Notas del autor - Privet! Lo que en un principio iba a ser un one-shot termino siendo el prologo de una nueva historia, desde ya aclarare que los capítulos tal vez no esten muy conectados entre si y que habra Yaoi, Lime y de todo un poco, parejas muy raras y mas, espero se animen a participar y les guste el prologo, y si Attakai lee esto, no me mates, no pude simplemente dejarlo en un One-shot.
Música del capitulo - "Welcome to my life" Simple plan
Advertencia - Shonen ai
Agradecimientos - Gracias a Bako Chibi-Nya por dejarme utilizar al Tsundere de Attakai
Inazuma Eleven no me pertenece, así como Attakai, solo me pertenece Masaki, Nissa y Soren.
Disfruten su lectura.
Prologo -Nada pasa porque si
El primer día de clases resulto mucho mejor de lo que Masaki se imaginó, todo lo contrario para su hermana menor que término el día con un ataque de ansiedad, ahora ambos caminaban de regreso a su casa
-Nissa vamos por un helado- la muchacha de ojos ámbar lo miro con odio, acomodo su bolso golpeando "accidentalmente" a su hermano
-No quiero- Masaki la miro sin borrar su sonrisa –Estoy muy cansada- el mayor de ambos acaricio el cabello de su pequeña hermanita antes de besarle la frente
-Bien, te veré en casa- la chica asintió y continuo su camino viendo como Masaki se alejaba hacia la heladería, solo entonces se permitió una pequeña pero sincera sonrisa, su hermano era único.
-¡Hello my friend!- fue el saludo del peli-negro al chico que se encontraba sentado en una de las mesas
-Hola- saludo animado el ex alíen, Masaki sonrió acercándose hasta el -¿Y Nissa?- pregunto Ryuuji, Masaki dejo su bolso en una silla antes de contestar
-No se sentía bien y se fue a casa- su imborrable sonrisa se desvaneció un momento al ver a cierto chico rubio, inflo sus mejillas de forma infantil y fue a pedir un helado de chocolate y menta con mucho caramelo, cuando tuvo el helado en sus manos sintió como su boca se hacía agua –Bendito seas caramelo- murmuro sin apartar su vista del dulce, se santo frente a Midorikawa que iba por su segundo helado, los ojos del de moña se desviaban contantemente hacía el rubio detrás de ambos –Deja de ser tan obvio- al escuchar eso las mejillas del oji-negro enrojecieron notablemente –Sabes que el hijo perdido de Vegeta tiene novio- la mirada inusualmente seria de Masaki lo hizo suspirar derrotado
-Lo se- fue su respuesta, luego de eso ambos chicos se dedicaron a hablar de todo y nada, cuando se dieron cuenta la noche estaba casi encima de ellos, ambos amigos se despidieron y siguieron sus rumbos a sus respectivos hogares.
A pocas calles de su casa Masaki se encontró con una cajita en la cual dos pequeños gatitos lloraban, sus instintos de hermano mayor hicieron que inevitablemente se llevara a ambos gatitos envueltos en su sudadera anaranjada, tan concentrado iba en ambos mininos que no noto al joven peli-negro que se acercaba en su dirección leyendo un libro, el choque entre ambos fue inminente haciendo que el libro de uno cayera al suelo y que los pequeños animalitos cayeran envueltos en la sudadera sin poder salir
-Perdón, perdón- se disculpó de forma apresurada Masaki gateando hasta ambos bebes felinos, los tomo con cuidado –Lo siento- susurro una vez más a los gatitos
-Maldición- musito molesto el otro chico mientras recogía su libro –Fíjate por donde vas- Masaki levanto el rostro encontrándose con un par de profundos ojos negros, se quedó embobado mirando los rasgos de aquel blanquecino rostro
-Ah, l-lo siento- musito apenado, se levantó e hizo una reverencia, el chico frente a él con el ceño fruncido noto las dos pequeñas bolas de pelo que el muchacho llevaba
-¿Son tuyos?- pregunto con inusual interés, Masaki ladeo el rostro sin entender, parpadeo un par de veces cuando el de lentes apunto a los mininos
-No, los encontré una calle atrás- el oji-ámbar sonrió enormemente -¿Quieres uno?- un incómodo silencio se formó entre ambos
-No tengo tiempo para mascotas- fue la contestación del chico, Masaki inflo las mejillas pero volvió a sonreír
-Ya que, por cierto me llamo Masaki- dijo extendiendo su mano, el más bajo miro su mano y luego siguió su camino -¡Hey, no vale!- se quejó de forma infantil, el otro chico lo miro de reojo
-Attakai- dicho esto volvió su vista a su lectura y se alejó del chico, Masaki se quedó allí procesando todo
-Lindo nombre- un brillo inusual se posó en su mirada –Nos volveremos a ver… Attakai- sin más continúo hasta llegar a su casa donde su adorada hermanita lo esperaba enfadada por llegar tan tarde, claro que su enojo se disipo de inmediato cuando vio a los dos pequeños mininos a los cuales llamaron Moka y Mermelada por sus colores.
