No contiene spoiler, o al menos no abiertamente, aúnque si es un posterior a la pelicula, y mas adelante un recuerdo partiendo del cap. 51.
REDENCION
CAPITULO I:
Sabía que aun no era muy tarde. Le pedía a sus piernas, ya adoloridas que resistieran solo un tiempo mas. Verdaderamente esa batalla, entre seres venidos de quien sabe que extraña dimensión, contra ellos; los militares resulto ser toda una proeza.
Se encontraron combatiendo, bajo las ordenes de un Coronel enclenque, que a diferencia de su antiguo superior, se había conformado con dar algunas ordenes, y dejar a todos los soldados que combatieran bajo la autoridad de Armstrong; mientras el se limita a observar como se desarrollaban las cosas desde la lejanía de su puesto.
La cuidad días atrás había sido sacudida por un fuerte temblor, solo equiparable con el que minutos antes de la aparición de esos seres, se sintió, destruyendo varias casas y edificios del Cuartel militar. Por fortuna no se habían reportado ninguna baja, hasta ese momento, y eso represento un alivió pues a la hora de formar filas y salir a enfrentar la amenaza que inundaba la ciudad y cuyo principal objetivo parecía ser el cuartel, significo una ventaja sobre el enemigo. Rápidamente se vieron superado por numero y fuerzas, aún así los soldados se mantenían firmes y resueltos a aguantar hasta el final. Pero los deseos de los hombres pueden menguar fácilmente cuando la desgracia y muerte se ciñe frente a ellos.
-----------------------------------------------------
Roy Mustang, nunca creyó volver a pisar esa tierra ; que tanta desgracias le provoco. Cuando salió en esa fría noche, hace ya dos años, se alegro superficialmente de que todo eso terminara. Esbozo una sonrisa mientras dirigía la vista hacia el pequeño departamento que tanta felicidad le había traído en tan poco tiempo; y así en la soledad de la noche, acompañado tan solo del soplo del viento y su corazón acongojado, abandono la cuidad, después de haber recibido su destitución.
Aun en las condiciones precarias con que desarrollaba su trabajo, al norte de Amestri; una región en la cual gran parte del año reinaba, el intenso frío acompañada con nevadas. Llegaron noticias de los movimientos telúricos que azotaban en esos momentos central. Roy acababa de llegar a primeras horas de la mañana, al pequeño edificio que fungía como base militar del Norte, cuando las líneas comenzaron a sonar, una tras otra, todas comunicaban lo mismo, y los hombres en responderlas informaban siempre la misma mala noticia. "Ciudad Central estaba siendo invadida por una especie de androides. Los soldados resistían valientemente. Pero carecían de estos... ". Roy revisaba unos papeles sin prestar mucha importancia a esos anuncios.. .pero lo último le hizo despegar el rostro del papel, para que después su pensamiento se perdiera en la inmensidad de sus recuerdos.
La infantería combatía valientemente, a pesar de la visible desventaja. Pronto saldrían a combate, los tiradores y militares elite, a cargo del General Eisenhower. Esas últimas palabras golpearon la cabeza de Roy como una pedrada. Tiradores elite... a esa clase pertenecían sus antiguos subordinados y ese tal general, todos conocían su historia... era un novato en la milicia, nunca había estado en un combate cuerpo a cuerpo... su rango...fue el resultado de sus influencias...y si él... Roy Mustang no hacia algo pronto... el resultado sería que todos sus ex-compañeros serían masacrados... todos sus esfuerzos, experiencias y potencial, muy posiblemente no los sabría explotar Eisenhower.
-"Mustang...Roy Mustang" –La voz de su superior lo saco de su ensimismamiento. –"Estarías dispuesto a usar de nuevo tu alquimia, de retornar al lugar que te denigro y te confino a este mísero lugar. Valoro tu esfuerzo y conozco tus habilidades, se que serías de mucha utilidad en central en estos momentos...pero no quiero hacer nada sin antes conocer tus deseos"
Su superior era un hombre maduro, próximo a entrar a los 60 años, pero que sin en cambio se conservaba fuerte, con la entereza y bravura, de un joven. Muchos mitos rondaban en torno suyo... se decía que durante sus años de mozo, fue condecorado con todo tipo de medallas y honores habidos en la milicia, y aunque en mas de una ocasión se le ofreció el cargo de fuhrer, el siempre terminaba declinando esa oferta. Y años mas tarde se conformo con que fuera designado a esa zona rural, aceptando liderar ese cuartel ...aunque su influencia aún era fuerte en central rara vez intervenía en asuntos de guerra. Su semblante rudo y rígido, solo era eso...un semblante...pues llevaba una buena relación con todos sus hombres, una especial amistad había nacido entre el General y Roy Mustang.
