ADVERTENCIA: Continuación de "una lección de hermanos" (aunque bien puede leerse individualmente, contiene relación yaoi, o sea relación chicoxchico) narrada aparte ya que la historia cuenta con un giro GORE RAPE, solo para las que les gusta esta categoría

Disclaimer: los personajes no me pertenecen… si así fuera jejeje(pensamientos pervertidos) ejem…y esta historia es sin fines de lucro…

Esta historia es responsabilidad de quien la recomienda y de quien la lee.

Diálogos entre -.-

Pensamientos en cursivas

Un hotel de lujo llamado Impel Down (nótese el sarcasmo)

Ace x Luffy

(Repito, contendrá gore y rape)

Despertó adolorido y con poca conciencia de en donde se encontraba, ese tan conocido y característico bamboleo le advertían que estaba dentro de un barco, pero nada mas. Recostado en el piso de madera en esa estrecha habitación Hiken se revolvió en su esquina y noto inmediatamente el tintineo de unas gruesas esposas que le apresaban las muñecas, asustado a su mente regresaron los últimos recuerdos donde se veía a si mismo peleando contra Teach

-maldición…- sintió su voz rasposa y ese metálico sabor en la boca de su propia sangre, todo el cuerpo le dolía horrores y más el saber que su situación solo significaba que irremediablemente había perdido contra el traidor que había matado a uno de sus nakama y por quien se había desvivido estos últimos meses buscando. De entre todo le molestaba que no había podido cumplir con su misión y más aun el haber sido capturado por él, siempre se imaginó que de perder perdería también la vida, nunca se había puesto a pensar que terminaría de prisionero, que humillación.

Ace conocía muy bien esa sensación de pesadez y debilidad, las esposas eran sin duda alguna de kairoseki aunque nunca estaba de más el cerciorarse, el moreno intento tomar su forma de logia pero no pudo siquiera formar ni una enclenque flama… si, definitivamente kairoseki

Bueno, lo segundo seria ver si era posible escapar, aunque sabía que eso sería increíblemente complicado pero no perdía la esperanza

Portgas a pesar de sentirse débil por culpa de las esposas se levantó y tenso las cadenas que estaban férreamente empotradas a la pared, intentando mantener la compostura, el pecoso fue tensando las cadenas y el dolor en sus muñecas fue en aumento pero no se detuvo, aun cuando el borde del metal le abrió una leve herida por la presión ejercida, una ligera sonrisa se dibujó en sus labios al escuchar el suave rechinar de la madera, uso las piernas para empujar la pared y ganar aún más presión, la madera crujió un poco más duro pero aun parecía muy lejos de conseguir su objetivo

La puerta de la habitación se abrió y Hiken tuvo que dejar rápidamente lo que hacía e incluso fingir no haber estado haciendo nada, no quería que le pusieran vigilancia y se le complicara aún más el escapar. Frente a él apareció la persona a la que mas odiaba en esos momentos

-Teach¡-

-wuajaja¡ taichou se encuentra cómodo? Desea algo de servicio a la habitación?- su mirada mordaz y esa sonrisa que le restregaba en la cara que él había sido el ganador de la pelea

-que pasa Teach, viniste a jactarte de tu victoria, te aseguro que en un segundo duelo te pasaría encima completamente, tu habilidad me sorprendió eso fue todo-

-wuajaja¡ taichou, taichou, ¿qué pasa?, te hacia un mejor perdedor-

-no he perdido Teach, sigo vivo ¿no es verdad? Sé que podría derrotarte si nos enfrentáramos de nuevo, no eres tan poderoso como piensas, además creo que ya le agarre la mañita a tu poder de oscuridad, no es la gran cosa- quería provocarlo, ciertamente no le importaba el morir en combate, especialmente si era contra ese traidor, pero ser su prisionero, eso si no podía soportarlo

El golpe contra su cara le sorprendió solo un poco, esperaba alterarlo tal vez incluso lograr que le soltara para pelear y aun así sabía que la opción previa siempre estaba disponible; un nuevo golpe en el estómago le saco todo el aire y lo obligo a doblarse, hubiera caído de rodillas de no ser por la gruesa mano que lo sujeto de los cabellos manteniéndolo erguido

-Ace… sé que eres listo, no hubieras sobrevivido por estos mares de no ser así, pero escúchame bien, perdiste… yo te gane y ahora mismo tu serás mi boleto a mi siguiente parada, no fue suerte el que te haya derrotado y sé que podría hacerlo de nuevo, pero no lo intentare aunque la opción que me das sea increíblemente tentadora, y al fin de cuentas el cartel de se busca dice vivo o muerto, pero lo creas o no, vales más con vida wuajajaja, eres mi prisionero, así que se bueno y cierra tu boca hasta que lleguemos a la siguiente isla

