Capítulo 1

Un día ordinario

―¡Viry, Viry! ― Llamó a gritos O'donnell, entrando al cuarto de descanso de la base principal de Corneria. La cual parece estar aparentemente vacía, mientras veía alrededor del cuarto con su vista.

― …Uhmm… ¿Ah? ― Expresó Charlie alzándose lentamente de un sofá ― ¿Qué ocurre, para qué gritas tanto? ― Digo sonando molesto, tal parece que dormitaba hace unos segundos.

―Estoy buscando a Viry. ― Se acercó del lado opuesto del sillón, muy cómodo, de color marrón oscuro. ―¿La has visto? ―

―Aaah… ― Expresó pesadamente, y elevó su vista respondiendo ―Creo que se fue… Ah…― Comenzó a cerrar los ojos, el lobo pensó que estaba recordando o algo así, pero notó que se estaba quedando dormido. Wolf un poco desesperado, exclamó ― ¡Oye! Pareces viejito durmiéndote así, despabila de una vez ― Le dio un manotazo en la nuca, la cual causó que Charlie casi se cayera al piso al estar desprevenido, y abrió los ojos de sopetón, y se puso de pie como un rayo, colocándose frente al lobo, que le miró sorprendido, Charlie se ha molestado y eso no era algo bueno.

―…Ah… Perdón, es solo que…― Se excusó el amenazado.

―…―El silencio por parte del conejo verdoso, no era para nada agradable, así que simplemente le pasó de largo diciendo ―…Está con su padre…― Salió del cuarto, O'donnell volteó para agradecer, pero ya era tarde, con su rostro desconcertado, puso una ligera sonrisa, y se encaminó a la puerta, para ir hacia la oficina del General.

―…Sí, fuimos a la base de Fichina, todo está funcionando bien. Me encontré con Lucy allá, así que platicamos un poco y sigue diciendo lo mismo. A ver si convences a Peppy que la deje pilotear un día de estos, es más me ofrezco a cuidarla si eso es lo que le preocupa. ―

―¡Ja, Ja, Ja! Ya veo. Conoces a Peppy, para él Lucy es realmente su tesoro, así como lo eres tú para mi hija. ―

―…Uhm… Entiendo… Pues igual, no debería ser tan sobreprotector. Por lo menos tú me dejaste andar… Que ahora que lo pienso….―

El sabueso le interrumpió las palabras ―…No iba a mantenerte encerrada siempre, hice lo que debía hacer, y lo mejor para ti, para los dos. ― Dijo el general, sonando de una manera sincera.

―Je…―Expresó la humana, con una sonrisa mientras se puso de pie, diciendo ―Gracias por ello, papá…― Abrió los brazos, para darle un tierno abrazo a su figura paterna, quien también le correspondió, acomodando su cabeza sobre el hombro de su hija.

La compuerta se escuchó deslizar, y ambos rompieron el abrazo volteando a la misma dirección.

―…Ah… Perdón, no quería interrumpir ― Dijo ya dentro de la oficina aquel lobo gris.

―Hey… ¿Qué sucede O'donnell? ― Habló la joven humana, con una sonrisita en los labios.

―Buenas tardes, Wolf ― Saludó el General, poniéndose de pie, a la vez que llevaba sus manos detrás a la cintura.

―Eh… ah… Sí. Buenas tardes General… Disculpe, yo… amm… Andaba buscando a su hija. ―

―…Sí, tengo rato de haber llegado. Primero tenía que dar el reporte con mi padre. ―

―Bueno, pero ya terminamos. Es tuya… ―Dijo el sabueso a la vez que le lanzó una extraña e intimidante mirada donde enfatizó ―…por el momento…―

La joven humana que traía su cabello trenzado, hasta llegarle a la cintura, además de portar un traje común en el equipo de Star Fox, sólo que rojo carmín, muy llamativo, y la chamarra en café oscuro. Se aproximó al lobo con una sonrisa, y volteó hacia atrás viendo a su padre, de nuevo tomar asiento tras su escritorio. ―...Nos vemos más tarde. ―

―Claro, hija. ―

―Con su permiso, General Pepper. ― Dijo educadamente el lobato.