-"Lo haría por los que alguna vez fueron mis hombres"
-"Solo por eso. Creí que tenías razones mas fuertes para eso"
-"No quiero decir... que regresaría por mis amigos, para hacer lo que no pude hace dos años" –hablo esta vez confiando en sus palabras y recobrando esa llama intrépida y aventurera que hace dos años se había apagado.
-"Prepárate entonces Roy, en media hora estarás rumbo a central, es una orden" – Sonrió el hombre. El ver al alquimista tan decidido... recuperado y en cierto modo alegre de retomar por primera vez en muchos años el rumbo de su vida, le hizo recordar aquellos años en los que él al igual que Roy, estaban dispuestos a dejarlo todo, por sus amigos.
----------------------------------------------------------------------
Cuatro horas mas tarde, Roy descendida del bunker, saco de la bolsa de su pantalón un par de guantes de ignición, los únicos que había llevado con el a Amestri y los coloco lentamente sobre sus manos. Durante todo el trayecto el pensamiento de Roy, se encontraba mas a menudo en el recuerdo de ella, en que haría cuando la viera, que le diría, como reaccionaría, como se vería. Se pregunto si aún lo recordaba como él a ella... o si acaso ya lo había olvidado y hecho su vida al lado de otro hombre. En el momento en que la imagen de Riza en brazos de otro hombre se hizo visible en su mente, escucho la voz del conductor.
-"Mayor hemos llegado. Lo sentimos pero no podemos seguir adelante los caminos han sido bloqueados. Me temo que tendrá que..."
Y antes de terminar la frase, Roy había dado un ágil salto y caminaba en dirección a central sin decirle mas al atónito hombre. La distancia que lo separaba del cuartel era corta; algunos metros mas y estaría de nuevo al frente de una guerra... La ciudad visiblemente cambiada, los alrededores del cuartel habían sido destruidos casi en su totalidad. Pero de entre los escombros y humo que se levantaban sobre el, pudo distinguir el lugar en donde se llevaba a cabo la batalla, y unos metros mas lejos a sus hombres.
La situación lentamente se salía de las manos de los militares...ahora eran pocas las esperanzas que tenían de ganar... sabiendo esto seguían peleando valientemente, cuidándose las espaldas unos a los otros, como seguramente lo haría su Coronel... si aún siguiera con ellos... pues para toda la brigada de Mustang, eso seguía siendo, su Coronel, a pesar de la distancia, a pesar del tiempo, a pesar de las circunstancias y cargos. Tal vez de los cinco el mas inexperto en el uso de armas de fuego era Fuery, pero eso se compensaba con la ayuda de Havoc y su habilidad de informar fácilmente de cualquier cosa extraña. Breda y Falman trataban una y otra vez de reagrupar las tropas, en tanto que el mayor Armstrong y Riza Hawkeye sobre ellos recaía la labor de cubrir ambos flancos e impedir el paso de sus enemigos.
Pronto los cinco militares junto con Armstrong, comprendieron que la retirada estaba próxima...pero ante sus ojos surgió el único hombre que les podría asegurar la victoria... Roy Mustang... el simple sonar de su voz; seguro en cada una de sus decisiones fue suficiente para que todos los hombres atendieran a su llamado... mas de uno supo porque aquel hombre eran tan temido como valioso para la milicia.
Su reencuentro fue inesperado y a la vez inexplicable... basto una simple mirada para remover todas aquellas emociones que habían permanecido guardadas pero latentes en el interior de cada uno. Para Riza significo el comprobar que el hombre que toda su vida había amado en secreto estaba a salvo. Para Roy fue muestra clara de que su amor por ella nada, ni nadie podría extinguirlo... Pero en ese momento hicieron a un lado todo sentimiento, para centrarse en su primordial objetivo, salir victoriosos de aquella guerra. Y así fue... una hora mas tarde las cosas regresaban a una aparente calma.