-Masaki- el muchacho volteo viendo a Nissa en la puerta de su cuarto con un rubor en las mejillas y su conejo de peluche -¿Puedo dormir aquí?- el chico sonrió y asintió enérgicamente, pronto ambos hermanos se encontraban uno junto al otro durmiendo.
o-o-o-o-o-o-o
-Ya estoy en casa- anuncio Attakai cerrando la puerta tras de sí, desde la sala Goenji apareció con un tenedor en la mano
-Llegas tarde- el peli-negro bufo quitándose la chaqueta, se sentó en el sofá donde anteriormente Shuuya se encontraba viendo una película
-Me entretuve en la librería- con esa respuesta quito sus anteojos y cerró los ojos un momento, no debía forzar tanto su vista pensó.
-Entonces ¿supongo que no cenaste?- el peli-negro asintió, Shuuya fue a la cocina y volvió minutos más tarde con un plato de pasta
-Gracias- murmuro, se levantó con el plato en la mano y se fue a su cuarto, los ojos negros de Goenji se quedaron fijos en él, su celular sonó haciéndolo apartar su mirada del lugar por el cual había desaparecido su amigo
-¿Kaze? ¿Cómo estás?- así desvió toda su atención a su novio el cual no veía hace un tiempo.
-Puto día- susurro Attakai tirándose sobre su cama, el plato estaba a medio comer y sus anteojos a un lado, miro fugazmente el libro que antes leía y recordó el pequeño incidente con ese chico, una pequeña sonrisa se posó en sus labios cuando recordó su infantil actitud, sus parpados comenzaron a pesar y pronto se vio sumergido en un profundo sueño.
El reloj despertador fue brutalmente asesinado por su dueño cuando este lo lanzo contra una de las paredes haciendo que las piezas quedaran esparcidas por el suelo, sus orbes negros se entrecerraron debido a la repentina luz sobre ellos, había olvidado cerrar las cortinas
-No quiero ir a clases- murmuro ocultando su rostro en la almohada, su cabello se encontraba desordenado y llevaba la misma ropa del día anterior, soltó un profundo suspiro para luego levantarse, con rapidez se metió a la ducha antes de que Goenji lo hiciera, la vanidad no era exclusiva de las mujeres pensó al recordar cuanto demoraba su compañero en arreglarse, salió después de darse un baño encontrándose con Goenji
-Tramposo- dijo con los ojos entrecerrados, Attakai sonrió con superioridad
-Solo me levante antes- se dirigió a su cuarto para ponerse su uniforme, el día anterior no había asistido a clases por simple pereza, pero no podía seguir así todo el año y lo sabía, se vistió con lentitud.
o-o-o-o-o-o-o
-¡Arriba Nissa, ya es de día!- exclamo el muchacho ya vestido mientras quitaba las sabanas que cubrían a su hermana, Nissa se removió inquieta buscando calor -¡El desayuno está listo! No me obligues a comérmelo- finalmente la de cabello largo abrió sus ojos, se sentó estirando su cuerpo y miro a su hermano
-Ya voy- dicho esto le lanzo la almohada en la cara, Masaki sonrió y salió del cuarto.
Tras haber desayunado se despidieron de su primo y salieron hacia Raimon, durante el trayecto Masaki hablaba sobre lo lindos que se veían los gatitos durmiendo y otras tantas cosas, Nissa se extrañó cuando dejo de escuchar a su hermano así que volteo para ver que ocurría, Masaki tenía sus orbes fijos en cierto chico peli-negro que caminaba junto a Goenji
-¿Hermano?- la de moña movió suavemente a Masaki intentando traerlo de vuelta a la realidad -¡Masaki!- le grito haciendo que el chico reaccionara y que la mirada de los dos chicos de más adelante se posara en ellos, Attakai alcanzo a reconocer al chico del día anterior y una chica que no conocía
-Lo siento me distraje- respondió apenado rascando su nuca, Nissa frunció el ceño y se aferró al brazo del mayor
-Te creeré esta vez- ambos siguieron su camino y cuando pasaron por el lado de ambos Masaki le dedico una sonrisa al de anteojos.
