Los personajes de Twilight le pertenecen a Stephanie Meyer (ya dije que estoy ahorrando para comprárselos! XD)
La historia le pertenece a Emmamama88, yo soy su fiel servidora que solo traduzco.
Capitulo beteado por Estephany Twilighter Priego Vazquez de FFAD
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-Gracias nena por brindar lo mejor de vos en todas mis locuras!-
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Gracias a MaeCllnWay por el diseño de portada:
-Hiciste un diseño espectacular, cariño, gracias!-
Capítulo 01 - Axilas & Manchas de café
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Martes 22 de diciembre, 2009
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Mi móvil me alertó sobre un mensaje de texto.
"Encuéntrame en la sala de conferencias en 10 minutos. Necesitamos hablar antes de la reunión de las 9:30."
Rose
Miré la hora… 9:10.
Oh Dios, por favor que no me haga ir a esa reunión.
Sí…, tiendo a rezar bastante cuando salgo con Rosalie.
Tomé mi café y salí a la sala de conferencias. Caminé rápidamente por la oficina de Mike, esperando que no me viera.
Mis esperanzas se vieron aplastadas cuando lo escuché llamarme con su odiosa voz.
—Bella, Bella, Bella —me llamó con lo que asumí era su voz sexy.
—Hola, Mike. Estoy un poco apurada, hablamos luego. —No aminoré mi paso mientras, casi sin mirarlo, continué caminando hacia la sala de conferencias.
—Seguro, Bella, estaré esperando. —Me encogí un poco.
Por alguna razón, Mike Newton se había propuesto invitarme a salir desde que empecé a trabajar aquí. Nunca lo alenté, de hecho, lo desanimaba. Incluso he pensado en la idea de fingir que soy lesbiana para que me deje en paz, pero eso les daría ideas a otras personas. Con mi suerte, Shelly, una de las periodistas de deporte, que ya me comía con los ojos, comenzaría a insinuarse. Ella era como Mike pero en chica.
Realmente no podía entender por qué se interesaban en mí. Emmett era el hermano que se llevaba todas las miradas. Soy normal, aburrida y torpe en extremo.
De cualquier forma, he estado trabajando en WIRI. Seattle "Up and Coming" red de afiliados, en una estación de televisión desde septiembre. Rose es uno de los miembros del personal al aire. Ella también es la novia de mi hermano, y es de esperarse, luego de la noche de año nuevo, su prometida. Sí, Emmett va a soltar la pregunta a medianoche.
Estoy en mi último año en la universidad de Washington, especializándome en Inglés. Rose me ha conseguido este trabajo parcial, como su asistente personal, o como me gustaba llamarlo "Glorificado Go-fer".* Este trabajo es lo que me ayuda a pagar las cuentas, pero mi verdadera pasión es escribir. Me ha encantado escribir historias desde que tengo memoria pero, desafortunadamente, no es algo con lo que pueda hacer una carrera ahora mismo.
Rose se cruzó conmigo cuando llegué a la puerta de la sala de conferencias y me llevó dentro de esta.
—Oh Dios mío, Bella, finalmente lo hizo. —Nunca había visto a Rosalie tan emocionada.
— ¿De qué estás hablando, Rose?
—Por fin conseguí la entrevista con Edward Masen. Su representante vino esta mañana para arreglar los detalles —dijo exaltada.
—Rose, su representante es tu hermano, ¿por qué es tan emocionante? —Rodé los ojos frente a su entusiasmo.
—Porque Masen no da entrevistas a menos que sea para promover una película. He estado molestando hasta la mierda a Jasper hace meses para que me consiguiera una. Lancé esto como: "De chico de pueblo a rompecorazones de Hollywood, la historia de Edward Masen." Jasper me llamó hoy para confirmarlo.
—Dios, Rose, toma un respiro. —Solté una risita por la falta de serenidad de mi amiga.
—Tenemos mucho trabajo que hacer. Jasper y los demás estarán aquí dentro de poco.
