Rick y Kate, o "Caskett" como se habían llamado a sí mismos, decidieron tomar una nueva oportunidad para ir a pasar una fin de semana a los Hamptons después de todo el desastre que había sucedido con la bomba. Y ahora que Gates lo sabía había sido muy fácil conseguir que les dieran el fin de semana libre.

-¿Y qué pasa si encontramos otro cadáver flotando en la piscina, Rick?-Dijo Kate esbozando una sonrisa traviesa

-Resolveremos el caso más rápido que la última vez y podremos seguir disfrutando de nuestro perfecto fin de semana – Castle lucía feliz, igual que siempre que estaba cerca de ella

Lo pasaban tan bien juntos, y su relación iba mejor que nunca. Estaban por cumplir uno año desde aquella noche en la que Kate llegó empapada de decisión al loft de Castle. Esa decisión de la cual lo único que lamentaba era no haberla tomado antes.

-Pues yo creo que sería mejor no encontrar cadáveres esta vez- dijo frunciendo los labios- Parece que nos persiguen los asesinatos.

-Bueno, yo no lo lamento, eso fue lo que nos unió por primera vez.-Ambos sonrieron ante el recuerdo.

Entre bromas y risas bajaron del auto y mientras que Kate entraba a la casa Castle bajaba el equipaje. Ella quería ayudar, pero él había insistido en que no lo hiciera, así que subió a la habitación y se recostó en la cama, simplemente dejando volar su mente, seguía tratando de decidir el mejor beso hasta el momento. Lo dejó, simplemente todos habían sido los mejores.

-¿En qué piensas?- Dijo Rick cuando entró a la habitación y se encontró con la sonrisa tonta que dibujaban los labios de Kate. Dejó las maletas en el piso y se volvió hacia ella

-En tus labios- Respondió ella adquiriendo una expresión un poco más seria mientras se ponía de lado apoyando su cabeza en la mano y el codo en la cama.

-mmh… ¿Y qué te decían mis labios? – Preguntó con una sonrisa pícara.

-No, no es lo que me decían, es lo que hacían. – Dijo aún seria mientras Castle gateaba en la cama acercándose a ella.

-Suena aún más interesante. ¿Qué es lo que hacían? – Preguntó llegando a la altura de Kate pudiendo sentir la cercanía.

Kate no necesito contestar esa pregunta con palabras. Acercó sus labios a los de Rick fundiéndose en un beso difícil de olvidar. Se detuvieron cunado Rick comenzaba a acariciar su abdomen, no por el hecho de que lo hiciera, sino por el ruido que este emitió.

-¿Tienes hambre? – Preguntó Rick mirándola expectante

-Puede esperar – Respondió Kate tratando de continuar con lo que habían comenzado.

Volvieron a besarse, pero Rick no quería dejar que el estómago de Kate sufriera. Se separó de ella con delicadeza apoyando sus frentes una con la otra.

-¿Qué te parece si nos duchamos y salimos a cenar a un bonito restaurante? – Preguntó Castle intentando convencer a Kate.

-Mal, muy mal- Respondió Kate cerrando los ojos acercándose de nuevo pero Rick echó su cabeza hacia atrás haciéndole ver su desaprobación ante la situación.

-Castle…- Gimió Kate mientras habría los ojos lentamente y se encontraba con su mirada.

-¡No quiero que tu estomago sufra, Kate!- Exclamó con un tono de niño pequeño.

-¿Y vas a dejar que quien sufra sea yo?- Preguntó ella con esa mirada amenazadora que le provocaba escalofríos.

Rick le dedicó una mirada de perrito que solo la hizo poner los ojos en blanco mientras se levantaba de la cama y buscaba sus cosas para meterse a la ducha. Rick se sintió orgulloso de haberlo logrado. De verdad tenía muchas ganas de llevarla a cenar a ese bonito lugar. Pero Kate aún estaba un poco molesta por haberle hecho perder la inspiración.

-Supongo que te duchas en la siguiente habitación.- Dijo Kate cerrando la puerta tras de ella haciendo esfumar la sonrisa que dibujaban los labios de Castle.

