Naruto © Masashi Kishimoto

Este fic nacio un dia que empece a preguntarme como hubiera sido la vida de Sakura y Sasuke (en vidas sin reglas mi otro fic) si ellos se hubieran quedado en Japon.

Aunque las historias no estan relacionadas... quizas noten alguna que otra similitud. En fin esa historia la escribi por que habia muchos pidiendome lemon mucho lemon. Y esta historia lo tendra y prometo que estara intenso.

Espero que sea de su agrado.


En el Subterraneo 1

- Sasuke ¿A que no sabes a quien vi en las oficinas de inscripción?

- No me interesa –contesto el azabache mientras con movimientos delicados le daba forma a lo que parecía una nariz sobre el canvas –.

- A Sakura Haruno… –Dejando su pincel en el caballete, Sasuke se volvió a mirar a su amigo –.

- ¿Por qué supones que debe importarme?

- No pensé que fuera a importarte. Pero imagine que al igual que todos debías de sentir curiosidad… todos lo hicimos después de que abandono la escuela hace un año y medio. Además tienen algo de historia… bueno por así decirlo –al ver que el pelinegro lo miraba molesto, cambio la conversación – por cierto veo que has cambiado de arete –le señaló los labios –.

- Hace dos días lo compre… pero creo que resulto como todos los demás. Este también me esta causando una ligera infección. Ahora que lo mencionas debo ir a curarlo.

- Bien… bueno me retiro Sasuke. Nos vemos mañana en la clase de diseño –.

- Si nos vemos Suigetsu – al despedirse de su amigo se dirigió hasta el baño, sacando algodón y un desinfectante del gabinete. Justo cuando iba a curarse un fuerte alboroto lo hizo salir del baño y dirigirse a la ventana de su dormitorio. Al asomarse vio a una gran multitud de chicas rodeando a una chica de cabello corto y rosado. –Vaya conmoción y todo por tu supuesto regreso Sakura. Hmph… veo que decidiste cambiar de apariencia. –noto en voz alta al darse cuenta que la chica llevaba varios aretes en ambas orejas y labial de color azul oscuro en los labios. –No era así como te recordaba ¿Qué paso con tu look de niña buena?–de nuevo dijo en voz alta para después alejarse de allí y entrar de nuevo en el baño. Frente al espejo se quito el arete y lo sumergió en alcohol. Tomando desinfectante con un hisopo se curó el enrojecimiento que se veía en su labio inferior. Una vez que termino reviso de nuevo la leve herida en el espejo y después miro su reflejo por unos segundos –. ¿Historia? ¿Cuál historia? Estúpido Suigetsu… ¿Por qué habría de importarme su regreso? No es como que ella y yo hubiésemos sido cercanos… al contrario entre más lejos estuviera de mi mejor…Entre Sakura y yo no hay historia alguna… nunca existió tal cosa.


Dos años atrás…

- Espero que le agraden nuestras instalaciones señorita Haruno.

- Son muy hermosas… espero que no sea difícil acostumbrarme a ellas. Aunque creo que son tan bellas que no me permitirán extrañar mi hogar con frecuencia.

- Fue bueno que tu padre haya decidido enviarte. Según me conto tienes mucho talento. Incluso más que tu madre.

- Eso no lo sé… supongo que para eso debe ver mis pinturas primero. Hare el examen de admisión.

- Nada de eso confió en las palabras de tu padre Sakura –y en su dinero también, pensó la pelirrosa –. Ven te llevare a los estudios privados.

- Este edificio tiene solo estudios privados, son un privilegio que le damos a los alumnos sobresalientes. Pero por supuesto que con tu talento tú ya tienes uno reservado. Espero te guste. Es este de aquí. –al abrir la puerta y ver los enormes ventanales no pudo evitar sonreír. Muy a pesar de que sabía que todo era porque su padre había pagado por ello. La luz entraba por todas partes lo que sin duda inspiraría sus pinturas –.

- Gracias Señor Shinomoto este será el lugar perfecto. Podre guardar mis pinturas y trabajar en mis esculturas. Es enorme…

- Si este es el último piso y tiene solo dos estudios, los más grandes. Es perfecto para usted. Confió en que le dirá a su padre que cumpliremos todas sus comodidades.

- Lo hare. Sin duda hará un buen donativo al instituto como agradecimiento – le aseguro mientras salían del estudio –.