Salieron del cuarto, uno cerca del otro, Viry parecía nerviosa y justo cuando iba a decir algo.

―…Viry…―

―…O'donnell…―

―…Ah…― Ambos se vieron a la cara, sorprendidos aparentemente al haber hablado al unísono.

―Tú primero. ―

―¿Ah? No, no, no… No iba a decir nada… Mejor tú…― Cedió la humana

―Como gustes… Te estaba buscando porque, quiero presentarte a alguien especial, además de que ansía conocerte, espero durante dos días, hasta que llegaras del trabajo. ―

―…Oh… Vaya… Un invitado. ―Dijo con emoción.

―Sí. ― Le tomó de la mano, y la condujo al pasillo, aun diciéndole ―…Te vas a sorprender…―

―Ja, pues si ya estoy sorprendida… ¿Cómo se llama o quién es? ― Preguntó la joven, caminando aprisa junto al lobo macho.

―Sólo, espera… Ya mismo lo verás. ―

―C-claro… Pero, a dónde me llevas, O'donnell…―

―Tú sigue caminando. ― Le respondió Wolf, sonando ansioso.

Departamento de Wolf,

Hora de la comida:

―…Aquí estamos… ― Comentó el lobo, apunto de entrar a su hogar

Viry simplemente esperó a que abriese, pareciendo paciente, aunque las ansias por saber de quién se trataba este misterioso invitado, le ganaban.

―Leon, y Panther también están aquí…― Abrió la compuerta, y le cedió el paso a la joven, quien entró con un poco de nervios, unos gritos alcanzó a oír al estar por el umbral.

―¡Te dije que no! ― Reprendió una voz chillona.

―Ay, ya… Tengo hambre, Leon... ― Dijo alguien más, con cierta pereza.

Al dar un par de pasos más, divisó a los otros dos, pero parecía adrede que la espalda de la pantera negra, tapase al tercer personaje al estar echado sobre la mesa o isla de cocina, donde del otro lado está el camaleón, en la estufa cocinando algún tipo de estofado, que inundaba la casa, con un buen y delicioso olor. La chica apenas e iba a dar un paso más, sintió de repente la mano masculina de su pareja que le tomó del hombro, abrazándola y con ella se dirigió detrás de Panther.

―…Hey, ya tranquilízate sobrino, no hay porque andar molestando a Leon, sino luego la comida le sale mal. ―

Panther se giró al oírle, al igual de Leon, mientras que el invitado se enderezó, y se puso rápidamente de pie, con los brazos extendido y gritando ― ¡Tío! ―

Viry quedó anonadada, y sonreía pareciendo un poco incrédula ―¿…T-t-t-t-t-t- tío…? ―Farfulló por la impresión, y al ver que el otro joven lobo del mismo pelaje que O'donnell, se irguió para verla, él sonreía tranquilamente, pero Wolf contestó. ―Sí, él es mi sobrino…―

―Lowell O'donnell ― Le dio la mano, presentándose al interrumpir a su querido tío.

―Oh…―Expresó la humana, bajando la vista a aquella mano que le ofreció, de inmediato la tomó saludándole ―Eh, sí… Mucho gusto, Lowell…― Saludó aún un poco atónita con la noticia, no se lo tragaba su mente todavía. ―…Es muy joven… es como ver a O'donnell…― Se dijo ella, aún perpleja.

―¡Ja! A él sí lo llamas por su nombre, eh…― Dijo Wolf entre dientes, cosa que de igual modo escucharon los dos.

―Ah… O'donnell…― Soltó la mano del sobrino, y dejó pasar ese tema, diciendo ― Bienvenido. ― Sonrió ― Acá mis ojos ― Volteó su mirada café a la violeta del otro, diciendo ―…Dijo que querías conocerme, y créeme que yo a ti también. ―

―Por supuesto. Ya ansiaba ver a la tan conocida hija del General, además…― Se acercó a ella, y la tomó abrazándola con un brazo sobre su hombro, y la despegó un poco del otro lobo, diciéndole ―…que estás saliendo con mi tío. Tenía aaañooos sin verlo feliz, y hasta aquellos otros dos, me lo dicen. ― Apuntó al otro par que se quedó más dentro de la cocina. Se separó y la tomó de los hombros diciendo ― Ralamente es un placer conocerte. ―Dibujó una sonrisa al final de la frase, a la vez que se enderezó.