Le golpeo el estómago con tanta fuerza que Ace sintió que perdería la conciencia, cayó al piso y escucho de fondo los pasos que se alejaban, respiro con dificultad y el sabor de la sangre regreso a sus labios, estaba lastimado, demasiado para su gusto, intuía que esa zona del costado que le dolía horrores era una o tal vez varias costillas rotas y esperaba no tener algún órgano lacerado

Se obligó a despertar, el bamboleo del barco era suave y la temperatura estaba elevada, temía que llegaran a la siguiente isla pronto, si llegaba a caer en manos de los marines se arriesgaba a que sus opciones para escapar se redujeran a cero

De nuevo forzó las cadenas, el chirrido de la madera cediendo era reconfortante; le tomo más tiempo del que había deseado pero al final y aun con las manos entumidas del dolor que esta acción le provocaba logro zafarse de la pared aunque el ruido que hizo no fue para nada disimulado, los pasos apurado por la cubierta le advirtieron que ya habían notado que su valiosa presa no estaba cooperando mucho, la puerta se abrió de súbito y Ace no perdió más el tiempo, usando la cadena como arma tomo desprevenido a Burgess y aun con toda la fuerza de este no pudo evitar perder el equilibrio con el ataque de Ace y abrirle paso. El pecoso apenas había logrado dar tres pasos fuera de la habitación cuando sintió en el cuerpo tres molesto piquetes que no les dio importancia hasta que dos pasos después el piso se le movió demasiado y su visión se tornó borrosa, la fuerza en sus piernas desapareció por completo y cayó a suelo sin poder evitarlo

-taichou, me has hecho ganar una apuesta wuajaja, sabía que te liberarías de esas corrientes cadenas pero las esposas de kairoseki son una joda verdad… oi Lafitte págame-

-pero senchou creo que no fue justo…-

Ace perdió el conocimiento. No fue hasta que un viaje de agua helada le despertó en su nueva y flamante ubicación, sentía la mente aun levemente dormida, y el dolor en el cuerpo no dejaba de incordiarlo

-Portgas d Ace, hijo de Gold Roger, el hijo del demonio…- tenía un tiempo que nadie le llamaba de esa manera, ciertamente no le importaba, la voz a su parecer sonaba distante y sin importancia, se movió incomodo en su asiento notando por la textura aparente que estaba en una silla de metal esposado de pies y manos y por supuesto la sensación de debilidad le advertían que era nada menos que kairoseki. Quiso hablar pero en su lugar un chorro de sangre fue lo que salió de su boca, la cabeza le dolía y el cuerpo diez veces más que cuando despertó en el barco de Teach, ¿que demonios había ocurrido?

-oi¡ puedes irme? Demonios¡ les dije que no lo golpearan tan fuerte, si se muere antes de la ejecución tendremos problemas- el vicelmirante Doberman, robusto y lleno de cicatrices en su rostro y cuerpo había dejado que sus hombres se divirtieran un poco con el temible e inconsciente pirata aunque sabía que este no moriría fácilmente empezó a preocuparse cuando este se tardó dos días en despertar

-oi Momonga, trae a un médico y que le atiendan, no quiero que Sengoku nos amoneste por matar a un prisionero como este-

Las voces se apagaron para Ace, no fue hasta después de un rato que despertó en una celda en lo que el intuía debía ser algún buque de la marina, que logro darse cuenta del lio en el que estaba metido, las cadenas no daban espacio a ningún movimiento además la forma en que estas se empotraban a una enorme lamina de acero le hacían saber que sería inútil intentar algo

Con la vista inspecciono el lugar rápidamente, aunque no había mucho que ver, una celda individual frente a él la puerta tipo reja el pasillo y otra fila de celdas, a su derecha la pared del barco y a su izquierda más celdas y ningún otro prisionero, se sentía casi una celebridad, un buque de la marina y por lo poco que recordaba dos vicealmirantes solo por él, tenía un tiempo que no se sentía tan importante, aunque sabía que no era en buena manera, ¿pero cuando si?, después de todo era un pirata con una enorme suma por su cabeza. Ace intento estirace un poco pues sus piernas estaban libres, él estaba sentado en un piso de madera, las esposas agarraban sus muñecas a la altura del rostro, una a cada lado y completamente pegadas a la pared, su torso y abdomen estaban cubiertos de varios vendajes al igual que uno de sus tobillos, su estomago rugió con fuerza, se sentía débil y ya no sabía si era por el kairoseki o por el hambre y la tremenda sed que se cargaba