—Rosalie, ¿por qué me necesitas? Sabes que me pongo muy nerviosa alrededor de gente nueva.
Ya conocía a Jasper, pero aún no a su esposa, Alice. Jasper y Alice (quien de paso es la hermana de Edward Masen) se casaron en junio pasado.
El público en general no sabía de la relación entre Edward y Alice pero, debido a la posición de Jasper, una gran cantidad de celebridades de Hollywood asistieron a la ceremonia. Me habían invitado, pero di una pobre excusa. Estoy bastante segura de que Emmett y Rosalie me habían pillado, pero no me presionaron.
Pude sentir mis manos comenzar a sudar, y si ya estaba sudando ahí, sabía que era 10 veces peor en mis axilas.
Mierda, no recuerdo si me puse desodorante hoy… Qué día para olvidarse.
Traté de oler discretamente mi entre brazo, esperando que Rose no lo notara.
—Bella, ¿qué diablos estás haciendo? ¿Te estás oliendo? —Estaba agradecida de que lo hubiera susurrado y que aún estuviéramos solas en la habitación.
—Yo… Yo no puedo recordar si me puse desodorante y tú sabes… —susurré.
—Oh, Jesús… —Ella se acercó a mí y respiró. Sentía mis mejillas arder—. Hules bien, genial de hecho, recuérdame olerte luego, ahora necesito concentrarme en la entrevista y tú me vas a ayudar.
Estaba muerta de nervios a este punto y había perdido totalmente mi capacidad de hablar. Levanté un poco la voz y dije:
—No puedo ver en qué te sería útil, salvo para murmurar con torpeza, tropezar con mis pies, sudar profusamente y avergonzarme en una sala llena de personas de Hollywood. Tal vez debería bajarme las bragas, quitarme el sujetador y desfilar por la estación: así puedo hacer frente a todas las humillaciones en un solo día.
Alguien aclarándose la garganta desde la puerta me congeló en mi lugar.
Al tiempo que cubría con mis manos mi cara, sentía mi sonrojo por todo el cuerpo, desde la punta de mis pies hasta mi cabello. Miré por entre mis dedos a la persona en cuestión.
Y porque el universo me odia, ¿quién debería estar de pie allí? Nada menos que Edward Masen, sonriendo con un gesto malicioso.
Ahí estaba en toda su perfección. Desde lo alto de su cabello bronce alborotado hasta el fondo de sus caros zapatos italianos. Él era sexo reencarnado.
Ya lo había visto en algunas películas, y lo consideraba atractivo. Pero, aquí mismo, en persona, me sorprendió por su belleza. Y al igual que el universo, él estaba allí de pie, burlándose de mí.
¿Hey, genio, ni siquiera una palabra? Vamos, Bella, que tú eres la experta en inglés.
Mi temor de las axilas húmedas fue reemplazado por el miedo de cagarme en los pantalones. ¿Por qué diablos me pasa esto a mí?
Pensé que podría llegar a la ventana, abrirla y lanzarme hacia una muerte espantosa, que debería ser mejor que morir de vergüenza en donde yo estaba. Luego recordé que las ventanas no se abren y el edificio solo tenía dos pisos. Probablemente terminaría con un brazo o una pierna rota y me convertiría en un serio inconveniente para Emmett o Rose, si tuviera que ir al baño.
Mierda.
Hice una pausa en mis divagaciones al escuchar realmente la conversación entre Rosalie y el equipo de Edward, que habían entrado a la habitación mientras yo estaba distraída.
De inmediato reconocí a Jasper Whitlock. Era alto, rubio y hermoso, igual que Rose.
Detrás de Jasper había una rubia bajita y un hombre rubio de mediana estatura, los dos eran bastante del tipo de Hollywood, y tenían rasgos faciales similares. Ellos se presentaron como Jane Volk, la agente de Edward, y Alec Volk, su asistente personal. No me sorprendió que Jane y Alec fueran hermanos.
Una sorprendente hermosa mujer morena entró después, se presentó como estilista y hermana de Edward, Alice, a quien reconocí por las fotos de la boda.