―El gusto es mío… Cielos…― Expresó impresionada, alzando una de sus manos, la cual llevó a la mejilla peluda del joven lobo ― Sí que se parecen. ― Le acarició sutilmente, causando que el joven se pusiera un tanto nervioso.

―Ejem…― Carraspeó el lobo mayor diciendo ―¿Me perdí de algo? ―

―Sólo estoy viendo lo mucho que ambos se parecen. ― Soltó al otro, y dio un paso atrás diciendo con la mano en el mentón, mientras les observó ― Uhmm… ―

―¿Q-qué? ―Inquirió Wolf, pareciendo nervioso.

―Nada. ― Respondió ella, sonriendo ― Son realmente iguales, excepto por la altura, los ojos, además de él tiene el que te falta ― Dijo con ironía, pero sin sonar grosera.

―¡Viry! ― Exclamó el lobo.

―Ji,ji, lo siento… Simplemente se me ocurrió decirlo. ―

―Tiene razón, tío. ―Volteó Lowell a su derecha, y su pariente desapareció, volviendo su vista al frente donde se arrinconó con la humana, que quedó acorralada. ―…Tío, no la amenaces…― Dijo al escuchar el intercambió de cuchicheos entre ambos.

―¿Qué te hace pensar que le estoy amenazando? ―Sintió que su sobrino le tomó del hombro apartándolo, y contestándole en un tono habitual ― Se le nota en la cara, tío. La asustas…―

―Ay, Lowell. No exageres…―

―¡Hey! Ya está la comida…― Avisó a gritos el reptil.

―¡Oh, sí! ―Exclamó Lowell, contentó.

―¿Vienes? ―Dijo Wolf, aun casi encima de la joven

―…Sí. Deja pongo la mesa…― Se alejó del lobo, para tomar los platos de vidrio, y empezar a acomodarlos, a lo que Caroso, se acercó diciendo ―Siempre tan bonita, Viry. ― Le ayudó con los platos, a lo cual ella respondió con una sonrisa. ―Ay, Panther, y tú siempre tan galante. ―

―Dense prisa…―Comentó Leon al pasar a un costado de ellos, con la olla en manos.

Viry tomó asiento a un costado de Wolf, y del otro se puso Lowell, quedando la joven humana en medio de ambos. Leon dio por servido dicho guiso de carne y verduras.

― ¿Y bien? Me van a contar cómo se conocieron. ― Comentó Lowell.

― ¿Ah? ¿No te lo ha contado, ya? ― Preguntó con sorpresa la humana. ―…Eso fue hace…―

Cosa que Wolf casi escupe la comida, causando que todos en la mesa lo volteasen a ver, tosió un poco y aclaro la garganta, tomando de la mano a la chica, como si la detuviera diciendo ―Viry… eso…―

―Tranquilo… Santo cielo. ― Expresó ella, tomando la espalda de Wolf como si le diera masaje ― Sólo iba a decir que nos conocimos hace ya algunos años ―Volteó a su costado, viendo al expectante y sonriente joven lobo gris ―De hecho fue cuando sucedió la invasión Aparoid, en una de las misiones donde debíamos encontrar a Pigma. En sí, ése fue el momento en que lo vi, por primera vez, lo demás… Ehm… Sucedió después de la invasión, y tuvimos algunas diferencias…―

―Oh… ya veo. ―

―Je… Diferencias…―Expresó el camaleón con cierta burla.

―¿Eh? ―

―Ah… no es nada, Lowell, no es nada. No le pongas atención. ― Dijo un poco exaltado Wolf, con las manos alzadas al aire, viéndose un poco chistoso en el momento.

―Está bien, tío. ¿Por qué te pones tan nervioso? ―

―Ehm… por nada…―Lanzó una mirada amenazante al camaleón, que de igual modo no le importó.

―Pues bueno… Qué interesante, de seguro mi querido tío Wolf, se hizo del rogar, eh. ― Comentó el chico, para la humana a su lado.

