¡Hola a todos! Estoy terriblemente encantada de que me acompañen en ésta nueva aventura, que será un FanFic de Rise of the Guardians. ¿Que qué pasó con mis otras historias que aún no están terminadas, dicen? No se preocupen, puesto que a medida que reciba la inspiración o tenga el tiempo para escribirlas, las iré actualizando ya un poco más constantemente que el último año; espero. Sólo necesito un poco de apoyo y de paciencia.

Antes de que comiences a leer la pequeña introducción obligatoria que tengo preparada, les invito a dejar en claro que no he leído los libros. Todo en cuanto al diseño de los personajes originales estará inspirado en lo que pude ir recolectando de las películas; de modo que igualmente tomaré libertad en cuanto al pasado y el Origen de cada uno de los Guardianes que se ofrezca describir y que no venga especificada en la versión de Dreamworks. Así mismo, quiero no dejar en duda que la leyenda de las hermanas de las cuatro estaciones la tomé de un libro, pero que igualmente tomaré libertad creativa en cuanto a definir todo lo que a éstos personajes mitológicos se refiere, con excepción de un par de referencias.

Dicho ésto aclaro que:

ADVERTENCIA: Nada referente a Rise of the Guardians me pertenece. Ni a la mitología Celta.

¡A leer!


INTRODUCCIÓN

El Hada de la Primavera es la menor de las Cuatro Hermanas y a la que más admiran las Criaturas Mágicas; la más noble y serena, y a la que todos miman.

Por algún motivo, siempre era así como el que sea que estuviese a punto de hablar acerca de ella, empezaba a relatar su historia. Tal vez era una cosa de hechizo; o tal vez como siempre se ha hecho de ésa manera, la demás gente sigue aquella regla no-escrita por costumbre. Como fuese; aquello era completamente cierto. Primavera se distinguía de sus hermanas por ser dulce y humilde, alegre y bondadosa. Si bien, esto no significaba de dejaba de ser un hada con todas las características de la regla.

Y es que las hadas, a pesar de haber sido desde siempre buscadas y admiradas por el hombre, no encuentran en la raza humana nada bello ni útil que merezca preservarse. No es que vean a los humanos como un desperdicio o unos parásitos; pero sí los consideran inútiles y torpes. Las hadas, como puede concluirse, no entienden el concepto de los Guardianes y no apoyan el hecho de proteger algo que a la larga terminará echándose a perder. Porque si bien no aprecian ni soportan al Hombre, disfrutan a veces de tener contacto y jugar con algunos niños y jóvenes. Es por eso que hay que tener cuidado, porque a pesar de su belleza cuando adquieren forma humana —cosa que hacen para burlarse de la predecibilidad y estupidez de los mayores—, un adulto jamás debe de confiarse si se encuentra a alguna de éstas criaturas, puesto a que si ella, que la mayoría del tiempo es invisible, decide mostrarse ante ti, es porque tiene planeado timarte. Por supuesto hay ciertas excepciones, pero las Hadas que han decidido ponerse al servicio del Hombre y ser buenas con ellos están, para las más poderosas y más frívolas, en una categoría aparte. Toothiana por ejemplo, y como todas las pequeñas a su cargo, han prometido ante MiM que jamás adquirirían completamente una forma humana —ni siquiera con alas—, para no ser una prueba física de la burla que las de su raza cometen en contra de los Hombres, que es a la raza a la que ellas han jurado servir y proteger.

También, hay que saber que si las Hadas permanecen invisibles para nosotros, es porque ellas viven en un mundo astral que ocupa el mismo tiempo y el espacio del nuestro, y no tienen interés de mezclarse entre nosotros. Para ser conscientes de éste mundo, hay que tener un Favor Especial o ser una de ellas mismas. Sólo con creer en ellas no basta.

Hay Hadas a todo lo largo y ancho del mundo, desarrollando toda clase de tareas que tienen que ver con lo que nosotros llamamos a veces el Mundo Natural, o el Mundo Orgánico. Algunas son patronas de ciertos fenómenos naturales o representan alguna clase de pecado, acción o pensamiento, y las otras son tan habilidosas que adivinan el futuro y son capaces de advertir sobre las calamidades —cuando están de humor para ayudar a alguien—. Las restantes son las más poderosas, y reinan sobre todas las demás como deidades. Cuatro de ellas se reparten su reinado en todos lugares, pero nunca al mismo tiempo: son las Hadas de las Estaciones; un grupo de hermanas que ofendieron terriblemente al padre que las creó. Es por eso que están malditas, y condenadas a no verse jamás, se mueven con la traslación del mundo llevando su reinado con ellas. Todos los fenómenos naturales les rinden obediencia.

Ésta, es la historia de lo que sucedió cuando se enteraron de que Invierno había sido ascendida a un puesto que ellas jamás hubieran creído que merecería, o que deseara.


Corto, ¿no?

Espero lo hayan disfrutado, y que al mismo tiempo esperen mucho de ésta pequeña historia que estoy comenzando a tejer.

¡Esperen pronto el próximo capítulo!

Besos.