Nunca olvidare aquel otoño en Paris…

Disclaimer: Primero que todo, los personajes de esta historia, le pertenecen a Naoko Takeuchi.

Moonlight Club: totalmente bohemio, realista y agridulce, ambientada en los mejores parajes y con la dosis de sexo, complicidad, amor, amargura y egoísmo que las senshi pueden tener. Por que Naoko takeuchi no solo nos hablo en color de rosa

13 de septiembre de 1997

(¸.•´ (¸.•´ (¸.•´ (¸.•´ (¸.• .• Rei •.•.¸) ¸.•¨)¸.•¨) ¸.•¨)¸.•¨)

-Srta. Hino-

-¿si Sra. Parkles?-

-su habitación es la numero 73, su compañera de habitaciones es la Srta. Serena Tsukino-

-Muchas Gracias Sra. Parkles-

Si desea saber algo más Srta. Rei no dude en comunicarme, o comuníqueselo a su compañera de habitación, van a la misma clase y ella podrá facilitarle muchas cosas, debido a que, como sabrá, las clases comenzaron la semana anterior, comprenderá que es su deber, ponerse al día-

-Si, Sra. Parkles, Gracias-

tomé mi maleta y los papeles que ella me acababa de entregar y salí de la oficina de la Sra. Parkles con rumbo a las habitaciones… el Instituto Mirage era un institución académica de carácter de internado para chicas de familias niponas de clase alta en Francia, yo, Rei Hino acababa de ser admitida en él instituto tras los múltiples intentos (y desembolsos económicos)de mi Padre, el nuevo embajador Yue Hino, quien, me trajo desde mi natal Tokio hasta esta ciudad para que, según el, pasáramos mas tiempo juntos, sin embargo, yo no había puesto bien ningún pie en Francia cuando ya estaba destinada a pasar 5 días a la semana en una cara prisión para señoritas, para luego vivir dos días a la semana en una mansión muy céntrica, resguardada de todos y de todo, y, si a eso le llamas vida, lejos de mi abuelo, de mi templo, de los cielos de Tokio y del amor…

caminé sin prisa y pesadez hasta la que seria mi habitación compartida, tomé la llave que se me había asignado y entré; si ciertamente lo había llamado una cara prisión, me había quedado corta, como toda chica de clase alta que asistía a una escuela internada para ser educada como toda una señora de sociedad, las habitaciones, aunque compartidas, eran un reflejo lujoso del desembolso que implicaba estudiar en este colegio, era una habitación espaciosa y bien iluminada, que constaba de dos plantas; en la parte inferior se encontraban los dos juegos de habitación y el baño, mientras que en la planta superior, a la cual se accedía por una escalera de caracol, solo se encontraba un pequeño estudio y los dos armarios. En la parte alta era que se encontraban las ventanas, sin embargo lograban distribuir bien la luz por toda la estancia, los colores de las paredes eran lila y ocre, igual que los sobrecamas y los cojines de los muebles, estos era de caoba oscuro, casi negro; sin embargo, no toda la habitación se encontraba en perfecto orden como debió ser, la parte de la habitación de la que se había adueñado mi compañera ya no portaba el orden natural; habían pósters de artistas por todos lados, algunos muebles habían sufrido cambios en los forros de los cojines y hasta el edredón era distinto, mi compañera había tenido el tiempo de convertir aquella prisión en su refugio; el sonido de la puerta al cerrarse hizo que volviera de mi letargo de observación

-¡hola!- un torbellino rubio se acerco a mi-tu debes ser Rei Hino ¿no?, yo soy Serena Tsukino, tu compañera de cuarto-

-hola, encantada de conocerte- dije viéndola ir de un lado a otro, buscando cosas

- igual para mi- dijo mientras subía las escaleras, yo me acerque hasta el pie de ellas viendo que hacia- bienvenida a Mirage- y me miro desde la baranda-ven, ¡sube!, a fin de cuentas este también es tu cuarto-

Yo subí y me sorprendí al encontrarla desvestida parcialmente; solo portaba su ropa interior y las medias con el liguero, si bien había siempre estudiado con chicas en mi escuelas en Tokio, nunca había tenido tal confianza con ninguna como para verla vestirse y desvestirse en frente de mi