-oi¡ hay alguien por ahí? Si no me dan algo de comer moriré antes de mi ejecución¡- Ace espero un rato, aunque parecía que efectivamente nadie le había escuchado, iba a gritar de nuevo cuando la trampilla superior se abrió dando paso a un par de marines cadetes y a los dos vicealmirantes

-Portgas d Ace, hijo de…-

-si si si, hijo de Gol D. Roger , hijo del demonio, ya lo sé, ¿trajiste mi comida viejo?- Momonga lo vio irritado, pero el sabia tratar con piratas

-ejem…hijo de "Gold" Roger, hijo del demonio, comandante de la segunda división de los piratas de barba blanca, capturado vivo…-

-vivo y hambriento, por kami, ¿a quién hay que matar para que puedas comer aquí?

La mirada de odio de Momonga fue la única reacción visible

-capturado vivo, con ejecución pendiente-

-saben, he notado que no hay fecha de la ejecución pero tampoco la hay del juicio, pero supongo que igualmente será programada más adelante-

-para los piratas como tú no hay juicio¡ pasan directo al patíbulo de ejecución¡ demonio¡-

-Doberman¡ cálmate¡-

-tu juicio será aquí y ahora-

-de verdad? No tengo abogado, ¿se me brindara uno?-

-si dejaras de interrumpir podríamos terminar con esto-

-oh vaya¡ entonces ya estoy en mi juicio, que interesante, ¿entonces tu serás quien me defienda o solo serás mi juez?-

Momonga lo ignoro, si bien no es como que los piratas con precio por sus cabezas pudiesen de alguna manera tener un "juicio justo" pero él no era quien para cuestionar las leyes de la marina y mientras Ennies lobby no regresara a la normalidad después del atentado de los mugiwara los juicios tenían que realizarse dentro del mismo buque que les trasportaba a Impel down.

-… se le acusa de crímenes de alta piratería, actos de traición a la nación y a la marina, robo, secuestro, asesinato…

-oi oi oi¡ tranquilo viejo¡ yo no he matado a nadie-

-… tráfico de armas y de mercancía robada, destrucción de propiedad del gobierno, el ejército y la marina, reuniones ilegales con fines de piratería, obstrucción de la justicia y sembrar el caos en lugares ajenos a su organización…-

-fiuuu¡ vaya mira que no tenía idea de todo eso, solo escuche bla bla bla piratería, bla bla bla, de dónde sacan todas esas cosas? Enserio, es solo para que se escuche bien en la plaza de ejecución o de verdad se lo creen?-

-… se declara culpable o inocente de estas acciones-

-inocente…-

Era su sonrisa altanera contra las miradas mordaces y cabreadas de los dos vicelamirantes

-el resultado de su juicio será emitido esta tarde, al igual que la fecha de su ejecución…-

-oi oi, no que apenas deliberaran, no debería estar en cuestionamiento también una posible liberación?-

-… mientras tanto, los cadetes lo alimentaran y ayudaran dentro de lo posible… disfrute su estancia, pirata…- Momonga y Doberman se alejaron desapareciendo por la trampilla superior

Ace se quedó solo con los dos marines que al verlo despierto y vivaracho –dentro de lo que cabía- tenían en sus miradas un pánico casi palpable

-oi¡ marine, muero de hambre, ¿que hay en el menú?- ambos cadetes intentaron calmarse, no sería la primera vez que tenían prisioneros a su cuidado pero no recordaban a uno tan importante como este, no querían pensar en que cabía la posibilidad de que este escapara pero su recompensa era de cuestionarse cualquier cosa

Los marines le mostraron un plato con un extraño guiso de algo entre verdoso y café, desprendía un olor a engrudo con frijoles

-eso es lo que se come aquí, no me sorprende que no tengan más invitados-

Un revelador gruñido en su estomago bajaron toda la fachada de superioridad que el pecoso había logrado imponer, maldijo el instante en que las risas altaneras de los marines vino a pintarles todo el rostro

-vaya vaya¡ veo que el hijito del demonio tiene tanta hambre que hasta esta asquerosa basura de lo que sea que el chef haya hecho para ti se te antoja ¿no es verdad?-

