Lo corregí un poquito, gracias BlindMaster
Avatarla leyenda de Aang no me pertenece y bla bla bla... :)
Vuelcos inesperados
Capítulo I : Una visita no deseada
En medio de una tormenta de nieve, se refugiaba en una cueva un joven solitario, deshonrado y desterrado, No durará por mucho tiempo más se dijo a si mismo en un intento de conseguir la fuerza necesaria para continuar con su plan, el cual en ese momento ya carecía de sentido. A su alrededor pudo observar la estrecha cueva en la cual se encontraban, él y ... el avatar, quien no parecía percatarse de los hechos, pues se encontraba en el mundo de los espíritus.
- ¿Qué haré ahora?- se repetía a si mismo una y otra vez- Tengo al avatar, pero estoy acorralado, hay nieve en todas partes, creo que mi tío tenía razón... debo pensar antes de actuar...
En ese momento, una fuerte ráfaga de viento lo azotó contra la pared y en un intento de recuperarse a si mismo levantó la vista y en menos de un segundo se vió rodeado por los amigos de Aang y su bisonte volador.
- Ríndete Zuko, sabes que no tienes opción contra nosotros tres- le amenazó Katara, dirigiéndole una mirada escrutadora.
- Eso jamás sucia campesina, ustedes jamás serán un rival para mí
Entonces, comenzó la batalla, sin saber el objetivo ni lo que haría una vez ganada la batalla, Zuko comenzó la batalla lanzando unos puños de fuego a los pies de Katara, seguido de un látigo de fuego para alejar a Sokka de su vista, pues la verdadera batalla no era con el guerrero de la tribu de agua del polo sur, sino con la maestra de agua-control.
Katara sabía que por el momento ella era más fuerte que Zuko, pues todavía era de noche, sin embargo quedaban pocos minuto antes de que amaneciera por lo que debía vencer a su oponente en lo que quedaba de tiempo. "Debo apresurarme" pensó desesperadamente, entonces vió como su hermano era acorralado por un látigo de fuego.
- Katara... ¡Ayúdame!- suplicó Sokka a lo lejos
Al ver que Katara había caído en su trampa al intentar socorrer a su hermano, Zuko sonrió victorioso a la vez que lanzaba una bola de fuego lo suficientemente poderosa para dejarla inconsciente, pero no lo suficientemente fuerte para acabar con ella, pues hubo algo en él que frenó la intensidad de su ataque, no sabía el por qué, pero no aguantó la idea de verla morir.
En ese momento Aang volvió del mundo de los espíritus y lo primero que pudieron observar sus ojos fueron a Katara inconsciente en el suelo, ¿Que había pasado? era lo único que lograba pensar, sin embargo la respuesta llegó rápidamente a su mente: Zuko.
- ¡Katara! ... ¡No!
- Tranquilo Aang, tu sucia campesina solo está inconsciente
- Pagarás caro lo que le has hecho, ¡Te lo prometo!
- ¡Eso lo veremos!
Entonces, el avatar comenzó a brillar y pudo sentir como una fuerte ráfaga de viento lo lanzaba contra la pared.
- ¡Despierta Chispitas!
Abrió los ojos lentamente, sentía todo su cuerpo adolorido, Toph lo había despertado con una oleada de rocas que lo habían azotado contra la pared del templo.
- Solo era un sueño- pensó aliviadoZuko.
- ¿Recuerdas que día es hoy? - indagó con cierta curiosidad la maestra tierra control.
- Em... - suspiró mientras se restregaba los ojos.
- ¡Lo has olvidado! - suspiró la pequeña con un poco de descepción
- ¡Claro que no lo he olvidado! Hoy es el día de a salir a explorar esa cueva que encontraste ayer... ¿No es así?
- Me alegra que no lo hayas olvidado Chispitas - dijo Toph mientras una sonrisa de dibujaba en su rostro.
- Pero primero vamos a comer algo, será un viaje largo.
Cuando llegaron al comedor encontraron a Soka hablando consigo mismo y haciendo algunos gestos con las manos en el aire.
- ¿Como se supone que voy a cocinarme a mi mismo? No tengo ni un trozo de carne y nosé cocinar otra cosa que no sea eso...!