-si, se que debería mostrarte la escuela y todo eso, pero, no te preocupes, tendrás tiempo para eso y seguro que siempre habrá quien quiera darte un paseo, yo lo haría…si pudiera-mi sorpresa fue grande cuando vi que Serena acababa de despojarse del brasier dejando al descubierto y sin pudor sus pechos ante mi y se colocaba un strapless negro- tengo cosas que hacer- y se colocaba una falda de cuadros rojos y negros y unas botas de motorista

-no es necesario, la Sra. Parkles me dio un breve recorrido ya- intentaba no fijar mi vista en ella

-Parkles? Si, todo un amor de persona ella ¿no?, bueno, Parkles no conoce ni la mitad de esta escuela, que te lo digo yo que se, al menos, unos 25 lugares donde esconderme de todos y 5 formas de fugarme de este lugar sin que nadie se de cuenta-

Serena se sujetaba con cintas los odangos de su cabeza y se maquillaba rápidamente los labios de un color vino, luego se apresuro a tomar un bolso, una bufanda de cuadros rojos y negros y una chaqueta de cuero que se encontraba sobre su cama y subió de nuevo, yo aun me encontraba en la parte alta de la habitación observando a mi curiosa compañera de cuarto

-no cierres la ventana con seguro por favor, prometo no llegar tarde para no molestarte y si preguntan, diles que fui a la biblioteca- la vi abrir el ventanal del medio y salir a la terraza, luego bajó por entre las ramas de un árbol y corrió, yo me acerque al ventanal y la vi llegar hasta los muros del instituto, ágilmente lo escaló y salio.

Cerré el ventanal sin seguro, tal como ella me dijo y proseguí a acomodar mis cosas y distribuirlas en la espaciosa habitación, acomodar mis nuevos uniformes, la poca ropa común que había traído de Tokio, los libros y repasar un poco de gramática francesa; a las 7 Salí de mi habitación con llave y mapa en mano, camino al comedor, donde encontré a más de 100 chicas, algunas comiendo, otras conversando y otras esparcidas entre las mesas buffet donde se servia la comida, termine de comer sin conversar con nadie y me fui directo a mi habitación, tomé un baño, me acomodé en mi cama y me acosté a dormir, era temprano aun, y aunque mi compañera no había llegado aún, apague las luces excepto la lámpara junto a su cama por si acaso y me dormí llorando pensando en Nicolás.

(¸.•´ (¸.•´ (¸.•´ (¸.•´ (¸.• .•Serena•.•.¸) ¸.•¨)¸.•¨) ¸.•¨)¸.•¨)

Esa tarde… la había estado esperando durante los últimos 2 meses, hoy, three lights debutaría, estaba tan feliz, los chicos y yo habíamos luchado mucho por conseguir, al fin un buen momento para presentarnos en un concurrido lugar nocturno de la ciudad, Seiya me había comunicado que nos reuniríamos a ensayar temprano y que pasaría por mi a las 3 y 30, que, con el trafico de París y su retraso común seria a las 4 y 30, lo cual, me daría la oportunidad de no saltarme ninguna clase, y efectivamente, a esa hora salté el muro, con todo y la breve conversación con mi nueva compañera de cuarto para ver como mi novio apenas doblaba la esquina en mi dirección.

Rápidamente me monté en su auto y el arrancó, tras un breve saludo, el primer semáforo en rojo nos dio la oportunidad inicial de comernos a besos, un extraño sabor conocido inundó mi boca

-¿estabas fumando? ¿Tienes cigarros? ¡Dame uno!- supliqué

-estrella, ¡tu sabes que no debes fumar mas! Tu voz, ¡debes cuidarla!-

-solo uno, lo haces y te prometo un rapidito-le sonreí pícaramente

-¡si!, ¡toma!-y sacó la caja de su bolsillo sin retirar la vista del volante; yo lo tomé y busque un encendedor en mi bolso, lo prendí y tomé las primeras bocanadas mas a prisa de lo normal –más te vale que cumplas-yo lo miré y exhalé en su cara.

-eres el sol de mis días Seiya, no sabes la falta que me hacia fumar, el cole, el estrés por hoy, una buena dosis de nicotina en las venas es ambrosia para mis células- y le di un beso.