-oi Patty, de seguro que hasta un buen tazón de mierda seria de su agrado en estos momentos¡-

-wuajaja¡ seguro que si –

-oi¡ Genma mira esto- el marine más robusto puso una mirada enloquecida y coloco el plato de engrudo en el piso y Ace intuyo que sea lo que sea que pasara ya no le sería posible comer por el día de hoy, así que simplemente espero a ver que fantástica idea se le ocurriría al estúpido marine

Patty abrió su pantalón y ante la mirada sorprendida de Genma y la aburrida de Ace, orino en el tazón de alimento

-bwuajajaja¡ te toca Genma¡ dáselo tu-

-no¡ ni madres tu dáselo- Ace sonrió de soslayo, esos marines eran unos idiotas, aunque definitivamente le habían arruinado la comida, viendo como su poca valentía recién ganada se perdía, el usuario de fuego se estiro todo lo que la posición le permitió acercándose lo suficiente para que sus piernas, más bien sus tobillos, ágilmente atraparan la cabeza del idiota de Patty y con rapidez le empujo para proyectarlo de cara directo sobre el plato que este mismo había meado, Genma retrocedió asustado de la considerable libertad de recién notaba en el peligroso pirata, pero Patty encabritado de que su broma había resultado en su contra, envistió iracundo al pecoso, Ace sonrió, limpiamente derroto al tipo con la poca movilidad que poseía, dejándolo tirado e inconsciente justo enfrente

-oi¡ Genma…- el aludido dio un respingo al ser consciente de la increíble facilidad con que su robusto compañero había caído, - tráeme un plato de comida decente, sin meadas por favor o el siguiente serás tu…- haciendo gala de su reputación, Hiken le dio su mirada más siniestra y diabólica que se conocía, acto seguido pateo al desafortunado e inconsciente marine tan fuerte que este impacto contra su asombrado compañero. Ambos salieron con prisa por la trampilla superior, uno cargando completamente al otro y Ace sabía que era demasiado esperar a que realmente le trajeran algo de comer por el día de hoy.

Los minutos pasaron, el hambre y el cansancio lo estaban venciendo, se preguntaba en que día se encontraban, cuánto tiempo había estado inconsciente, cuánto tiempo había pasado desde aquella pelea en la isla Banaro, mas importante aún, ¿que había sido de Teach? ¿el malnacido aun quería buscar la cabeza de su hermanito o con la de él había sido suficiente?

-Luffy, Oyashi… gommene…-

un helado viaje de agua halada lo había levantado de súbito, que manía tenían los marines por hacer esto?

-qué demonios quieren?- Ace intento poner su mejor cara de odio pero tenía un dolor de cabeza increíble debido a la deshidratación que estaba sufriendo, solo quería seguir durmiendo y ese mismo cansancio habían hecho mella en sus expresiones. aun con pocos segundos de haber despertado podía darse cuenta de la situación y no pintaba nada bien, uno: antes de dormirse había notado la escasa luz que pasa por un insignificante ventana de buey al final del pasillo y ahora estaba oscuro, lo que significaba que ya era de noche; la habitación era alumbrada por poca luz eléctrica, ventaja con la que contaban exclusivamente los buques de la marina y ningún otro barco, al menos ninguno que el conociera, dos: los dos marines de la mañana, especialmente el idiota que había meado en su plato y del cual ya no recordaba su estúpido nombre era el que encabezaba esa pequeña banda de marines matones, cuantos eran, diez, quince tal vez, no alcanzaba a verlos a todos desde su posición y ciertamente no le importaba mucho, si iban a apalearlo se llevaría los primeros entre las patas, aunque sería imposible que en las condiciones en que estaba y con la cantidad de ellos saliera bien parado, pero era inevitable, después de todo era un pirata prisionero en un buque de la marina, que otro trato podría esperar

-lo tienen?-

-si aquí esta-

-Perfecto-

Ace no supo a que diablos se referían hasta que sintió un aguijonazo en el pecho, viendo con cierto temor un colorido dardo con la afilada punta sumergida en su piel

-pero que carajos?…- Portgas sintió el cuerpo pesado, quiso hablar pero su lengua no quiso moverse, no podía moverse, ni hablar, era un dardo tranquilizante? O tal vez alguna especie de anestesia