- Soka - llamó el ex príncipe- ¿En dónde están Katara y Aang?
Se levantaron temprano y se fueron a investigar una cueva que Aang encontró ayer... y ni siquiera se molestaron en dejar preparado el desayuno! - explicó Sokka mientras arrojaba un pergamino a las manos de Zuko- mira, aquí esta el pergamino que dejaron.
Querido Sokka:
Aang y yo salimos a explorar una cueva que Aang encontró ayer mientras buscaba un buen lugar para entrenar, no te dejé hecho el desayuno porque Aang insistió en que nos fueramos rápido, pero tranquilo. Volveremos a la hora de almorzar.
Katara
- Entonces... tendremos que improvisar un desayuno en el camino.
- Si no hay otra opción... -suspiró la niña.
- ¿Ustedes también se van?- indagó Sokka un poco desanimado.
- Sí - la mirada de la pequeña niña se iluminó, reflejando todo su entusiasmo- también exploraremos una cueva, aunque dudo que sea la misma, hay muchas cuevas en estos sectores.
- Pero, ¿Cómo van a irse? Aang y Katara ya se llevaron a Apa
- Toph construirá un tunel que nos llevará a la superficie, ¿No quieres venir Sokka? Teo, Harú y el duque también se fueron... te quedarías solo aquí.
- No importa... vayan ustedes, yo me quedaré ideando un plan de ataque para el día en el que cometa de Sozin vuelva y registrando el lugar.
- Vamos Chispitas, nos tomará unos minutos llegar a la superficie.
- ¿Estás seguro de que no estamos caminando en círculos? Creo que ya he visto esa roca antes- la preocupación de Katara era perfectamente distinguible a pesar de la poca iluminación.
- Tranquila, nos falta poco para llegar- dijo el avatar justo en el momento en el que tomó las manos de Katara para guiarla en medio de la oscuridad pero ella se soltó inmediatamente.
- Aang, ya hablamos sobre esto, solo ilumina el camino y yo te sigo... además todavía no me has dicho adonde nos dirigimos.
- Es una sorpresa, estoy seguro de que te va a gustar.
Una luz azulverdosa comenzó a inundar el ambiente a medida que avanzaban por un pasillo cada vez mas estrecho. Al lado de ellos apareció una pequeña hilera de agua que salía de una grieta que se encontraba entre las rocas, el pequeño riachuelo les cubría hasta un poco más arriba de los tobillos y cuando el camino llegó a su fin ambos se quedaron asombrados mirando el bello paisaje que se encontraba delante de ellos.
- Esto es simplemente hermoso, gracias Aang.
- Sabía que te gustaría.
Ambos se encontraban al pie de una enorme cascada de aguas termales, el espacio estaba iluminado por unos piedras de color azulverdoso, las mismas que se encontraban en el subterráneo secreto de Ba Sing Sé, al final de la cascada se encontraba un gran lago cristalino que estaba conectado a otros mas pequeños por medio de pequeños conductos subterráneos hechos de tierra, creando la ilución de varias piscinas temperadas. Y a pesar de que un intenso vapor rodeaba el ambiente, este no era un inconveniente pues Aang creó unos conductos de ventilación que estaban conectados a la superficie.
- ¿Como es posible...
- Yo estuve remodeñando un poco este lugar, supuse que te gustaría tener un lugar relajante para poder distraerte de vez en cuando, ya que no te he visto muy relajada desde que llegó Zuko. - explicó rápidamente el joven avatar.
- Es solo que no confío en Zuko todavía y además las rocas de este lugar me recuerdan muchoa Ba Sing Sé y sobretodo el momento en el cual Zuko nos traicinó , pero creo que puedo tratar de no pensar en eso, este lugar lo vale.
- Entonces... ¿Te gustaría que nos diéramos un relajante baño?
- Por supuesto- esbosó una pequeña sonrisa antes de dar un salto para sambullirse en el agua- ya me estaba preguntando para que me preguntaste si tenía ropa de cambio.
- Llegamos- anunció Toph de forma triunfante- se que no se ve prometedora, la entrada es un como estrecha pero por dentro es un laberinto gigante con una sorpresa en el medio de el.