Subieron al auto cuando estuvieron listos. Ambos lucían guapísimos. Kate llevaba uno de sus vestidos casualmente entallados que hacían que sus curvas lucían espectaculares. Rick, por su parte iba más relajado con unos vaqueros y una playera color blanco que lo hacía lucir extremadamente sexy.

Aparcaron el auto cerca del lugar a donde se dirigían. Rick abrió la puerta de Kate y la ayudo a bajar tomándola de la mano. Caminaron así hasta llegar a la puerta del restaurant. No era un lugar lujoso. Eligieron una mesa pequeña en el balcón en donde se podían escuchar las olas del mar.

-Esto es perfecto, Rick. Gracias- Dijo Kate con una hermosa sonrisa mientras miraba a lo lejos el vaivén de las olas.

-No tienes por qué agradecerme.- Le respondió abrazándola por la espalda y besándole el cuello. Kate cerró los ojos disfrutando dela cercanía y del momento.

El servició llegó y tuvieron que acudir a elegir que cenarían.

Una mujer joven, no tan mal perecida acudió a tomar el pedido. No dudó ni un momento en echarle un ojo a Rick que iba luciendo tan sexy. A Kate le sorprendió la manera en la que la chica había pasado de su presencia aun cuando era evidente que estaban juntos.

Rick se encargó de pedir la cena para ambos sin perder la oportunidad de devolver las sonrisas a la mesera. A lo cual Kate solo podía poner los ojos en blanco y lanzando miradas matadoras a Rick cuando la chica del servicio se alejaba.

-¡¿Qué?!- Pregunto Rick fingiendo inocencia

Kate respondió achicando los ojos antes de desviar la mirada.

-¿Por qué te enfadas conmigo? ¡Fue ella la que empezó!

-¿Es en serio, Castle?- Preguntó Kate con la misma mirada recriminadora.

-¡Vamos, Kate. No fue nada!

-¡Oh! ¿Entonces qué es "Algo" para ti?

Castle dirigió la mirada hacia la barra y se dio cuenta que la camarera no le quitaba los ojos de encima. Se levantó de su silla y la acomodó a lado de Kate. Se volvió a cerciorar que los estuviera mirando, ella lo hacía, así que miró a Kate, acarició su rostro lentamente se acercó a ella y la besó sintiendo como ella tardaba en responder debido a lo sorpresivo de la situación.

Tardaron mucho en separar sus labios, ninguno de los dos quería que esto terminara.

-Esto es "algo"- Dijo Castle mirándola fijamente.

-Lo sé- Dijo Kate sonriendo a Castle y después a la camarera.

-Entonces, ¿aún estas celosa?

-mmm… No lo sé...¿Quieres seguir demostrándome que es "algo"?- Preguntó Kate subiendo sus brazos para abrazarlo por el cuello y moviendo la cabeza de lado a lado.

Volvieron a besarse y terminaron la cena entre plática, caricias y besos.

Cuando salieron del restaurant se dirigieron a caminar a la orilla de la playa.

-Y para ti, ¿Qué es "algo", Kate?- Preguntó Castle intentando romper el silencio, que había sido agradable, como todos los silencios compartidos con su musa, pero quería seguir jugando con ella y sus celos.

Kate se detuvo en seco, se volvió hacia él y subió sus brazos abrazándolo por el cuello.

-Para mí "algo" es cualquier cosa, "algo importante" son esas 5 letras en 2 palabras. Eso que ya ambos dijimos pero no hemos vuelto a escuchar.- No era la respuesta que él esperaba. Sin embargo no tardó mucho en entender lo que su novia le estaba diciendo.

La tomó por la cintura y la atrajo más hacia su cuerpo hasta quedar perfectamente amoldados. No les costaba mucho, era evidente que sus cuerpos estaban hechos para estar juntos siempre

-Te amo, Kate.- Dijo Rick mirándola intensamente a los ojos

-También te amo, Rick.

Se besaron intensamente. No dudaron en jugar un poco en la playa antes de llegar a casa y terminar la noche mucho más espectacular de lo que hubieran podido imaginar.