-rápido solo tenemos unos cuantos minutos antes de que se termine el efecto-

Con la mirada gacha pues su cuello no le respondía, Ace solo veía de reojo que los marines lo rodeaban, esperaba comenzar a sentir en cualquier momento los golpes pero en vez de eso sintió que sus manos cayeron sin fuerza, lo habían liberado, pero dudaba que fuera para algo que le beneficiara. Trago grueso, libre del poder de kairoseki no tendría una mejor oportunidad para escapar, pero era imposible, su cuerpo no respondía, estaba paralizado y no había más. Los marines cargaron el cuerpo inerte de Hiken y lo movieron a una celda más grande donde previamente habían empotrado una extraña picota*, esta vez no solo sus manos si no también su cuello fue fuertemente sostenido por el tan conocido aparato de torturas, al parecer los marines iban a darle rienda suelta a la imaginación y Ace solo podía pensar en lo feliz que iba estar cuando finalmente escapara y le partiera la cara a todo ellos de manera gustosa

Con mucho cuidado de dejar todo bien ajustado los marines encadenaron de igual manera los tobillos del pecoso a las cadenas que empotradas en el piso se ubicaban de manera estratégica cercanas a la picota , Ace había quedado inmóvil de sus cuatro extremidades pero en una posición donde podrían fácilmente tortúralo y humillarlo todo lo que quisieran

-creo que deberíamos aprovechar esa boquita antes de que el efecto pase, no crees Patty?-

-si wajajaja esto será divertido-

Ace se tenso, aun no podía mover su cuerpo y apenas podía respirar pues al no poder sostenerse sobre sus piernas el ángulo apretaba su garganta y se le dificultaba el respirar

Frente a él Patty o el imbécil como le gustaba llamarlo, volvió a hace gala de sacar a su pequeño y molesto amiguito de entre sus pantalones, que manía tenia este tipo por exhibirse así, el marine sostuvo el rostro de Ace y debido a la droga basto con aplicar poca fuerza en las mejillas para lograr que la boca de Ace se abriera casi completamente, si Hiken hubiese podido hablar le hubiera advertido que de hacer lo que él tenía pensado que haría muy posiblemente el imbécil de Patty se quedaría sin hombría, pero la droga estaba presente en su cuerpo impidiéndole cualquier movimiento pero manteniéndolo despierto y completamente consiente del tacto sobre su cuerpo. Tal vez el sentir que sus pantalones se deslizaban por el largo de sus piernas hasta caer al piso le hubiese importado un poco más si el erecto y maloliente miembro del marine que en su mente ya era hombre muerto no le hubiese atravesado hasta el fondo de su garganta. la sensación y toda la acción le provocaron al pecoso unas arcadas profundas en rechazo de esa intromisión en su boca, el exceso de adrenalina en su torrente sanguíneo le regresaron el control lo suficiente para conseguir cerrar su mandíbula con fuerza suficiente para provocar en Patty un sonoro aullido de dolor, el marine ya podía agradecer que los efectos de la droga habían evitado que quedara castrado por completo, pero si le habían abierto una sangrante herida con la forma de los dientes de Hiken, aun en medio del dolor Patty logro asestar un par de golpes en el rostro del pecoso antes de salir corriendo hacia la enfermería asustado por el chorro de sangre que no dejaba de salir de su lacerado amiguito

Ace aun disfrutaba de su extraña victoria cuando una horrible sensación lo abordo por completo, el artefacto de madera no le permitían ver nada que pasara detrás de cuello, pero las manos que aferradas de sus cadera lo elevaban con prontitud dejándolo a la altura adecuada para ser el entretenimiento principal de la noche, lo pusieron muy nervioso especialmente porque apenas había recuperado muy poca movilidad y aunque la hubiese recuperado toda, sus pies estaban encadenados y no podía moverlos para defenderse, ni para nada. Aguanto en su garganta un grito de dolor cuando algo –algo que intuía que era pero tampoco estaba muy seguro- entro por su orificio posterior, fue un dolor desgarrador y completamente humillante, respiro con fuerza y cuando una nueva envestida le lacero por dentro apretó sus labios y no dejo salir ni un solo murmullo, no les daría el placer de escucharlo gritar,

-que pasa princesita demoniaca, ¿te gusta? ¿Quieres que te dé más fuerte?- como prometió esta vez se encajó hasta el fondo y Ace solo pudo apretar los ojos y trincar los dientes, lo sentía entrar y salir mientras esas caderas golpeaban sus glúteos, el dolor lo mareaba y amenazaba con hacerlo vomitar, después de algunos segundos pido percibir algo escurriendo por el interior de sus muslos, tal vez su propia sangre o algo más asqueroso

-oh¡ si, me encanta cuando están apretaditas, oye Genma, tu turno he, ya lo deje listo para ti-

