Era un hermoso día, Kagome había vuelto de su época y les trajo la "comida ninja" a los chicos, luego de eso todos continuaron con sus labores, matar a demonios o monstruos que atacaran a humanos, Kagome estaba algo distraída ese día, sus amigos lo notaron, todos menos Inuyasha, ya que andaba detrás de las serpientes caza almas de Kikyo.
Kagome, ¿Qué te sucede?, te noto muy distraída.- Dijo Sango
No lo sé Sango, me he sentido un poco extraña, pero no es nada malo, no te preocupes por mí.
Bueno, si tú lo dices.
Además, puede que sea un simple resfriado.- Dijo sonriendo
Eso espero, pero tomemos precauciones y sube a Kirara, para que no te sientas mal.
Está bien, solo porque tú me lo pides Sango. —Subiéndose al lomo de Kirara.
El trayecto fue muy tranquilo hasta que encontraron un monstruo que atacaba una aldea que se encontraba cercana a un río, Inuyasha empuñando a colmillo de acero, hizo a viento cortante y lo venció. Cerca de allí estaba una serpiente caza alma que se acercó a él indicándole un camino. Él sin dudarlo, la siguió, llegando donde estaba Kikyo, ella lo estaba esperando, él se acercó, la tomo por la cintura y la beso. Luego de un momento se separaron, Kikyo le pregunto si se quedaría con ella y él le respondió que sí y que además le contaría su decisión a los demás.
¿Cómo que te quedas con Kikyo?- Dijo Kagome.
Estás loco Inuyasha.- Dijo Sango.
Eres un bobo.- Dijo Shippo.
¿Y a ustedes quien les pidió su opinión?- Dijo Inuyasha bastante molesto.- Además yo ya decidí quedarme con ella, nadie cambiara mi decisión. Quiero decirles algo, Kikyo formara parte de nuestro grupo, así que no quiero malos tratos, a y Kagome no es necesario que estés ya con nosotros, con Kikyo basta, además eres demasiado débil, tú no eres como Kikyo, aun no entiendo la razón por la cual estas con nosotros, Naraku fue vencido, ya no necesitamos tu ayuda, así que quiero que vuelvas a tu época y no regreses.
Inuyasha, eres un tonto.- Grito Kagome.- Abajo, abajo, abajo, abajo, abajo…- Luego se dirigió al bosque llorando y no regreso.
Pov Kagome.
Ese Inuyasha, como se atrevió a compararme con ella y aún peor, decidió quedarse con ella, en realidad eso no me interesa, pero lo que más rabia de da, es que me dijo que yo no era nadie fuerte y que no tenía que estar más allí, que desde que vencimos a Naraku no tendría que seguir viniendo y que no me protegería más si en sus labores como exterminadores me atacaran, eso colmo mi paciencia, y le dije tantos abajos que lo deje muy bajo tierra así que decide ese momento para irme. Aun no entiendo cómo es posible que sea así; tendré que quitar este sentimiento de amor que siento por él, porque me terminara destruyéndome por completo, no sé cómo me pude enamorar de alguien que ni siquiera siente compasión por mi corazón. Debo sacarlo de mi vida, cuando me vuelva más fuerte lo hare sentir todo lo que sufrí, esa será mi venganza, no lo matare ni tampoco lo sellare, le mostrare que puedo estar con alguien que en verdad me quiere por lo que soy y no por mi poder, así verá que él no era el centro de mi corazón. Ya vera, que aunque pida de rodillas mi perdón no tendrá más a cambio que mi indiferencia ante él, eso lo juro.
Fin Pov Kagome
Creo que me he perdido. Voy a buscar algún río eso me ayudara a guiarme. – Solo siguió caminando por el bosque.- ¿Qué es eso? Me acercare un poco.- Caminado hacía lo que llamo su atención.- Son lobos y se ven amenazadores, mejor tomare otro camino.
¡Alto!- Grito uno de los lobos.
¿Me dices a mí?
Así es, humana, no te asustes, no te haremos daño. - Dijo el lobo más grande
¿Y cómo puedo confiar en que no me harán daño?
