Hola!!
Aquí les dejo este pequeño one-shot, no es la gran cosa pero surgió en un instante de inspiración e irremediable tristeza…pero bueno, mejor leanlo y después me dan su opinión:
Confusión.
Y bien, aquí estoy; frente a la puerta. Suspiro. Es que acaso no hay una manera más fácil? Al parecer no. Abro lentamente la puerta y me topo con su mirada. Con aquellos hermosos ojos verdes que me cautivaron desde el primer día y que, dolorosamente, debo aprender a olvidar. Me mira, y no puedo reprimir girar mi cabeza. Lo miro. Como llegaron las cosas a este punto? No lo sé. No me interesa, tampoco.
Me volteo y camino a mi lugar. La mirada altiva y el caminar fingidamente airoso. Dentro de mí, fluyen solo pensamientos incoherentes que tratan de mantenerme en la realidad mientras mi corazón late a mil por hora. Dolor. ¿Qué más? Ah, sí. Traición.
Me siento en mi lugar, no el de costumbre, pues sería sentarme a su lado. No, es un lugar nuevo, justo al fondo del salón. No estoy de humor para estar delante. Y saco una libreta, la primera que encuentro porque se me olvidó la otra. ¿Qué puedo hacer? Sólo dibujo mil líneas sin forma alguna mientras el maestro suelta su discurso sobre la convención de duendes en Viena, de 1567, ¿o la de 1657? …Creo que también he cedido un poco de atención.
Con el pasar de las manecillas del reloj, los minutos recorren su camino hasta que sea hora de la salida. Yo espero pacientemente, y sin embargo siento su mirada en mí en varias ocasiones. Aún me sorprendo por mi ingenuidad y por haberme equivocado de esa manera tan estrepitosa. ¿Acaso no eran señales? No, sólo yo y mi imaginación que se recreaba situaciones inexistentes. Penosamente triste y patético. Castillos en el aire. Así.
Y luego? La caída, muy dolorosa, porque estaba muy arriba. Ja! Ahora casi me causa risa el haber confundido su "amistad" con algo más, cuando sólo era, sí acaso, indiferencia. Y, porque no, algo de interés. Ingenua, me repito una y otra vez, pero queriendo pensar en algo diferente mientras mis ojos luchan por no derramar lágrimas. Tonta. Puro interés. La convención de duendes en Viena,, hay que regresar a ella. Debo escuchar al profesor, pero no puedo hacerlo. Su mirada en mí. Otra vez. Aquella mirada que me penetra, que me destruye, que me desarma. Para dejarme deshecha una vez más. No, no puedo. Sólo escribo unas palabras más y luego salgo del salón a toda velocidad. Me dirijo al baño para poder llorar a gusto.
Las lágrimas ruedan por mis mejillas mientras me empeño en querer detenerlas con el dorso de mi mano. Inútil. Luego, siento otra mano sobre mí. La suya. Me seca las lágrimas y me abraza mientras yo sollozo incontrolablemente. Después, me tranquilizo y me doy cuenta de que todo estará bien. Baja su mirada hacia mis labios y, lentamente, acerca sus labios también. Siento su aliento. Veo aquellas pupilas fijamente, hasta que, me besa. Lo saboreo cada segundo, cada instante, consciente de que puede ser la única vez. Luego abro los ojos. Él no está.
Me doy cuenta que es sólo otra ilusión más. Increíble. Ingenua. Ilusa. Y aquí estoy, frente a la puerta.
Bueno, eso es todo, espero que les haya gustado y me dejen muchos reviews!!! Que se la pasen bonito…