-no se Hermes, si el capitán Doberman se entera nos amonestara-

-si Hermes, no quiero pasar otra semana completa limpiando inodoros-

-no sean princesas, vamos, que la pichoncita ya está lista para todos y ni Doberman ni Momonga deben enterarse, esos viejos neófitos solo saben poner reglas y reglas y reglas, nunca se divierten, por eso tiene esas caras de impotentes amargados- Hermes dio una nalgada en los carnoso muslos de Ace mientras se deleitaba con la visión de cómo su esencia mesclada con la sangre de Ace pintaba alegremente los muslos trigueños

Los demás marines lo miraron como si apenas notaran el perfecto tesoro que tenían enfrente, aun los que no tenían tanto interés en hacer tales cosas, llevaban más de un mes en alta mar, se suponía que esa semana tocarían puerto pero fue precisamente por culpa de este pirata que habían tenido dar la vuelta y cumplir con la nueva misión de trasportarlo hasta Impel down

-bueno, está bien, pero ni creas que voy a meter al gran Genma en donde tu asqueroso pito a dejado huella-

-habrán paso a la manguera contra disturbios¡- entre varios marines ya más entrados en el "juego" fueron por la manguera antidisturbios que tenían en parte para lo que realmente era y la usaban más bien para molestar a los prisioneros o darles un baño a distancia cuando estos ya olían muy mal

La fuerza con que el agua a presión golpeo su piel y sus piernas se había sentido como un verdadero golpe físico, sumado al frio del agua y al constante torrente que parecía querer arrancarlo de sus cadenas. Fue aun peor cuando los marines giraron para que el agua le diera en el rostro, el agua se le metía con fuerza por los parpados, la nariz y la boca, trago agua pero también respiro otra buena parte

-bien, ya está limpio, yo pido primeras¡ hey¡-

…Le dolía horrores cada envestida, apretaba los puños aguantando cualquier exclamación y cada que uno terminaba dentro de él un nuevo viaje de agua helada golpeaba su trasero helándole las piernas y dejando el paso limpio para el siguiente… perdió la cuenta después del décimo, el dolor era tan intenso que empezaba a entumirse y su mente comenzaba a divagar lejos de ahí, estaba cansado aun antes de todo el desmadre, ahora sus músculos resentían la mala posición y los golpes de las peleas previas, sus energías habían caído hasta los más bajo y empezaba a perder el conocimiento. Una nueva oleada de golpes azotaron sus piernas y su entrepierna, se mordió los labios para no gritar, cada golpe debilitaba su postura que de por si no era muy rígida y tuvo que morderse muy fuerte los labios para aguantar el grito que aclamaba por salir cuando algo enorme lo penetro con tanta dificultad que estaba seguro que lo había desgarrado tan profundamente que poco faltaba para que lo partiera en dos, quiso voltearse para ver qué era lo que estaban haciéndole, pero tampoco le importaba mucho, era tortura física, no sería la primera vez que la soportara aunque nunca había tenido que pasar por una de esta índole, sabía que todas radicaban en lo mismo, hacerte sentir el peor dolor y humillación que permitieran las circunstancias.

El dolor extremo y la adrenalina le hicieron devolver la bilis que se acumulaba en su estomago, en su vientre empezó a bullir el deseo de matar a esos cabrones que se divertían a su costa y el sentirse tan imposibilitado lo acercaban peligrosamente a la locura. Su estresada mente no pudo evitar recordar a su ototo, no sabía exactamente porque se acordaba de él, pero pensar en Luffy lo mantenía cuerdo y despierto.

-Ace, esta vez quiero ser yo quien te lo haga…- ambos estaban recostados en una tienda de campaña improvisada en las frías arenas de Arabasta, la noche ya estaba avanzada y el frio había hecho que todos se arremolinaran en las tiendas que les había tocado a cada quien, el capitán que había exigido dormir con su hermano ahora disfrutaba de la cercanía de su siempre cálida piel, era como estar cerca de una agradable fogata personal, lo que por supuesto le habían subido los ánimos

-no Luffy, yo no soy de goma, me dolerá y además alguien podría escucharnos, no quisiera tu tripulación pensara mal de ti- Luffy frunció los labios, ya antes su hermano mayor se había tomado la molestia de explicarle las diferencias entre los diferentes tipos de amor que puede sentir una persona, pero con todo y todo habían terminado enrolados en la bodega del merry, pero Luffy sabía que era algo importante para su amado hermano y aunque si por él fuera saltaría encima de su aniki aun con todos viéndole, no quería sentir ese doloroso rechazo que este le había dado antes cuando descuidadamente se había metido en su cama.