Ambos se encontraban frente a una pequeña grieta que se abría entre las rocas de una pequeña colina, ambos se encontraban un poco cansados pues no habían parado a descansar desde que habían llegado a la superficie, ni siquera habían tomado desayuno pues Toph se reusó a hacer pausa alguna, por lo menos no hasta que llegasen a su destino.
- Toph, ¿podemos comer algo ahora?- un rugido proveniente del estómago de Zuko provocó que la maestra tierra soltara unas risitas disimuladamente.
- Claro que sí- una bolsacon carne apareció a los pies de Zuko- me traje lo que quedaba de carne, espero que Sokka no se enfade por eso.
- No lo hará si no se entera- entonces ambos compartieron una mirada cómplice y unas estruendosas risotadas.
Buscaron un árbol cuya sombra fuese lo suficientemente grande para ambos y entonces se sentaron a disfrutar su comida, no habían nubes en el cielo y el sol brillaba con todo su resplandor, sin embargo corría bastante viento como para contra arrestar el efecto. Una vez que ambos terminaron de comer Toph se puso de pie y apuntó hacia la grieta.
- Te propongo hacer una carrera, ambos nos separamos y tomamos caminos distintos hacia el centro de la cueva y el primero que llegue gana.
- Pero Toph, ¿como sabré cual es el centro del laberinto? Además tu tienes la ventaja de poder visualizar lo que está más adelante de tí por lo que llegar a la meta no será un desafío para tí.
- Tranquilo Chispitas, el centro del laberinto es muy grande por lo que lo reconocerás facilmente, además no me estarás diciendo que no puedes ganarle a una niña pequeña en una simple carrera, o sí?
- Está bien, pero... ¿Cuál es el premio para el ganador?
- Un deseo, a no ser de que tengas miedo de perder.
- Claro que no, empecemos.
Una pequeña sonrisa iluminó el rostro de la maestra tierra, justo antes de salir corriendo hacia la entrada de la cueva, entonces cuando se disponía a mirar burlonamentea Zuko y restregarle en la cara que le había sacado ventaja, se dió cuenta de que él ya no esta atrás de ella, ya no sentía sus vibraciones. ¿En dónde estás Chispitas? Se preguntó a si misma con cierta preocupación.
- No eres la única con trucos bajo la manga - Zuko se encontraba dentro de la cueva esperando por la pequeña maestra tierra-metal. - Vamos, te daré unos minutos de ventaja si así lo prefieres.
- No será necesario Chispitas, será una carrera justa para ambos.
- En ese caso comenzaré la cuenta regresiva: Tres, dos ... HEY! - la poderosa maestra tierra-metal control se encontraba ya a unos cientos metros de distancia - Ya que...
Entonces comenzó a correr con todas sus fuerzas a la vez que intentaba encontrar algún rastro de luminosidad o algún punto diferente entre la oscuridad, algo que delatase la ubicación del centro de aquel gigantesco laberinto.
En cambio Toph iba muy confiada pues conocía la cueva como la palma de su mano, pues unos días atrás ella y Aang habían encontrado esa cueva juntos sin embargo al parecer de la niña, el avatar no se había mostrado interesado en esta, sin embargo la pequeña maestra tierra estaba muy emocionada pues podusentir la complejidad de la cueva con las vibraciones de la tierra por lo que ideó un plan: conocer la cueva completamente y memorizar el gran laberinto para así tenderle una trampa a Zuko, apostar contra él en una notable desventaja y así cobrar su deseo, aunque no estaba muy segura de lo que pediría seguro se le ocurriría algo interesante.
-Pobre Zuko... no sabe de las trampas que le he preparado - sonriendo de oreja a oreja recordó las pequeñas trampillas que había colocado deliveradamenteen el camino de Zuko, para así asegurar su victoria.
El ex-príncipe de la nación del fuego corría con todas sus fuerzas hasta su impredecible destino, sabía que si Toph ganaba sería su esclavo por lo menos por unos cuantas semanas, si no meses! No puedo dejar que eso pase, cierto? - se decía a si mismo mientras corría con gran destreza y agilidad. Entonces pudo observar una brillante luz azulverdosa que empezaba a iluminar lentamente el lugar. Esto fué demasiado fácil- el príncipe exiliado sonreía con un poco de desconfianza e incredulidad mientras se acercaba a la meta, sin embargo, justo en el momento en el se disponía a entrar al centro del laberinto sintió como se activaba una trampa cuando uno de sus pies tocó una roca de extraña apariencia con la figura de la flor de loto inscrita en ésta. Se detuvo un momento para contemplar su alrededor cuando descubrió que un par de paredes de tierra bajaban rápidamente dejándolo acorralado en una habitación improvisada. Toph- pensó con cierta frustración-savía que no podía ser tan fácil. En ese momento un par de paredes opuestas se levantaron dejando libre a su prisionero.