La última persona en entrar fue el hombre más enorme que haya visto en mi vida. Incluso más grande que mi hermano, que era jugador de fútbol profesional. Este tipo media más de seis o siete pies. Su nombre era Félix, el guardaespaldas de Edward.
Santo cielo, me alegro de no ser la responsable de pagar sus facturas de comestibles o cocinar sus alimentos. En serio tendría que replantear mi creencia de que no había nadie que comiera más que Emmett.
Rose abrazó a Jasper y a Alice, luego estrechó la mano de Edward, Jane, Alec y Félix.
—No sabía cuántos iban a venir, pensé que solo serían Jasper, Alice y Jane —dijo Rose, manteniendo su sonrisa pero entornando los ojos a su hermano.
—Sí, Edward quería conocerte antes de la entrevista y los demás son parte del paquete —dijo nervioso.
Sí, incluso Rose intimida a su hermano.
—Bueno, Félix, Alec y yo nos vamos esta tarde para regresar a nuestros hogares para la navidad. Este es nuestro último día de trabajo con Edward antes del año nuevo. —Jane fue un poco a la defensiva.
—En realidad es una buena oportunidad para ver algunos detalles —dijo Rose feliz.
Todo el mundo tomó asiento en la sala de conferencias y Rose tiró de mi brazo, obligándome a depositar mi trasero en la silla junto a ella.
El hombre vivo más sexy del mundo tomó su lugar frente a mí. Si lo dice la revista People debe ser verdad.
Edward frunció el ceño mirando en mi dirección. Rose fue arreglando los detalles de la entrevista de Edward con Jasper.
—Bella me ayudará con la lista de preguntas hoy. Y creo que podríamos hacer la entrevista la próxima semana.
—Rose, necesito aprobar las preguntas mucho antes de la entrevista, eso evitará problemas de ambos lados —dijo Jasper.
— ¡Lo tengo, Jasper! —Luego fijó su atención en Edward, que seguía con su mirada más o menos en mí—. Estoy muy feliz de que haya aceptado esta entrevista, señor Masen. Prometo que no se arrepentirá.
—Por favor, Rose, llámame Edward. Después de todo, Jasper y Alice me han contado demasiado acerca de ti que ya siento que te conozco. Sin embargo, no estoy familiarizado con tu amiga —dijo Edward mientras inclinaba su cabeza en mi dirección.
—Oh, perdóname, en qué estaba pensando. Edward, ella es Isabella Swan, mi asistente. Uh, eso suena algo frío, en realidad ella es mucho más que eso, es mi mejor amiga y su hermano es mi novio, por lo que somos muy cercanas —respondió Rose, mirándome con disimulo.
—Estoy contento de ver que tú estás tan cómoda con el nepotismo como yo, Rose —comentó Edward con una sonrisa.
—Oye, este negocio es todo acerca de a quién conoces ¿verdad? —respondió ella.
—Absolutamente. —Edward volvió a mirarme—. Y muchas veces… con quién estás relacionado…
—Bueno, todos sabemos que el éxito comercial me mantiene muy ocupada —bromeó Alice—. Mi trabajo como estilista junto a Edward es simplemente para que yo pueda estar segura de que va a vestirse adecuadamente para ser el centro de atención —continuó—. Si yo le permitiese vestirse solo, él nunca saldría de su sudadera Doc Martens y unos vaqueros.
Un hombre conforme a mi corazón y a otras partes de mi muy sudado cuerpo.
Santa mierda, ¿de dónde viene esto?
—Oh sí, Bella, creo que nunca te he dicho que Alice es diseñadora de modas. De hecho, ella es la co-fundadora de Brandon Miles Desings —declaró Rose, sonriendo a Alice.
—Brandon era el apellido de soltera de mi abuela y también mi segundo nombre —aclaró Alice—. Miles viene de mi compañero de negocios Christopher Miles.
Los medios de comunicación siempre veían a Brandon Miles como un diseñador exclusivo. Ahora venía a averiguar que no existía y uno de los propietarios era ella, la hermana de la estrella de Hollywood más popular del momento. Impactante.