Habían peleado juntos hombro a hombro, y a pesar del tiempo ella aún sentía la necesidad de protegerlo y seguirlo a donde fuera. Se le negó ese derecho cuando Roy desapareció en el aire, dejándola sola y abatida en tierra...pero no lo dejaría ir otra vez con la misma facilidad de hace dos años. Lo había visto descender después de un rato, lo siguió sin perderlo de vista, observando cada uno de sus movimientos, cuando termino de hablar con el General y hecho a andar de regreso; Riza lo siguió manteniendo cierta distancia. A mitad del camino, en una desolada calle, ella lo llamo por su nombre.
-"Roy... aguarda te vas tan pronto" –su voz no era la de siempre, no era la que Roy recordaba... antes firme ahora era débil y al borde de las lagrimas.
-"Lo lamento Riza... este lugar ya no me pertenece... no hay porque quedarme mas tiempo"
-"Y Havoc, Breda, Falman, Fuery, que hay de ellos te esperaban, no te alegras de verlos"
-"..."
-"Y yo... Roy que hay de mí. Tan poco signifique en tu vida que ahora te marchas de nuevo dejando las cosas así, sin importar lo que me pase o sienta..."
-"No es eso Riza..." –Sus palabras fueron sofocadas por los labios de la joven mujer que se había acercado a él, besándolo como tiempo atrás solía hacer.
-"Por favor Roy no te vallas... no me dejes otra vez...aún podemos hacer tantas cosas juntos" –suplico mientras apoyaba su rostro en el pecho del hombre y las lagrimas corrían con libertad hasta morir en las ropas del militar.
-"Lo siento tanto mi querida Riza...pero lo nuestro no puede ser" –pronunció entrecortadamente, al tiempo que separaba asombrada a Riza, y con una última mirada a sus húmedos ojosambar se alejo.
Y de esta forma Riza lo vio partir otra vez...de nuevo se alejaba de ella, dejándola sola y abatida... todos esos meses de larga y angustiante esperada...sobreviviendo tan solo con la ilusión de volverlo a ver... habían sido el motor que la impulsaba a seguir ahí...en central...en el cuartel... escalando lenta pero segura cada duro peldaño de la milicia, para que de esta forma facilitarle las cosas a su Coronel, pero todas esas esperanzas... tan solo se trataron de simples quimeras, que se desvanecieron tan pronto como el se alejaba de ella por segunda ocasión... Y su corazón antes inquebrantable, pero fracturado por el trancurrir del tiempo...ahora se desmoronaba lentamente en un agudo y constante sufrimiento.
Ahora la calle se volvía estrecha para ella y a la vez kilométrica, lo siguió un tiempo mas con ojos húmedos, incapaz de gritarle un "no te llevas" o un "te amo". Y él jamás dio vuelta atrás... mi una mirada... ni una vacilación, ningún tipo de sentimiento creyó Riza experimento Roy en esa hora de partida. Que acaso Amestri del Norte y la crueldad de su clima, habían sido capaz de cambiar a Roy, en tan solo dos años, sepultar al hombre: alegre, ambicioso, con ganas de sobresalir ante cualquier situación y varonil; para dejar solo a un hombre derrotado y sin esperanzas.
Eso hubiera atemorizado a Riza, pero en sus ojos durante su primer encuentro... no descubrió nada de eso... lo había escudriñado minuciosamente, tan pronto lo vio acercarse a ella...y lo que descubrió fue lo mismo que ella esperaba y ambicionaba aún guardara Roy hacia ella... pasión...amor...cariño. Todas esas emociones que recién habían descubierto, cuando el partió dejándola sola. Pero con su repentina partida, lo único que le quedaba a Riza era una inmensa confusión.
Apoyo ambas manos a la pared, junto con su hombro, pero esta no fue lo suficientemente firme para soportar su dolor. Sus piernas ya cansadas por la batalla y el movimiento de ese día, comenzaron a vacilar, se deslizo sobre si misma lentamente hasta quedar arrodillada, con su rostro sumido en su pecho y llorando amargamente, a ratos se llevaba su mano a la altura de sus labios para impedirle a sus sollozos salir...pero todo resultaba en vano. Nisiquiera escucho el sonido de unos pasos que se habían acercado a ella por la espalda. Solo se percato cuando el hombre le hablo.
-"Teniente, la estaba buscando...desapareció de pronto...nos preocupamos por usted. Preguntamos y un soldado me digo que la vio andar en esta dirección. ¿Pero que fue lo que paso?" –Pregunto al darse cuenta del estado de su compañera.
-"Se fue Havoc. Ninguno de nosotros le importamos... ni siquiera le importo que ..."