-¿Lo conoces?- pregunto Shuuya al ver el gesto del desconocido chico, Attakai soltó un bufido
-Chocamos ayer por la tarde- tras eso ambos continuaron charlando de otras cosas.
Las clases siguieron su curso normal y Attakai resulto estar en la misma clase que el chico de ojos ámbar y peinado extraño que resultó ser un verdadero dolor de cabeza o al menos eso pensó Attakai por su actitud tan alegre.
Paso una semana en la que él y Masaki se encontraron constantemente en su camino usual pues resulto que ambos vivían más cerca de lo que pensaban, gracias a eso Atakkai se enteró que tenía una hermana que cuidaba con su vida y vivían con su primo mayor que era profesor
-¡Attakai!- el mencionado suspiro con cansancio antes de voltear, Masaki iba en su dirección corriendo, solo.
-¿Qué?- pregunto hastiado, le molestaba que ese chico no lo dejara en paz
-Nada- y ahí estaba otra vez su tonta sonrisa que le ponía de mal humor
-¿Y Nissa?- pregunto por curiosidad pues al parecer Masaki casi nunca se apartaba de ella
-Amaneció con algo de fiebre, Soren la cuida- supuso que Soren era su primo así que no dijo nada más, el camino fue por demás silencioso, algo extraño viniendo de Masaki.
Ya en clases el profesor de Historia les dio un trabajo para la próxima clase ya que la mayoría no lo había terminado en la hora, Masaki iba de un lado a otro hasta que se detuvo frente al peli-negro de cienes rapadas
-¡Attakai ayúdame!- el chico en cuestión lo miro unos segundos
-No- respondió cortante, Masaki hizo un puchero infantil y le puso ojitos de cachorro –Bien, bien- acomodo sus anteojos –Después de clases en la biblioteca- dicho aquello se levantó en busca de su no tan buen amigo Goenji quien últimamente no dejaba de molestarlo con ese niño.
Tras el pequeño dialogo entre ambos Masaki se dirigió al baño, al entrar se encontró con una escena de lo más peculiar, Kidou a quien el tanto respetaba se encontraba acorralando a, sus ojos se abrieron con sorpresa, ¿ese era Fubuki Shirou? Se movió un poco para comprobar que efectivamente era Shirou
-Yuuto, nos pueden ver- musito un sonrojado Fubuki, un suave gemido escapo de sus labios cuando la inquieta mano del pardo se adentró bajo su camisa
-Tranquilo- dijo en respuesta para luego besar los labios del platinado y empujarlo a uno de los cubículos, Masaki no dijo nada, solo retrocedió lentamente y huyo del lugar con el rostro enrojecido de la vergüenza.
Finalmente las clases llegaron a su fin y con ello Masaki prácticamente se teletransportó hasta el puesto de Attakai, este solo lo miro hastiado –Vamos- dijo, Masaki con una sonrisa lo siguió. Pasaron un par de horas hasta que el de ojos ámbar terminara y Attakai aprovecho el tiempo en que el chico no lo molestaba para leer
-¡Termine!- levanto los brazos en señal de victoria ganándose una mirada desaprobatoria por parte del más bajo, hurgo en sus bolsillos sacando algunos caramelos -¿Quieres uno?- Attakai negó -¿Vamos por un helado?- volvió a negar -¿Un postre?- una vez más negó -¿Chocolate?
-No quiero nada que provenga de ti- dijo finalmente, el otro ladeo su rostro
-¿Por qué?- Attakai lo miro como si fuera un tonto
-Porque no me agradas- Masaki sonrió como si lo que acababa de decir no doliera
-¿Y porque no te agrado?- quiso saber, el oji-negro cerro los ojos intentando calmar su enojo
-Por tu estúpida actitud- el chico se quedó en silencio un momento, su usual sonrisa había desaparecido
-¿Qué tiene de malo?- interrogo con el simple hecho de saber porque su actitud le molestaba tanto
-Tienes 16 años, deberías actuar un poco más maduro- dijo –Además eres tan malditamente insistente- su ceño se frunció, un nuevo silencio se formó entre ambos
-¿Y eso es tan malo?- sus ambarinos ojos parecían a punto de llorar
-¡Es que no lo entiendes!- Attakai estaba molesto y Masaki seguía insistiendo con sus preguntas
-¡¿Qué es lo que debo entender?!- pregunto exasperado sorprendiendo a Attakai
-¡Que eres un inútil! ¡Siempre con tu tonta sonrisa!- finalmente el oji-negro estallo -¡Intentas arreglar todo con tus estúpidos dulces! ¡Acaso no te das cuenta que eso no ayuda! ¡Eres un inútil Masaki, un completo inútil y nada cambiara eso, por eso nunca llegaras a agradarme!- su respiración estaba agitada y no lo miraba.
