Hola a tods!!!!

He decidido subir esta historia aqui a FF, ya que despues de mucho pensarlo, me e dedicido por hacer un fic ambientado en la Edad Media

Claramente, todos los personajes pertenecen a JKR, aunque no creo que ella pensara esta historia para ellos xDD

Prólogo

Los golpes de tambor le indicaban que su hora había llegado. Al salir del castillo, la luz del Sol le dio en los ojos, obligándolo ha cerrarlos. Hacía demasiado tiempo que vivía en la penumbra, que sus ojos no podían soportar tanta claridad. No sintió el calor del Sol sobre su pálida piel, los guardias que lo empujaron le recordaron lo que pasaba y le impidieron hacerlo.

Fueron por la calle principal del pueblo, oyendo los gritos e insultos de los pueblerinos, que estaban situados a ambos lados de la calle. Pero no se conformaron con gritar, sino que empezaron a lanzarle verduras podridas que los guardias se encargaban de que recibiera sobre su cuerpo y cara. Al final de la calle se encontraba la plaza de la Iglesia y en ella, imponente y alta, le esperaba la que sería su última compañera en ese viaje: la horca.

Los guardias lo lanzaron a la multitud, que entre gritos y risas los iban empujando hacia ella, esperando ver el espectáculo del día. "Eran mis vecinos" pensaba amargamente mientras la gente lo empujaba "mis vecinos y amigos son los que me mandan a la muerte". Pronto se encontró enfrente de la horca y allí los guardias que estaban lo lanzaron a la parte superior, donde sólo había una cuerda colgada y una palanca que abría una trampilla que había en el suelo de madera de la horca.

Entre la gente, se empezó ha abrir un pequeño pasillo por donde un hombre rubio y bien vestido se iba acercando a la horca, degustando lo que en pocos minutos sería la consumación de su venganza. Al subir a la horca, miró al preso con desdén y una sonrisa cínica que no presagiaba nada bueno.

¡Gente del condado de Gryffindor! Yo, Draco Malfoy, ministro de este condado y bajo la bendición de sus majestades James y Lilian y de su hijo, el príncipe Harry, condeno a este joven por brujería-

La gente empezó a gritar aún más fuerte que antes y los guardias de afanaron en coger al preso y colocarlo sobre la trampilla. "Si yo fuera brujo, haría mucho tiempo que abría escapado de esto" pensó amargamente. Antes de que se diera cuenta, asieron sobre su cabeza una bolsa de tela que tapaba su cara completamente y le colocaron la cuerda alrededor del cuello, obligándolo a estar de puntilla para poder seguir respirando.

Él se dejo hacer, ya nada le importaba. Su mente no se encontraba en la plaza, estaba en la celda donde había vivido el último año. Donde hacía tan sólo 4 días la había conocido.

En ese momento se dio cuenta de la verdad. Le daba igual que lo matase, ya no había vuelta atrás. Lo que le preocupaba era lo que su muerte le haría a ella, cómo tomaría que le hubiese mentido y lo que le harían a ella después.

Sin poder ver, la tomó desprevenido cuando la trampilla desapareció y que la cuerda le empezara a cortar la respiración. En su cabeza sólo estaba su imagen, la de la persona a la que había dejado en la celda. La de Hermione.

La gente del pueblo chilló con fuerza cuando vio que el cuerpo del preso dejaba de moverse. El ministro Malfoy no pudo evitar reirse al ver al fin al mozo que lo había dejado en ridículo morir. "Que tomen ejemplos los demás pueblerinos de este estúpido pueblo" [/i]pensaba alegremente [i]"si intentan burlarse de mi, acabarán como el desgraciado de Ronald Weasley"