-"Shii" –fue todo lo que pronuncio Havoc. Sabía de quien hablaba y a que se refería con ese "ninguno", también sabía lo que le iba a decir. Pero se lo impidió.
Se había puesto al lado suyo y agachado a su altura, para estrecharla entre sus brazos.
–"Todo saldrá bien" –Realmente el ver a Riza Hawkeye en ese estado, le partía el corazón. La conocía desde hace varios años y nunca la había visto derramar una sola lagrima. Ella acepto de buen grado la solidaridad de su compañero y dejo que sus brazos la protegieran. Ninguno de los dos volvió a hablar, Jean esperaba paciente a que su llanto cesara, mientras la mecía delicadamente de un lado a otro. No sabía que mas decirle, ni como acallar sus lagrimas...pero de una cosa si estaba seguro, ya había tomado una resolución y la ejecutaría cuanto antes. Solo le restaba esperar hasta su día libre y las cosas podrían solucionarse.
-"Vamos te llevo a casa" –se ofreció, después de un rato cuando Riza había dejado de llorar.
Le tendió su mano ayudándola a ponerse de pie. Para fortuna de ambos, en especial de Riza, muy pocos hombres se paseaban en esos momentos por ahí, y en realidad nadie les presto importancia. Cuando llegaron a ésta Black Hayate salió al encuentro de su ama, entusiasmado y juguetón, como cada que Riza tornaba a su casa; pero ella apenas si le dirigió una escuálida sonrisa y unas palmadas en su cabeza. Ella se instalo en la sala y Havoc se dirigió a la cocina, le preparo una taza de aumenta té y se la tendió cuando se reunió con ella. Cuando tuvo la certeza de que Riza se encontraba mejor, se puso de pie y se despidió de ella y de Hayate.
-"Teniente Havoc... podría pedirle un último favor" –se dirigió a él antes de que abriera la puerta.
-"Descuide Hawkeye... ni una palabra de esto a nadie" –con tan solo escuchar que lo llamaba por su rango, comprendió la petición de ésta, sin siquiera escucharla.
-"Te lo agradezco... y agradezco lo que hoy hiciste por mí, me alegra saber que aún pudo confiar en alguien"
-"Siempre a sido así Teniente, yo siempre he estado con ustedes para apoyarlos en cuanto sea, no lo olvide, por favor" –se dirigieron un rápida sonrisa y Havoc salió.
---------------------------------------
Los planes de Havoc, se tuvieron que posponer, durante dos semanas ningún militar en central había tenido un día de descanso, y es que eran requeridos para realizar labores de rescate, cada uno participaba en alguna obra para la pronta recuperación de central. Aún con todo el trabajo de mas que tenían Havoc no había olvidado que tan pronto descansará tendría que abandonar central por algunos días, para Riza significo una buena terapia, para olvidar sus penas. Salía temprano por la mañana junto con Hayate, que de pronto se había vuelto perro de rastreo y rescate, atendía sus labores en el cuartel y por las tardes salía a patrullar la ciudad y ayudar en lo que le designaran ese día.
Le gustaba verla tan recuperada, los primeros días se impresiono al ver que actuaba como normalmente, no mostraba signos de debilidad, ni pesar; pero pronto se dio cuenta que solo era una imagen, y que bajo toda esa alegría, y esfuerzos, se escondían sus verdaderos sentimientos y sabía que no pasaba un día sin que pensara en él, en esa tarde y en lo que seguramente habían vivido hace dos años.
A partir de ese día había nacido entre ambos militares una creciente amistad. Seria como siempre, como todos los militares la conocían, solo se daba la libertad de sonreír menudamente cuando se encontraba en compañía de Havoc, o en ocasiones con los 4 hombres que una vez conformaron la brigada del Coronel Mustang. De no ser por que todos sabían que Riza Hawkeye sería la última persona en romper un estándar tan importante como "Cero relaciones sentimentales, entre dos miembros de la milicia" , mas de uno habría rumorado que existía entre ambos Tenientes una relación amorosa. Y ahora toda duda quedaba resuelta con la nueva noticia que corría rápidamente por todos los pasillos de central: Jean Havoc, finalmente había iniciado una relación, formal y seria; con una chica; una joven bonita, que había sufrido en las últimas semanas, una joven a la altura del Teniente.
