Capítulo #1
They.
(Ellos)
Declaimer: Corazón de melón es de auditoría de Chinomiko, solamente mis oc's, algunos escenarios y la trama en sí son de mi auditoria. Si quieres disfrutar el doble la novela te recomiendo que escuches "Clementine - Sarah Jaffe" (Canción inspirada en la película Eternal Sunshine of the Spotless Mind) o si no "The Tallest Man On Earth - Deamer" Posiblemente sea una combinación entre mi Ooc y Kentin y también entre mi otro Ooc y Castiel. Si no te gusta la canción quitala, no es una obligación escucharla.
Al fin llegamos, por Deus, creí que jamás llegaríamos, me llamo Colette y tengo una hermana melliza llamada Gaëlle y ambas nos acabamos de mudar a los alrededores del instituto Sweet Amoris, la verdad es que el lugar no es tan concurrido como era nuestro hogar anterior, aquí se nota un poco la paz y además que fue el lugar de crianza de mi madre y su melliza.
Tía Agatha, creo que es una dentista ¿Estoy en lo correcto? Creo que sí.
Como sea, estoy feliz de poder al fin haber llegado, en el verano pasado antes de marcharse le comente de este suceso a Ken, un gran amigo mío, pero no tanto de mi hermana Gaëlle, ella es un tanto Diva en ese sentido y cree que Kentin es un ñoño, no es por nada pero me gustan los chicos que tienen lentes y en especial de culo de botella.
Pero algunas veces se pasa de la raya. Es muy intenso.
La verdad es que comparto con mi hermana el gusto al Death Metal y el Indie, y amamos a las bandas entre: Dethklok, Cowboys from Hell, Funeral Suits, The Honey Trees, todas buenas bandas. Como sus fans, somos una delicias de personas.
- ¿Gili? - la llamé, ella dejó de mirar la ventana, los rayos del sol se adueñaron de su cara, le daba un aire de paz al lugar, pero a la vez te jode la vista, ella se me quedó por unos minutos y luego parpadeó varias veces, sacó de su bolsillo un reproductor y del otro sacó sus audífonos.
- ¿Pasa algo Cili? - le mire, la verdad es que desde pequeñas nos acostumbramos a que nos dijeran "Gili" e "Cili" y bueno no nos importa - ¿Qué te parece la ciudad? - ella sonrió un poco y luego fijó su mirada a la ventana.
- Me gusta, tengo una agradable vista de la playa del lugar - me senté un poco más cerca para poder ver lo mismo que ella veía, y vaya que era hermoso, una playa azul cristalino y como apenas íbamos por la colina del lugar, por lo tanto veíamos también la ciudad por lo debajo con ese color amarillo del atardecer con unos toques de anaranjado, lo que le daba magia al lugar.
- Tienes tanta razón, es hermoso - le dije mirando todo como si fuera la última vez que lo pudiese admirar - Me pregunto… - me indagué al pensar en todo el proceso de tener que ser el nuevo y toda la cosa, algo muy difícil para mí, pero no para Gaëlle, pero no importa yo cuento con que ella me ayudará a poder al menos carrilar en el sentido social.
- ¿Si te refieres a los estudios? Tranquila, yo siempre te daré batería - ambas reímos porque era cierto, ella era muy estudiosa, muy mala en deportes y social; yo era dura en casi todo, amaba los deportes y era muy reservada. Muy diferentes, pero igual nos queremos.
- ¡Ha! ¡Ha! ¡Ha! Muy graciosa - dije yo con todo el sarcasmo del mundo, ella se puso los audífonos y empezó a cantar The Tallest Man On Earth - Dreamer, muy bonita y en mi mente le seguía el coro. Somos una rara combinación entre el amor por el Death Metal e Indie.
Pero me gusta, me gusta ser así.
Mire por detrás el compartimiento y vi las guitarras que teníamos para tocar, la mía tenía más tatuajes; la de ella estaba limpia y pulcra; la mía estaba hecha añicos, ya una cuerda se había roto y tenía que comprar otra; la de ella estaba limpia y sabía tocar incluso mejor que yo.
¿Ya dije la parte en la cual es aplicada a todo? Sin excepción. Sep, es por eso.