- Qué extraño- se decía a si mismo mientras comenzaba a avanzar por aquel nuevo recorrido - esto no es igual a lo que ví antes, ya no está iluminado.
El maestro fuego encendió una pequeña llama de fuego para ver mejor, sim embargo lo que pudo observar lo dejó atonido.
- Tengo que avisarle a Aang- comenzó a correr otra vez, sin embargo ahora no pretendía llegar al centro del laberinto, sino encontrar a Toph, para que así, juntos le avisaran a su amigo del descubrimiento que acababa de realizar.
- ¡Mira lo que puedo hacer Katara! - Aang corría tan rápido que podía hacerlo por encima del lago sin hundirse, después tomó un látigo de agua, el cual era del doble de su tamaño, y comenzó a crear un remolino de agua sobre su cabeza para después hundirlo en el lago.
-Aang...¡¿Qué estás haciendo? - Katara estaba siendo succionada por aquel remolido de agua cuando empezó a invadirle el pánico.- ¡Deténte, por favor!
-Tu tranquila Katara- dijo Aang en un intento por calmar a su amiga- confía en mí.
Ahora Katara se encontraba en el centro del remolino. Este es el momento perfecto - pensó con entusiasmo Aang. Entonces el joven avatar comenzó a elevarla lentamente provocando que el anterior remolino ahora se convirtiera en una gran pileta de agua, la cual sostenía a su amiga por lo alto, junto a otras piletas improvisadas que se encontraban alrededor de ella. La joven de la tribu agua del sur reía maravillada por la acrobacia de su amigo.
- Eres genial Aang .
Un extraño silbido interrumpió la diversión de ambos amigos, sentían que algo se movía rápidamente alrededor de ellos cambiando constantemente de rumbo. El joven nómade descendió lentamente a la maestra de la tribu agua del sur para escuchar con mayor presición.
- ¿Qué crees que sea? - preguntó Katara un poco asustaba.- por lo que se escucha parece ser muy rápido.
- Lo más probable es que sea un amiguito que se perdió de casa.- una sonrisa tranquilizadora apareció en el rostro del niño.- en cualquier caso iré a averiguar.
Cuando el niño se acercó a la salida, esta fué bloqueada por una gruesa pared de tierra. El joven avatar se sorprendió al ver que ya no tenían salida sin embargo se relajó un poco e intentó levantar la pared haciendo tierra-control sin embargo, esta no no cedía, por mayor que fuese el esfuerzo que Aang pusiera en intentar subirla.
- Katara - la voz del niño sonaba un poco melancólica.
- ¿Qué ocurre Aang?- la maestra agua se escontraba flotando de espaldas en un pequeño lago de aguas termales.
- Creo que nos quedamos encerrados aquí...
- No me mires así Momo, no es mi culpa que tu pariente se viera tan delicioso.
- Grrrrrc.
- Además no sabía que existían más animales aparte de Apa que podían hacer aire control y derivara los estantes sin que yo alcanzara a reaccionar.
Unpequeño lemur se encontraba encima de una pila de pergaminos revueltos por todas partes, los cuales provenían de un estante que aplastaban al guerrero de la tribu del polo sur. Intentó sacarlo de ahí tirando de sus brazos, sin embargo no lograba moverlo ni siquiera un milímetro.
oOoOoOoFlash Back oOoOoOo
- Ah que bien... ¡Esto sí que es perfecto!- replicaba Sokka con sarcasmo. - Justo el día en el cual no hay nada para comer los pájaros decidieron desaparecer. Tengo tanta hambre que me comería cualquier cosa...!
Entonces Momo aplastó a un insecto que volaba por el aire y alargó uno de sus brazos hacia Soka esperando que él aceptara el alimento que le ofrecía.