―…Je… Sí, algo así. ―

―¿Estás segura que fui yo? ― Inquirió el otro, sonando muy serio.

―O'donnell, batallé mucho para saber de ti, después de imaginar que moriste en aquella ocasión, luego al saber que andabas en Corneria y sin mencionar lo de Fox… Creo que sí, pasé por muchas cosas…―

―Pero; si ya cuando me di cuenta de todo, y puse en claro lo que sentía, tú simplemente desapareciste…― Sonó a reclamo.

―Dije que pase por muchas cosas. Basta del asunto. ― Le calló colocando su mano en la boca del varón, causando que no hablase. ― Y así fue…―Dijo, dirigiendo su voz al sobrino.

―¡Ja, ja, ja! Ustedes están locos. ―

―¡Je, je! ― Sonrió la humana, mientras el lobo, se quitó de encima la mano de la joven.

―Creo; que es hora del postre. ―Mencionó Panther, levantándose de la silla, para ir a la nevera, donde sacó una charola de pastel de nieve, de sabor a chocolate.

―¡Woooh! Eso se ve delicioso. ― Expresó Lowell con un brillo en sus hermosos ojos carmín.

―Y lo está ―Dijo con orgullo la pantera.

―Es lo único que sabe hacer bien. ―

―Déjame en paz, Leon. ― Se defendió el otro

―¡Tch! ― Expresó el camaleón sarcásticamente.

―Ahora mismo les sirvo. ― Tomó el cuchillo, y unos platos más pequeños para poder servir el delicioso postre, que casi comenzó a derretirse.

―Toma… Toma… y Toma…― Pasó los platitos a cada uno sentado a la mesa.

―Oooh… Panther, está delicioso. Recuérdame pedirte hacer el pastel de bodas…―Soltó la joven humana sin pensar bien lo que dijo, cosa que dejó anonadado al lobo mayor a su lado, mientras que el otro joven lobato sonrió de oreja a oreja.

―Aaaah… Ya se van a casar, ¿Por qué no me lo habían dicho? ― Sonó muy contento.

―¡Ehm… Eh! No, no, no, no… ―Comenzó a negar Wolf.

Viry agachó su rostro, avergonzada aparentemente, y O'donnell, lo notó pensando que había metido la pata al negar hace un rato, aunque en sí era cierto.

―¿V-viry…? ― Inquirió un poco inquieto.

―Estoy bien, es solo… que… me dio pena… ― Alzó su rostro, diciendo ―Lo siento, sólo fue un comentario… no… es que… no me gusté la idea, pero… ah… supongo que aún podemos llevar las cosas, despacio, ¿cierto? ―

―Ah…― Expresó Wolf impresionado y tomó la cabeza de la humana acariciándola como le gusta hacer ― Claro que sí. Aún hay tiempo… Y cuando menos lo esperes, te lo propondré adecuadamente…―

―¡Eh! ―Despabiló la chica, con los ojos abiertos de sobremanera, y un rubor apareció en sus mejillas, a la vez que una sonrisa ―…Ah… Claro…―

―Qué cursis... ― Comentó Leon, levantándose de la mesa, para comenzar a limpiar, y lavar los platos.

―Cuentan conmigo para el pastel. ―Mencionó Panther, también levantándose de la mesa para ir donde Leon.

―Pues yo espero recibir la invitación. ― Comentó Lowell, estando a un lado del par de tortolitos. ―Tal vez decida, traer a mi novia. ―

―¿Eh? ¿Tienes novia? ― Cuestionó Wolf, con sorpresa.

―Claro. Soy el guapo de la familia, es obvio que la tenga, y es preciosa…―Comentó con los ojos idos, al parecer recordando a su amada.

―Qué bonito. ―Expresó la chica humana, recogiendo su plato, y el de Wolf. ―Lo pondré en la nevera, O'donnell. ―

―Está bien, gracias. ―Contestó viendo a la chica alejarse.

―Realmente te gusta…― Escuchó muy cerca de su oreja, cosa que le causó un ligero escalofrío.

