Fiebre
- Hace calor…
- Lo sé, lo sé. Hago todo lo que puedo ¿vale?
- Hace mucho calor. Demasiado.
- Ya lo sé, Ikuto por favor, no seas tan pesado
- ¿Pero por que hace calor?
- Dios mío, estas ardiendo de fiebre.
- No puedo aguantarlo más Amu, hace demasiado calor, por favor quítame la ropa.
- ¿Qué?
- La ropa, la ropa…
- No pienso desnudarte, Ikuto. Ni hablar.
- Agh… me muero… hace demasiado calor
- Déjame ver… treinta y nueve grados de fiebre. Si sigues así se te freirá el cerebro.
- Amu, por favor…Necesito que me desnudes.
- P…pero… yo…
- Por favor…
- …¿Puedes levantar los brazos?
- No. Ayúdame
- Inútil…
- Mmm…tus manos están fresquitas…
- En contacto contigo, hasta el desierto del Sahara esta fresquito.
- Me da igual el desierto. Tú hueles mejor.
- Ikuto, estas empezando a delirar.
- Amu estas fresquita…
- Venga, levanta más los brazos que no puedo quitarte la camiseta.
- Me arde la piel. Me quema como el fuego.
- Ya se lo mucho que te gusta quejarte. No te preocupes que voy a estar aquí contigo hasta que se te baje la fiebre.
- Amu…
- ¿Que quieres ahora?
- Quítate la camiseta tú también.
- ¡Ikuto!
- Venga, por favor. Lo necesito.
- ¿Me estas tomando el pelo?
- Jo, Amu. Yo ya me he quitado la camiseta y tú estas tan fresquita. Quítate la camiseta y abrázame.
- Pervertido.
- No aguanto el calor. Joder, demasiado calor. Me muero y tú no eres capaz ni de quitarte una prenda para salvarme de esta agonía.
- Ya te he quitado la camiseta. No pienso hacerte un striptease solo porque estés enfermo.
- Pues vete y déjame morir en paz.
- … No seas exagerado. Si tanto calor tienes te llevare a la ducha y te empapare de agua helada.
-Sí. Agua helada. Dúchate conmigo Amu. Los dos en una ducha helada sin ropa.
- ¿S..Sin ropa?
- Tú y yo en la ducha, abrazados, mojados y calientes, acariciándonos…
- ¡Suficiente! Dios mío, eres peor de lo que imaginaba.
- Abrázame.
- ¿Otra vez?
- Si no vas a ducharte conmigo entonces te pido que me abraces.
- No pienso ducharme contigo
- Entonces te queda abrazarme
- No pien…Ikuto, ¿Q…Qué estás haciendo? ¡Suéltame! N...No. ¿Qué haces? Me estas arrugando la camiseta…
- Mmm…
- Tus manos me hacen cosquillas en la tripa… Eh..Eh, no subas más. No Ikuto, como te atrevas a levantarme más la camiseta...te juro que...
- Hueles bien
- No… Ahí no. Ikuto. Para. Ahh.
- Tu cuello es suavecito y fresquito. Déjame apoyar la frente en él.
-… Si vale. De acuerdo.
- Ahh. Qué bien hueles.
- Es la última vez que vengo a cuidarte. Y ya estas sacando la mano de debajo de mi camiseta si no quieres que te la corte de un tajo.
- Que fresquito…
- Lo juro. La última vez.
Esto es lo que hace la imaginación y el aburrimiento a la una de la madrugada.
En realidad esto se supone que debía ser el argumento del nuevo capítulo de mi otro fic de Shugo Chara (La curiosidad mató al gato). En realidad esto es un experimento para ver que tal puedo expresar una escena sin narrarla. He intentado que el dialogo tenga la fuerza suficiente para que sea interpretado sin la necesidad de estar leyendo párrafos y párrafos de descripciones.
Vosotros decidís si tirarme tomates o flores. Toda respuesta será bienvenida.
Y que Dios nos pille confesados.