-y tu mi estrella gemela, pero no por eso voy a dejarte que arruines tu voz de ángel, aunque- e introdujo uno de sus manos por mi falda-si voy al cielo por consentirte, bien podría volver a ser el vocalista-yo gemí cuando el intensifico su toque y me terminé el cigarro

-Seiya que tenemos ensayo...-dije intentando calmarme

-a las 6, yo tenía pensado tomarte un rato solo para mí, pero aunque llegue tarde tendremos aun una hora-

-entonces en vez de estar tocándome ¡apúrate en llegar querido!-y retiré su mano

-sus deseos son ordenes mi estrella- Seiya condujo mas deprisa y llegamos rápido a su edificio, bajamos del auto y comenzamos a comernos a besos camino al ascensor, sin importarnos si este se detenía, al montarnos comencé a abrir su chaqueta y el a quitarme la mía, justo nos detuvimos en el 9no y ultimo piso, abrimos la puerta y entramos directo al apartamento, conocía de sobra este lugar, donde estaban los muebles, las lámparas, los cambios de textura en el piso, así que sin mirar nada, concentrándome en los besos, le despoje la camisa y lo que le quedaba de la chaqueta a mi novio mientras el me quitaba la bufanda, me quite las botas rápidamente y la tomé y la iba a colocar en cualquier sofá junto con mis cosas y el me sujetó

-no, dámela mejor-la tomó y la dobló para luego vendarme los ojos- me voy a cobrar mas placenteramente lo del cigarro que con un rapidito-yo asentí aceptando gustosamente el cambo de planes y sentí como mi novio me desvestía, hasta dejarme solo en ropa interior, luego me tomo de la mano y me llevo a su habitación, habitación que me sabía de memoria así que sabia que había llegado a la cama

-recuéstate-ordeno, a Seiya le encantaba ser dominante a veces, yo le hice caso y me acomodé en su cama sugerentemente, piernas abiertas doblando un poco las rodillas, brazos abiertos e inclinados hacia atrás-ropa interior negra eh? Tanguita muy sexy, sin corpiño y liguero, Serena, ¡esto vamos a disfrutarlo!-su voz ronca delato su excitación, comprendí por el sonido de la cremallera que mi novio se había despojado de su pantalón y del, probablemente boxer, que cargaba debajo

-si, ¡por favor!- suplique mientras lo veía tomar uno de mis pechos en su mano y comenzar a lamerlo mientras pellizcaba el otro

-te va a gustar mucho mi estrella-dijo mientras cambiaba de pecho-te va a gustar tanto que vas a querer mas toda la noche-y comenzó a bajar sobre mi vientre, besando mi ombligo, con sus manos en mis pechos- levanta las rodillas-me ordeno de nuevo mientras me quitaba la tanguita e colocó su cara entre mis piernas-¡Serena, como me gusta tu sabor!- yo comencé a gemir sabiendo que no veía nada de lo que mi novio hacia, solo sentía el placer exquisito de sentir sus caricias y besos que, al faltarme la vista, hacia que mis otros sentidos intensificaran las sensaciones

Tras de un rato lamiendo y mordisqueándome Seiya solevanto y oí que corría las cortinas de su habitación, por lo que penetraron los últimos rayos de sol por la habitación, pude notarlo por la claridad-¡levántate!-aun sintiendo los espasmos del orgasmo, le hice caso y lo vi llevarme a la ventana, donde me pegó a ella mientras me abría las piernas y comenzaba a tocarme de nuevo-tu no ves, pero ellos si te ven a ti-su miembro hacia presión sobre mis glúteos, pero el morbo y la sensación placentera de sus manos y sus besos en mi nuca, eran mas placenteros- quiero que todo el mundo te vea como te excito, pero tu no lo veras, solo lo sentirás-

-si...-dije roncamente

-¿te gusta?-me pregunto y aumento la velocidad

-si-gemí

-¡Esto te gustara mas!-y me introdujo un dedo-mi estrella, estas tan caliente, húmeda y apretada-

-por ti Seiya...- sabia cuanto le gustaba que dijera su nombre, mientras intentaba guiar mis manos a su miembro

-espera...-de pronto detuvo mi mano, pero la soltó-eso quieres- entonces se detuvo y subió sus manos a mi cabeza donde me inclino hasta agacharme sobre mis rodillas-tómalo con la boca- y lo coloco en la comisura de mis labios-mételo tu misma-

