CORAZON SALVAJE

Era una noche de lluvia acompañada de viento muy fuerte, los arboles se movían con mucha fuerza y brutalidad, el cielo estaba completamente lleno de truenos y relámpagos, por lo que el zoológico de Central Park se encontraba cerrado.

-pero que dura noche ¿no creen?.- les pregunta a sus soldados, Skipper.

-sí que es muy noche muy dura y triste.- le confirma cabo.- solo espero que Kowalski esté bien.

-¿a qué te refieres con qué esperas que este bien?

-es que Kowalski salió del cuartel y no ha regresado

-¿Cómo que salió del cuartel?.- pregunta Skipper muy impresionado, en ese momento, en las afueras del zoológico, en el parque, se escucha como relampaguea muy fuertemente. Cierto pingüino alto, se acobijaba de la lluvia entre un gran árbol.

-no creo poder llegar.- dice Kowalski mirando el gran camino que le falta para llegar a su base.- lo mejor será esperar a que la lluvia se tranquilice.- en ese momento, ve como del árbol comienzan a caer varias hojas, desvía su mirada hacia arriba del árbol y ve a cierta halcón que ya conocía desde hace mucho tiempo.-… ¿kitka?

-hola Kowalski.- lo saluda ocultándose de la lluvia en el árbol, al igual que el.

-kitka, ¿Qué haces aquí?

-vengo a ver a Skipper.

-ya había terminado su relación contigo, ¿no?

-si, así es, pero no me daré por vencida, he vuelto para volver a conquistarlo y para que volvamos a ser una pareja feliz.- le explica la halcón con una gran sonrisa. Kowalski en el fondo, sabía que era una mentira, por lo que se preguntaba, cuál era el verdadero motivo por el cual la halcón quería volver a ver a su capitán.

Esta baja del árbol y se acerca a Kowalski aun tratando de taparse de la lluvia.

-hace días que ya no te veía.- le dice con una sonrisa coqueta.

-ni yo a ti.- la halcón comienza a acercarse a este muy lentamente y colocando una de sus alas sobre su mejilla.

-me sorprende aun que no tienes novia, si eres tan guapo como Skipper.- el pingüino ante este comentario solo se quedo mirando serio a la halcón, pues ya conocía muy bien sus intenciones.

-gracias por tu comentario, pero si no tengo novia es por algo que yo solo sé y no me gusta decírselo a cualquier animal.

-me encanta tu silencio.- le dice con voz seductora.

-sabes algo kitka, yo no soy como Skipper, yo no caeré en tus encantos.- le contesta muy a la defensiva.

-por favor Kowalski, no niegues el amor… solo déjate querer.- la halcón enreda sus alas en su cuello atrayéndolo hacia él y comienza a besarlo apasionadamente.

EN EL ZOOLOGICO…

Marlene en su habitad, veía como la noche continuaba siendo empapada ante tal lluvia, se sentía un poco sola y temerosa. Camino hacia su cama de cemento y saco debajo de su almohada una foto de ella con Skipper.

-se que yo para ti solamente soy una simple amiga… pero no sabes cómo me gustaría llegar a ser algo más que eso.- dice hacia la fotografía dándole un beso justo donde estaba el líder pingüino.

Mientras que en el habitad de los pingüinos, Skipper estaba siento comido por las ansias, no sabía en donde estaba su teniente y con esa lluvia tan fuerte, temía que le pasara algo malo o que hubiera sido atacado por alguno de sus enemigos.

EN EL PARQUE…

Kowalski podía sentir dentro de el, cómo su corazón latía fuertemente, pensaba que esta era la primera vez en la cual, una hembra se interesaba por él, aun siendo Kitka un amor prohibido para él, sentía que la pasión los unía mutuamente, aun siguiendo con ese beso, Kowalski comenzó a tomarla de la cintura. Ese momento único fue eterno para ambos, después de varios minutos dejando de besarse y con la lluvia calmándose, Kitka y Kowalski se miraron a los ojos.

-es mejor si no volvemos a hablar de esto.- le pide el pingüino aun agarrándola de la cintura, Kitka solo le asiente con la cabeza y ambos comienzan a caminar hacia el zoológico.

Al llegar, Kowalski abrió la escotilla de entrada y el primero entro a la base, mientras que Kitka solo esperaba el momento preciso para entrar y darle la sorpresa a Skipper.

-hola chicos.- los saluda como si nada el más alto.

-Kowalski, ¿Dónde estabas?.- le pregunta su capitán corriendo hacia él, finalmente abrazándolo.

-lamento este atraso Skipper, pero con la lluvia no pude avanzar hasta la base y me quede esperando en un árbol, hasta que la lluvia se detuviera un poco.

-aun así debiste haberme avisado que saliste, pero en fin, me alegra que hayas vuelto.- le dice aun abrazándolo.

-Skipper, mientras esperaba en el árbol, me encontré con alguien que ha regresado por ti.

