EL DESTINO SIEMPRE ME LLEVA A TI
CAPITULO # 1
Por. Tatita Andrew.
Albert disfrutaba de una tarde en el parque es que amaba la naturaleza la vida al aire libre, admiraba cada sitio donde podía respirar aire fresco, tenía más de una hora por allí deambulando, estaba un poco cansado se sentó en una banca a observar las personas pasar por allí, se veían tan felices las parejas de enamorados pasear de la mano. Los niños jugando y corriendo, los padres dando un paseo familiar. Cuando de repente mira a lo lejos a alguien que le parece totalmente familiar.
-¡Será ella se preguntó!- no no puede ser, después de tanto tiempo será ella en verdad.
Su mente empezó a recordar cuando la conoció por primera vez él tenía tan solo 12 años y estaba siguiendo una hermosa mariposa que volaba de flor en flor, ante sus ojos se bajaba de un auto la niña más hermosa que él hubiera visto, su melena rubia con varios rizos volaba con el viento, tenía unas hermosas pecas sobre su rostro que le daban una belleza única y usaba una colita de caballo, por un momento sintió que aquella niña lo alcanzo a ver y lo saludo con la mano, él que era muy tímido se quedó petrificado, quiso moverse pero sus piernas no le respondieron, intento ir ayudarla mientras su familia hacia la mudanza pero en eso su madre lo llamo a almorzar y cuando se dio cuenta su ángel había desaparecido ante sus ojos.
Era lunes y tenía tanta pereza levantarse a clases pero su madre como siempre lo apuraba.
-Vamos Albert que llegaras tarde a la escuela.
La clase transcurría tan aburrida como lo era su profesor de historia su mente divagaba hacía afuera veía como corrían los niños por el pasillo cuando de pronto advirtió que pasaba corriendo su ángel era ella la misma niña que vio frente su casa.
-Profesor disculpe puedo ir al baño.
-adelante muchacho no tardes.
Salió del salón buscando desesperada a la niña pero ya sus ojos no la veían donde se pudo haber metido. Estaba tan distraído buscando a su ángel que tropezó con alguien sin darse cuenta.
-Uph disculpe no fue mi intención.
Y frente a mí recogiendo unos libros la niña de los ojos más hermoso que en su corta vida él hubiera visto, y allí se quedaron mirándose los dos a tan corta edad se miraban y hablaban sin voz, yo estaba nervioso y tú toda apenada sentimos que el amor se despertaba.
-Hola soy Candy White. ¿Cómo te llámas?
-Yoo me llamo Albert mucho gusto Candy mientras le daba todos los libros que él torpemente había tirado al piso.
Desde ese momento nunca más nos separamos, yo la seguía a todos lados como su sombra, nos habíamos convertido en los mejores amigos, fue el mejor verano de mi vida jamás lo podré olvidar.
Una tarde mientras jugaba ella vino llorando hacía mí.
-Albert, Albert decía desesperada me tengo que ir, mañana nos vamos a otra ciudad a mi papá lo transfirieron.
En mi inocencia no sabía que el destino se encargaría de separarnos, pero no podía demostrar tristeza, quería ser valiente para pasar la última noche con ella, sin pensar en cosas tristes.
-Candy le dije, no te preocupes cuando este grande yo te buscaré y me casaré contigo eso te lo prometo.
-Pero como sabrás que soy yo y si cambio mucho.
-Espera y regreso tengo una cámara que mi mama acaba de regalarme te tomaré una foto para recordarte.
Los dos niños pasaron toda la noche conversando sentados uno frente al otro, observando la luna y las estrellas, tenía tantas ganas de darle un beso pero no me atreví era solo un niño como quisiera retroceder el tiempo y hacer las cosas diferentes. A la mañana siguiente partió y toda mi inocencia con ella.
Después de eso mi vida se convirtió en un infierno mi madre contrajo una enfermedad muy rara y los pocos años murió.
Mi padre y yo nos trasladamos a Chicago a rehacer nuestras vidas, pero la mía ya estaba desecha, me convertí en un rebelde sin causa, un desadaptado para la sociedad.
Pasarían muchos años para que mis ojos volvieran a ver a esa hermosa niña otra vez, estaba en la sala de espera, por millonésima vez el Director de la Escuela me había llamado a la rectoría para sermonearme otra vez.
Y junto a mí se sentó ella era ella mi dulce Candy, jamás podría haber olvidado esos ojos aunque hubieran pasado 7 años desde la última vez que la vi. Pero ella me miro de reojo como si nunca en la vida me hubiera visto, pues ahora pensándolo bien no la culparía, porque mi ropa y vestimenta no eran glamorosas en ese tiempo, usaba unos jeans rasgados, una camiseta negra, y una chaqueta de cuero, mi cabello tan largo y rebelde como yo mismo en esa época. Sentí tanta rabia de que me hubiera olvidado que descargue mi coraje contra la vida con ella.
-Y que hizo la muñequita de papi para ser llamada ante el Director. Pregunte con desdén.
-Eso no es tu problema, me dijo muy enojada note como no había cambiado nada sus pecas se hacían más grande cuando se enojaban. Ja ja reí para mí.
En ese momento la secretaria me aviso que el director me esperaba.
-Andrew ya me estoy cansando de tus llegadas tardes y tu insolencia no te soportare más no sé qué voy a hacer contigo.