- Gracias Señorita Haruno.

- Oh este es el otro estudio. También tiene una ventana en la puerta como el mío –índico al asomarse por la ventana. Abrió sus ojos muy grandes denotando sorpresa – ¿Quién es él?

- A él es nuestro mejor talento sin duda… no es que usted no lo vaya a ser también…

- No puede decir tal cosa. Aun no ha visto mis pinturas… ¿Quién es él? –pregunto la pelirrosa de nuevo –.

- Uchiha Sasuke…acaba de comenzar su tercer semestre con nosotros… excelente artista pero con una actitud bastante extraña.

- Es muy bueno sin duda lo es –aseguro Sakura mientras lo observaba sentado en un andamio, pintando en lo que parecía un canvas muy grande. Tenía una brocha en cada mano y con ambas dibujaba patrones amorfos… amorfos sin duda, pero cautivantes. Algunos otros parecían espirales – Espero poder conocerle.

- Es lo más probable…él al igual que usted estudia la misma concentración. Solo que de manera inversa. Usted ha elegido pintura con subconcentracion en escultura. Y él escultura con pintura como subconcentracion.

- Ya veo… ¿Podría mostrarme los dormitorios?

- Por supuesto… en los dormitorios es lo único en lo que somos muy estrictos. Es un edifico para las mujeres y otro para los hombres. Después de las 10 de la noche no se permite que ningún estudiante del sexo opuesto se quede en el dormitorio que no le corresponde.

- Vaya que es estricto… para nivel universitario…

- ¿Cómo dice señorita Haruno?

- Nada de importancia…

Para su sorpresa había sido bastante difícil socializar. Pues la mayoría de los estudiantes de su departamento hablaban a sus espaldas. Se referían a ella como la niña rica que había entrado sin examen de admisión. Y que gracias a las influencias de su padre le habían dado uno de los mejores estudios. Su único amigo era Chouji y eso porque tenían mucho de conocerse. Habia decidido que lo mejor sería comenzar a pintar para que los demás pudieran darse cuenta que estaban equivocados. Al ir aproximándose a su estudio escucho la fuerte música que escapaba del estudio del tal Sasuke. Era rock… sin pensarlo abrió la puerta y se dedico a observarlo pintar. Desde hace unos días tenía pensado hablarle. Quería consultarle algo. El no parecía percibir su presencia… quizás la música se lo impedía. Aun seguía trabajando sobre el andamio. Parecía que aun tardaría algunas semanas en terminar pues la dimensión era muy grande. Se veía infinita y mas con esos patrones de espirales que la cubrían. La música se paró de repente y Sasuke le hablo dándole la espalda –.

- ¿Hasta cuando piensas marcharte? –al escuchar su pregunta la pelirrosa se inmuto. Justo en ese momento observo el espejo que estaba en la parte superior de donde Sasuke pintaba. Era como esos que las tiendas colgaban como medida preventiva para minimizar los robos.

- Si me viste que entre ¿Por qué no me pediste que marchara en ese momento?

- Tenía curiosidad –le respondió mientras bajaba del andamio para de ahí caminar hasta ella –.

- ¿Curiosidad de que?

- De si tú eras la chica de la que todos hablaban… la chica sin talento que gracias a la influencia de su padre obtuvo un estudio sin antes haber tenido una exposición. Sin haber ganado un concurso en la escuela… aunque ¿Que se puede esperar si ni siquiera hiciste el examen de admisión?

- ¿Cómo sabes que no tengo talento? ¿Acaso has visto alguna de mis pinturas?

- No… y no me interesa. Tu apariencia me lo dice todo. –le explico mientras la observaba de arriba abajo. Llevaba un vestido blanco con unos zapatos de piso en forma de conejo y en las orejas unas perlas azules – Soy muy bueno percibiendo a las personas. Tu apariencia me dice que eres la hija consentida de papi. Y que por ser precisamente la favorita no le importo despilfarrar su dinero para cumplir tu capricho de mejorar tus dibujos. Supongo que ya no te conformas con pintar con crayones y decidiste jugar con el arte de verdad.