―¡Lowell! ¡No hagas eso! ―

―¡Ja, ja, ja! Yo no hice nada… Sólo te hable al oído…―

―No molestes. ―

―¡Ja, ja, ja, ja! Para qué te enojas, tío gruñón… Oye así debería llamarte ¡Ja, ja, ja! ―Siguió riendo a carcajadas.

Viry los miró desde algunos metros, sonrió con la escena ante sus ojos, lo vio como si fuesen padre e hijo, entonces pensó que no se le había ocurrido preguntar. Volvió a donde ellos, diciendo ― Disculpen Lowell, y Don Gruñón ―

―Aaah… ¡Viry! ― Exclamó con fastidio, al sentirse atacado ahora por su novia.

―¡Ja, ja, ja! Ella también te llamó así…―

―Je, je… En sí ese título le queda mejor a Charlie. En fin…―Se sentó de nuevo ― Oye, Lowell… Estaba preguntándome, y… va más para los dos. ―Apuntó a ambos ― No sabía que O'donnell tuviese familia, realmente sigo desconociendo el pasado de tu querido tío. ―

―Oh…―Expresó el joven Lowell ―Bueno…―

―Sólo tuve un hermano ― Interrumpió el lobo mayor.

―…Mis papás fallecieron cuando yo era más pequeño, me dejaron a cargo de Wolf, y de repente Pow, desapareció. ―

―Pensé que habías muerto― Comentó el lobo mayor sonando muy serio.

―Lo sé, no te estoy echando la culpa de nada, mírame, estoy aquí, feliz y a salvo. ― Dijo Lowell con una sonrisita en el rostro.

―Por supuesto. ― Llevó su mano hasta la frente del chico, pero sólo para hacerle una pequeña bromita con su dedo índice que le causó un golpecito molesto en esa zona.

―¡Tío! ¡Eso duele! ―

―¡Je! ―

―Te lo tenías bien escondido, O'donnell. ― Definitivamente, no sé muchas cosas acerca de ti…―Sonó cabizbaja, y esto lo notó el nombrado.

Lowell, para romper la tensión ― Por qué desde que estoy aquí, sólo lo llamas por su apellido, yo también soy un O'donnell. ―

―Eh… Amm… ―Sacó a la joven humana de sus pensamientos.

―Así es como le gusta llamarme, el "Wolf" lo usa únicamente para el momento del sexo ―

―Jo, jo… Ok… Demasiada información ―

Viry se puso roja y gritó ―¡O'donnell! ― El cual volteó y sacó levemente la lengua mofándose ahora de ella al verla avergonzada. ― No es cierto, Lowell, no le creas… ―

―Pues entonces dime, para olvidar eso último que dijo mi tío. ―

―Ah… Eso es… Yo… Realmente no lo sé…―

―Es tu pareja, ¿no? Deberías tenerle mucha más confianza en vez de tanto respeto. ―

―Sí… lo sé. No es que no le tenga confianza, es sólo que me da mucha vergüenza llamarlo por su nombre… ―

―¿Por qué razón? Las veces en que me has llamado por mi nombre, son contadas… Y hasta me sobran dedos de la mano. ―Comentó Wolf.

―Suena como si lo regañaras… Je, así me decían también, conforme a la lista de la academia, o cuando hacía enojar a algún profesor. Deberías llamarlo por su nombre… Vamos, inténtalo ahora…―

―¿Eh? ¿Ahora? ― Expresó sorprendida a la vez que avergonzada.

―Vamos, Viry… Qué tan difícil puede ser…―

―Es… es que…―Fue bajando la cabeza a la vez que su voz disminuyo.

―Wolf ―Interrumpió el camaleón con su típico semblante y voz. ―Panther y yo volveremos más tarde. ―

―Por supuesto. Nos vemos. ―

―Sí…―

―Hasta pronto, Viry. ―Se despidió Panther.

La humana solo le dijo adiós con la mano, estando avergonzada aún, y dándose cuenta que está a merced del par de lobos grises. ―Debería huir…―Pensó.