- No gracias Momo, creo que puedo aguantar hasta el almuerzo sin tener que recurrir a ... ¡¿Qué es eso?
Un aguila-lemur cola de dragón se acercó hacia unos estantes de la biblioteca y se posó en uno de ellos.Esta es mi oportunidad- pensó con entusiasmo el joven guerrero. Se aproximó a la criatura con sumo sigilo y cautela, entonces cuando se encontraba tan solo a unos pocos metros lanzó un grito de guerra al aire mientras se disponía a atacarla, sin embargo el aguila-lemur cola de dragón sorprendió al joven lanzando una enorme ráfaga de aire que lo golpeó en todo su ser derribándolo y dejándolo aplastado por un estante y unos cuantos pergaminos esparcidos a su alrededor.
oOoOoOo Fin delFlash Back oOoOoOo
Al ver que los esfuerzos que realizaba su pequeño amigo eran en vano, decidió sacar los pergaminos que lo aprisionaban uno por uno...
- ¿Qué es esto?- un pergamino con el sello de la nación del fuego apareció frente a sus ojos, captando su antención- Quizás sea útil...
Cuando Soka se disponía a desenrollar el pergamino se escuchó un estruendoso estallido de rocas a unos pocos metros de él, por lo que enrolló rápidamente el pergamino y se dispuso a pedir ayuda.
- ¡Hey!... ¿Quién está ahí? ¡Por favor ayúdenme!
- Somos nosotros, Harú, Teo y Yo.
- ¿Podrían tomarse la molestia de... ¡SACARME DE AQUÍ!
Claro, claro, no te alteres.- Harú y el duque se aproximaron al estante que mantenía a Sokka prisionero cuando sintieron que una fuerte ráfaga de fuego los empujaba lejos de Sokka, ocasionándoles unas leves quemaduras de primer grado.
- Harú toma esto- Soka le entregó a su amigo el pergamino que había encontrado con anterioridad- tienes que entregárselo a Aang, probablemente sea de mucha ayuda. Lleva al resto contigo, ¡RÁPIDO!
El maestro tierra no vaciló ni un segundo, tomo el pergamino entre sus manos y lo guardó dentro de su traje y se llevó rápidamente al duque y a Teo por un tunel hasta la superficie del lugar. Entonces se disponía para bajar cuando sus amigos lo detuvieron.
- ¿Qué crees que estás haciendo?- le preguntó el duque con incredulidad- si bajas allá no demorarán mucho tiempo en derrotarte, son muchos.
-Lo sé, pero no dejaré que un amigo pase solo por todo esto, estaré a su lado hasta que ya no podamos seguir peleando, jamás abandonaría a un amigo.
Y diciendo estas palabras descendió rápidamente hasta el lugar donde Soka estaba acorralado.
- Nosotros vamos a buscar a buscar a Aang, Zuko, Katara y a Toph, seguro que ellos nos podrán ayudar- dijo rápidamente Teo.- Vamos, no hay tiempo que perder.
Cuando Harú vio a Soka tendido en el suelo intentando desvainar su espada mientras un pequeño ejército de maestros fuego descendían de los globos de guerra, comprendió que había llegado justo a tiempo.
- ¡Harú!- exclamó Sokka con cierta alegría mezclada con preocupación- ¿Por qué...
- Jamás te abandonaría, eres mi amigo.
El maestro tierra sacó el estante que aplastaba a su amigo y comenzó a hundira los maestros fuego que intentaran atacarle mientras Sokka peleaba con su espada lo mejor que podía, sin embargo una enorme explosión de fuego azul reventó en sus rostros, lo cual dejó indefensos a ambos.
-Vaya, vaya, ¿Qué tenemos aquí? un insignificante campesino de la tribu del agua del sur y un mugriento maestro tierra ¿Dónde están Zuko y el Avatar? - Azula se encontraba parada encima de un globo de guerra de la nación del fuego mirándolo con una cara que delataba un poco de descepción- pensé que estarían con ustedes.
-oOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoO-
Hola! ^^ este es mi primer fanfic y me gustaría saver sus opiniones sobre él... ojalá les haya gustado (: pues tengo pensado continuarlo sin embargo si nos les gusta pues bueno al menos hice el intento :P
