¤ Fandom: Clamp School Detective.
¤ Claim: Suoh/Akira.
¤ Prompt: Almuerzo.
¤ Palabras: 407.
¤ Advertencia: Shonen ai.
¤ Notas: Me inspiré en parte en un comic que leí ayer xDU. Ah, sí, Kaichou es como se le dice al presidente del comité estudiantil.
Suoh no podía más que sorprenderse y sentirse un poco mal. Akira siempre, desde que era parte del comité, se aseguraba de que hubiera una taza de té caliente en su escritorio. Y no sólo eso, sino que siempre estaba dispuesto a hacer el almuerzo tanto del presidente como el suyo. Y, en todo ese tiempo, Suoh no encontraba alguna forma de agradecerle más que diciéndole simplemente 'Gracias'. En verdad sentía que aquello no era suficiente.
Así que, después de mucho pensarlo, se decidió en regalarle un delantal nuevo. Lo compró y lo envolvió, pensando que el mejor momento para dárselo sería antes de su clase de cocina con las universitarias, así evitaría que Nokoru hiciera algún comentario innecesario.
Lo fue a buscar, sabiendo que el castaño tenía la costumbre de llegar antes para revisar todo. Y no se había equivocado.
―Takamura-senpai ¿sucedió algo? ―preguntó el niño, extrañado de verlo por esos lares. Suoh no dijo nada, la vergüenza invadiéndolo en ese momento, por lo que sólo le entregó el regalo y se marchó―. Uh, gracias ―Akira abrió el presente, un poco extrañado, pero no pudo más que sonreír contento al ver de qué se trataba.
Pasaron las horas y Suoh regresó al ala de cocina, un tanto temeroso de que a Akira no le hubiera gustado su regalo. Pero al asomarse por la puerta esa preocupación desapareció. El tesorero estaba utilizando el delantal. Suoh no pudo evitar sentirse un poco orgulloso por haber escogido un buen regalo, además, le quedaba muy bien a Ijyuin.
―Definitivamente Akira sería una gran ama de casa ―dijo una voz a su espalda, sorprendiéndolo. Nokoru abrió su abanico, ocultando su sonrisa divertida tras el mismo.
Suoh, por su parte, no pudo evitar pensar algo que no debía, haciendo que su rostro se pusiera completamente rojo, por lo que salió corriendo, para extrañeza del Presidente.
―¿Y ahora que pasó? ―se preguntó extrañado.
―¿Kaichou? ―Akira lo había visto y, aprovechando unos minutos, salió del aula.
―Uhm... Akira-kun, asegurate de llevarnos un poco de lo que prepares para el almuerzo, creo que a Suoh le gustara.
―Claro.
Está de más decir que Suoh no pudo comer ese almuerzo tranquilamente, por lo avergonzado que estaba. Y es que Akira se lo había entregado vistiendo aún el delantal que le había regalado (Y Nokoru le molestaba preguntándole la razón por lo que hizo eso, además de que también quería regalarle algo a Akira, sin razón aparente).
¿Review? :3