-¿Quién es el que…- el pingüino deja de hablar al ver a la halcón entrando a su base, seguía tan hermosa como la última vez que la vio, la recibe con una calida sonrisa mientras corre hacia ella para que la recibiera entre sus brazos

-hola Kitka.- la saluda el líder pingüino.

-Skipper, no sabes cuánto te extrañe.- le dice correspondiendo al abrazo.

-no sabes cuánto espere este momento, que es el volver a verte.

-y yo a ti, te he extrañado tanto.- Cabo, Rico y Kowalski solo los miraban curiosos, pero Kowalski además de verlos así, los veía con algo de… ¿celos?

-bueno, me alegra de verdad que la hayas vuelto a ver Skipper.- le habla separándolo de la halcón, por lo que solo Cabo y Rico cruzaron miradas extrañas ante tal acción del más alto, pero Skipper no noto ese comportamiento extraño en su teniente, ya que estaba muy feliz como para estarse fijando en eso.

-¿te quedaras a dormir esta noche Kitka?.- le pregunta Skipper con mucha alegría.

-pero claro que si, ahora que nos hemos vuelto a ver, no quiero separarme de ti Skipper.- le contesta la halcón de la misma manera.

10 minutos después, ya todos los pingüinos se encargaron de dormir en sus literas, pero esta vez Skipper no dormiría en la suya, ya que Kitka dormiría en la de él y éste se dormiría en el laboratorio de Kowalski.

POV KOWALSKI

Esta noche es la que me mantendrá despierto, ¿Cómo es posible que me deje llevar ante sus encantos?, no es mi novia, ni es de mi propiedad, ni siquiera puedo confesarme a mí mismo que la amo, sé que es malvada por dentro y si volvió debe ser por una muy buena razón, no por mi amor ni por el de Skipper… ¿y el por qué estoy diciendo esto en mi mente?... porque es lo único que puedo pensar ahora, vuelvo mi mirada hacia la litera de abajo y la miro, dormía tranquilamente, aun entre sus plumas puedo notar unas cuantas gotas de lluvia, todo ella era completamente perfecta.

A la mañana siguiente, Cabo decide ir a visitar a su amiga la nutria, bebía contarle lo que pasaba con su capitán, ahora que Kitka volvió a su vida.

-gracias por venir a visitarme cabo.- agradece Marlene invitándolo a pasar a su cueva.

-no fue nada, además vine porque necesito decirte algo muy importante Marlene.

-¿Qué sucede?

-Kitka volvió por Skipper.- Marlene al escuchar eso, siente como su mundo de sueños amorosos se destruye por completo.

-no, eso no puede ser posible…

-lamentablemente así es, a mí tampoco me agrada esta idea, pero ya sabes cómo es Skipper, esta perdidamente enamorado de ella.

-si volvió no es por el amor de Skipper, si no por otra cosa, estoy segura.

-yo también lo estoy Marlene.

Mientras que en el habitad de los pingüinos, Skipper salió de la base para nadar un poco junto con Rico, Kowalski no deseaba nadar en ese momento, ya que no está de humor para aquello.

El pingüino estaba encerrado en su laboratorio, mesclando unas cuantas clases de líquidos de colores que se hallaban en sus tubos de ensayo, en eso se desconcentra por un momento al sentir como unas alas tocaban su espalda con delicadeza.

-Kowalski, por favor necesitamos arreglar unas cosas.

-¿Qué cosas quieres arreglar?... si me queda claro que tu lo único a lo que viniste aquí, es por Skipper.- le contesta dejando claro sus celos.

-te equivocas, yo no vine por Skipper… yo vine por ti.- le contesta acercándose a él para besarlo.

-eso no es cierto.- le contesta apartándose de ella.

-es la verdad, solo vine a la base con ese pretexto de querer regresar por Skipper, pero el que de verdad me interesa eres tu.- la halcón camina hacia él, acercándose de nuevo y logra besarlo, el pingüino de nuevo sin poder resistirse ante ella la toma de la cintura y continua besándola.

Afuera de la base, Skipper seguía chapoteando en el agua junto con Rico, en eso logra ver a lo lejos a Marlene caminando directo hacia él.

-hola Marlene.- el saluda, mientras la veía como seguía acercándose a él.

-hola Skipper… Cabo me dijo que Kitka ha vuelto, por… ti.

-sí, así es…

-pero es que tu aun no has aprendido de lo que es capaz esa halcón.

-Marlene no sabía que Kitka te cayera mal.

-ni yo lo sabía, hasta ahora que la conozco mejor… no creo que sea buena idea el que regreses con ella.

-Marlene, eres mi amiga y te agradezco el que te preocupes por mí, pero no hare caso a las ideas que tienes.- sin decir una palabra más, el líder pingüino ingresa de nuevo a su base escondida, dejando a la nutria casi con la palabra en la boca y dándole la espalda por completo.