Yo comencé mi tarea sobre el, como el mismo me había enseñado, hasta que el me jaló el cabello hacia atrás- ¡para o me harás acabar!- me levantó y me llevó a la cama, esta vez me amarró a loas patas de la cama las 4 extremidades- Serena, se siente tan bien cuando estas tan entregada a mi- y me beso excitándome aun mas al sentir mi propio sabor en su boca, luego me abandonó y volvió un rato después con algo supuse, no tarde en enterarme que uno era una chupeta, puesto que me hizo probarla y luego me penetró con ella varias veces, luego volvió a ponerla en mi boca-vuélvete tu también adicta a tu sabor mi estrella- yo gemí de excitación y el tomó un poco crema batida y la esparció por mi pubis y un poco mas abajo - deliciosa- murmuró mientras lamia, con una mano me acariciaba el pecho y con la otra tenia la chupeta en mi boca, la cual tras cada cierto tiempo volvía a ponerme dentro y la devolvía a mi boca, todo era tan excitante, la dominación fuerte pero suave de Seiya era un lujo demasiado placentero; después de un rato, el retiró todas las cosas de mi cuerpo y me desató, me volteó y me penetró de espaldas, arañándome los pechos entre sus embestidas, tras un rato sentí sus espasmos y ambos nos desplomamos sobre su cama aun entrelazados, mientras el lamia mis muñecas aun rosadas, media hora después, aun dormitáramos cuando sonó el timbre

-¡maldición! ¿ya son las 6?- miró su reloj-¡si!¡Serena, vístete rápido-me tiró su franela mientras se colocaba un boxer y se subía el pantalón

-yo miré el reloj y vi que eran las 6 y 15, así que tomé mi ropa interior y me empecé a vestir con la franela de Seiya- oí voces desde afuera que rápidamente reconocí como Yaten kou y Taiki Kaioh, al abrir la puerta los vi a los 3 en el umbral

- ¡lo sabia! son unos perezosos pervertidos-gritó Yaten con aparente enfado

- ¿pues de que te sirve echar un polvo si no descansas después?-bromeó Seiya

-Que pudieron aprovechar y ensayar-nos reprendió Taiki

- ¡hola chicos! ¿Y calma no? Tenemos todo el año ensayando estas 3 piezas-dije intentando bajar la tensión

-¿y si nos piden algo nuevo?-preguntó

-covers... Starless night me parecería bien-

- practiquémoslas de todos modos y Serena, no esta bien que andes por casa de este individuo con solo su franelas-

- un poco de piel no les hace mal monjas-

-me vestiré antes de salir, además Yaten, ¿no conseguimos a Berjerite igual en tu casa una vez?-comenté

-fue su culpa, yo la mande a vestir, igual la voy a mandar al diablo pronto, a ti no te podemos hacer eso, eres nuestra vocalista-

-gracias por el cariño-le respondí

-¿y bien? ¿Vinieron a ensayar no?- todos asentimos y Taiki se acomodó en la batería, Seiya y Yaten tomaron su guitarra y bajo respectivamente y yo tomé el micrófono

-y uno, dos, tres, y cuatro-plic plic plic

...

Salimos cerca de las 10 de casa de Seiya listos hacia el club donde íbamos a tocar, entramos por detrás con instrumentos en mano y nos comenzamos a acomodar en el escenario tras la cortina negra que no dejaba vernos al publico, cuando estuvimos listos, el equipo de iluminación encendió las luces para que nuestras siluetas tras el telón se iluminaran y el DJ nos hizo la entrada

-hola buenas noches, nosotros somos three lights y esta es nuestra canción "Nothing feel Matters"-

Los chicos comenzaron a tocar y mi espíritu entro en mi trance, comencé a moverme y a cantar

...

Cerca de las 2 AM llegamos al instituto, la fiesta en el club nos había distraído de la hora, así me despedí de Seiya con un beso apasionado en su auto que incluyo un desequilibrio de mi TOP y volví a saltar la barricada del instituto y trepé por el árbol que daba a mi habitación, entré con cuidado y cerré el ventanal, me quité la ropa y la arrojé junto a la silla de mi armario, bajé y noté que mi compañera dormía pero había dejado una luz prendida junto a mi cama, le sonreí y la apagué, fui al baño, me lavé la cara y me acosté en mi cama, en 5 horas debía despertarme, así que me tomé un somnífero y me dormí recordando mi tarde con Seiya pero sin soñar.