- Vaya que eres un imbécil –ante tal comentario el rostro de Sasuke se sorprendió, pues no esperaba tal respuesta – bueno tu comentario no me es nada nuevo por que como has dicho… todos en esta escuela piensan lo mismo. Supongo que debo empezar a callarles la boca muy pronto… en fin yo solo venia por que deseaba conocerte. El dia que te vi pintando me pareciste muy interesante… y con eso de que somos los únicos utilizando este piso… en fin… Nunca he intentado pintar en un canvas tan grande como en el que estás trabajando en estos momentos ¿Te inspiro la secuencia Fibonacci no es así? …. Olvídalo…Solo venia a presentarme y pedirle un consejo a uno de mis senpais… esas eran mis únicas intenciones. Vaya intento fallido…

- No solo eres una chica sin talento pero ahora veo que te pareces a muchas de las chicas que estudian aquí. Alégrate al menos algo tienes en común con ellas…

- No entiendo a que te refieres…

- Igual que todas ellas vienes a perder el tiempo tratando de darme cumplidos para acercarte a mí. Disculpa mi falta de interés pero no eres mi tipo. Aunque quizás un dia de estos andaré falto de actividad sexual y quizás te considere… si escuchar esto te deja más tranquila… márchate.

- Vaya que debe ser muy patética tu vida si las chicas solo se te acercan para dormir contigo… me da más lástima que no aprecien tu talento… francamente estaba muy molesta con tus comentarios. Auto controlándome para no darte algunos puñetazos… pero al oírte decir esto entiendo bien porque estas a la defensiva… ya he hecho lo que quería. Te he dicho que me has parecido interesante tan pronto te vi… y pues sobre el consejo es una lástima. Buen dia Sasuke –kun. Tratare de no tomarme tus insultos tan a pecho. –tan pronto la pelirrosa se hubo marchado, Sasuke fue y se sentó a uno de sus sillones pensativo. De pronto toda la inspiración que había tenido para pintar se había esfumado. Tras permanecer sentado unos cinco minutos decidió marcharse. Mañana continuaría. Antes de irse se asomo por la ventana en la puerta de Sakura. Esta bebía café mientras que limpiaba lo que parecían sus pinceles. Nunca se había equivocado al juzgar a una persona. Nunca… pero ese dia por primera vez había sentido algo muy parecido a la duda.

A la siguiente mañana la voz de Suigetsu lo hizo que saliera de la cama. Arrastrando los pies y ligeramente molesto se dirigió a abrirle la puerta. No había dormido muy bien por culpa del café que había tomado.

- ¿Qué sucede? ¿Se te olvidaron las llaves?

- Si las olvide en el buro pero eso es lo de menos… debes venir a ver lo que amaneció frente al dormitorio… para ser mas especifico en la pared donde pensabas realizar uno de tus proyectos.

- ¿Cómo?

- Si anda cámbiate y vayamos a verlo.

- ¿Quién crees que haya sido?

- Sin duda la chica nueva –respondió Sasuke mientras miraba el grafiti y se reconocía a sí mismo en uno de los dibujos, el cual decía imbécil con aerosol rojo. No podía ser más obvio –.

- No lo creo. Se ve demasiado tierna como para hacer algo como esto… además alguien dijo que habían visto a Kabuto con unas latas de aerosol en la madrugada. De hecho según tengo entendido ya debe estar en la dirección recibiendo su castigo.

- Ya veo… Kabuto es un idiota –por dentro pensó que quizás Kabuto lo merecía, pues realmente lo detestaba. Quizás debía callar lo que sabía y dejarlo recibir el castigo. Sobre todo cuando recordaba cómo había robado algunas de sus ideas haciéndolas pasar como propias, supuso que Kabuto merecía tal cosa.

- En fin pero si realmente crees que fue la chica nueva deberías decirlo. Aunque en verdad lo dudo. Es muy linda y se ve que es una buena chica. Lástima que por usar sus influencias se ha creado mala fama. He escuchado que muchos se han encargado de hacerle la vida de cuadritos en esta su primera semana.

- Ya no me hables de ella… sin talento no durara mucho en este lugar. Solo esta aquí por el prestigio… su padre podrá presumir de ella. Decirle a sus amistades que su hija atiende la mejor escuela de arte… cuando vean sus pinturas todos reirán …

- Bueno aun no sabemos si posee talento o no…

- ¿Alguna vez me he equivocado descifrando a las personas?

- No hasta ahora…En verdad que detestas a la clase alta.

- Infinitamente la odio…

- Joven Uchiha justa a usted lo estaba buscando –le anuncio el director. Junto a él venía Sakura –Veo que ya se ha dado cuenta de lo que sucedió. Esta mañana estuve charlando con Yakushi pues me habían informado que él había sido el culpable. Sé que usted tenía mucho interés en pintar el mural así que entiendo si esta molesto.

