¡Hola a todos! Bueno, pasa que quería experimentar escribiendo solo con diálogos y me salió este drabble. Para empezar esto lo primero que escrito de Naruto y lo primero de temática yaoi/shonen ai -/w/- jeje es cortito y monoso, creo. Espero que os guste :DD
—Oi, usuratonkachi.
—¿Huh? ¿Qué quieres, teme?
—He estado pensando...
—JAJA, ¿en serio?
—¡Idiota, esa es mi linea!
— Lo que tu digas, Sasuke-teme.
—Tch. Dobe...
—De todas formas, ¿qué querías decirme?
—Bueno, me preguntaba si naciste así de tonto o se te pegó de algún sitio.
—¡ ¿En serio era eso lo que querías decirme? !
—Hm. No realmente.
—Hoy te has levantado con el día gracioso, ¿eh Sasukin?
—... ¿Cómo me has llamado?
—Sa-su-kin~
— Bien, pues ahora te quedas sin saber lo que tenía que decirte, usuratonkachi.
—¡Psst! No... no me interesaba de todos modos.
—Vaya, ¿en serio? Quizás debería ir a contarle a Sakura. Bien, hasta luego.
—¡E-espera, teme!
—¿Oh? ¿por casualidad no querrás oír lo que iba a decir?
—Moou, solo dilo ya, ¡dattebayo!
—Veras, no tendría problema en decírtelo pero... tus constantes "dattebayos" son tan molestos que... ¡vaya, se me han quitado las ganas!
—Se-serás...
—¿Seré que? ¿tienes algún problema, Naru-chan?
—O-oi, mejor estate callado, datteba...
—Shhhhh...
—¡Teme, puedes hacerme callar sin necesidad de plantarme tu dedazo en los morros!
—Ya te lo dije, Naru-chan, no me gusta esa molesta expresión. Solo deja de decirla, ¿vale?
—¿Qué? ¡No! Y no me llames Naru-chan, imbécil.
—¿Oh? Eres un compañero de grupo para nada adorable. Y yo que pensaba contártelo...
—Si-si ese es el caso... Está bien.
— Bien dicho, Te lo diré entonces... acerca la oreja, usuratonkachi. Es un secreto y nadie más puede saberlo, ¿entendido?
—Sí...
—Acércate más, idiota. Ya te he dicho que nadie puede enterarse.
—¿M-más aún? Bien...
—Sí... Así está bien.
—¡Agh! cierra la boca, teme. Tu aliento me hace cosquillas en el oído.
—Je. ¿De veras?
—Um, ¡sí, y es muy molesto! Agh, ¿vas a contarme ese secreto o no?
—Claro... ¿preparado?
—¡Solo dilo y... AH!
—Jajaja, eres tan inocente, Naruto.
—¡Me mordiste la oreja, Sasuke-teme!
—Oh, vamos. Mordí flojo.
—¡N-no tiene que ver con eso, cabrón!
—Dobe...
—¡Qué!
—Estás todo rojo. Alguien podría confundirte con un tomate, ¿sabes?
—¡Ugh, eres un idiota! ¡Me voy! Y puedes quedarte con tu estúpido secreto, ya no me interesa.
—Espera. La verdad...
—Suéltame, idiota. Me voy.
—No, Naruto. La verdad es que no sabía como decírtelo.
—¿Huh?
—Está bien, voy a contártelo. Cierra los ojos.
—¿Por quien me tomas? ¡No voy a caer de nuevo!
—¡Solo ciérralos, dobe!
—¡Está bien, idiota!
— ...
— …
— …
— …
— …
— ...
—Ah...
—Sa-sasuke... teme... te dije que no... me volvieras a tomar el pelo.
—¿Quién te está tomando el pelo? Cállate y usa tus labios para algo útil como seguir besando, usuratonkachi.