- No quiero llegar Gaëlle - le susurre en el oído evitando que mi mamá escuchara - No me siento comoda, de todos modos no vemos mucho a tía Agatha. - Ella asintió conmigo y luego me dedicó una de sus tiernas sonrisas, apoyo su mano en la mía y la apretó en forma de compañia.
- Acostumbrate a los cambios y verás que todo será diferente - sonrío - Es fácil si lo intentas - cerré mis ojos y pensé en la posibilidad de hacer amigos, conocer a alguien o por lo menos… tener novio.
- No gracias, estoy bien con mi vida de otaku amante de los videojuegos que detesta el sol.
- Como quieras - dijo ella - ya me gusta este ambiente de tranquilidad.
"Se te hace todo tan fácil" me dije "Tan fácil" ojalá tuviese esa misma suerte que ella tiene y entonces podría cambiar, pero ¿Estaría preparada para este cambio tan drástico? No lo sé, da miedo pensar en esas cosas, que tú área de confort se vea en peligro es algo que no le deseo a muchos.
Mire por mi ventana y entonces opté por bajarla y sentir aquel aire de paz del cual tanto me afamo Gili, baje la ventana y cuando saqué mi cabeza me tope con el aire jugar con mis cabellos naranjas y ojos azules bastante llamativos, mi hermana era la típica caucásica, pero ella se cortó el cabello por arriba de sus orejas y como tenía ese perfil delicado se le veía el rostro más angelical que antes, ese aire que enserio se sentía puro y libre de contaminantes a causa de los carros, a lo alto de la colina estaban las coníferas adornando el lugar y dándole un toque muy hermoso. Miré a mi madre manejar mientras escuchaba a Bon Iver y al parecer yo era la única que no escuchaba música, pero no me importaba, de todos modos quiero que mis oídos no me duelan al rato.
Y además las canciones de mi mamá eran bastante buenas.
Subí la ventana y me arregle el cabello, ahora me sentía un poco más relajada, me estire en mi asiento y seguí con la mirada como poco a poco bajamos la colina, al mismo tiempo que llegábamos al lugar. Todo era muy silencioso, como un pueblo fantasma.
La única que disfruta esto, era mi madre y mi hermana. Yo, estaba pensando que venir aquí era un error de nivel mundial.
Mi hermana fue la primera al bajarse y abrazar a mi Tía Agatha se abalanzó sobre ella y le dijo lo mucho que la extrañaba, yo fui la segunda y le dije también lo mucho que no la veía y por último mi madre quienes demoraron más susurrandose en el oído lo mucho que se extrañaban y que había pasado mucho. Al poco rato se separaron y ella nos ayudó con bajar las cosas del auto, no había mucho, apenas estábamos en la primera etapa, teníamos cuartos diferentes la casa de ella era un departamento y tenía dos cuartos de sobra. Perfecto.
Su novio vivía en otro lado, según ella nos contó. Dice que es una persona muy amable y cariñosa, pero que es algo reservado, cosa que a ella le vuelve loca.
Nos quedamos un poco hablando, a la mañana siguiente mi madre nos llevaría al instituto y luego se iría para ver a mi papá y después volar al aeropuerto para poder viajar por el mundo, según ellos los negocios. Ellos se quieren tanto que mi madre dejó el trabajo para poder estar con él y estar más cerca.
- ¿Y como están mis sobrinas? - preguntó ella pícara - ¿Acaso hay alguien en su vida? ¿Un novio? ¿Un platónico? - abrí y también Gaëlle los ojos y empezamos a negar rápidamente con la cabeza, haciendo que estas rieran de maneras incontrolables.
- Tranquila fiera - dijo Agatha en broma - Hay muchos peces en el mar - luego mi mamá vino y le dijo que le gustaba la idea de sus dos hijas solas y sin novios por los cuales preocuparse. Mi tía le dijo que no debía ser cierto que cuando mi madre era joven tenía mucho novios y que ahora no quiere que sus hijas no tengan ni un perro que les ladre.
- ¡Yo solo estaba con el padre de sus hijas! - contestó mi madre al alterada - ¡Nadie más!
- ¿A sí? ¿Qué pasó con Viktor?
Mi hermana y yo abrimos los ojos ante la impresión, nos costaba mucho creer que nuestra madre tuviese un novio antes que nuestro padre, no me molestaba, si no que me sorprendía ¿Entienden la diferencia? Espero que si.
