Los personajes no me pertenecen son creación original de Masashi Kishimoto. Los pido prestados sin fines de lucro.
Del universo Escapista, segui con esa línea, pero por obvias razones muchos de ellos ya no aparecen en este fic.
Rinnegan
Por Tlacuilo
Capítulo I
El Hokage miró a los dos llamados sannin y se recargó en su silla con los brazos cruzados.
–¿Lo mataste?
–Si Hokage-sama. –respondió Jiraiya.
–Pero como le he explicado, yo le dije a Jiraiya lo que Danzō planeaba.
–No tienes que justificarlo Orochimaru, eso de ofrecerte los ojos Uchiha ya era sentencia de muerte ¿o acaso este tipo iba a arrancarme los ojos o los de mi clan?
Los dos sannin se miraron, a veces el Hokage olvidaba que también era parte Uzumaki. El chakra del Sandaime ya estaba haciendo ebullición por la ira de este, y confirmaron lo que las habladurías decían, que el Hokage había heredado la fuerza de su abuelo Hashirama, pero el carácter de su abuelo Madara, por eso a todos les hacía gracia el nombre del Hokage… Kazuo*
–¿Y que haremos Hokage-sama? –preguntó el sannin de cabello blanco.
–Me extraña que los llamen sannin.
–…
–…
–Estaba al tanto de lo que hacía Danzō con Hanzō, tengo espías entre las filas de este…
–Pero…
–Si Jiraiya, por supuesto que no permitiremos que haya una emboscada, si dijeron que era un acto de paz, Konoha se asegurara que eso sea.
–¿Puedo…? –decía el de cabello blanco.
–Ponte en camino Jiraiya, por el momento solo de observador.
000
Los tres jóvenes de capa negra se situaron delante de su ejército. Hanzō arriba de su salamandra los miraba sin subestimarlos, esos mocosos le habían causado muchos problemas por lo que terminar eso con una estrategia más simple, era la mejor opción.
Del otro lado del cañón arrastrando prácticamente a su compañero, un hombre apuraba el paso:
–¡Deja de correr ya hemos llegado! –gritó fastidiado al que jalaban.
–¿Y si es demasiado tarde?
–Pues no creo que logres nada con quedarte aquí parado. Además el Hokage sabía de esto y mandó a varios espías seguro que alguno de ellos ya debe de haber actuado.
–Ese Uchiha loco sabe lo que hace.
–Te recuerdo que es el primo de Tsunade e hijo del legendario Taiki.
–Eso no le quita lo loco.
–¡¿Tú estás aun molesto por que nuestro maestro no fue elegido como Hokage?!
–…
–Inmaduro.
El par de hombre avanzó y vieron los dos lados del supuesto tratado de paz.
–De saber que me traerías hasta este lugar que no soporto, no te hubiese contado lo que pretendía Danzō…
–El muy desgraciado ya no le dio tiempo de hacer nada.
Orochimaru suspiró, Jiraiya sin pestañear había matado al jefe de Raíz y todo porque este se había aliado con Hanzō para tenderles una trampa a sus ex alumnos. Él se enteró cuando el mismo Danzō le pidió que lo hiciera más fuerte ofreciéndole unos ojos Uchiha. El sannin de los sapos recordó esto y preguntó:
–¿Hubieses aceptado? –preguntó Jiraiya.
–… No puedes negar que son hermosos, siempre me han gustado… ¡¿Por qué no los herede?!
–No te tocaban, además tu abuela dijo que tu abuelo fue Uchiha, pero…
–No sigas ya sé que ella nunca pudo probar eso y que mi padre fue un bastardo.
–No lo dije con la intención de ofender… –se disculpó el de cabello blanco– tu padre no los heredó. –Luego Jiraiya sonrió pícaro– Por eso babeas cuando vamos al barrio Uchiha. ¡Oh ya recuerdo que tu amor platónico era nuestro Hokage! –se burló el de marcas rojas.
–¡Cállate!... ¿o estás celoso?