-no te lastimare, lo prometo¡- en su mirada había esa decisión que era difícil de ignorar, incluso Ace sabia que cuando se le metía algo en la cabeza era difícil hacerlo salir de ahí

-pero hay que ser silenciosos y si haces algo que me lastime te hare pagar- la enorme sonrisa de su ototo era contagioso a varios niveles. Luffy que ya estaba bastante enrollado en el cuerpo de su hermano para no pasar frio simplemente atrapo sus labios y devoro su boca como tanto le encantaba hacer

Tenían ya dos días caminado por el caluroso desierto y la noche anterior había pasado un frio de pocas veces, el chopper y Usopp habían terminado hechos volita al fondo de una cabaña, pero entre tanto pelo y patadas de su francotirador el capitán no había descansado bien, y que nadie le dijera que chopper no pelechaba porque había despertado tosiendo pelos como cualquier gato terminando de bañarse. Por eso hoy había dejado muy en claro que dormiría con su hermano, si o si, los demás habían accedido ya que para variar era uno de esos caprichos de su capitán que no le hacían mal a nadie y por su estatus de hermanos lo habían visto más bien como un gesto tierno y fraternal,

Ya entrados en calor, sentados en la improvisada cama hecha de telas Ace había empezado a masturbar a su hermanito, este hacia ligeros gemidos justo en su oído mientras intentaba acariciar su espalda, a este paso terminaría siendo el domínate de nuevo y no es que le molestara pero Luffy era capaz de levantarse temprano para intentar convencerlo de nuevo exigiendo ser él el activo, otra vez y no creía tener la suficiente paciencia para eso

-ah… Lu…- ¿pero cómo guiarlo cuando realmente ellos solo se dejaban llevar por las circunstancias?- Lu... hazme lo mismo…- Ace agarro una de las manos de Luffy y se la coloco en su enhiesta masculinidad

Absortos en profundos besos ambos se manipulaban deliciosamente, si ninguno cedía terreno terminarían viniéndose así como iban. Ace intentaba controlar su fuerte instinto de poner a su ototo a cuatro patas y penetrarlo hasta perder la noción de si mismo, su deseo estaba demasiado intensificado y estaba a nada de perder el control, sentía su piel arder y no precisamente por su logia, aunque dudaba si esta igual ayudaba, aguantándose las ganas, el mayor se giro dándole la espalda al capitán, poniéndose él mismo a cuatro, era él o Luffy pero alguien tenía que pasar al siguiente nivel o se volvería loco

-ah¡ escucha Lu… yo… yo nunca…- Hiken sintió sus mejillas arder aun con todo y que era usuario de fuego no pudo evitarlo, o quizá era psicológico, no importaba igual se sentía avergonzado

-escucha… yo no…-

-tranquilo Ace… yo entiendo- sintió la suave caricia en sus caderas y los ojos negros de Ace miraron de soslayo como Luffy se acercaba casi peligrosamente

-e-espera Lu, n-n-no puedes simplemente, AAH¡- Ace apretó la sabanas y hundió su frente en estas, sentía como Luffy se abría paso lenta y dolorosamente, mordió sus labios y aguantado los deseos de alejarse

Luffy sentía la tensión en el cuerpo se su oniichan, casi podía percibir el dolor que este estaba sintiendo y si había algo que no soportaba era lastimarle de esta manera, a golpes si, a mordías jugando perfecto, midiendo su fuerza, más que bien, pero estando así, en algo tan delicado como enrolarse juntos, así no le parecía para nada bien. Se retiro de su estrecha entrada antes de poder siquiera llegar a la mitad, se sentía extraño de esa manera que empezaba a identificar como estar excitado y odiaba pensar que quizá le había bajado las ganas a su hermano

-gomenne… Ace…- lo rodeo con los brazos por la cintura quedando a cuatro patas sobre su hermano y busco su miembro para comprobar si este seguía excitado, se sorprendió bastante al encontrarlo aun completamente duro, a pesar del dolor que le había causado, sonrió para sí mismo, apoyando su frente en la húmeda espalda de su aniki y con maestría aprendida comenzó a masajearlo de nuevo, el pecoso se abandonó a las exquisitas caricias que su amado y torpe hermanito le proporcionaba, se sentía tan bien… tan endemoniadamente bien…