- ¿Tenías un novio antes que papá? - preguntó Gili - ¡Wow!
- Bueno, ya. Hay que arreglarse mañana hay que levantarse temprano.
La verdad era que no nos habíamos dado cuenta cuando ya la oscuridad reinaba sobre nosotros, las estrellas se podían apreciar el doble que en anterior ciudad.
Me empieza a gustar este nuevo aire.
Cenamos, reposamos, charlamos un rato, nos arreglamos para dormir, pero faltaba algo.
¿Donde estaba mi gato Spock?
Bajé las escaleras y al rato me acordé que estaba en el carro, pegué un grito que de seguro lo escucharon hasta en Pekín y luego todas las demás bajaron asustadas.
- ¡Mi gato! - grité - ¡Sigue en el carro! - en lo que gritaba y chillaba de miedo por la probabilidad de que se muera por la falta de aire, pero al poco rato escuchamos un ronroneo de la cocina. Mire por dentro de la cocina y me fijé que mi gato y el cachorro de Gaëlle estaban en la cocina descansando.
- ¿Acaso no te acuerdas cuando lo bajaste? - me preguntó extrañada mi hermana - Fue lo primero que bajaste. Qué olvidadiza eres - dicho esto una risa colectiva de los oyentes no se pudo esperar, yo solo sentía la cabeza caliente y las mejillas arder, cogí a mi gato y me dirigí a mi cuarto aún con la cabeza de un tomate y nos dijimos todas unas buenas noches. antes de acostarme reze a Dios por estar con bien, si soy catolica, y luego besé a mi gato para poder irme a dormir.
La verdad es que no se si mi hermana cree lo mismo que yo. Lo dudo. Aunque fuimos inculcadas con ese amor a nuestro creador y yo siempre lo seguí y en especial desde que mi abuela falleció.
Al día siguiente, mi madre tuvo que batallar para sacarme de mi cama, con la ayuda de mi hermana pudieron al menos ayudarme a cepillarme los dientes sin caerme rendida en el sueño que sentía.
¡Es que es un gusto dormir! ¡Oh! ¡La gloria! ¿Enserio nadie se da cuenta?
- ¿Son tostadas francesas? - pregunté al ver a mi tía prepararlas, ella asintió de una manera energizante, que mujer tan chispeante - ¡Que delicia! - dije al oler las recién hechas.
- Prepárate de dentro de poco nos vamos - dijo mi madre y comimos tán rápido como pudimos, nos bañamos y nos arreglamos según nuestros gustos. Mi hermana con un vestido que caía en varias capas desde la cintura hasta las rodillas; en las puntas el color pasaba de un rosado pastel a uno casi llegando al Fucsia; unas largas botas de color marrón, en la parte de arriba como aquel vestido era sin mangas, osea tenía unos tirantes, ella prefirió acompañarlo con un abrigo de tela que combinaba con las botas; de último traía un retocado de una trenza griega, los labios con un brillo y un poco de polvo para tapar los granos. Yo, por el otro lado, me puse una sandalias esas que son prácticas y parecen convers, bueno esas; un suéter manga larga de color negro; este tenía unos retoques en color dorado, por lo tanto me puse un collar de fantasía de ese mismo color; y unos vaqueros rotos, también me puse un poco de brillo labial y polvo para que no se vieran los granos.
Todo esto fue usado ayer por nosotras. Nadie nos vio, así que optamos por el ahorro de ropa.
¡Solo los ganadores se la juegan! Bitch Please!
Recorrimos varias calles y unas cuantas avenidas, la verdad es que no demoramos mucho, ella nos llevaba simplemente por el hecho de que debía culminar con el papeleo y nosotras al menos estar instaladas. Se que después de hoy, caminaremos.
- Bien, aquí esta - baje la ventana para ver al mar de personas que entraban en su respectivos estudios.
¿Lo que me dolía? Es que en donde vivía ya se estaba acabando la escuela. Aquí apenas estaba empezando.
¡Dios bendiga las diferencias de horas! ¡Amén!
Bajamos y nos preparamos mentalmente para dar clases, nos miramos como si fuéramos nuestros espejos y luego asentimos para ir a dar clases, estábamos guapas y nadie podía decir lo contrario y eso que la ropa era de ayer. Somos unas genios.
