N/A: Escrito basado principalmente en el capítulo seis del anime. Posible Spoiler.
DISCLAIMER: The Rising of the Shield Hero no me pertenece, tampoco la imagen utilizada como portada, créditos a su creador respectivo.
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NI CREAS
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Jugarretas mentales o no… ni creas que te me vas a escapar así de fácil.
Sé que ahora me veo algo loco, no he dejado de mirarte desde lo que sucedió en aquella mina.
Firo no lo nota, gracias al cielo, sería extraño tener que explicarle mi comportamiento a esa pequeña rubia; y realmente ni siquiera yo estoy seguro de lo que me está pasando.
Por otro lado… puedo verte a ti… te muestras incómoda ante la mirada que te doy. Y es que no puedo evitar que mis ojos verdes dejen de escanearte, de vigilarte con cierto recelo.
"Sólo acepté quedarme para poder matarte yo misma"
Mis manos se volvieron puños de forma casi automática. Recordar aquello me daban unas ganas tremendas de vomitar. Mi estómago se sentía revuelto y la cabeza me palpitaba.
De nuevo mis ojos empezaron a examinarla.
Me lo prometiste.
Pensé segundos después de no ver algún rastro diferente en ella.
"Yo seré tu espada"
Me juró aquella vez, su semblante decidido e inmutable se reflejaba en sus ojos rosados.
"No tenías que hacerlo"
"Lo sé… pero así te demostraré que puedes confiar en mí"
Musitó con una sonrisa, ignorando el ardor de aquella magia, luego de que el comerciante esclavista le colocara de nuevo la marca de pertenencia.
Sí ella ya me había demostrado su lealtad de esa manera, ¿por qué mi pecho sigue quemando?
Es una sensación tan amarga como cuando creí que se iría, después de que aquellos imbéciles le quitaron la marca.
―… Descansa Firo, mañana partiremos ― La escuché despedirse de la chiquilla mitad ángel y mitad ave.
Con un gesto algo distraído le desee buenas noches también. Y sin más se había echado a dormir por un costado de mí.
Ella se puso de pie, estirándose un poco mientras tendía su sábana para también poder dormir.
― ¿Naofumi-sama? ―
La miré de nuevo. Tal parece que quiere respuestas a mi actitud. No estoy muy cómodo respecto a eso, pero debo aceptarlo.
― ¿Sucede algo? Lo noto molesto ― Preguntó en voz baja para no interrumpir el sueño de Firo.
Nuestros rostros brillaban con las leves llamas que nos ofrecía la fogata del centro. El ruido del bosque era lejano. Era un escenario diferente a los anteriores.
Resoplé con suavidad. ― Sí alguna vez… decides seguir tu propio camino… ― Tragué duro y evité mirarla. ―… sólo avísame y no te detendré, ¿De acuerdo? ― Fue difícil pronunciar aquello sin que mi lengua sangrara luego de morderla, evitando que alguna cursilería saliera de mi boca.
Raphtalia se mostraba confundida, y hasta podía jurar que su semblante era de ¿desilusión? ¿Por qué?
― Bueno… una vez que terminemos con las olas… ya veremos ― Contestó con una sonrisa encogiéndose de hombros. ― ¡Buenas noches Naofumi-sama! ― Exclamó, evitando seguir hablando del tema.
Sonreí de forma tenue luego de oírla.
Hasta que las olas terminen…bueno, eso nos deja más tiempo.
Pensé con más ánimo, olvidando, al menos por esa noche, aquella sensación sofocante de mi pecho. Mientras custodiaba la fogata y velaba el sueño de ellas, sonreí orgulloso.
Ni creas que te vas largar de mi lado.
Me perteneces.
Eso era lo que realmente quería decirte Raphtalia, pero ni creas que lo diré en voz alta.
… al menos no por ahora.
N/A: Ok, definitivamente el capítulo de ayer me dio muchas ideas para escribir, ésta es una de ellas. Pobre Raphtalia, le tocó un chico muy lento, Jejeje pero no hay que culparlo, los romances llevan tiempo y por ahora su amistad-compañerismo tipo una familia funciona bastante bien y deja volar mucho a la imaginación.
Igual, espero que hayan gustado de este pequeño trabajo.
¡Hasta la próxima!
GEMITHA0208
Febrero 14 del 2019