-ah¡ ah… Luffy… inténtalo otra vez… pero hazlo con tus dedos primero, para que me acostumbre…- Luffy asintió para sí mismo pues sabía que su hermano no podía verlo, con tranquilidad y sin dejar de masturbarle ubico con su mano libre la entrada del mayor, le acaricio por fuera forzando poco a poco el acceso, por puro instinto acerco sus labios y con su lengua le acaricio también, humedeciendo todo el espacio o más bien asegurándose de dejarlo bien húmedo, el segundo dedo entro un poco más difícil pero sin mayor problema, Ace seguía respirando agitadamente pero no aparentaba sentir dolor, con más tranquilidad y las ganas renovadas Luffy introdujo un dedo más…

-ah¡ espera que haces?- Luffy sonrió e introdujo un cuarto dedo

-oh¡ kami Luffy¡ que haces? Se siente bien raro… ah¡- Portgas apretó las sabana e intento no retroceder, podía sentir como los dedos de Luffy entraban y salían con cierto ritmo, no le dolía pero tenía que aceptar que se sentía sumamente extraño una sensación ambigua entre el placer y la total incomodidad

-shishishi, solo me hago espacio- Ace sentía una extraña presión en el vientre, se sentía casi como cuando estaba a punto de venirse pero era más bien una especie de extraña necesidad

Luffy le había agarrado un gusto bizarro al revolver los dedos en el cálido interior de Ace, se sentía húmedo, suave, apretado y hasta cierto punto divertido y más cuando su amado hermano parecía estar al borde del delirio solo por su causa

-ah¡… ma-maldicion Luffy… voy a correrme…- esa declaración dicha de esa manera tan angustiada le hicieron a Luffy sentir una correntada de placer y excitación de las más pura, con rapidez dejo de envestirlo con los dedos para empezar a hacerlo con su endurecida y sobrexcitada masculinidad, esta vez había entrado con facilidad y la sensación de placer fue tan absoluta que un leve mareo casi le hacen perder el equilibrio; su razón le abandono y su instinto tomo el control absoluto de su cuerpo, envistiendo duro y rápido contra su hermano ni siquiera noto el momento en que este se había derramado manchando las sabanas y su mano que en ningún momento había dejado de mastúrbale

-oye pirata¡- un golpe en la quijada lo regresaron por completo a la realidad

-sabes pirata, yo digo que quiero que me la mames, tu culito ya está muy usado y no quiero que me infecte de algo-

-puedes intentarlo pero quedaras peor que el imbécil que se atrevió antes…- le dijo con su mejor tono demoniaco que poseía

-ya se hagamos un trato, tú me la mamas rico y yo no te corto los huevos, ¿que te parece?-

-seguro porque no? Parece un buen trato… si es quieres quedar sin polla-

-a ver imbécil no me has entendido¡ -

-ya Hermes déjalo en paz, ya nos divertimos y tú fuiste el primero, hay que limpiar todo antes de que los capitanes se den cuenta-

-mmm… tal vez debería intentarlo por otro lado…- con fuerza el marine sujeto los cabellos de Ace y unto su miembro por las mejillas y la frente del pecoso, Ace apretó los puños incapaz de hacer nada mas, pero si se lo acercaba solo un poco más a los labios estaba seguro que mordería sin importarle lo que ocurriera después. Las gruesas manos de Hermes apretaron una de las pupilas del pirata quien aun con los ojos cerrados empezaba a sentir un indescriptible dolor

-se te quito un ojo podría cogerte por ahí… apuesto a que se sentiría muy bien- apretó mas y Ace en verdad creyó que le reventaría el ojo

-basta Hermes¡ si lo lastimamos mas no solo nos reñirán, podríamos terminar en Impel Down igual-

-nee, a lo mucho una baja deshonrosa… mmm tienes suerte pirata, suerte de que todas estas niñitas sean unas mariquitas asustadas de papi capitán o ya estaría fallándote por las cuencas bwajajaja- un par de fuertes puñetazos en el rostro que le dejaron a Ace un nuevo sabor de sangre fue el cierre de su primera noche consiente como prisionero de la marina… si a partir de ahora todo iba a ser así, sería un largo camino hacia su sentencia…

Continuara…

xD no me maten¡ torturar a Ace no es de mi agrado tampoco pero eso me pasa por leer historias de terror y sadismo o.O… les spoileo para que me sigan leyendo, hare circo maroma y teatro para permitirle a Ace sobrevivir… o quizá no, no lo se jajajaja XD

Mándenme reviews no sean malas TwT

atte: Kagome Nekko