–…
–Pero no hubiese aceptado el trato de Danzō; lejano, pero creo tener parte Uchiha. Por si fuera poco el viejo Taiki aún es un peligro, no me acercaría a su gente -de ese modo- estando él cuidándolos…
–¿Solo Taiki? –se burló Jiraiya.
–Oye el Nidaime también es un viejito de cuidado.
–Ah claro y los hijos de estos solo están de adorno, por no hablar de todo el clan Uchiha y Senjū. A veces creo que Konoha es pequeña para contener tantos shinobis fuertes.
–Muy cierto. Ya ves era mejor decir lo que Danzō planeaba. –concluyó Orochimaru.
–Si claro, de cuando acá tan gentil shinobi.
–A lo mejor convivir contigo me ha contagiado algo, mira que regresar por esos niños que conociste en nuestra misión de reconocimiento hace años ¿O tienes otro motivo?
–¿Que otro motivo tendría? –dijo no muy convincente Jiraiya.
–Entrar en acción.
–…
–¡No puedo creerlo!
–¡No es justo que no haya misiones emocionantes!
–El Hokage siempre te ha permitido salir a tus viajes de investigación.
–¡Y a ti tus experimentos! Pero eso no es combatir…
Como iban discutiendo no notaron que estaban en medio de los dos lados que pactarían el tratado de paz.
Yahiko sonrió y bajó hasta donde su maestro se encontraba:
–Jiraiya-sensei.
Hanzō bajó de su salamandra y se dirigió a donde los recién llegados estaban, con las preguntas grabadas en su rostro. El de mascarilla se cruzó de brazos y cuestionó:
–¡¿Que hacen aquí?!
–Oh… –fue lo que dijo Jiraiya– Venimos… a…
–Somos los representantes de Konoha para validar el tratado de paz –concluyó Orochimaru.
Hanzō ni se inmutó:
–No pedimos representantes.
–Oh no lo hiciste, pero nuestro Hokage consideró su deber cívico mandarnos como testigos. –volvió a contestar Orochimaru.
El hombre de mascara se tuvo que tragar la sarta de improperios que pasaban por su cabeza recordando al Sandaime. Por su parte los de Konoha sonrieron, pero para sus adentros esperaban que Hanzō no estuviera de acuerdo y así poder mostrar la supremacía de la aldea de la hoja como líder de las otras.
Yahiko intervino y respondió a los de Konoha:
–Agradecemos que el Hokage y Konoha hayan considerado este pacto como digno de ser testificado.
–Siempre lo hacemos cuando se trata de detener derramamiento de sangre –apoyó Jiraiya.
Hanzō se retiró hacia su lado e hizo una señal de que dejaran en paz a Konan, si los de Konoha testificaban que él había sido el que inició con las hostilidades y atacó, de su aldea y de él no quedarían ni escombros, pues a pesar de que la aldea de la hoja se consideró neutral en todos los conflictos, su fuerza shinobi era legendaria. Como ejemplo dos de los tres sannin que estaban en ese momento ahí. Hanzō casi sonrió al recordar que él los había bautizado de ese modo cuando los vio por primera vez en esa misión de reconocimiento años atrás.
El hombre mascarilla se retiró con el pacto realizado, sin embargo se juró que no cejaría en detener a ese grupo, rebelde aun si con eso se ganaba la enemistad de Konoha, claro que para eso debían comprobarle primero que él tuvo algo que ver.
El grupo de capas negras iniciaron con los murmullos felicitándose por ese tratado y por qué con eso muchos de ellos podrían regresar a sus familias sin ser delincuentes buscados.
Jiraiya llegó hasta sus tres alumnos y los saludó:
–Se ven bien y muy grandes, casi no los reconocí sin el traje de sapo.
Konan se sonrojó al igual que Nagato, en cambio Yahiko se carcajeó junto con su sensei. Orochimaru se cruzó de brazos y miró con una ceja arqueada a Jiraiya.
-¿Los vestiste de sapos?
–Pues sí.
–…
–¡Era parte de entrenamiento! –se justificó Jiraiya.
–Aja.
Yahiko se rascó la nuca y comentó:
–Es bueno verlo… verlos, con ustedes aquí, Hanzō no pudo retractarse de su palabra.
–Yo no estaría tan seguro –afirmó Orochimaru.