Llegamos y luego la directora nos recibió con una sonrisa forzada, la verdad es que nunca en la vida había sentido que me sonrieran de una manera tan obligada, era peor que yo cuando me cantan feliz cumpleaños por el teléfono móvil. En serio una pesadilla.
- Hola - nos saludó - ¿Ya tienen todo lo que necesitan para culminar con el informe? - mi madre se lo dio y nos dijo que mañana empezábamos clases, pero antes podíamos caminar y conocer mejor el instituto. Me dio que pereza, preferí quedarme en el pasillo, los casilleros rojos, varios cuartos y cuando preferí quedarme más tiempo.
- Joven, no puede estar aquí. Debe ir a clases - dijo una voz detrás de mí, lentamente me voltee, ya estaba asustada, no llevaba ni una hora y ya estaba en problemas serios. Me sentía con la más grande las suertes. *Notese el sarcasmo*
- Lo siento, yo… - no pude terminar cuando esos ojos dorados me dejaron sin palabras, oh mi Deus ¿Ya dije lo guapo que era? Era esbelto, de cabellos amarillos, ojos dorados totalmente llenos de amabilidad, una camisa blanca desabrochada las dos primeras y las dos últimas y un pantalón negro bastante elegante, digo, todo en él era elegante. Debía reaccionar, un chico no haría que simplemente mis hormonas se revolvieron, debía ser firme - Lo siento, la directora me dijo que podía ver el lugar y mañana poder empezar a dar clases- dije con cierta frialdad fingida, el chico me miró con los ojos abiertos y luego sonrío de una manera tan ¡Wow! Deus todo poderoso, haz que se quite la camisa.
"¿Que idioteces dices Colette? ¡Madura!"
- Ah… - dijo él - Eres la nueva ¿Verdad? ¡Ya sabía yo! Es que no te había visto antes y como te ví de espaldas me recordaste a alguien, perdonas si te ofendí - respondió apenado, se sonrojo ¡Ah que cute! Pero no se lo veía como muy recto para mí, no era el tipo de chico que me gusta.
- No te preocupes - le respondí moviendo mis manos para poder calmarlo - Creí que me ibas a regañar o algo - dije, luego de un rato de conversar dijo que debía irse porque pronto sonaba el timbre de cambio de clases y él debía ir a dar clases. Como cualquier chico responsable con buenas calificaciones.
Demasiado recto para mí. Es como mi hermana, solo que ella es más hardcore o goofy en algunos sentidos.
Hablando del rey de Roma ¿Donde se metio?
Gaëlle Pov
Me separe de mi hermana en el momento que la directora dijo que podíamos caminar por los alrededor y conocer más sobre el instituto.
Este lugar me agrada.
Caminé por el pasillo, conociendo a Colette se quedaría ahí como tonta mirando el infinito y más allá por lo que opte irme y descubrir tierras desconocidas. Al poco rato salí del interior del lugar, dando paso a una especie de parque o no se como decirle actualmente, la mendiga palabra se me va, pero había unas bancas y unas rosas muy hermosas creciendo por aquí, me acerque con todas las ganas de verlas, olerlas y poder quedarme con una, pero una chica con un gorro característico de jardinería me miró mal, por lo tanto me aleje con sumo cuidado de que me tirara ese cubeta de composta.
Me senté en una de las bancas rendida, a diferencia de mi hermana la atlética, yo al no hacer ejercicio me cansó con facilidad y por lo tanto tengo unas pequeñas llantitas, pero no se notan, de todos modos no como tanto como lo hace mi hermana Colette.
Pero aún así le quiero. Ella es muy flexible, loca y rebelde, lo que busco en alguien. Lo que se parezca a mí hermana. Alguien temerario y que le guste el cuero negro, que no se asuste de Dethklok (como el ñoño de Ken) y que le guste tocar guitarra como a Colette y a mi.
- Oye, esa banca es mía - dijo una voz, era ronca y sonaba como si te quisiera clavar un daga en el momento que le mires, estaba harta de las personas que me pisotean solo porque soy nerd, lo miré con todo la poca cara de amigos que tengo.
