uno de sus recuerdos en el frasco que, Harry decidió, seguramente era un Pensadero.
Si bien aún seguía bastante confundido con respecto a lo que estaba pasando, no dijo nada y se limitó a observar a Blaise y a la vendedora. La chica le acababa de entregar unos papeles al otro muchacho y éste los leía con el ceño fruncido. "Me gustaría ver a Kinney y a Winchester," dijo un rato después.
Harry volvió a levantar una ceja. ¿Qué eran un Kinney y un Winchester?
"Ahora mismo se los muestro," anunció la vendedora y se retiró rápidamente.
"Blaise, ¿qué está pasando?" preguntó el Gryffindor, observando todos los rincones del extraño local, que estaba repleto de objetos obscenos, espejos y frascos.
"Un Doll es un muñeco sexual que puede lucir como tú quieras. El Doll que encargué lucirá como Draco."
"¿Y qué son un Kinney y un Winchester?"
El Slytherin sonrió, aparentemente divertido debido a la ignorancia del otro chico. "Son personalidades. Los Dolls vienen con una personalidad base pero es muy limitada, sólo pornográfica y nada más. Kinney y Winchester son personalidades interesantes y creo que le gustarán a Draco."
Momentos más tarde, la vendedora regresó y le pidió a Blaise que la acompañara a la 'Sala de Prueba'.
Los dos se fueron a esa Sala y Harry se quedó solo, aún bastante aturdido. Se aproximó a una biblioteca y leyó algunos de los títulos de los libros: 'Las siete claves para follar en lugares públicos', 'Me enamoré de mi Doll', 'Hipogrifilia: el placer de hacerlo con un hipogrifo'.
"Listo," musitó la voz de Blaise, a sus espaldas. "Creo que Kinney será mejor," comentó a la vez que acomodaba su túnica, que lucía sospechosamente desaliñada, al igual que su cabello. "Tienes que venir a buscarlo mañana a la noche… Le va a encantar. Te lo aseguro." Suspiró y se lamió los labios.
"Hmm, claro," respondió llanamente, Harry. "Bueno, ¿es regalo compartido o tú le comprarás otra cosa?"
"Yo le compraré algo que necesitará para jugar con el Doll."
Harry se encogió de hombros y Blaise meneó la cabeza, riéndose internamente gracias a la ingenuidad del Auror.