- No hay nada que algunas capas de pintura blanca no puedan cubrir.

- Si y trabajaremos en ello… la señorita Haruno ha venido conmigo porque desea disculparse.

- ¿Disculparse?

- Si, pues ha sido ella quien ha vandalizado su pared no el alumno Yakushi.

- Ya veo… –lo sabia se dijo así mismo mientras se preguntaba por que había confesado–.

- Me explica la señorita que se le había informado que como nueva alumna debía tomar este reto de iniciación como especie de novatada.

- Así es… se me explico que todos los alumnos de nuevo ingreso deben realizar un reto… el mío fue vandalizar esta pared. En verdad lo siento… –explico Sakura cabizbaja –.

- ¿Haces todo lo que te ordenan los demás? Sin talento y fácil de manipular… supongo que con el dinero de tu padre podemos comprar la pintura blanca que utilizaremos para cubrir tus garabatos.

- Joven Uchiha le exijo que no se dirija de esa forma a su compañera.

- ¿Acaso su padre es muy esplendido contigo Shinomoto?

- Joven Uchiha cuide sus palabras…

- En verdad lo siento –se disculpó Sakura de nuevo – se que sonara presuntuoso pero señor Shinomoto permítame ser yo quien pinte el mural. Lo hare como una disculpa hacia mi compañero y como primer proyecto. Ya que entre a esta escuela sin presentar el examen me gustaría que este proyecto fuera considerado mi pase de admisión.

- No me parece mala idea señorita Haruno. Y viendo lo rudo que ha sido el joven Uchiha con usted no me queda más remedio que aceptar.

- ¿Qué? –exclamaron Sasuke y Suigetsu al mismo tiempo – profesor Shinomoto…

- Lo siento Sasuke, pero no me dejaste otra opción…

- La pared bajo mi habitación aun esta disponible señor Shinomoto. No me parece muy justo que por mi petición fuera de lugar mi compañero se quede sin un espacio para expresarse. Por favor déjele que pinte en mi pared.

- Solo porque usted ha intercedido por él señorita Haruno…

- Gracias y Sasuke… –se dirigió al pelinegro – como disculpa también te dejare escoger mi temática… es más que justo. Dime que debo pintar y lo hare…

- ¿Acaso no tienes creatividad propia?

- No me sorprende tu respuesta… puedo pintar lo que sea… por favor senpai tan solo dime una palabra para visualizarla y plasmarla en tu muro.

- Vamos joven Uchiha no me complique mas el dia –rogó Shinomoto –.

- Si no te gusta… yo misma volveré a pintar esas paredes de blanco y podrás pintar en ella de nuevo… y en la de mi habitación…

- Ten por seguro que te hare repintarla si pintas algo mediocre. Como condición te pediré que no pintes la pared. Que pintes algo incorporando tus garabatos en la pintura.

- Bien así lo hare –le sonrió Sakura – ¿Algo más?

- Plasma algo opuesto a lo que tu representas… algo oscuro ¿crees que puedas hacerlo?

- Sin duda… –le respondió mientras el señor Shinomoto se marchaba dejándolos a los tres –

- Supongo que este era tu plan desde el principio… algo así como tu venganza por lo que te dije ayer…

- Quizás… no hay nada en el mundo que el dinero de papi no pueda comprar –le aseguro con una sonrisa mientras se marchaba –.

- Vaya… entonces tenias razón. Fue ella quien lo hizo… no lo hubiera pensado. ¿Quién le habrá mentido con eso de la novatada? Se ve tan inocente… es muy bonita…

- Suigetsu no seas idiota… si… es muy bonita… pero es una chica que solo vino a este lugar a perder su tiempo. Quizás se aburrió de su vida de compras y decidió que para hacerse la más interesante le convendría entrar a una academia de arte… no será la primera ni la ultima.

- Lo dices por tu ex… hahaha pensé que ya la habías superado.

- Esto que ha pasado me demuestra que no la juzgue mal –le aseguro Sasuke a su amigo mientras regresaba de nuevo a su habitación. Sabía bien que Sakura estaba allí para jugar con el dinero de su padre y al hacerlo de pasada tener algo de que presumirle a todos quienes fueran parte de su círculo social.

