Disclaimer/Declaimer

Esta historia está basada en anime dirigido por Noriyuki Abe y Creador del manga Tite Tubo. Por lo tanto ningún personaje ni historia que sea relacionada directamente a ellos me pertenece.

Utilizare sus personajes y parte de la historia para crear un final alternativo que NO TIENE RELACIÓN CON LA OBRA ORIGINAL.

La verdad y el destino

Soy kurosaki Ichigo y…

Conversación entre dos ex capitanes y un encuentro inesperado

Kurosaki Ichigo no es de los que se plantea los porque ni los para que, probablemente así le ocurrió aquella vez en que luego de haber perdido sus poderes de shinigami vago de un club a otro, intentando encontrar su lugar o de ocupar su tiempo. En ese momento los chicos ya se preocupaban sobre sus aptitudes y sueños después del instituto, pero él ni siquiera tiene proyectos a futuro, en algún momento pensé que fue porque su vida estuvo drásticamente marcada por el encuentro con Rukia. Pero todo este asunto de Hōgyoku me aclarado solo una cosa…los deseos de mi hijo, ¿no lo crees así Urahara?

Urahara que siempre tiene una actitud relajada y casi despreocupada, se quedó mirando perplejo a Isshin esbozo una sonrisa y dijo –Así que siempre fingiste no darte cuenta y trataste de ser lo más objetivo posible respecto a este tema-

Los dos antiguos capitanes se quedaron en silencio varios minutos, justo cuando Urahara se disponía a relajar el ambiente, Isshin con su cara sonriente y lágrimas en los ojos dice –Ese chico siempre ha querido protegernos, nunca ha dejado de anhelar ser responsable por nosotros y sus amigos, pero el muy estúpido no se ha dado cuenta que todos nosotros también podemos ser responsables de nuestra seguridad y lo más importante… PROTEGERLO A ÉL-

Urahara acomodó su sombrero, se acercó a su camarada dándole una palmada en el hombro –Ese es el tipo de respuesta que hubiera esperado de un hombre como tú, sabes en cierto modo Ichigo se parece mucho a ti, buena suerte nos veremos después- siguió su camino dejando a Isshin acompañado de esa soledad que de vez en cuando hace falta tener.

Era una tarde muy agradable en la ciudad de karakura, luego de que terminara la batalla de los mil años [eso no lo detallare porque me gustaría saber que pasa en el manga, asumiré victoria]. Kurosaki Ichigo caminaba hacia su casa cuando se encuentra con Rukia quien venía de forma improvista, la chica parecía más inquieta de lo normal.

Rukia… ¿ha ocurrido algo? Pareces preocupada- Ichigo que en ese momento se encontraba frente a su amiga, procurando no ser tan entrometido pero no es lo suyo la discreción. –Solo dime que pasa-

¡Ichigo! ¿Acaso no puedo simplemente ser algo distinta a veces?- Rukia con su típica pose de enojo, le mostro su puño amenazante, pero se dejó caer y simplemente dejo salir estas palabras – Ahora que todo está un poco más tranquilo, se hace cada vez más problemático tener que verte, nos vemos idiota- Ella hace su típico gesto de risa fastidiosa y se despide mientras corre, desapareciendo en el camino.

Ichigo sintió que en las palabras de Rukia había algo más, pensó que quizás algo ocurría en la sociedad de las almas pero él era bastante fuerte ya como para que quisieran seguir ocultándole cosas, esas ideas no duraron demasiado – Maldita ni siquiera escuchaste mi adiós, siempre eres igual de rara- El chico entro a su casa, saludo a sus hermanas y estaba preparado para el abordaje de su padre pero este no se encontraba en casa. Se dirigió a su habitación recostándose en su cama, pensaba en si seguirían sucediendo cosas o simplemente ahora su vida sería tranquila y normal, pero su mirada reflejaba que eso no le interesaba mucho por otro lado se venían a su mente preguntas como ¿Qué harán Ishida, Inoe, Chad y los demás? Probablemente estén preparándose para los exámenes finales o yendo a entrevistas para sus futuras universidades, él realmente siempre habría querido tener una vida normal pero en ese momento no tenía claro ese si esa palabra se ajustaba a su futuro – Parece que hoy dormiré un buen rato- Ichigo se quedó dormido profundamente solo despertando a las doce de la madrugada, habían pasado cinco horas desde que llego a su casa. Bajo para comer algo y se dio cuenta que su padre aun no regresaba, esto lo preocupo bastante pero sentía su reiatsu como siempre, solo por precaución salió en su búsqueda llegando así a la tienda de Urahara, este se encontraba fuera como si estuviera esperándolo.

-Al fin llegas Ichigo- contesto un relajado tipo con sandalias, bastón y sombrero. – Tú padre está en el sitio donde entrenamos, creo que está esperándote hace rato-

¿Ese viejo…esperándome? Debe estar en problemas con una de mis hermanas, no tiene remedio iré a ver que sucedió ahora- Kurosaki camino preparado para los típicos recibimientos de su padre, pero Urahara le susurro algo mientras pasaba a su lado – Ichigo has crecido mucho- El chico se quedó pensativo pero con agradeció su gesto.

Un hombre de cabello oscuro y gran semblante estaba parado en medio del patio de entrenamiento del almacén, cuando siente una intensa fuerza venir hacia él, era su hijo dispuesto a darle un golpe pero esta vez el viejo lo esquivo dejándolo pasar a su lado – Ichigo! Responde lo siguiente ¿Por qué quieres seguir siendo Shinigami?

La verdad Kurosaki no esperaba esta reacción de su padre, incluso quedo petrificado y algo confundido ya que solo hubo pocas ocasiones donde hablaron seriamente como en medio de la pelea con Aizen y la verdad sobre su familia específicamente el origen de su madre. – Oye, oye viejo ¿Qué te pasa, tienes algún problema o te llego la vejez, te peleaste con las mis hermanas o simplemente me estas jodiendo como siempre?- Le replico el chico.

-solo responde a esta pregunta ¿o te es imposible chico?- Isshin miraba fijamente el rostro de su hijo, pero había llegado el momento de hablar las cosas sinceramente.

Próximo capítulo: Sinceridad

PD: Espero les haya gustado ^.^