–¡¿No?! –preguntó Nagato asombrado, tanto que se volvió a sonrojar por su exabrupto.
–No. Este tipo es un hombre taimado y no creo que respete el pacto, así se gane la molestia de las otras naciones por faltar a su palabra.
–Estaremos al pendiente –aseguró Yahiko.
–No entiendes Yahiko, Hanzō si tiene que jugar sucio, lo hará. –explicó el sannin de cabello blanco.
–¿Y qué podemos hacer sensei? Lucharemos si es necesario.
–Lo sé. Quisiera ayudarles…
–No seas necio Jiraiya y diles lo que debes. –Los chicos de Amegakure observaron a los dos sannin– Hagan una alianza con Konoha, de ese modo podremos intervenir si algo sucede.
–No gracias, estamos luchando por nuestra libertad y no queremos depender de ninguna de las naciones ninja. –expuso orgulloso Yahiko.
–Debemos ser fuertes incluso para darnos cuenta que necesitamos ayuda –dijo Jiraiya mirando a Yahiko.
–No menosprecies el trabajo que has hecho muchacho, este grupo armado ha sido tu idea… –decía el sannin de las serpientes.
–Y la de mis amigos.
–Por eso mismo su esfuerzo es tan importante como el de cualquier aldea ninja y Konoha no menosprecia a ninguno de sus aliados ¿O acaso no se sienten capaces de ayudarnos cuando lo necesitemos?
La sonrisa sarcástica del sannin de cabello negro apareció, retando al líder del grupo. El de cabello naranja se irguió y respondió:
–¡Somos tan fuertes como sus mejores shinobis! ¡Tenemos el rinnegan! ¡Nagato! –llamó a su amigo.
–…
Jiraiya no agregó nada, más este silencio le pareció sospechoso a Orochimaru.
–¡¿Lo sabias?! –cuestionó el pelinegro a Jiraiya.
–No estaba seguro.
–Debiste informarlo.
–¿Por qué?
–Taiki-sama debió saber, tal vez este joven es su descendiente.
–No… No lo creo…
–O puede ser descendiente del Nidaime.
–En todo caso puede ser descendiente del todo el clan Uchiha y Senjū, pero eso no cambia que Nagato sea de Amegakure.
–¡¿Y?! De ese modo pudo ser cuidado por ellos y no ser huérfano.
–… ¡Yo jamás lo hubiese separado de sus amigos!
–¡Jiraiya baka!
Orochimaru se giró y se fue dando grandes zancadas. Jiraiya suspiró abatido y volteó a ver a sus alumnos. Konan lo veía con una sonrisa condescendiente y los otros dos trataban de no reír.
–Bueno es mi pareja no puedo dejar que se vaya solo… si no me echara de casa. Mis suegros tienen un tiempo de haber muerto si no me abandonaba y se iba a vivir con ellos.
El grupo se retiró hasta donde estaba su base y Jiraiya estaba por despedirse cuando vieron aparecer de nuevo a Orochimaru que iba casi corriendo a su encuentro.
–¿Qué pasa? –cuestionó Jiraiya.
–Un mensaje de Konoha… Taiki-sama está muriendo.
–¡¿Cómo pero si es la reencarnación… de…?! ¡No puede ser!
–Vamos Jiraiya, él estaba listo y consideraba que su aldea estaba en buenas manos.
El de marcas rojas en los ojos se giró hacia Nagato:
–Debe conocerte… por favor.
Yahiko colocó su mano sobre el hombro de pelirrojo.
–Iremos contigo, yo también quiero conocer a legendario Uchiha Taiki.
El grupo se fue hasta la base y ahí hicieron los preparativos correspondientes. Los otros miembros del grupo se esconderían por el momento, evitando que Hanzō pudiera atacarlos en lo que sus tres cabecillas iban de incognito a Konoha.
…
*Kazuo (pacífico) Nombre compuesto: Kazu (paz) + O, de 'oto' (hombre) Significado: Pacífico, hombre de paz.
Iniciamos con este nuevo fic y espero que sea de su agrado o que por lo menos los (as) entretenga un rato.