Llevaba rato observando el mural de Sakura ya terminado. A ambos les había tomado tres semanas y media pintar su respectivo proyecto y el resultado definitivamente no era lo que había esperado. Todas esas semanas pinto mientras la imaginaba cubriendo de pintura blanca esas paredes para que él pudiera pintar otra cosa. Mas sin embargo, eso no sucedería. No, no sucedería. No había nada en ese mural que mereciera ser recubierto en pintura. Todo en el merecía ser admirado por todos. Por la multitud. Tal y como pasaba en esos momentos. Con todos deteniéndose a admirar y reconocer el talento de la nueva estudiante. Habia quienes aseguraban la habían visto pintando entrada la madrugada algunos días. A pesar de que apenas si podían percibirse, los garabatos estaban allí incorporados a la pintura. El que lo representaba a él y decía la palabra imbécil se había incorporado a lo que ahora eran las costillas de un caballo esquelético. Sobre él una mujer sin rostro visible cabalgaba sosteniendo un muñeco. Todo resultaba algo tétrico en realidad. De fondo un bosque tenebroso abatido por el fuerte viento, aves volando a pesar de ello. Era una pintura muy compleja ahora entendía por que pintaba incluso en las noches. Poder darle ese nivel de detalle en tres semanas hubiera sido imposible si no hubiera trabajado también en las noches. Después de eso todos dejaron de hablar de ella a sus espaldas. Les había demostrado que tenía talento y uno muy grande. Uno que no podía ponerse en duda pues la habían visto pintar con sus propios ojos.

- ¿Deseas que lo cubra de pintura? –le preguntó un tiempo después. La pelirrosa entro a su estudio como si hubiese sido invitada –.

- Si así lo hubiese querido… te lo habría dicho desde hace tiempo.

- ¿Aun crees que no tengo talento?

- Todos los demás ya se han dado cuenta que en verdad eres talentosa…

- ¿Y tú?

- ¿Te importa más mi opinión que la de los demás?

- Si – la sinceridad con la que contesto lo desconcertó un poco –.

- ¿Por qué?

- Porque de todos los que estamos aquí… eres tú el mejor de todos…

- ¿No crees que esas palabras solo alimentaran mi ego?

- Quizás… aun así deseaba decirlas… tu mural me ha gustado más que el mío… es aun más oscuro… me causa algo de terror. ¿No te llama la atención que ambos murales tengan algo en común?

- Yo no he notado nada en común entre ellos…

- Ummm el niño o muñeco siendo devorado por su padre… si no me equivoco es cronos cometiendo filicidio ¿Cierto? tu versión moderna ha sido una reinterpretación increíble…

- Aun no entiendo a que similitudes te refieres…

- Mi mujer sostiene un muñeco en sus brazos… o un niño quizás… no lo sé a la hora de pintarlo no pude decidir lo que quería que fuese. No pude decidirme entre muñeco o niño y termino así… será interpretado por cada individuo a su manera. Pero si me lo llegan a preguntar no sabré que responder ¿Es un niño? ¿Es un muñeco? No lo sé… –al escucharla decir esto concluyo que quizás si eran un tanto similares en ese aspecto. Decidiendo ignorarla continúo trabajando en su escultura –.

- Estoy algo ocupado… espero lo entiendas… – le anuncio para que se marchara de su estudio –.

- Te gusta bastante la mitología griega ¿cierto? –le respondió la pelirrosa acercándose para analizar la escultura. Sasuke rezongó con fastidio al verla pararse junto a él–.

- ¿Por qué no terminas de marcharte?

- Es Dafne transformándose en laurel mientras huye de Apolo ¿cierto?

- Has decidido que me harás la vida imposible por haberte ofendido ¿No es así? –sugirió el pelinegro viéndola a los ojos bastante molesto –.

- Esa era mi intención cuando decidí que pintaría mi mural en el lugar que te habían designado… esa sería la primera de muchas cosas por venir… pero ayer decidí que no lo haría. ¿Quieres saber porque ya no lo hare?

- No me interesa… pero si te agradecería que no intentaras nada. Si quiero yo también puedo causarte problemas y el dinero de tu padre no podrá detenerme.

- Ja ja ja sigues siendo un imbécil…en fin… No sé si lo sabes o más bien has fingido no verme durante este tiempo… ¿Sabes que estamos juntos en la clase de escultura verdad?