-----------------------------------------------------------------------
Alguna de las instalaciones del Cuartel General de pronto se habían convertido en centro de acopio y módulos de información, para cualquiera que quisiera dar con el paradero de alguno de sus desaparecidos familiares. Y desde que estos habían empezado a funcionar cada día a la misma hora una joven castaña, ojos verdes , un rostro perfilado perfectamente, delgada y con un andar gracioso, se acercaba con el militar encargado y preguntaba lo mismo "noticias de su pequeño hermano Semnut". A pesar de que su ropa diferenciaba todos los días, unos faldas largas, cortas, pantalones, vestidos, etc, siempre eran del mismo color negros, guardando el luto de sus recién fallecidos padres.
Havoc la había visto de reojo el primer día. Se acerco dudosa vestía un vestido hasta las rodillas negro con mangas cortas, con un discreto escote en "v", zapatillas altas, sus castaños rizos recogidos en una cola alta, dejando que su fleco fuera el único que ocultara su rostro lloroso. "Demasiado hermosa, y frágil entre tanta destrucción" fue lo primero que paso por la mente del militar.
-"Busco a mi hermano, se llama Senmut Brashov... siete años, tez blanca, ojos marrones..." –respondió a todas las preguntas que le hicieron, cuando recibió una negativa, se marcho del lugar.
Para sorpresa de Jean, ella no se comportaba como todas las demás personas, lloraban, gritaban, y se desmayaban tan pronto escuchaban un no o esta muerto. Ella por el contrario parecía firme y a la vez agotada.
Cuando su turno termino y después de acompañar a Hawkeye a su casa, se encamino hacia la suya, al pasar por el parque, la encontró ahí a pesar de la hora, y de que solo un faro alumbraba el lugar. La joven mujer se encontraba sentada en un columpio meciéndose suavemente, al tiempo que el frío de la noche le arremolinaba el cabello y alzaba su vestido.
-"Buenas Noches" –fingió una sonrisa, para ocultar el asombro de verla.
-"Buenas Noches..." –respondió sin alzar la vista.
-"Jean, me llamo Jean Havoc y usted" –pregunto mientras se sentaba a su lado
-"Hatshepsut, es usted militar cierto, lo vi en la tarde, que es lo que hace" –se enjugo las lagrimas antes de girar su rostro y extenderle la mano.
-"Si así es, soy Teniente, y por ahora ayudo en la reconstrucción de la ciudad. Y tu Hasetshupt que hacías allá"
-"Es Hatshepsut, es difícil lo se, puedes decirme Hat. Buscaba a mi hermano, veras mis padres murieron en el temblor sepultados bajo su oficina, Senmut estaba en la escuela pero no se nada de él y me temo lo peor" –
Y sin importarle que acabara de conocer al militar se hecho a llorar en sus brazos; resignado y sorprendido, ofreció por segunda ocasión en esa semana su hombro como apoyo. Se retiro su chaqueta y ofreció gentilmente a la joven mujer; cuando se calmo ofreció a acompañarla hasta su departamento ubicado cerca de su casa para sorpresa de ambos. Después todo se había resumido en una sola cosa, visitas continuas, salidas y una creciente amistad que despues de esa semana paso a ser una relación seria.
CONTINUARA...
Dejenme aclarar algo antes de seguir con esto; veran cambie mi nick, porque de pronto regreso mi amor hacia Egipto, pero resulta que ya tenia escrita esta parte de Havoc, y no se me ocurrio otro nombre largo y complicado, así que deje el mismo de Hatshepsut.
Enserio me encanta ese nombre, tiene una historia genial; la primera faraona que goberno Egipto, y Senmut, no es presisamente el nombre de su hermano si no mas bien el de su arquitecto y amante. Ademas de que su libro e historia significan mucho para mí, una especie de vínculo por el cual estoy ahora aquí escribiendo esto. Tal vez un día conozcan toda la hist, por ahora no las aburro mas.
Ahh!si tambien si se preguntan que hace Havoc con tanto protagonico,de pronto no supe quien consolaria a Riza, hasta que me di cuenta que Havoc era el mas cercano a ella, pero para que esto no pareciera triangulo amoroso y despues romperle sus esperanzas a Jean, me invente esa hist rápida, ojala les guste. Si es así y quieren puedo hacer algo mas con él. Por cierto como les gustaria, Senmut con vida o muerto. Se me complica esto pero ustedes decidan.
Como que el título no me termina de convencer, así que creo sera provisional, si tienen un buen título con gusto lo acepto. Y por último espero recibir sus reviews, continuo en este negocio o mejor desertamos, voten..
HATSHEPSUTH
(por cierto ¿que nick les gustaba mas?)