(¸.•´ (¸.•´ (¸.•´ (¸.•´ (¸.• .•Michiru•.•.¸) ¸.•¨)¸.•¨) ¸.•¨)¸.•¨)

Acababa de salir de nadar cuando unos brazos fuertes y musculosos me cubrieron con la toalla

-Haruka! ¿Que haces aquí? ¡Nos pueden ver!-exclamé alarmada intentando zafarme de su abrazo

-Sirena, una vez en el agua todo el mundo queda fuera de tu mente ¿no? ¡No hay nadie aquí, son casi las 7!-

-¿hablas en serio?-pregunté y corrí a ver el reloj en mi cartera-¡que tarde es, si no me apuro no llego a cenar!-

-calma preciosa, aun hay tiempo, la hora de la cena es entre 7 y 8, además ¿es la primera vez que te vas a la cama sin cenar por estar nadando?

-no- respondí-pero hoy si tengo hambre-

-es una pena-con tono de resignación-por un momento pensé que lo harías de nuevo hoy, solo que no por estar nadando-

Voltee a mirar a varios lados y al comprobar que no había nadie me acerque a sus labios-¿justo ahora ruka?-

-justo ahora-

-pero tengo hambre-y mi estomago lo comprobó

-pensé que las jóvenes delicadas no permitían que sus estómagos sonaran así-

-sabes que en la intimidad no soy tan dama-

-y se, que si no comes ahorita, tu hambre no me dejara dormir-sonreí- toma, aquí esta tu ropa- y me la acercó

-¿como...? ¿tu la trajiste?-pregunté aunque sabia que estaba demás la pregunta, estaba justo lo que quería ponerme para cenar, incluso la ropa interior y zapatos

-por mucho que sea un colegio de chicas, no me gusta verte caminar solo con traje de baño, ¡cámbiate aquí mismo!-

-¿solo quieres que me desvista ante ti no?-

-por mas que me da mucho placer verte sin ropa mi sirena, no me gusta hacerlo en lugares públicos, así que apresúrate para que vayamos a cenar-

Me despojé del traje de baño y me apresuré a colocarme la ropa, tome la toalla junto con mi traje de baño y los pusimos en el bolso de Haruka-¡tu Gucci se mojara!-

-pero tú estas vestida, comeremos y luego podré cobrármelo-

Sonreí extasiada de la idea y caminamos al comedor, donde estaba casi todo el instituto, Haruka y yo nos sentamos en una de las mesas más cerca del buffet y comimos en silencio

-¿has visto a Serena?-pregunté

-no, y creo que debe haberse escapado con Seiya-

-¿De nuevo?-

-algo oí acerca de una presentación en el local frente al Louvre hoy-

-¿iremos?-

-sabes que no...-

- esta bien-respondí resignada

-¿lista?-me preguntó

-desde hace rato-

-me refería a la comida

-aun tengo hambre-

-¿Quieres algún postre?-

-si... a ti-

-¡ah! Me gusta esa clase de hambre-

-si...y estoy famélica-nos levantamos de la mesa y caminamos sin prisa a nuestra habitación en el lado oeste, abrimos la habitación y cerramos, trancando con seguro, apenas Haruka volteo de cerrar, me la comí a besos

-si que tienes hambre sirena-

- no te imaginas cuanta- dije soltando los breteles de mi vestido que cayo al suelo, para quedar en solo panty, ya que Haruka odiaba que usara sujetador, luego le quité la playera a Haruka y le quité su jean y ropa interior, la recosté contra la pared y me arrodillé entre sus piernas levantando una de sus piernas sobre mis hombros

-¿que haces?-me pregunto algo excitada

-te dije que tengo hambre-

-ya veo... ¿piensas... AAAAAH!- gimió cuando penetré con mi lengua entre sus labios inferiores, yo comencé mi ardua tarea que seguro acabaría muy muy tarde como cada jornada agotadora de sexo desde que habían comenzado las clases, si, es que este año adoraba a mi amiga Setsuna por haberse graduado y que mi nueva compañera de cuarto fuera mi sexy novia

Moonlight Club

19/12/2010