Me reí para mí misma, y la mirada de Edward se volvió cuestionadora, como si quisiera averiguar qué sucedía.
—Si no te importa, Bella, nos gustaría mantener ese secreto en silencio. —Alice sonrió—. Nunca quise ser conocida por lo que mis parientes eran. Debo decir que es muy satisfactorio tener un negocio de gran éxito al tiempo que conservo mi anonimato.
Decidí esconderme de los ojos vigilantes de Edward, tomando un sorbo de mí, ya frío, café.
De cierto modo oía los detalles de la entrevista mientras jugaba con el borde de mi taza de café, evitando en todo momento el contacto visual con él.
Se decidió que la entrevista se llevara a cabo a lo largo de tres días. Desde el 28 hasta el 30 de diciembre (el próximo lunes, martes y miércoles). La primera parte se filmaría en la suite de Edward, en el hotel 1000. La segunda parte en algún lugar de Seattle, que aún no se determinaba. Y la última parte se filmaría en el estudio de televisión.
—Estoy en la ciudad para las fiestas y me quedaré hasta el día después de año nuevo, así que pensé que podría ser un buen tiempo para hacer una entrevista. Jasper ha tratado de convencerme desde hace un tiempo —dijo Edward mientras me sonreía.
Esa sonrisa me estaba volviendo loca. Me gustaría borrarla… con mi lengua. Una vez más, ¿qué demonios me pasa?
Comencé a prestar atención a la conversación.
—Ahora, por supuesto, soy consciente de que tus asistentes estarán de vacaciones estas semanas, por lo que estaré encantada de enviar a alguien de la estación para que esté contigo estos tres días —mencionó Rose alegremente.
—Bueno, creo que me gustaría pedirle a la señorita Swan que sea mi asistente. Ella parece muy capaz para manejar mis necesidades…
Retrocede y detente. ¿Qué mier…?
Me ahogué con mi café e hice un desagradable espectáculo de balbuceos, tos, y luego escupir y derramar el contenido de mi taza sobre la parte frontal de mi camisa. Por supuesto, hoy llevaba una camiseta fina de algodón blanco.
Jodida vida.
— ¡Qué demonios, Bella! —gritó Rose—. Oh, Dios mío, mira tu camiseta, podrías participar en un concurso de camisetas mojadas, puedo ver tu sujetador.
Rápidamente crucé mis brazos sobre mi pecho, pero eso no impidió que mis ojos se llenaran de lágrimas.
—Déjame ver qué puedo encontrar para que te pongas. —Rose saltó de su asiento hacia la puerta.
Que alguien me mate ahora.
—Déjame ayudarte —dijo Edward mientras se quitaba la chaqueta. Se acercó a mí mientras yo me sentía morir de vergüenza. Cuando llegó a mi lado, gentilmente la colocó sobre mis hombros para luego voltearme y subir el cierre.
Lo miré, esperando ver su sonrisa habitual o quizá una mirada fría. Pero me encontré con una mirada ardiente en esos hermosos ojos verdes. Estaba demasiado cerca… y olía tan bien.
Mmm… yo no quiero su lástima… quiero morder su labio inferior.
Nunca había tenido esta reacción con nadie. Nunca… por eso es que sigo siendo virgen.
Lo miré otra vez y su expresión reflejaba lo que era mi propia y enorme sorpresa. Estaba atónito y sin palabras.
No quería nada más que correr mis dedos por esos cabellos cobrizos y besarlo apasionadamente.
Wow, ¿qué está pasando conmigo? Jamás he besado a alguien. Y no podría diferenciar un beso ardiente de una patada en el culo.
—Volviendo al asunto del asistente personal… —Rose había vuelto a mi lado—, Bella es mi ayudante, Edward. No creo que ella esté muy cómoda trabajando contigo.
