Hola!!!!!!

Bueno aqui les presento mi primer ficc. Espero de verdad que les guste y tengan en cuenta que es el primero. jajaja. Debo decir que no he leido ningun ficc asi, por ello espero que si saben de alguno me lo hagas saber, creo no estar escribieno algo que ya esta muy visto, asi que espero lo disfruten.

El ficc solo sera una historia de amor, no habra guerras ni nada del estilo. Si tendremos celos y peleitas por parte de los protagonistas pero nada mas.

Aviso: Los personajes no me pertenecen, tampoco los lugares donde se desenvuelven, ni la magia que se utilice. Nacieron de la vasta imaginación de J.K. Rowling. La trama sí es mía, y algunos personajes y lugares tambien.

Espero les agrade.

Besos y les dejo el primer capi, no muy largo...


"Despertares"

Capitulo 1: Un día más

El ruido de un reloj despertador era lo único que se escuchaba en aquella habitación.

El muchacho se despertaba, un nuevo día comenzaba. Se giro en la cama miró el reloj, las 7 de la mañana y apago aquel sonido. Aquella no eran sus sabanas ni su cama, pero él ya estaba acostumbrado. Cada vez que tenía que viajar por trabajo dormía en un lujoso hotel que le pagaban gracias al puesto que había logrado conseguir en el ministerio de magia. Lentamente se fue levantando y dirigiéndose hacia el baño. Se preparo una ducha mientras se miraba al espejo y notaba cuanto había cambiado.

A sus 23 años era un joven muy apuesto. Y si, había cambiado mucho, su pelo que antes lo usaba largo ahora lo llevaba bien corto, no quería que nadie le encontrara parecido a su padre, aunque eso era muy difícil pero por lo menos lo intentaba. Estaba más alto y su estado atlético intacto, aunque ya no practicaba quiddich tanto como en el colegio, seguía manteniéndose en forma. Su piel era tan blanca como siempre y sus ojos, sus ojos seguían cautivando a millones de mujeres, esos ojos grises que alguna vez fueron tan fríos ahora ya no lo eran.

Todo lo que había sufrido en la guerra había hecho que Draco Malfoy hiciera un gran cambio. Si, el y sus amigos se habían cambiado de bando y puesto en contra de sus familias. Estaban agradecidos de haber sobrevivido a esa guerra, ya que Harry Potter se había encargado de destruir a Voldemort. Draco había perdido a su madre en aquella batalla, todo gracias a su padre quien intento matarlo y su madre se interpuso. Luego Snape había acabado con la vida del desgraciado de su padre, para su alivio.

Después de la guerra tuvo que pasar unos días en el cuartel de la orden del fénix, hasta que todo sobre su participación y sus propiedades, que al fallecer sus padres eran suyas, se arreglaran. Allí a ninguno de sus ex compañeros le gustaba que el estuviera. Solo a una castaña, que como él había perdido a sus padres y podía entender lo que estaba sintiendo en esos momentos. Aunque no se hicieron grandes amigos, llegaron a tolerarse y llevarse bien. Así fue que Draco descubrió lo maravillosa persona que era aquella castaña que él se había encargado de torturar por 6 años. Y así fue que termino enamorándose de ella aunque sabia que nunca tendría una oportunidad. Por eso callo sus sentimientos.

Pero él no sabia lo que el destino le tenia preparado…

En otra parte una muchacha también despertaba. Ella había cambiado mucho, había crecido convirtiéndose en una esbelta mujer, su cabello castaño, continuaba sin dejarse dominar mucho, lo llevaba hasta media espalda, si bien Hermione sabía que no era una chica perfecta, le agradaba la imagen que su espejo le devolvía al mirarse.

Como muchos durante la guerra había sufrido. Hermione perdió a sus padres y ahora vivía sola. Por ello decidió vender la casa de su infancia y comprarse un departamento mas chico. Su departamento estaba ubicado en pleno centro de Londres muggle, no era muy grande pero contaba con dos habitaciones cada una con su respectivo baño, un living, la cocina realmente espaciosa y otro pequeño baño cerca de alli.

Ella permanecía soltera aunque candidatos no le faltaban. Sus amigos se habían casado y ya estaban agrandando su familia. Su relación con Ron no había pasado a mas que unos besos de adolescentes, ya que ambos se querían mucho pero solo era cariño de amigos, ninguno de los dos creía que esa relación llegaría a algo mas, por ello decidieron que lo mejor era separarse y seguir como amigos. Y eso fue los mejor que pudieron hacer.

Luego de un tiempo Ron se enamoró de Luna quienes estuvieron un par de meses de novios para luego casarse. Ron y Luna fueron los primeros en casarse y ya tenían una preciosa niña de 1 año y medio. Harry y Ginny se casaron un año después que Ron y ya tenían a su primer hijo de no más de 3 meses. La castaña mantenía estrecho contacto con sus amigos y los años no habían pasado en vano para ella...

A sus 22 años Hermione tenía un muy buen trabajo. Trabajaba en San Mungo. Se había recibido muy joven de medimaga y con las mas altas notas, era la mejor, la mas joven y dedicada a su trabajo.

Allí llego, como todos los días. Donde todos la saludaban y admiraban.

-Buenos días señorita Granger-saludó la enfermera

-Buenos días Anne-respondió cortésmente Hermione.

Caminó por el hospital a toda prisa, subió las escaleras que llevaban hasta el último piso, donde se encontraba el despacho de su jefe.

Hermione llamo a la puerta y entro en cuanto escucho un adelante que le decía su jefe

-Buenos días doctora-dijo su jefe con una sonrisa

-Buenos días Doctor-respondió la castaña con otra sonrisa.-Me buscaba?

-si, le he encontrado un nuevo caso.

-¿Un nuevo caso?-preguntó la sanadora un poco intimidada por la actitud de su jefe- ¿De qué se trata?

-Aquí tienes la historia clínica, lo único que te puedo decir es que es un caso especial y quiero que te ocupes solo de este paciente.

-Muy bien-dijo Hermione sosteniendo las papeles- ya mismo comienzo.

-No esperaba menos de usted, nos vemos doctora.

-Hasta luego.

Y así salio del despacho de su jefe dirigiéndose al suyo.

Cuando llego se coloco su guardapolvo blanco, con su distintivo prolijamente ubicado. Se recogió el pelo, dejando algunos mechones sueltos. Tomo la historia clínica del paciente y se dirigió hacia su habitación. Llego al cuarto donde se encontraba su paciente y no pudo creer lo que sus ojos veían…