- Lo sé… pero francamente me da igual si estas en mi clase o no…

- Ayer me di cuenta que tu y yo tenemos algo en común… y eso me hizo entender tu actitud tan nefasta… entender eso me hizo darme cuenta que de pronto ya no deseo hacer tu vida imposible.

- Tú y yo no tenemos nada en común…

- Te equivocas… ambos tenemos la misma mirada vacía… solo que a menudo la escondemos… lo descubrí por casualidad… pero de pronto tener esto en común me hace querer estar cerca de ti…

- No deseo que mujeres con actitudes infantiles como la tuya estén cerca de mí… así que tendré que rechazar tu intento de amistad. Si pudieras dedicarte a lo tuyo y dejarme a mí en lo mío te lo agradeceré inmensamente. No tengo deseos de ser tu amigo o estar cerca de ti… dedícate a tus estudios… y por favor no me fastidies.

- Supongo que a los dos nos gusta la soledad… aunque más a ti que a mí… en fin te dejare continuar. Disculpa las molestias –se despidió con una sonrisa. Después de eso no volvieron a cruzar palabras en algunos meses. Ahora todos parecían tenerle mucho afecto y respeto. Sin circular ningún rumor despectivo sobre ella como lo habían hecho al principio –.

Caminaba en silencio y pensativo mientras se dirigía a la galería para ver la exposición. La clase de arte les había pedido como proyecto final que recrearan una escultura sencilla para presentarla en la galería del instituto. Mientras caminaba en busca de la suya se detenía de vez en vez a ver las obras de los demás. Las esculturas estaban acomodadas por época y por escultor. Justo cuando llegaba a lo que sería su sección sobre el escultor Rodin alcanzo a ver que su escultura estaba acompañada por una más. Leyendo la placa sonrió irónicamente.

- Vaya así que las han puesto juntas –resonó uno voz detrás de él –.

- Lo hiciste a propósito ¿No es así?

- ¿me creerás si te digo que no?

- No lo hare…

- Al igual que tu pienso que esta escultura no debería estar aquí… ella no merece estar junto a él… incluso si solo son replicas… pero como fui la única que reprodujo una obra de Claudel… el profesor decidió que debía estar junto a las obras de Rodin.

- Sabias bien que yo haría esta escultura…

- ¿Cómo podría saberlo? no es como que tú me diriges la palabra…

- Pues no me parece coincidencia que ambos hayamos hecho estas manos… lo sabías y decidiste complementar esta obra para acercarte a mí. ¿Por qué estas tan obsesionada conmigo?

- ¿Obsesionada? Ahhh tu y Rodin comparten el imbecilismo. Créeme que mi vida no gira a tu alrededor… aunque esto una vez más me comprueba que hay similitudes entre nosotros.

- No existe tal cosa entre nosotros… aun no entiendo porque tratas de acercarte a mi… ya te he dicho que no deseo involucrarme contigo.

- Es tu culpa… fuiste tú quien dijo que a pesar de no tener talento quizás tendrías sexo conmigo…pero aun no lo has hecho…supongo que aun no estás falto de actividad sexual… aunque detesto tu arrogancia con todas mis fuerzas supongo que no es suficiente para hacerme sentir desagrado por ti…supongo que yo también soy una imbécil por ello. –su móvil comenzó a sonar lo que la hizo dejar la conversación para contestar. Se recargo cerca de uno de los pilares que estaban junto a su escultura y converso sin importarle que Sasuke estuviera allí. Sasuke por su parte intento no poner atención a su conversación pero le resulto un tanto imposible–.

- Si todo ha estado bien. Ya nadie habla tras mis espaldas. Chouji también esta exponiendo en la galería. Si… adivinaste. Bien sabes que esta obsesionado con sus obras. La réplica le quedo exacta. ¿Qué deseas comer? ¿Seguro? ¿También alitas de pollo? Esta bien ya no hay mucho que hacer en este lugar… ahora mismo salgo para allá. Te he extrañado mucho…pero me vigilan demasiado…no quieren que te vea con tanta frecuencia. Eso y los proyectos de la escuela… si a Ino la vera el jueves… te amo… mucho… me haces decirte que te amo pero tú no me lo dices de regreso… eres injusto…te veo en una hora… si tomare un taxi. –la pelirrosa se alejo sin volverse a ver a Sasuke con una gran sonrisa en su rostro –.