Nuestra apariencia es amenazadora, pero en realidad somos hombres lobo, que ayudamos a los humanos.
Si es así, ¿me pueden ayudar?
Claro, síguenos.
Muy bien, pero antes, me puedes decir tu nombre.
Soy Hoshi, líder del clan de los lobos negros y blancos. ¿Y tú nombre?
Me llamo Kagome Higurashi.
Muy bien ahora que ya conoces mi nombre sígueme.
¿Pero a donde nos dirigimos?
Hacía las cascadas de la Identidad.
¿Y qué son?
Cuando lleguemos, te lo explicare más detallado. Por el momento, para llegar más rápido, sube a mi lomo.
Muy bien.- Subiendo arriba del lobo, que era más grande que los lobos normales.
Los lobos estuvieron corriendo mucho y Kagome se afirmaba bien para no caer, el viaje fue muy largo, pero hubiera sido aún más largo si se hubieran ido caminando. Al llegar a las cascadas, Kagome se sorprendió mucho, era un lugar muy lindo, el agua era transparente, se podía apreciar las estrellas, era un lugar hermoso.
Bueno Kagome, te explicaré porque te traje aquí.
Lo escucho señor Hoshi.
Estas cascadas, muestran la verdadera identidad de los humanos, algunos siguen siendo humanos pero otros se transforman en Yokai, ya que su sangre estaba sellada. Los humanos que traemos aquí por diferentes casos, se les sumerge debajo de la cascada y se transforma en su verdadera forma. Cuando vuelven a aparecer con forma humana, se les da un lobo de nuestro clan, que no es un demonio lobo, sino uno lobo normal, para que le proteja, en cambio sí se transforma en Yokai, le ayudamos a que aprenda a ocupar sus poderes para el bien y no para el mal.
Comprendo, estas aguas son mágicas.
Así que dime, joven sacerdotisa, ¿Quieres saber tu verdadera esencia?
Sí, señor Hoshi.
Muy bien, entra en el agua.
Kagome entro decidida al agua cristalina, quería saber si era una simple humana o una yokai, mientras ella pensaba, de su cuerpo comenzó a aparecer una luz purpura que la comenzó a envolver, de pronto de su corazón apareció una pequeña esfera brillante, que comenzó a crecer y mostro la figura de un animal, específicamente un lobo, pero no era un lobo normal sino que un lobo como el jefe del clan. La luz purpura envolvió al animal y regresó al cuerpo de Kagome. Al regresar la luz al cuerpo de ella, se comenzó a transformar, su cabellos comenzó a crecer, su cuerpo también creció, su ropa cambió completamente, se le formo lo mismo que tenía Ayame, solo que el color era negro, se le formo una cola en señal que era un demonio lobo, sus orejas se volvieron más puntiagudas, sus ojos se mantuvieron de color chocolate, le crecieron colmillos y garras. Al terminar la transformación se quitó la luz purpura que la envolvía y mostro a la nueva Kagome, ahora ella un demonio lobo.
Veo que serás parte de nosotros.- Dijo Hoshi.
¿Qué dice señor Hoshi?
Tu verdadera esencia era la de un lobo, pero no cualquier lobo sino un demonio lobo puro como nosotros. Mírate en el agua.
Es verdad, soy un lobo. ¿Cree usted que me pueda entrenar señor Hoshi?
Sí, querida Kagome, yo te enseñare, pero no me digas señor, dime abuelo.
Muy bien, abuelo.
Comenzaremos mañana, por hoy te mostrare un poco el lugar y descansaras.
Como usted diga, abuelo.
Kagome recorrió el lugar, era un territorio bastante extenso, contaba con un gran bosque donde había animales salvajes como jabalís, conejos, etc., un río donde cazaban peces, unas acogedoras cuevas donde dormían; ese lugar era perfecto para ella. Se hizo de noche y entraron a las cuevas, como ella era nueva, estaría con los lobos más jóvenes y con el jefe del clan, Hoshi un lobo de avanzada edad.