―¿Y bien? ¿Estás lista? ―

―¡No! Lowell… Yo…―

El nombrado joven, se puso de pie, y obligó a su tío a pararse también, y lo colocó frente a la silla de la chica Pepper. ―Aquí está… Vamos, sólo tienes que decir su nombre…―

―…Eh… Con sus ojos puestos en el único ojo visible de su pareja, se puso nerviosa, y balbuceaba como una boba, a la vez que se puso roja, y roja a cada segundo que posaba su mirada en la del otro. No soportó la tensión, simplemente su cuerpo se hizo hacia atrás, a punto de caer al suelo, cosa que no sucedió debido a que el lobo mayor la pescó a tiempo.

―Déjala, la presionas demasiado. ― Dijo para Lowell, mientras tomaba a la humana entre sus brazos, la cual abrió sus ojos como si estuviera somnolienta, y justo cuando el lobo gris se irguió junto con ella, al mismo tiempo escuchó un susurró ―…Wolf…―

O'donnell, se puso rojo de repente, trató de ocultarlo lo más que pudo estando frente a su sobrino.

―…Me disculpo, tío… No era mi intención incomodar a tu novia. ―Le dio la espalda diciendo ― Voy al baño…―

Al momento en que Lowell se apartó, Wolf sentó a la humana despierta, en el sofá doble, se puso en cuclillas para llegar a su altura, y le obligó a que le mirase, quería verle a la cara.

―…Me llamaste…―

―…Ah… Eh… Esto…― Ni siquiera había articulado palabra alguna, y lo que sea que iba a decir, Wolf lo detuvo al envolverla en sus brazos, muy tiernamente.

―Sí que sabes hacer a un hombre feliz…―

―…Qué cosas dices…― Contestó ella, abrazándolo también.

Lowell, los observó, escondiéndose detrás de una de las paredes, no fue al sanitario como dijo que iría, sabía que tenía darles un momento a solas. Sólo esperó unos segundos más, y salió a escena diciendo ―Bien… Sería bueno repetir esto, todos los días. ―Se acercó a la pareja, y Wolf se puso de pie. ―Me alegra que estén bien, felices y notar que se quieren un montón. Aunque tu novia, tío, es muy inocente. ―

―¿Cómo? ―Inquirió la chica un poco confundida.

―Ay, Lowell… No sabes las cosas que me ha hecho pasar, y hacer…― Sonrió de una manera un poco pícara, recordando algún acontecimiento pasado.

―Válgame… ―Expresó el lobato menor un poco sorprendido.

―…Eh… es decir, así me gusta. A ver cuándo nos presentas a la tuya. ―

―Claro, está de viaje, pero… Se lo haré saber. Cuando ustedes se casen ―Le pegó levemente en un costado de las costillas a su querido tío.

―Que sea un trato. ― Le miró Wolf con suspicacia

―Ya está… ―

Viry sólo sonreía, sin entender muy bien el asunto entre éste par de lobos, desde su asiento, volvió a tener el mismo pensamiento de hace un rato. De igual modo le daba gusto ver a Wolf, actuando despreocupadamente, y feliz.

―Como un día cualquiera… Nah… Este es más un día especial. Es cierto que no le conocía a otro familiar, me da mucho gusto el conocer al sobrino de Wolf, se nota que se quieren mucho, es bueno agrandar la familia, y la lista de conocidos… Lowell O'donnell, eres bienvenido. ― Pensó la chica, con una sonrisa.

…Fin…

Notas del autor: Sí,es algo pequeño y corto… xD Pero sólo lo hice porque le debía su obsequio a mijo, mijito… Ray Wolf Aran x3 Que lo quiero un montón, ya lo he dicho, y creo que siempre lo digo en todos mis fics chisqueados que hago por nuestros gustos locos y parecidos. ¡Feliz cumpleaños mijo! Sí, otra vez xD ¡Ja, ja!

Espero que haya sido de su agrado mis queridos lectores, y lectoras… Un pequeño oneshoot sobre un mundo "alterno" usando el personaje principal de LO'D, Lowell O'donnell, si no lo conocen, deberían pasar a leer su fanfic, está muy bueno y es largo, para los que son de carrera larga (?) ¡Jaja! Les gustará, así que lo recomiendo ampliamente, búscalo xD. En fin, sin más qué decir, que tengan un lindo día, tarde, o noche, depende a la hora que lo hayan leído. ¡Saludos y bendiciones! :3