Gracias al cielo por Rosalie. Ella me conoce muy bien. Mi inocencia no sobreviviría demasiado tiempo en presencia de "Sexy Eddie". Ese fue el nombre que la revista Enquirer le dio el año pasado, cuando fue visto salir con dos mujeres diferentes en un solo fin de semana. Ninguna de las cuales, debo añadir, era su novia estable de los últimos seis años: Tanya Madison, estrella de Hollywood. Tanya también fue la co-estrella de Edward en, al menos, cuatro películas, desde que ambos tenían 18 años.
Yo no sería una mella en su cama. Incluso si su novia hiciera la "vista gorda" ante sus deslices. Ella no debe tener demasiada autoestima o Hollywood era un mundo completamente diferente al que yo estaba acostumbrada.
Probablemente un poco de ambos.
—Realmente tengo que insistir en tener a la señorita Swan. Es una condición para garantizar la entrevista. —Edward prácticamente respiró la primera frase en mi oído. Luego se volvió hacia Rosalie para decir la segunda.
Mierda, mierda, mierda. Me siento mareada, su aliento es embriagante. Defiéndete tú misma, Bella.
La parte no intoxicada de mi cerebro se dio cuenta de que Rosalie se estaba enfadando. Y estaba a punto de acabar con esta reunión.
¡Oh, no, no podía dejar que Rose saboteara su carrera de esa forma! Pero ¿podría trabajar y sobrevivir con Edward?
Tuve que hacerlo. Rosalie necesitaba esta entrevista para su carrera. Y ella era tan malditamente buena en lo que hacía, y esto podría ayudarle a tener mayores y mejores oportunidades.
Rose estaba furiosa.
—Bueno, Edward, debo insistir en que tomes tu estipulación y te la metas…
— ¡Rose! —interrumpí, antes de que esto se agravara más—. Lo haré —dije, tan bajo que apenas pudo oírme.
— ¿Qué? Bella no necesitas hacer esto. —Rosalie me tomó de los hombros y me volteó hacia ella—. La entrevista no es tan importante. Yo jamás te pondría en esta posición. — Rosalie estaba visiblemente molesta.
—No, Rose, estoy bien con ello, tanto tiempo como tú no me necesites.
— ¿Estás segura? Bella, no quiero molestarte. Tendrías que pasar demasiado tiempo con él a solas. ¿Puedes manejarlo? —Rose estaba completamente ajena a la presencia de las otras personas en la habitación.
Edward no solo me miraba a mí, pero se veía confundido por las palabras que Rose decía.
Es injusto guardar rencor contra Edward porque tengo problemas emocionales.
Me sentí un poco mal por él. Pero luego recordé que era un bastardo.
—Estoy bien, Rose. Solo es parte de mi trabajo, ¿de acuerdo?
Rosalie suspiró y miró a Edward.
—Escucha, Masen: no me gusta esto, pero Bella es una mujer adulta y no puedo tomar decisiones por ella. Solo tienes que saber esto… —La voz de Rose se volvió dura y amenazante—: Bella no es como las mujeres con las que estás acostumbrado a estar. Ella es frágil.
¡Oh no, Rose no ahora! No tires mis trapos sucios al aire, no aquí, no ahora.
El sonrojo volvió a mi rostro mientras bajaba la cabeza y miraba mis pies.
—Esta chica es la hermana de Emmett Swan. Sí, el Emmett Swan de los Halcones Marinos de Seattle. —Rose ahora se estaba divirtiendo—. Sé de tu reputación, y si le causas alguna molestia, Emmett ni siquiera tendrá tiempo de arrancarte las pelotas, porque yo le ganaré.
— ¡Oh Dios mío! Rose, basta. —Este día había estado lleno de momentos embarazosos.
Decidido.
Me volví hacia Edward, sus ojos verdes brillaban, y tenía una sonrisa divertida en su hermoso rostro.
— ¿Estamos de acuerdo aquí? —preguntó—. Porque realmente necesito ver a mis padres antes de instalarme en el hotel.
—Sí, creo que estamos de acuerdo. —Rose aún seguía enfadada, y no trataba de ocultarlo.