- Tiene novio y aun así me dice que esta esperando que me acueste con ella… –recordando lo que había escuchado concluyo que seguramente salía con alguien que sus padres no aprobaban. Se volvió a mirarla mientras se alejaba, su vestido amarillo ondeándose con la prisa con que caminaba. ¿Cómo una chica como ella podía pintar cosas tan oscuras? No solo el mural, pero sus pinturas recientes le parecieron llenas de oscuridad –.

- Hey Sasuke –saludo su amigo sacándolo de su ensimismamiento –.

- Hola Suigetsu…

- Vaya ¿Hiciste ambas obras? Te han quedado increíbles mas esta de aquí… ahh no la hiciste tú…

- Tienes razón. De las dos, esta es la que esta mejor hecha... anatómicamente hablando…

- Sakura también tiene talento en la escultura eh… ¿Por qué están juntas?

- Porque Rodin y Claudel fueron amantes por algunos años… aunque todo acabo muy mal para los dos… Rodin disfruto su fama y Camille pasó muchos años en un sanatorio…

- ¿Se pusieron de acuerdo para hacer obras complementarias?

- No…

- Creí que eran compañeros ¿No?

- Compañeros no amigos…

- Ahh yo que tú la convertía en mi novia… es demasiado bonita para que la dejes ir…

- No deseo ese tipo de relación con nadie… los noviazgos son inútiles y quitan el tiempo… solo me harán perder creatividad…

- Sigues con tu actitud de tengo sexo con ellas pero no me quedo a dormir con ellas… hombre fatal rompecorazones…

- No digas idioteces…

- Por cierto ¿Cuando visitaras a Itachi?

- El fin de semana.

- Salúdamelo… dile que cualquier cosa que necesite se lo haga saber a mi padre…

- Lo hare…

- Por cierto ¿Ya empezaste tu proyecto para la beca? Este año hay muchos estudiantes de otros departamentos que desean obtenerla. Habrá mucha competencia.

- Lo sé… pero no te preocupes… de nuevo la obtendré… será mi mejor escultura hasta ahora.

- Aun no entiendo muy bien porque lo haces… pero tu padre podría…

- Ni siquiera lo menciones Suigetsu –al decir esto se dio cuenta que Sakura había dejado un bolso junto al anaquel que sostenía sus esculturas. Pensó en alcanzarla… pero a fin de cuentas no lo hizo y se decidió a irse por un café al despedirse de su amigo. La máquina de café estaba junto a la entrada de la galería de donde ya varias personas se estaban marchando. Al ver que no había el sabor que quería, regreso hasta su escultura donde se percato que la bolsa de Sakura no estaba. Preocupado de que alguien la hubiera robado comenzó a correr en busca de quien fuese que la hubiera tomado. Al cabo de unos segundos alcanzo a ver que Sakura corría apresurada hacia él –Sakura tu bolsa… alguien la tomo –apenas y si logro musitar pero la pelirrosa parecía no haberlo visto y lo paso de largo. Se detuvo hasta llegar junto a un chico que le sonreía y le entregaba la bolsa –.

- Gracias Chouji… pasaste mucho tiempo conmigo escogiendo todos estos tipos de chocolates y yo por despistada los andaba olvidando. Espero que les agraden… les diré que me ayudaste a escogerlos. Bueno nos vemos mañana que me esperan.

- ¿Pasaras la noche con él? –pregunto su amigo –.


No olviden dejar sus reviews Significan mucho para mi.

Este fic sera actualizado dependiendo de la demanda... hahaha diran y a esta que le pasa. A lo que me refiero es que empezare a actualizar mis historias pero tomando en cuenta su opinion. Asi que si desean que actualice pronto voten por ella o dejenme un comentario.

En mi pagina de deviantart anilu37 podran encontrar el link de la pintura del mural de Sakura.

En cuanto a la cancion... en este fic habra mucho rock. Y esta es la canción que escuchaba Sasuke mientras pintaba... de mis bandas favoritas... y sobretodo mi voz favorita Tool Lateralus... si pudiera me casaba con su voz. En varias encuestas y tops de musica siempre aparece como la numero 1... de las canciones de metal o rock de los ultimos anios... es simplemente perfecta... aunque entiendo si no les gusta el rock haha al vocalista pueden escucharlo en otras bandas como A perfect circle(otra de mis favoritas ) o Puscifer... sea lo que sea que cante... su voz me atrapa.