-No tienes que ser tan cruel- Attakai volteo encontrándose con los llorosos ojos de Masaki, una fuerte opresión se instaló en su pecho, no se suponía que debía importarle como se sintiera el chico
-Maldición- musito en voz baja, soltó un suspiro cansado antes de sentarse junto a él –Lo siento, a veces no controlo lo que digo- las lágrimas se deslizaron inevitablemente por sus mejillas
-Supongo que tienes razón después de todo, solo soy un inútil- nunca imagino ver a ese alegre chico en un estado así, se mordió el labio pensando en una manera de hacer sentir mejor al otro
-Oye…yo- Masaki le dedico una triste sonrisa que hizo que su corazón se encogiera
-Tal parece que intentar no es suficiente- Attakai quito sus anteojos dejándolos sobre la mesa
-Ya basta- su ceño estaba fruncido cosa que a Masaki se le hizo adorable –No debí decirte todo eso, no eres un inútil, solo…- su voz se apagó mientras un ligero rubor se instalaba en sus mejillas, no acostumbraba comportarse así –…es solo que a veces eres demasiado infantil y… eso es molesto- un suspiro escapo de sus labios –Pero eres un chico increíble- concluyo.
Aun con sus ojos llorosos Masaki se inclinó buscando la calidez del otro chico, Attakai en respuesta se sonrojo y desvió la mirada
-Gracias- susurro el oji-ámbar frotando su rostro contra su cuello, un ligero estremecimiento lo recorrió, busco los ojos de Masaki que brillaban por las lágrimas anteriormente derramadas, su respiración se agito cuando la tibia mano del más alto se posó sobre su mejilla y sus ojos se entrecerraron por mero instinto al sentir sus labios tan cerca del otro, no fue consciente de cuando ocurrió o quien lo había iniciado pero ambos se encontraban besándose, un beso inocente y por demás corto, en cuanto se separaron Masaki se alejó con un rubor cubriendo su rostro –Lo siento- susurro sin poder ocultar la sonrisa en sus labios
-N-no te preocupes- dijo en respuesta, aparto la mirada del chico e intento calmar su corazón que había comenzado a latir con demasiada fuerza –Y-ya me tengo que ir- se levantó dispuesto a irse pero la mano de Masaki lo detuvo, volteo encontrándose con aquella brillante sonrisa y sus ojos ambarinos, se levantó y lo jalo contra si para robar un nuevo beso a Attakai que en un principio se negó, tomo el rostro del chico entre sus manos y profundizo el beso sintiendo el ligero sabor a caramelo de los labios de Masaki, se separaron tras agotar todo el aire en sus pulmones y la sonrisa del chico parecía más amplia y alegre que nunca
-Nos vemos- el primero en irse fue Masaki dejando a Attakai agitado y confundido con sus propias acciones, negó efusivamente antes de colocar sus anteojos que había quitado anteriormente
-Mierda- murmuro, tomo su bolso y su libro y se fue enfadado al departamento que compartía con Shuuya, una pequeña sonrisa se dibujó en sus labios al pensar en ese alegre chico, negó nuevamente intentando sacar de su mente la imagen del rostro sonrojado y sonriente de Masaki
Masaki por su parte iba con una alegre sonrisa, ya no había rastro alguno de lágrimas y sus mejillas se encontraban sonrojadas, abrió con suavidad la puerta de su casa encontrándose con Nissa aun en pijama –Bienvenido a casa- Masaki la abrazo con fuerza levantándola del suelo –Al parecer algo bueno ocurrió- dijo con una pequeña sonrisa, el mayor asintió efusivamente para luego dirigirse a su cuarto, al hacerlo se dejó caer sobre su cama completamente feliz, algo bueno había sacado de la ausencia de su hermana.
Notas del autor - Bieeen~ ¿que tal? ¿se animan?
Se que hay Yaoi y todo eso, pero créanme formare mucho lió, Taste the Flesh me inspiro, no tengo mucho que decir salvo que espero se animen, si es así aquí les dejo la ficha
Ficha.-
Nombre:
Edad: (15 a 17)
Apariencia:
Personalidad:
Gustos y disgustos:
Historia: (breve)
Pareja: (Elijan al que quieran que con todos haré desmadre)
Extra:
Si llegaste hasta aquí, muchas gracias.