Ella tomó del brazo a Jasper, mientras hablaba en voz baja con él, y lo llevó al elevador.
Todos los demás los siguieron. Alice me dio una mirada significativa, y sonrió mientras seguía a su marido.
Edward y yo nos quedamos solos en el salón de conferencias. Él seguía mirándome, no sonriendo, pero estudiando mi rostro. Y se quedó confundido.
—Buenos días, señorita Swan, fue un placer conocerla.
Y, por supuesto, me quedé helada en su presencia.
Echó una mirada más de desconcierto, suspiró y se fue.
¿En qué me había metido?
Sorprendentemente, Rose no sacó el tema de la asistente personal por el resto de la jornada laboral. Por la tarde, luego de haber grabado los segmentos para el mediodía, y para las 5 de la tarde del día siguiente, nos encontramos en la oficina de Rose intercambiando ideas para la entrevista de Cullen.
— ¿Eres o has sido comunista? —Yo estaba tumbada en el sofá, tratando de llegar a las últimas preguntas de la entrevista.
— ¡Ya déjalo, Bella! En serio, tenemos que terminar con esta lista de preguntas y que la aprueben hoy. Tengo un montón de cosas que hacer. Y que me torturen si gastamos un minuto más de la víspera de navidad en esta oficina.
—Pensé que el McCartismo era un tema perfectamente aceptable. Además, Jasper no te dejará hacer ninguna pregunta acerca de las relaciones personales de Edward. Y no puedes mencionar a sus padres o a Alice. Estamos muy limitadas.
Estaba muy molesta por todas las restricciones puestas en esta entrevista.
—Bella, estamos de acuerdo con el tema de sus relaciones. Pero no entiendo por qué quiere mantener a sus padres y a su hermana fuera de esto. Él ni siquiera usa su verdadero apellido: Cullen. Usa Masen, el apellido de soltera de su madre, para proteger su privacidad.
—Sí, pero no podemos decirle al público cualquier cosa ¿verdad? —Yo seguía enojada.
¿Quién se cree que es, de todos modos?
—Ok, qué tal... "¿Dónde estabas/qué estabas haciendo cuando pasó lo del 9 – 11?" —pregunté, tratando de volver a la línea.
—Oh, bueno Bella. Nosotros podemos resolver esas restricciones. —Ella me miró.
Después de unas dos horas, Rosalie y yo teníamos preparadas las preguntas en el e-mail para Jasper.
Para las cuatro, Jasper había devuelto el e-mail con la lista, menos siete preguntas que Edward consideró censurables.
— ¿¡Qué mierda está mal en preguntar si es una persona de gatos o perros!? —Oí gritar a Rose en el teléfono a Jasper—. Sí, sí, sí, no quiere decepcionar a sus fans, seguro, como sea, Jasper. Él es una gruesa pieza de trabajo si me preguntas. ¿Por qué si es actor insiste tanto en ocultar su vida privada?… Eso parece absurdo… Está bien, sí, creo que es todo. Buenos, te veo mañana con Alice en nuestra casa para una cena. Jasper, siento haber sido tan ruda, realmente aprecio que arreglaras todo esto para mí, significa mucho… También te quiero, adiós. —Rose sonrió y colgó el teléfono—. Bueno, Bells ¿estás lista para ir? Emmett tiene práctica, así que cenarás conmigo.
Oh no. ¿Por qué tengo la sensación de que Rose soltará la bomba de Edward Masen en cuanto estemos a solas?
Buenas! Así empezamos con "Vírgenes y Villanos"
Juro que tengo tantas energías puesto en esta historia, ojala les guste y dejen sus opiniones.
Las actualizaciones serán una vez por semana, en lo posible, los días viernes!
No quiero adelantarles mucho, pero se van a divertir y enfurruñar! XD
Como siempre digo, los adelantos e imágenes del fic los pueden encontrar en el grupo de fb! (link en mi perfil!)
Gracias por acompañarme en esta locura!
凸(^_^)凸
Nos leemos en la próxima actualización!
๑۩۞۩๑
#Andre!#