Le conteste todo lo natural que pude, no se dé problemas Director, páseme de año y gradúeme pronto y verá que nunca más me verá por aquí, además somos amigos..
-Eres un insolente Andrew, debes tener responsabilidades ya tienes 19 años tienes que pensar que vas a hacer con tu futuro una sola cosa te digo un atraso más una insolencia y este año no te gradúas.
-Nos estaremos viendo profesor le dije en forma de saludo.
Al salir vi a Candy entrar con enormes cuadernos y folletos.
-Espero que el Director no te haga enojar, porque tus pecas se te hacen más grandes dije riendo sin parar.
-Eres un granuja no sé cómo pueden permitir tipos como tú en la escuela.
El rumor se corría como pólvora Candy White era una de las chicas más populares del colegio y consentida del Director, ella organizaba el baile de graduación y por eso entraba con todo tipo de ideas para el baile, aunque apenas tenía 16 años era toda una mujer hermosa y novia de un jugador de futbol americano, aunque los rumores en ese tiempo es que él le interesaba más su carrera como futbolista que su propia novia, y no se dejó esperar que la dejará planta justo días antes del baile por una propuesta en otra ciudad.
Ese día andaba por el patio de la escuela y Candy estaba muy molesta todos los chicos y chicas de la escuela la rodeaban esto es imposible y tan cerca del baile cómo podré volver a dejar todo y listo cómo estaba.
A medida que avanzaba con mi moto hacía ella por medio del patio escuchaba a los alumnos hablar de que todos los meses que Candy había demorado en arreglar el salón para el baile estaba destruido por culpa de un incendio ocasionado por alguna pareja romántica que se había escabullido en medio de la noche y todo estaba destruido.
Al llegar hacía ella le dije con desdén pobrecita la niñita de papi, triste porque por qué no se llevará su estúpido baile donde todos buscaran como tonto una pareja y se vestirán con su hermosas galas que ridículo.
-Eres un imbécil no sabes lo que me costó arreglar todo y para que, ahora todo está destruido.
Iba a seguir burlándome de ella cuando apareció el Director.
-Señor Andrew como veo que usted no tiene ningún remordimiento por lo sucedido con su compañera, le sugiero que de ahora en adelante la ayude todos los días con los preparativos del baile nuevamente hasta que todo esté listo.
-Pero Director dijo ella muy molesta no puede ayudarme alguien más, por favor este chico es insoportable.
-Y quien quisiera estar con una estirada como tú.
Basta los dos ya lo decidí Albert ayudará a Candy si es que se quiere graduar este año. Cierto Albert me olvide que somos amigos dijo el Director con ironía. En ello vi mi oportunidad para acercarme nuevamente a mi ángel de ojos verdes.
-Te espero a las dos en punto en el salón de baile todos los días después de la escuela, y por favor no me hagas perder el tiempo- la vi alejarse de mí moviéndose con tanta superioridad que me pregunte donde quedo aquella niña que me enamoró..
Albert, Albert me dijo un compañero un día después Candy White está muy molesta porque tienes que ayudarla, dijo que eras un bueno para nada que solo buscas problemas, incluso le conto a su padre que era un castigo trabajar contigo. Me enoje mucho y murmure ahora me vas a conocer.
A propósito llegue dos horas tardes, no tenía intenciones de hacerle las cosas fáciles después de cómo me ha tratado.
-Pero que bien el rey se ha dignado en aparecer, te dije que debías llegar a las dos en punto y ya son las cuatro.
-disculpe mi reina por la tardanza hice todo un ademan hacia el piso inclinándome, que es lo primero que quiere que haga mi leidy.
Con mucha autoridad me dijo mueve todas esas lonas para allá.
Mientras tanto ella desenredaba un juego de luces, que estaba todo hecho una bola, de tanto ir y venir estaba empezando a sudar y para no mojar mi camisa me la quite, quedando solo en una camisetilla, tenía muy buen cuerpo porque me gustaba ir al gimnasio y mantenerme en forma. Observe con mucho agrado cómo ella se quedó mirándome por unos momentos no me quitaba la vista de encima incluso hasta me hizo sonrojar con lo intenso de su mirada se notaba que era la primera vez, que veía a un hombre con tanta determinación.
-deseas que te ayude en algo pregunte. Al notarla distraída.
-Noo, no es que me dijo nerviosa, quería mover este tacho de su sitio, supe que fue lo primero que se le ocurrió porque era un tacho enorme y lleno de pegamento. Además de que solo portaba un pequeño vestido blanco que llegaba hasta arriba de sus rodillas.
-Te puedo ayudar le ofrecí. Acercándome a ella.
-Gracias lo deseo poner allá me señalo con su dedo, sentí como su respiración se agitaba con mi cercanía, estaba tan cerca de ella de su rostro que su aliento me llegaba directo a la cara. En eso me coloque por detrás de ella y con toda la normalidad del mundo le tome de las manos y le susurre- Mira te agachas coges fuerzas y lo alzas hasta allá.
-Me miro con tanta furia mientras a la pobre la veía arrastrar el tacho lleno de pegamento hacía el otro lado. Después de unas dos horas de trabajos aquí y allá. Le dije hasta mañana niñita de papá.
Con las ganas de que se llegará el próximo día para encontrarme con esa hermosa niña ahora convertida en una hermosa mujer.
CONTINUARÁ….
Primer capítulo de otro fic, espero les vaya gustando la trama, espero comentarios, reproches y sugerencias.
Taro_bazam