- ¿Así? - enarqué una ceja - Pues no veo tu jodido nombre y vete tapas el sol, haciendo que pierda la oportunidad de coger vitamina C de este - dije ignorando olímpicamente el aspecto físico del chico que se cree la gran cagada solamente porque se ha fugado de clases. Dije que me agradaría alguien rebelde, pero algunas veces me confundo en mis gustos, lo quiero pero amable sabiendo que eso no existe.
Solo en novelas pornografícas Gaëlle. Lease Cincuenta sombras de Grey.
Sentí un gran apretón, mire hacia la figura que estaba al lado mío, pero qué… pelo tan raro tenía la verdad.
- Veo que eres alguien dura de tratar - susurro en mi oído haciendo que me sonrojara mucho, creo que su cometido se estaba logrando, incomodar mi paz para hacer que me fuera y él quedarse con la banca, pero este juego lo podemos jugar dos, puse mis manos cerca de su cara y la hice girar a la mía, unos ojos grises penetrantes me llamarón la atención, solo sonreí acerque lo más que pude mi rostro y cuando este creyó que lo besaría ¡Pum! ¡Gaëlle ataca de nuevo! lo aparté haciendo que este cayera de la banca, sorprendido y a la vez confundido me miró y al ver mi cara triunfal solo sonrío.
- Adiós extraño, ganaste - le dije, aún sabiendo que yo había ganado justamente la banca, de todos modos no tenía ganas de pelear con alguien - Adios, ya me voy - antes de irme mire para atrás y vi al chico aún en el piso mirándome y por supuesto un sonrojo no pudo escapar de mí - Me llamó Gaëlle por si te lo preguntabas - me fui en busca de mi hermana quien daba la redundancia que seguía en el pasillo.
¡Vaya sorpresa! Estaba en el pasillo…
- Hermana la llamé - ella me miró con los ojos llenos de alegría, se abalanzó sobre mí y empezó a gritar como una niña en navidad - ¡¿Qué pasa?! - le pregunté alarmada
- Está aquí - dijo ella - él se mudó solo por mí - dicho esto empezó a dar vueltas como misma tonta.
- ¿Se puede saber que te pasa? - le pregunté con todo el miedo del mundo, mis sospechas crecían conforme ella seguía abrazando ese panda que tenía como adorno en el celular.
Tiene. Que. Ser. Una. Maldita. Broma.
- Kentin, está aquí Gaëlle- dijo ella mirando sobre mi hombro, yo la mire como si se hubiese drogado o algo por el estilo.
- Estás mal - le dije mirándole de la cabeza a los pies - Muy mal - me fui de ahí, no aguanto ni un segundo más entre tortolos frikis, me voy a casa de mi tía a ver Sherlock Holmes.
Todos parecen que están mal en este lugar, y al parecer es una enfermedad de contagio rápido.
N.A:
¡Hola! Sorry I Don't Have a Username reportandose, espero que les haya gustado este primer capítulo de "They Have Something In Common" "Ellas tienen algo en común" Okay, las protagonistas son un Out of character (Ooc), es aquel personaje que el escritor no ha llegado a decidir del todo el personaje, tengo una idea de las mellizas.
Colette sería un poco picara, rebelde, atlética, odiosa de libros y de encerrarse todo el día en casa, amante de dormir y ama a los gatos.
Gaëlle sería un poco social, recta, estudiosa o aplicada, nerd, y también odiosa del encerramiento, ama a los hurones, amante de levantarse a la hora que cree que debe ser bueno para la salud humana, es amante de la salud; por lo tanto no come mucha comida chatarra, ama pasear y el dibujo.
Ambas aman el Death metal, una de ellas es católica, la otra no es practicante, y aman tocar la guitarra juntas; aunque le cueste un mundo a Colette, no les importa estar separadas para ellas sería como tomar un respiro de sus vidas diarias.
(¡¿Qué estoy haciendo?! ¡¿Lo opuesto de los personajes Castiel y Kentin?! Pues sí, me gusta jugar con todo)
Quiero aclarar que mellizas no es lo mismo que gemelas, por lo tanto son diferentes en muchos aspectos. No tengo nada encontra de 50ofGrey, pero creí que sería gracioso, si no te gusta mi chiste esta bien, pero debes aceptar que solo es una broma y mi intención no es ofender a nadie.